ENTREGA DE LA XXXIV EDICIÓN DEL PREMIO DE PERIODISMO “FRANCISCO CERECEDO

Buscando unos ejemplos sobre el tema de los zapatos para @serena, encontré esta nota sobre los trucos de las celebrities:

https://www.trendencias.com/propues...s-de-estilo-que-las-celebrities-te-pueden-dar

Allí puede leerse que para el tema de los zapatos, Paula Echevarría usa directamente la cinta adhesiva doble faz.
Pero la "perlita" está en que dentro de ese conjunto de personajes del show business tenemos a la Lety, con sus jeans de culobra, con marca y todo :LOL::LOL::LOL::LOL::LOL:

Una verdadera finura de reina........:hungover::hungover:
 
26.11.2017 – 05:00 H.
Esta semana, la Reina ha sido cuestionada por elegir un extremado minivestido blanco de la diseñadora catalana Teresa Helbig para asistir a la entrega del Premio Francisco Cerecedo en el hotel Ritz de Madrid. El largo de su falda fue una de las cuestiones más comentadas y criticadas. Son muchos los que piensan que la prenda no era adecuada ni para el evento ni para el estatus de doña Letizia y que pegaba más para una fiesta privada o una cena en Palma de Mallorca.
Sin embargo, esta no es la primera ocasión en la que la esposa de Felipe VI presume de piernas en actos oficiales. Durante años, la hemos visto con diseños de lo más escuetos, como el que llevó el día de su 45 cumpleaños en el Teatro Real.

Aparte del largo de la falda, también se le ha criticado a Letizia que vista más como una 'celebrity' que como una Reina. Esto lo hemos visto en muchas ocasiones, sobre todo últimamente. Un ejemplo de ello es el vestido rojo pasión de Stella McCartney que llevó en el 50 cumpleaños del rey Guillermo Alejandro de Holanda o el look a la Kardashian que eligió para la entrega de los Premios Mariano de Cavia en 2016




Viaje a Chile 2010

Al sentarse, acabó mostrando su ropa interior

Mallorca 2017

En un acto oficial

una vez más
una celebrity, no una reina en un acto oficial

Otra vez estrella de Hollywood en el 50 cumpleaños del rey de Holanda
A lo Kardashian


Queda clarísimo que es una exhibicionista ridícula que necesita llamar la atenciòn paseando ese cuerpo raquítico y protésico debajo de vestidos inapropiados y vulgares. En la foto con el vestido rojo es que parece una caricatura, como una broma de esas que circulan por ahí, con ese traje rojo tomate pegado al cuerpecillo, los zapatacos como ladrillos rojos, la melena Rita Hayworth, los labios rojos con los dientes pintados, es que da risa verla.
 
1511440956_125876_1511441268_sumario_normal.jpg

Ni siquiera pasa como muñeca de la Casa del Horror:bigtears::bigtears::bigtears::bigtears:
Y hay que llamarla reina...


Está a un paso de Bette Davies en "Qué fué de Baby Jane"
upload_2017-11-27_11-10-30.jpeg
 
Se que llego tarde pero no puedo dejar de decir que me parece la "salida de pata de banco" más gruesa de Letizia desde hace al menos, algún tiempo. Inadecuado y muy pasado de moda. La verdad es que no entiendo la intención. Ella y sus asesoresdeben saber que no es apropiado para un evento de noche, oficial, en noviembre. Y como no van a saber sus estilistas que esos volantes pasaron de moda hace mil años?. Y me atrevo a vaticinar que la diseñadora no entrará de nuevo en el real vestidor después de ver el mismo vestido en el cuerpo de una niña actriz de hace 10 años.
 
Se que llego tarde pero no puedo dejar de decir que me parece la "salida de pata de banco" más gruesa de Letizia desde hace al menos, algún tiempo. Inadecuado y muy pasado de moda. La verdad es que no entiendo la intención. Ella y sus asesoresdeben saber que no es apropiado para un evento de noche, oficial, en noviembre. Y como no van a saber sus estilistas que esos volantes pasaron de moda hace mil años?. Y me atrevo a vaticinar que la diseñadora no entrará de nuevo en el real vestidor después de ver el mismo vestido en el cuerpo de una niña actriz de hace 10 años.

Que esté o no de moda el modelo es lo de menos. Es la imagen que da de la reina de España...
 
El problema no es el vestido, que estaría perfecto para un concierto o una salida nocturna en verano en Palma. El problema es no saber llevar en cada momento lo que corresponde.

Me gusta el vestido, y letizia lo lleva cuando le da la gana y como le da la gana, vamos faltaría más que alguien criticara por cómo y cuándo se lo pone.

Como tiene que ser, y como debe de ser, lo que me faltaba que una mujer no pudiera poner lo que quiera y cuando quiera.
 
No sé si está ,pero tiene guasa, Tomasa... :whistle:

http://letiziaimpagable.com/2017/11/23/letizia-puttin-on-the-ritz/

Puttin on the Ritz
Publicado el noviembre 23, 2017 por Kiki Ardilla81 comentarios ↓


If you’re blue and you don’t know where to go to
Why don’t you go where fashion sits

Puttin’ on the Ritz

Inicio de la canción estrella de la película Puttin on the Ritz protagonizada por Clark Gable (disponible en youtube. No se la pierdan).



El Acto


Cita anual en el Hotel Ritz para los Reyes de España que presiden la entrega de la XXXIV Edición del Premio de Periodismo “Francisco Cerecedo”.

El Look


Después de dos día seguidos de estilismos ursulinos, la Reina no ha decepcionado. Se ha presentado con un look que rompe con el protocolo esperado en cualquier noble, y más tratándose de una reina. Si esperabamos ver brazos musculados, ahora se les unen un par de piernas de bailarina de los locos 20s.

Mi primera impresión fue recordar la escena de baile de Clark Gable en la película Puttin on the Ritz; él, adelante y las coristas (flapper girls) detrás bajando las escaleras de otro Ritz. Sólo le faltan las plumas y la boquilla larga; con los volantes nos introduce la versión playera para it girls del siglo XXI. WOW.

Se trata de un mini vestido en estilo baby doll de volantes en chiffon de seda blanco rematados en fina escarcha (el remate estrellado es precioso) con anchos tirantes negros de terciopelo que agregan invierno al de otro modo vestido playero.



Repitan conmigo: mejor volantes que flecos. Otro WOW.

Al momento de escribir, aún nadie sabe quién firma este desfiguro. Se sospecha que puede ser un vestido vintage de Teresa Heilbig de 2008. Pero si vemos la pasarela de Chanel y nos encontramos esta otra versión romántica, ya sabemos quién firmaría la versión cabaret: el modisto de cabecera Felipe Varela. Suspenso…y ya veremos.

Gracias, ardillita Elegeme por ubicar “la inspiración.”



Una amable forera llamada Princess Kate del Cotiforo ha puesto este montaje que recorre la historia de Doña Letizia en este evento que, como siempre que se trata de periodismo, se encuentra entre sus actos favoritos. Da la impresión que para estas citas Doña Letizia realmente escoge lo que le gusta sin reparar en el protocolo, ni en la institución, y va a su aire.



Este año rompió con el total black y se decantó por el black & white. Bueno, por romper, rompió con todo.

Como complementos los imprescindibles salones negros de Prada –que sirven para un acto militar, el huerto de los Obama y bailar charleston (¡los quiero! Sirven pa’ tó)-. Con un sencillo clutch negro de solapa, es idéntico a otro azul, así que podría ser también de Felipe Varela.



No aprecio bien los pendientes, parecen los que lució el día de su boda, regalo de sus suegros.



Como era de esperarse el beauty ha sido bastante cargado, pero ha mantenido la melena con volumen y puntas hacia adentro durante en toda una semana. Aplausos.

Dicen que ha descendido del coche cubierta por una gran capa negra, que rauda se quitó para subir las escaleras. De Ritz tirando a Dolby Theater ¡qué llegada tan espectacular! Old Hollywood glamour, pero bien old, de la época muda; como muda debió quedar toda la gente que vio la escena. Quizá cambiaron el champagne por una tila durante el vernissage del evento.

Rescatando el estilismo

Desde un diván y con aflautada voz: “Aaay las sales, Eduviges.”
girl_wacko.gif


(Fin del rescate)

Sigue...
JC-hysterical.gif
 

LA CULPA NO LA TIENE ELLA

Cuando aún no se habían extinguido los ecos de la polémica actuación de Letizia, durante su estancia en el México de sus amores, la consorte vuelve a dar la nota.

En esta ocasión, no por su comportamiento cuando presidía la Cumbre Mundial de Líderes contra el Cáncer, marcándose unos pasos de baile, pero que muy chulos, como una gachupina picantona, con un cantante rapero que la agarró por el hombro desnudo. Y, además, en presencia del propio presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que no daba crédito a lo que estaba viendo. No por eso. Esta semana, el motivo ha sido su polémico y ridículo atuendo, luciendo piernas y brazos, de los que parece estar orgullosa, en un acto al que también asistía Felipe.

Se trataba de un modelito mini, muy mini, de volantes blancos, estilo charlestón, que dejaba ver, en toda la extensión su bien tonificadas piernas, sus hombros y brazos musculosos. “A costa de levantar ampollas entre los partidarios de un mayor decoro regio”, como escribía mi compañera Consuelo Font en la Otra Crónica de El Mundo. A lo peor, querida, es lo que ella, con esta falta de pudor, pretende. Y todos caemos en su provocación. Unos para alabarla; otros, criticarla.

Reconozco que no somos justos en nuestras críticas. Y, además, no lo hemos sido nunca, centrando nuestros comentarios y descalificaciones sobre Letizia cuando el único responsable de las polémicas actuaciones de la consorte es… Felipe. Posiblemente, porque carece de la mínima influencia sobre su esposa. Incapaz de reconducir su manera de ser y de comportarse.

Estarán de acuerdo conmigo, no ser de recibo que cada comparecencia de la consorte, en solitario o acompañándole, la atención se centre, tan sólo, en ella.

Nadie entiende como el pasado miércoles, en la entrega de los premios de periodismo “Francisco Cerecedo”, Felipe no le advirtiera, al verla vestida de tan ridícula manera, demasiado corta para su edad y categoría “Así, no puedes ir”.

Bien sabía él lo que iba a suceder. Porque “nada más desprenderse de su capa negra, todos los presentes se quedaron obnubilados”, como reconoce Consuelo.

Pienso que Felipe ha perdido la batalla. Y la perdió el 6 de noviembre de 2003, cuando, en el transcurso de la ceremonia de pedida en el Palacio de El Pardo, Letizia se revolvió, sin poder contener la contrariedad por el atrevimiento de Felipe de interrumpirle su parlamento, para decirle con nada disimulada ira “¡Déjame terminar…!”

Era la primera vez que esto le sucedía a él y, además, en público. Aunque lo disimuló con una forzada sonrisa, se sintió muy mal. Ese día y ante la prensa del mundo entero, Letizia demostró que, independiente de ser una mujer de fortísimo carácter, es… una mandona.

Que puede ser un defecto o una virtud. Depende del momento. En aquellos y en presencia de los Reyes y de toda la Familia Real, demostró que los pantalones le sientan pero que muy bien. En El Pardo se manifestó tal cual es. Porque no sólo le hizo callar sino que tampoco tuvo inconveniente en interrumpirle, otra vez, cuando intentaba hablar de los regalos apuntándole: “¡Ahora… dilo!”.

Ese día, Felipe perdió y Letizia… ganó. De todas formas la culpa de su comportamiento la tiene él y sólo él incapaz de reconducir ese carácter que amenaza con acabar con el matrimonio o con la Monarquía que es peor. Y somos injustos culpando siempre a ella.

:jawdrop::jawdrop:Ojo, DON Peña habla de la " gachupina picantona":nailbiting::nailbiting:
https://www.republica.com/reino-de-corazones/2017/11/27/la-culpa-no-la-tiene-ella/
 
Back