Yo creo que hay una gran diferencia entre no poder y no querer. Yo quiero tener hijos, para mí es muy diferente que mi pareja me diga que no puede a que no quiere. Si me dice que no quiere, está claro que no es para mí, si me dice que no puede, entonces tenemos un problema los dos y podemos intentar resolverlo o aceptarlo juntos. En el tema de los hijos es muy importante la sinceridad porque es una renuncia demasiado importante para la persona que quiere tenerlos.