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Lo que yo no comprendo de este caso es por qué la prensa deja como héroes a los médicos, que, según ellos mismos, lo sabían desde el principio y no denunciaron. No es necesaria la autorización de ningún gerente para poner una denuncia. Me han dado mucho asco en especial unas declaraciones del presunto héroe médico diciendo que, si lo hubieran parado a tiempo, esos niños estarían ahora yendo al colegio… Oye, que si tú lo sabías y no lo paraste, tú le fallaste a esos niños exactamente igual que los gerentes. Tú no evitaste un asesinato. Tú no te enfrentaste a la presunta asesina, nunca se lo dijiste a la cara, te dedicabas a escribir emails poco explícitos y luego a quejarte de que no se había comprendido lo que decías. No estoy diciendo que le pegaran una paliza, sino simplemente unas palabras bien dichas en un ratito de la guardia, la podrían haber parado al hacerle saber que sospechaban de ella. Es incómodo, pero las vidas de los niños bien lo merecían.
Por otra parte, el perfil de la chica no es en absoluto de “una chica blanca privilegiada y que por eso no sospechaban de ella”. Al contrario; el perfil que todos han dado de ella es de treintañera solterona que vive con dos gatos, visita a sus padres y nunca ha tenido novio, pero que le gusta un compañero casado… Si os metéis en el foro “tattle life”, el equivalente en UK a Cotilleando, está salpicado de comentarios jocosos del tipo “apuesto a que es virgen”. Todo dicho con muy mala leche y en la época en que se debatía si era inocente o culpable. Ese perfil no es precisamente favorable. No la estoy defendiendo, sino que alucino con que digan que nadie sospechó de ella por ser una chica muy querida por ser rubia y blanca cuando la realidad es que todos los compañeros de trabajo la despreciaban.
Por último, con motivo del exceso de mortalidad, el hospital dejó de atender a grandes prematuros y desde que Lucy Letby se fue, sólo atienden a prematuros de más de 34 semanas. Si revisáis las defunciones, muchos de los bebés fallecidos, eran nacidos a las 23 semanas de gestación. La prueba de fuego hubiera sido, una vez eliminada la presunta asesina, volver a aceptar prematuros como antes, y demostrar que la mortalidad volvía a ser la esperada ahora que ya no estaba la asesina. Sin embargo, no lo han hecho: siguen aceptando sólo niños nacidos con más de 34 semanas y tienen la jeta de decir que “desde que se fue Lucy sólo ha fallecido un niño”. Sí, un niño de más de 34 semanas; si eliminas los de más de 34 semanas de las víctimas de Lucy, te quedas sin ninguna. A mí esto me suena a “no dejes que la realidad te estropee una buena historia”.
En resumen, que esto no es una defensa de Lucy Letby, lo que quiero decir es que hay muchos culpables llevándose aplausos a cambio de haber permitido que algo horrible sucediera y que de paso se han librado de los prematuros más complicados.
Por otra parte, el perfil de la chica no es en absoluto de “una chica blanca privilegiada y que por eso no sospechaban de ella”. Al contrario; el perfil que todos han dado de ella es de treintañera solterona que vive con dos gatos, visita a sus padres y nunca ha tenido novio, pero que le gusta un compañero casado… Si os metéis en el foro “tattle life”, el equivalente en UK a Cotilleando, está salpicado de comentarios jocosos del tipo “apuesto a que es virgen”. Todo dicho con muy mala leche y en la época en que se debatía si era inocente o culpable. Ese perfil no es precisamente favorable. No la estoy defendiendo, sino que alucino con que digan que nadie sospechó de ella por ser una chica muy querida por ser rubia y blanca cuando la realidad es que todos los compañeros de trabajo la despreciaban.
Por último, con motivo del exceso de mortalidad, el hospital dejó de atender a grandes prematuros y desde que Lucy Letby se fue, sólo atienden a prematuros de más de 34 semanas. Si revisáis las defunciones, muchos de los bebés fallecidos, eran nacidos a las 23 semanas de gestación. La prueba de fuego hubiera sido, una vez eliminada la presunta asesina, volver a aceptar prematuros como antes, y demostrar que la mortalidad volvía a ser la esperada ahora que ya no estaba la asesina. Sin embargo, no lo han hecho: siguen aceptando sólo niños nacidos con más de 34 semanas y tienen la jeta de decir que “desde que se fue Lucy sólo ha fallecido un niño”. Sí, un niño de más de 34 semanas; si eliminas los de más de 34 semanas de las víctimas de Lucy, te quedas sin ninguna. A mí esto me suena a “no dejes que la realidad te estropee una buena historia”.
En resumen, que esto no es una defensa de Lucy Letby, lo que quiero decir es que hay muchos culpables llevándose aplausos a cambio de haber permitido que algo horrible sucediera y que de paso se han librado de los prematuros más complicados.
