Nueva biografía sobre Letizia: 'La Reina impaciente' de Leonardo Faccio. El autor desvela los entresijos del libro en exclusiva

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Letizia, la reina de España y su pasado oculto en México
El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles.

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El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles. (Foto: Getty Images)

Archivo histórico Quién

Nota del editor: En abril de 2004 la revista Quién publicó una historia que hizo que los ojos de otros países voltearan a México, bajo el título: "El pasado oculto de Letizia de España", firmado por Erika Roa, donde revelaba que la mujer que estaba a días de convertirse en esposa del príncipe Felipe había tenido un amante en Jalisco, de nombre Luis Miguel González su entonces jefe en el periódico "Público de Guadalajara", entre otros datos. Aquí el texto que se publicó en nuestras páginas.


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En la edición 64 de la revista Quién se publicó el pasado oculto de Letizia.

Felipe era uno de los últimos príncipes solteros más cotizados de Europa. España se ponía de cabeza para adivinar quién sería la futura reina. Al fin, el l de noviembre de 2003 se desveló el misterio: Letizia Ortiz Rocasolano, una mujer inteligente, fría para muchos, feminista, luchadora incansable, clasemediera, hija de padres divorciados. Nada que ver con el perfil que manejaba Felipe.

A pesar de ello, la mayor parte del pueblo español aplaudió la elección sin saber a ciencia cierta quién era la joven que había conquistado el corazón de su Príncipe. Conforme pasó el tiempo, fueron saliendo a la luz datos de la vida de Letizia que no siempre beneficiaron su imagen. Muchos de sus compañeros de trabajo de Televisión Española (tve), donde se desempeñó como conductora del noticiario Telediario hasta antes de su compromiso real, la tildaban de ambiciosa y calculadora. Incluso la llamaban Ficticia a sus espaldas.

También se revelaron varios de los países latinoamericanos donde ella había residido, por ejemplo Colombia, adonde se mudó en octubre de 1994 por cuestiones de trabajo. Costa Rica fue su refugió para pensar si aceptaría o no la petición de matrimonio que le hizo Felipe. Y, por supuesto, en México poco a poco la prensa local se encargó de difundir los detalles ‘ de su estancia, como fue la obra del pintor cubano Waldo Saavedra, en la cual aparecía el rostro de Letizia sobre un torso desnudo. Pero hay más de esta intrépida periodista que llegó a nuestro país a estudiar un posgrado en la Universidad de Guadalajara.

Hoy descubrimos sus lugares preferidos, su labor como periodista, sus amigos y el affaire furtivo que sostuvo con un mexicano.

Intercambio universitario

Letizia llegó a Jalisco en l995. Recién desempacada comenzó a buscar trabajo. Lo consiguió en el periódico Siglo 21 (hoy llamado Público) como reportera del suplemento "Tentaciones". Fue entonces cuando conoció a su compatriota y colega Fran y a la mexicana Sara Cuéllar, actual directora de la agencia Comunicación & Relaciones Públicas y la amiga más cercana de Letizia en México. Trabajaban juntas, pues ambas cubrían la misma fuente, sólo que Sara para la sección cultural del mismo periódico.

En la Perla Tapatía la española era una estudiante común que se transportaba en camiones. De hecho, a sus allegados les comentó que quería comprarse una moto porque "Guadalajara es una ciudad muy grande para mí".
Cuentan sus amigos que Letizia no era la típica niña guapa que va a los mejores sitios y se viste con lo último. Sara recuerda: "Era muy bailadora. Le encantaba la salsa. Íbamos al Salón Veracruz, que no estaba de moda".

A la futura reina de España le gustaba comer en la fonda Irma Corajes, que se encontraba a la vuelta de las oficinas del periódico. Le encantaba la carne asada con tortillas recién hechas que ahí servían. En el Bar Barbanegra pasaba largas horas escuchando música en vivo y a su cantante favorita, Sara Valenzuela, del grupo La Dosis. La mayoría de las veces pedía tequila o vino tinto, bebidas que le fascinaban.

Otro de sus escondites era el mercado de Guadalajara, donde compró regalos para su madre y hermanas antes de volver a España, entre ellos varias bolsas de cuero grabadas. También dominaba Puerto Vallarta y Maloapa, una playa hippie donde solía acampar.

Sara, ¿cómo empezó tu relación con ella?

Nos tocaba cubrir los mismos eventos. En ese entonces yo vivía con Fran y como él era español, inmediatamente se identificó con Letizia. Fran era más amigo de ella que yo. Empecé a tener mayor contacto con ella en una fiesta. De repente nos dimos cuenta que no era una niña bonita y hueca. Trabajaba muchísimo. Siempre andaba corriendo. Se movía en camión o lo que fuera. Al principio vivía con una familia de Guadalajara, luego se mudó con nosotros y ahí nos hicimos muy amigas.

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Luis Miguel González en Guadalajara. (Foto: Archivo Quién)

Descríbenos a la Letizia de aquella época...

Era muy sencilla. En el edificio donde vivíamos conocía perfecto al que cuidaba los coches. Era querida y odiada, como toda mujer bonita e inteligente. Era la típica de camiseta y jeans que hacía lo que se le daba la gana, muy independiente e irreverente, defensora de sus ideas.

Me acuerdo que cuando llegaba al periódico, todos los chavos le ofrecían sus computadoras para que trabajara. Por supuesto, ‘ sus compañeras nos poníamos celosísimas. Era muy parrandera. Éramos como una familia. Nuestros novios y amigos eran del diario.

Se trataba de una mujer sensible. Un día lloró por unos perritos que se vendían en el mercado de Santa Tere. Le reclamó al vendedor: "¿Por qué tiene esos animales sin su madre? Pobres criaturas, si pudiera me los llevaba todos".

Cuando llegó a México contaba con 23 años y tenía muy claro su sueño en la vida: triunfar como periodista. Quería viajar y pensaba vivir un año en Australia, aunque América Latina le llamaba mucho la atención, sobre todo por los contrastes entre la riqueza y la pobreza. Se peleaba con el sistema.

¿Qué opinaba sobre las costumbres mexicanas?

Afirmaba que teníamos una cultura muy servicial, que nos rendíamos mucho. Frente a la frase de "mi casa es tu casa", comentaba inquieta: "¡Pero cómo es posible que digan eso!" O cuando le decían "sí señorita", respondía "no me llame señorita, soy Letizia".

Le chocaba que le abrieran la puerta del carro. Recuerdo que una vez le mandaron flores, las rechazó y envió otras al galán con un recado que decía: "Yo también puedo hacer eso".


Se sorprendía con la calidez de la gente. Era muy cariñosa, cosa rara en los españoles. Le gustaba abrazar y aquí sí podía hacerlo.

¿Cuál era su rutina?

Iba a la escuela y de ahí al periódico. Llegaba a casa como a la 1 a.m. Era hiperactiva. Los sábados en la tarde limpiábamos el departamento. A ella le chocaba la cocina. Prefería asear la estancia, barrer y trapear. Lo hacía perfecto.

¿Y sus gustos?

Joaquín Sabina era su músico de cabecera. Le encantaba U2 y, ‘ de México, Maná, a quienes conoció cuando los entrevistó, pero nunca fueron íntimos. Le agradaba Chavela Vargas, porque admiraba a las mujeres fuertes. Se identificaba con ellas. Pero lo que más le gustaba eran los libros. Era una lectora empedernida. Adoraba a Jorge Luis Borges, Juan Rulfo -incluso conoció a su hijo, Juan Carlos Rulfo, cuando éste hacía cine-, la periodista y novelista española Maruja Torres y al periodista argentino Tomás León Martínez.

Letizia no era una niña fashion. Prefería las bolsas de gamuza y ante, sin embargo nunca fue de diseñadores.

Dinos algunas de sus manías o secretos...

Se comía las uñas. Es ambidiestra. Usaba lentes...

La mujer que no se quería casar

Probablemente debido al divorcio de sus padres, la joven Letizia había descartado como proyecto de vida el matrimonio y convertirse en madre.

¿Qué platicaba de su familia?

Su ídolo era su padre (Jesús Ortiz). En ese entonces él trabajaba en la radio. Ella vivía con su mamá (Paloma Rocasolano), con quien se peleaba mucho, como cualquier joven de su edad. Admiraba a sus hermanas (Thelma y Erika). Siempre decía que le hubiera gustado ser tan guapa como una de ellas, no recuerdo cuál, pero ninguna es tan bonita como Letizia.

Sentía admiración por su abuelo paterno. Era muy respetuosa de su familia a pesar de que no quería tener hijos. Creo que todos en algún momento pensamos de esa forma, principalmente cuando estás empezando. El divorcio de sus padres la hizo madurar.

¿Cómo era la relación entre Letizia y el escritor español Alonso Guerrero, con quien estuvo casada de 1998 a 1999?

Un día tuvimos una conversación muy chistosa. Fue una parranda íntima. No teníamos dinero y ninguna de las dos queríamos que nos invitaran a salir, así que abrimos una botella de tequila. Fue una noche fantástica. Lloramos y hablamos de mil cosas. Nos emborrachamos padrísimo, entre amigas, en nuestra casa, a gusto. Cuando le pregunté a qué le tiraba en la vida, respondió: "No me quiero casar. Ya he vivido con Alonso y seguramente voy a volver con él. Tengo muchos planes y un hombre siempre estorba en esas cosas. No me quiero comprometer".

Entonces ella no idealizaba esa parte de su vida...

Jamás. En ese momento (1995) tenía muchos conflictos con Alonso, pues él era un poco celoso. Era como su maestro en la vida, la aterrizaba, le decía que se concentrara en su posgrado, porque ella ‘había elegido no tener días de descanso en el periódico. Y ella le respondía: "¡Joder, tío!, ¿cómo voy a dejar una cosa que me apasiona?" Quería aprender muy rápido, comerse el mundo a mordidas. Letizia era muy mal hablada y le decía Chiqui a su ex marido.

¿Qué pensaba sobre la maternidad?

No podía tener hijos y trabajar al mismo tiempo. Comentaba: "No podría viajar y no voy a dejar de hacer mis cosas. Algún día voy a tener mi programa de televisión." Eso lo tenía clarísimo. Estaba segura que iba a tener éxito.

El amor secreto de La Maja

Letizia es una mujer con mucha personalidad y muy guapa, por lo tanto, no es raro que tuviera muchos pretendientes mexicanos. Hasta mantuvo un amor furtivo en Guadalajara con un hombre casado.

¿Cuántos corazones rompió?

Muchos, pero ninguno en especial. Tuvo un galán muy guapo, rubio, de ojos azules, artista plástico, muy divertido. Ella nunca les llamaba novios sino amigos.


¿Crees que se haya enamorado alguna vez?

Nunca le conocí alguien de quien se haya enamorado.

¿Anduvo con Luis Miguel González, actual subdirector del periódico Público de Guadalajara, que en ese entonces estaba casado?

No, no creo. Eran muy buenos amigos, se llevaban mucho. Él era de la bolita, su jefe y amigo. Además, conozco a su esposa y eso no es cierto. Pero la mujer de Luis Miguel se divorció de él después de enterarse de lo de Letizia...

Será por cosas de ellos. De hecho, supe de la separación después de que se fue Letizia. A mí no me consta, y si lo hicieron,‘ lo hicieron muy bien porque ninguno de los dos me lo dijo. Luis Miguel es un hombre muy cabal y profesional. De alguna manera se debe aceptar que Letizia es un ser humano común y corriente que seguramente alguna vez se puso borrachita. Eso de que le estén espulgando a ver qué lado oscuro le encuentran... ¿De qué les vale?

Respecto a esta información, tres fuentes que solicitaron el anonimato, compañeros en el periódico de Luis Miguel y Letizia, coincidieron que entre ellos hubo más que una simple amistad. "Era bien sabido que andaban. No se esforzaban mucho en ocultarlo." Y aseguran que esto fue el detonador para que el matrimonio del mexicano fracasara.

Otra fuente afirmó: "Cuando Letizia volvió a España, una amiga comentó: ‘¿Cómo ven que Luis Miguel hasta lloró cuando supo que Letizia se regresaba?'"

Recién dada la noticia de que la hispana se convertiría en la futura princesa de Asturias, dicen que el propio Luis Miguel mandó un correo electrónico a todos sus amigos de entonces para pedirles que por ningún motivo hablaran sobre la relación que sostuvo con ella, que lo negaran a toda costa.

Sara, ¿cómo fue el adiós de Letizia?

Al principio ella no sabía si volver a España o quedarse en México porque había conocido gente de la misma Universidad que producía videos y estaba muy interesada en seguir en ese campo. Cuando terminó su posgrado se quedó unos meses más para finiquitar algunos proyectos en el periódico y tuvo muchas despedidas. Se llevó tequila, artesanías, libros... Fue muy querida, a pesar de que en un inicio causó muchos celos entre las tapatías por su arrojo con los hombres.

La familia política que no pensó tener

¿Qué contaba de su país?

En esa época finalizaba el periodo del presidente Felipe González, alguien a quien Letizia admiraba. Se preguntaba cómo los españoles podían contemplar un gobierno que no fuera tan negociable y tan inteligente como el de él. Le encantaba la comida de su tierra, el vino tinto y el queso manchego.

¿Y sobre la familia Real?

Una vez unos españoles que vivían en Guadalajara platicaban que el Rey era muy mujeriego. Yo le preguntaba a Letizia por qué la gente no sabía eso aunque era un secreto a voces, y me explicaba que hay un pacto entre la prensa y la familia real: ésta es intocable.

¿Y qué te decía del Príncipe?

Le comenté que se me hacía muy guapo, aunque no era mi tipo. Letizia me contestó: "A mí también se me hace muy guapo, pero los hombres con cabello rizado no me gustan".

¿Cómo percibes su relación con la reina Sofía?

Tengo mis dudas. Que a Letizia le indiquen qué decir, qué hacer, se me hace una situación difícil. Su venida a México, su divorcio, haber ido a la guerra (la de Iraq el año pasado) fueron decisiones suyas. Sus papás jamás lograron tener injerencia en eso.

¿De qué forma te enteraste del compromiso de Letizia con el Príncipe de Asturias?

Vi El País con aquella portada de Letizia y pensé: "No es posible." Llamé a Fran por teléfono, que ahora vive en Madrid, y se encontraba en el mismo estado de shock. Me comentó que había coincidido con ella en un evento de corresponsales apenas unos meses atrás, y me dijo: "La noté rara. Muy alegre, como es ella, pero muy cortante. No charlaba igual que antes".

¿Cuándo fue la última vez que la viste?

En Semana Santa de 2002, en Madrid. Cenamos y nos fuimos de copas. Pasamos un rato muy padre. Ella estaba por entrar a tve y se encontraba muy ilusionada por eso. Estaba adelgazando mucho por el trajín y vivía con su mamá, aunque estaba a punto de tener su departamento.

La discusión de la noche fue si se cortaba o no el pelo. Lo tenía larguísimo, con un flequillo, y siempre andaba de coleta. A la vez estaba muy triste porque su romance con Alonso iba muy mal. La suya era una relación muy apasionada en todo. Se admiraban mutuamente.

Ellos se divorciaron en 1999 y tú la viste en el 2002, ¿continuaban juntos?

Se seguían queriendo mucho. Era una de esas relaciones destructivas, pero con sus buenos momentos. Ella no sabía si volver con él o no, pues también tenía un galán en puerta y no se quería comprometer con nadie.

¿Cómo piensas que Letizia esté lidiando con el hecho de tener que renunciar a todas las cosas por las que ha luchado?

Imagino que está deslumbrada y sacada de onda, porque el hecho tan simple de no poder ir al súper, no creo que le guste. Considero que está muy enamorada. Muchos dicen que es ambiciosa, pero lo es en el buen sentido de la palabra. Fue una magnífica jugada del destino. Está entrando a un mundo tan distinto que no sé si se llegue a acostumbrar.

http://www.quien.com/realeza/2014/0...-reina-de-espana-y-su-pasado-oculto-en-mexico
Esta mujer ...
 
Vídeo: Así pensaba Letizia Ortiz con 23 años, 8 antes de convertirse en Princesa

Rescatamos una entrevista a la por entonces joven periodista, en 1995 antes de ir a México para iniciar sus estudios de doctorado. Se emitió en el programa '7 días, 7 noches' de Antena 3, en 2003, cuando se anunció el compromiso con el Príncipe Felipe. Se suprimieron partes en las que se consideraba el aborto un derecho de la mujer y se declaraba admiradora del subcomandante Marcos

11.11.2013
¿Cómo pensaba la periodista Letizia Ortiz en los inicios de su carrera, 8 años antes de anunciar su compromiso con el Príncipe Felipe?


Manuel Aguilera, director de Diario Las Américas, ha rescatado en su blogeste vídeo grabado cuando la ilusionada periodista tenía 23 años y se disponía a viajar a Guadalajara, México, para iniciar sus estudios de doctorado.



En las imágenes, emitidas ocho años después, en 2003, "una flaquísima Letizia, en momentos con un cigarro en la mano, se mostraba entusiasmada con su aventura académico-profesional.". “Letizia era entonces una joven comprometida, preocupada por la falta de alternativa política al PRI, por la imagen de los españoles en aquel México debido a la leyenda negra de la conquista y también por la inseguridad y la corrupción policial. Se mostraba muy natural, más progresista que conservadora y sin convicciones religiosas”, relata Aguilera.
Aquel vídeo se convirtió en un reportaje que “produjimos en El Mundo y que se emitió en la cadena Antena 3 la noche del 18 de diciembre de 2003, en elprograma 7 Días, 7 Noches, del que yo era director”.
Aguilera tuvo conocimiento de este vídeo en medio de la vorágine investigativa posterior al anuncio de compromiso de los Príncipes, en noviembre de 2003. “Me encontré una fría mañana de noviembre de 2003 en un escueto ático del centro de Madrid donde vivía un mexicano de nombre Cuautemoc, que había estudiado la carrera de periodismo con la prometida de Felipe de Borbón. Recostado en el suelo observé sin pestañear un vídeo grabado cuando la ilusionada periodista tenía 23 años y se disponía a viajar a Guadalajara, México, para iniciar sus estudios de doctorado.“
Lo que el vídeo no mostró: Letizia creía que el aborto era un derecho de la mujer y admiraba al líder de la guerrilla
Lo que cuenta Manuel Aguilera, y que el vídeo no muestra, es que en la transcripción completa de la entrevista había unas frases que fueron suprimidas por petición de Zarzuela. Hay que recordar que en los días posteriores al anuncio de compromiso, la Casa Real pidió respeto general a los medios, con quienes por entonces tenía más complicidad que en la actualidad.
La princesa de Asturias pensaba, cuando tenía 23 años, que el aborto es un derecho fundamental de la mujer y en otro momento de la entrevista declaraba su admiración por el líder de la guerrilla zapatista, el subcomandante Marcos.
“Pensamientos chocantes para una representante de una institución conservadora. Puede que haya cambiado de opinión, o no, pero eso ya es otra historia”, cierra Aguilera la entrada en su blog.
 
Letizia, la reina de España y su pasado oculto en México
Ahora que la reina de España se encuentra en nuestro país, nos recuerda que tiene una relación profunda con México pues vivió aquí. Estos son todos los detalles.
martes 14 noviembre 2017

El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles.

letizia El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles. (Foto: Getty Images)
Archivo histórico Quién
Nota del editor: En abril de 2004 la revista Quién publicó una historia que hizo que los ojos de otros países voltearan a México, bajo el título: "El pasado oculto de Letizia de España", firmado por Erika Roa, donde revelaba que la mujer que estaba a días de convertirse en esposa del príncipe Felipe había tenido un amante en Jalisco, de nombre Luis Miguel González su entonces jefe en el periódico "Público de Guadalajara", entre otros datos. Aquí el texto que se publicó en nuestras páginas.


En la edición 64 de la revista Quién se publicó el pasado oculto de Letizia.
En la edición 64 de la revista Quién se publicó el pasado oculto de Letizia. (Revista Quién)


Felipe era uno de los últimos príncipes solteros más cotizados de Europa. España se ponía de cabeza para adivinar quién sería la futura reina. Al fin, el l de noviembre de 2003 se desveló el misterio: Letizia Ortiz Rocasolano, una mujer inteligente, fría para muchos, feminista, luchadora incansable, clasemediera, hija de padres divorciados. Nada que ver con el perfil que manejaba Felipe.
A pesar de ello, la mayor parte del pueblo español aplaudió la elección sin saber a ciencia cierta quién era la joven que había conquistado el corazón de su Príncipe. Conforme pasó el tiempo, fueron saliendo a la luz datos de la vida de Letizia que no siempre beneficiaron su imagen. Muchos de sus compañeros de trabajo de Televisión Española (tve), donde se desempeñó como conductora del noticiario Telediario hasta antes de su compromiso real, la tildaban de ambiciosa y calculadora. Incluso la llamaban Ficticia a sus espaldas.
También se revelaron varios de los países latinoamericanos donde ella había residido, por ejemplo Colombia, adonde se mudó en octubre de 1994 por cuestiones de trabajo. Costa Rica fue su refugió para pensar si aceptaría o no la petición de matrimonio que le hizo Felipe. Y, por supuesto, en México poco a poco la prensa local se encargó de difundir los detalles ‘ de su estancia, como fue la obra del pintor cubano Waldo Saavedra, en la cual aparecía el rostro de Letizia sobre un torso desnudo. Pero hay más de esta intrépida periodista que llegó a nuestro país a estudiar un posgrado en la Universidad de Guadalajara.
Descubrimos sus lugares preferidos, su labor como periodista, sus amigos y el affaire furtivo que sostuvo con un mexicano.
Intercambio universitario
Letizia llegó a Jalisco en l995. Recién desempacada comenzó a buscar trabajo. Lo consiguió en el periódico Siglo 21 (hoy llamado Público) como reportera del suplemento "Tentaciones". Fue entonces cuando conoció a su compatriota y colega Fran y a la mexicana Sara Cuéllar, actual directora de la agencia Comunicación & Relaciones Públicas y la amiga más cercana de Letizia en México. Trabajaban juntas, pues ambas cubrían la misma fuente, sólo que Sara para la sección cultural del mismo periódico.
En la Perla Tapatía la española era una estudiante común que se transportaba en camiones. De hecho, a sus allegados les comentó que quería comprarse una moto porque "Guadalajara es una ciudad muy grande para mí".
Cuentan sus amigos que Letizia no era la típica niña guapa que va a los mejores sitios y se viste con lo último. Sara recuerda: "Era muy bailadora. Le encantaba la salsa. Íbamos al Salón Veracruz, que no estaba de moda".
A la ahora reina de España le gustaba comer en la fonda Irma Corajes, que se encontraba a la vuelta de las oficinas del periódico. Le encantaba la carne asada con tortillas recién hechas que ahí servían. En el Bar Barbanegra pasaba largas horas escuchando música en vivo y a su cantante favorita, Sara Valenzuela, del grupo La Dosis. La mayoría de las veces pedía tequila o vino tinto, bebidas que le fascinaban.
Otro de sus escondites era el mercado de Guadalajara, donde compró regalos para su madre y hermanas antes de volver a España, entre ellos varias bolsas de cuero grabadas. También dominaba Puerto Vallarta y Maloapa, una playa hippie donde solía acampar.
Sara, ¿cómo empezó tu relación con ella?
Nos tocaba cubrir los mismos eventos. En ese entonces yo vivía con Fran y como él era español, inmediatamente se identificó con Letizia. Fran era más amigo de ella que yo. Empecé a tener mayor contacto con ella en una fiesta. De repente nos dimos cuenta que no era una niña bonita y hueca. Trabajaba muchísimo. Siempre andaba corriendo. Se movía en camión o lo que fuera. Al principio vivía con una familia de Guadalajara, luego se mudó con nosotros y ahí nos hicimos muy amigas.

Luis Miguel González en Guadalajara.
Luis Miguel González en Guadalajara. (Archivo Quién)


Descríbenos a la Letizia de aquella época...
Era muy sencilla. En el edificio donde vivíamos conocía perfecto al que cuidaba los coches. Era querida y odiada, como toda mujer bonita e inteligente. Era la típica de camiseta y jeans que hacía lo que se le daba la gana, muy independiente e irreverente, defensora de sus ideas.
Me acuerdo que cuando llegaba al periódico, todos los chavos le ofrecían sus computadoras para que trabajara. Por supuesto, ‘ sus compañeras nos poníamos celosísimas. Era muy parrandera. Éramos como una familia. Nuestros novios y amigos eran del diario.
Se trataba de una mujer sensible. Un día lloró por unos perritos que se vendían en el mercado de Santa Tere. Le reclamó al vendedor: "¿Por qué tiene esos animales sin su madre? Pobres criaturas, si pudiera me los llevaba todos".
Cuando llegó a México contaba con 23 años y tenía muy claro su sueño en la vida: triunfar como periodista. Quería viajar y pensaba vivir un año en Australia, aunque América Latina le llamaba mucho la atención, sobre todo por los contrastes entre la riqueza y la pobreza. Se peleaba con el sistema.
¿Qué opinaba sobre las costumbres mexicanas?
Afirmaba que teníamos una cultura muy servicial, que nos rendíamos mucho. Frente a la frase de "mi casa es tu casa", comentaba inquieta: "¡Pero cómo es posible que digan eso!" O cuando le decían "sí señorita", respondía "no me llame señorita, soy Letizia".
Le chocaba que le abrieran la puerta del carro. Recuerdo que una vez le mandaron flores, las rechazó y envió otras al galán con un recado que decía: "Yo también puedo hacer eso".
Se sorprendía con la calidez de la gente. Era muy cariñosa, cosa rara en los españoles. Le gustaba abrazar y aquí sí podía hacerlo.
¿Cuál era su rutina?
Iba a la escuela y de ahí al periódico. Llegaba a casa como a la 1 a.m. Era hiperactiva. Los sábados en la tarde limpiábamos el departamento. A ella le chocaba la cocina. Prefería asear la estancia, barrer y trapear. Lo hacía perfecto.
¿Y sus gustos?
Joaquín Sabina era su músico de cabecera. Le encantaba U2 y, ‘ de México, Maná, a quienes conoció cuando los entrevistó, pero nunca fueron íntimos. Le agradaba Chavela Vargas, porque admiraba a las mujeres fuertes. Se identificaba con ellas. Pero lo que más le gustaba eran los libros. Era una lectora empedernida. Adoraba a Jorge Luis Borges, Juan Rulfo -incluso conoció a su hijo, Juan Carlos Rulfo, cuando éste hacía cine-, la periodista y novelista española Maruja Torres y al periodista argentino Tomás León Martínez.
Letizia no era una niña fashion. Prefería las bolsas de gamuza y ante, sin embargo nunca fue de diseñadores.
Dinos algunas de sus manías o secretos...
Se comía las uñas. Es ambidiestra. Usaba lentes...
La mujer que no se quería casar
Probablemente debido al divorcio de sus padres, la joven Letizia había descartado como proyecto de vida el matrimonio y convertirse en madre.
¿Qué platicaba de su familia?
Su ídolo era su padre (Jesús Ortiz). En ese entonces él trabajaba en la radio. Ella vivía con su mamá (Paloma Rocasolano), con quien se peleaba mucho, como cualquier joven de su edad. Admiraba a sus hermanas (Thelma y Erika). Siempre decía que le hubiera gustado ser tan guapa como una de ellas, no recuerdo cuál, pero ninguna es tan bonita como Letizia.
Sentía admiración por su abuelo paterno. Era muy respetuosa de su familia a pesar de que no quería tener hijos. Creo que todos en algún momento pensamos de esa forma, principalmente cuando estás empezando. El divorcio de sus padres la hizo madurar.
¿Cómo era la relación entre Letizia y el escritor español Alonso Guerrero, con quien estuvo casada de 1998 a 1999?
Un día tuvimos una conversación muy chistosa. Fue una parranda íntima. No teníamos dinero y ninguna de las dos queríamos que nos invitaran a salir, así que abrimos una botella de tequila. Fue una noche fantástica. Lloramos y hablamos de mil cosas. Nos emborrachamos padrísimo, entre amigas, en nuestra casa, a gusto. Cuando le pregunté a qué le tiraba en la vida, respondió: "No me quiero casar. Ya he vivido con Alonso y seguramente voy a volver con él. Tengo muchos planes y un hombre siempre estorba en esas cosas. No me quiero comprometer".
Entonces ella no idealizaba esa parte de su vida...
Jamás. En ese momento (1995) tenía muchos conflictos con Alonso, pues él era un poco celoso. Era como su maestro en la vida, la aterrizaba, le decía que se concentrara en su posgrado, porque ella ‘había elegido no tener días de descanso en el periódico. Y ella le respondía: "¡Joder, tío!, ¿cómo voy a dejar una cosa que me apasiona?" Quería aprender muy rápido, comerse el mundo a mordidas. Letizia era muy mal hablada y le decía Chiqui a su ex marido.
¿Qué pensaba sobre la maternidad?
No podía tener hijos y trabajar al mismo tiempo. Comentaba: "No podría viajar y no voy a dejar de hacer mis cosas. Algún día voy a tener mi programa de televisión." Eso lo tenía clarísimo. Estaba segura que iba a tener éxito.
El amor secreto de La Maja
Letizia es una mujer con mucha personalidad y muy guapa, por lo tanto, no es raro que tuviera muchos pretendientes mexicanos. Hasta mantuvo un amor furtivo en Guadalajara con un hombre casado.
¿Cuántos corazones rompió?
Muchos, pero ninguno en especial. Tuvo un galán muy guapo, rubio, de ojos azules, artista plástico, muy divertido. Ella nunca les llamaba novios sino amigos.
¿Crees que se haya enamorado alguna vez?
Nunca le conocí alguien de quien se haya enamorado.
¿Anduvo con Luis Miguel González, el entoncesdirector del periódico Público de Guadalajara, que en ese entonces estaba casado?
No, no creo. Eran muy buenos amigos, se llevaban mucho. Él era de la bolita, su jefe y amigo. Además, conozco a su esposa y eso no es cierto. Pero la mujer de Luis Miguel se divorció de él después de enterarse de lo de Letizia...
Será por cosas de ellos. De hecho, supe de la separación después de que se fue Letizia. A mí no me consta, y si lo hicieron,‘ lo hicieron muy bien porque ninguno de los dos me lo dijo. Luis Miguel es un hombre muy cabal y profesional. De alguna manera se debe aceptar que Letizia es un ser humano común y corriente que seguramente alguna vez se puso borrachita. Eso de que le estén espulgando a ver qué lado oscuro le encuentran... ¿De qué les vale?
Respecto a esta información, tres fuentes que solicitaron el anonimato, compañeros en el periódico de Luis Miguel y Letizia, coincidieron que entre ellos hubo más que una simple amistad. "Era bien sabido que andaban. No se esforzaban mucho en ocultarlo." Y aseguran que esto fue el detonador para que el matrimonio del mexicano fracasara.
Otra fuente afirmó: "Cuando Letizia volvió a España, una amiga comentó: ‘¿Cómo ven que Luis Miguel hasta lloró cuando supo que Letizia se regresaba?'"
Recién dada la noticia de que la hispana se convertiría en la futura princesa de Asturias, dicen que el propio Luis Miguel mandó un correo electrónico a todos sus amigos de entonces para pedirles que por ningún motivo hablaran sobre la relación que sostuvo con ella, que lo negaran a toda costa.
Sara, ¿cómo fue el adiós de Letizia?
Al principio ella no sabía si volver a España o quedarse en México porque había conocido gente de la misma Universidad que producía videos y estaba muy interesada en seguir en ese campo. Cuando terminó su posgrado se quedó unos meses más para finiquitar algunos proyectos en el periódico y tuvo muchas despedidas. Se llevó tequila, artesanías, libros... Fue muy querida, a pesar de que en un inicio causó muchos celos entre las tapatías por su arrojo con los hombres.
La familia política que no pensó tener
¿Qué contaba de su país?
En esa época finalizaba el periodo del presidente Felipe González, alguien a quien Letizia admiraba. Se preguntaba cómo los españoles podían contemplar un gobierno que no fuera tan negociable y tan inteligente como el de él. Le encantaba la comida de su tierra, el vino tinto y el queso manchego.
¿Y sobre la familia Real?
Una vez unos españoles que vivían en Guadalajara platicaban que el Rey era muy mujeriego. Yo le preguntaba a Letizia por qué la gente no sabía eso aunque era un secreto a voces, y me explicaba que hay un pacto entre la prensa y la familia real: ésta es intocable.
¿Y qué te decía del Príncipe?
Le comenté que se me hacía muy guapo, aunque no era mi tipo. Letizia me contestó: "A mí también se me hace muy guapo, pero los hombres con cabello rizado no me gustan".
¿Cómo percibes su relación con la reina Sofía?
Tengo mis dudas. Que a Letizia le indiquen qué decir, qué hacer, se me hace una situación difícil. Su venida a México, su divorcio, haber ido a la guerra (la de Iraq el año pasado) fueron decisiones suyas. Sus papás jamás lograron tener injerencia en eso.
¿De qué forma te enteraste del compromiso de Letizia con el Príncipe de Asturias?
Vi El País con aquella portada de Letizia y pensé: "No es posible." Llamé a Fran por teléfono, que ahora vive en Madrid, y se encontraba en el mismo estado de shock. Me comentó que había coincidido con ella en un evento de corresponsales apenas unos meses atrás, y me dijo: "La noté rara. Muy alegre, como es ella, pero muy cortante. No charlaba igual que antes".
¿Cuándo fue la última vez que la viste?
En Semana Santa de 2002, en Madrid. Cenamos y nos fuimos de copas. Pasamos un rato muy padre. Ella estaba por entrar a tve y se encontraba muy ilusionada por eso. Estaba adelgazando mucho por el trajín y vivía con su mamá, aunque estaba a punto de tener su departamento.
La discusión de la noche fue si se cortaba o no el pelo. Lo tenía larguísimo, con un flequillo, y siempre andaba de coleta. A la vez estaba muy triste porque su romance con Alonso iba muy mal. La suya era una relación muy apasionada en todo. Se admiraban mutuamente.
Ellos se divorciaron en 1999 y tú la viste en el 2002, ¿continuaban juntos?
Se seguían queriendo mucho. Era una de esas relaciones destructivas, pero con sus buenos momentos. Ella no sabía si volver con él o no, pues también tenía un galán en puerta y no se quería comprometer con nadie.
¿Cómo piensas que Letizia esté lidiando con el hecho de tener que renunciar a todas las cosas por las que ha luchado?
Imagino que está deslumbrada y sacada de onda, porque el hecho tan simple de no poder ir al súper, no creo que le guste. Considero que está muy enamorada. Muchos dicen que es ambiciosa, pero lo es en el buen sentido de la palabra. Fue una magnífica jugada del destino. Está entrando a un mundo tan distinto que no sé si se llegue a acostumbrar.
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@Eleonora de Toledo

Eleoooo :)

Gracias por traerlo ;)

Lo interesante de todo esto es que a traves del tiempo nos han estado mostrando piezas de su historia...

Aunque sin bien es cierto que siempre es más de lo mismo, poco a poco filtran pequeños detalles que nos ofrecen una idea más completa de quien es ella.

Claro está que los detalles escabrosos no han salido aún...Aunque muchas redacciones sabían y saben muy bien sobre esto...

Voy a traer otras imágenes donde a través de una entrevista el autor del libro muestra las habilidades de letuZova para convencer a uno de sus profesores de que le dieran una especie de beca para la cual NO calificaba en absoluto por no tener las notas correspondientes...

Por cierto, una beca o ayudque no se la daban a todo el mundo...pero ella por supuesto la consiguió...

El profesor en cuestión aún la defiende...
Letizia, la reina de España y su pasado oculto en México
Ahora que la reina de España se encuentra en nuestro país, nos recuerda que tiene una relación profunda con México pues vivió aquí. Estos son todos los detalles.
martes 14 noviembre 2017

El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles.

letizia El rey Juan Carlos de España abdicó el trono, por tanto Letizia se ha convertido en la nueva Reina, con un pasado que oscuro que vivió en México. Aquí todos los detalles. (Foto: Getty Images)
Archivo histórico Quién
Nota del editor: En abril de 2004 la revista Quién publicó una historia que hizo que los ojos de otros países voltearan a México, bajo el título: "El pasado oculto de Letizia de España", firmado por Erika Roa, donde revelaba que la mujer que estaba a días de convertirse en esposa del príncipe Felipe había tenido un amante en Jalisco, de nombre Luis Miguel González su entonces jefe en el periódico "Público de Guadalajara", entre otros datos. Aquí el texto que se publicó en nuestras páginas.


En la edición 64 de la revista Quién se publicó el pasado oculto de Letizia.
En la edición 64 de la revista Quién se publicó el pasado oculto de Letizia. (Revista Quién)


Felipe era uno de los últimos príncipes solteros más cotizados de Europa. España se ponía de cabeza para adivinar quién sería la futura reina. Al fin, el l de noviembre de 2003 se desveló el misterio: Letizia Ortiz Rocasolano, una mujer inteligente, fría para muchos, feminista, luchadora incansable, clasemediera, hija de padres divorciados. Nada que ver con el perfil que manejaba Felipe.
A pesar de ello, la mayor parte del pueblo español aplaudió la elección sin saber a ciencia cierta quién era la joven que había conquistado el corazón de su Príncipe. Conforme pasó el tiempo, fueron saliendo a la luz datos de la vida de Letizia que no siempre beneficiaron su imagen. Muchos de sus compañeros de trabajo de Televisión Española (tve), donde se desempeñó como conductora del noticiario Telediario hasta antes de su compromiso real, la tildaban de ambiciosa y calculadora. Incluso la llamaban Ficticia a sus espaldas.
También se revelaron varios de los países latinoamericanos donde ella había residido, por ejemplo Colombia, adonde se mudó en octubre de 1994 por cuestiones de trabajo. Costa Rica fue su refugió para pensar si aceptaría o no la petición de matrimonio que le hizo Felipe. Y, por supuesto, en México poco a poco la prensa local se encargó de difundir los detalles ‘ de su estancia, como fue la obra del pintor cubano Waldo Saavedra, en la cual aparecía el rostro de Letizia sobre un torso desnudo. Pero hay más de esta intrépida periodista que llegó a nuestro país a estudiar un posgrado en la Universidad de Guadalajara.
Descubrimos sus lugares preferidos, su labor como periodista, sus amigos y el affaire furtivo que sostuvo con un mexicano.
Intercambio universitario
Letizia llegó a Jalisco en l995. Recién desempacada comenzó a buscar trabajo. Lo consiguió en el periódico Siglo 21 (hoy llamado Público) como reportera del suplemento "Tentaciones". Fue entonces cuando conoció a su compatriota y colega Fran y a la mexicana Sara Cuéllar, actual directora de la agencia Comunicación & Relaciones Públicas y la amiga más cercana de Letizia en México. Trabajaban juntas, pues ambas cubrían la misma fuente, sólo que Sara para la sección cultural del mismo periódico.
En la Perla Tapatía la española era una estudiante común que se transportaba en camiones. De hecho, a sus allegados les comentó que quería comprarse una moto porque "Guadalajara es una ciudad muy grande para mí".
Cuentan sus amigos que Letizia no era la típica niña guapa que va a los mejores sitios y se viste con lo último. Sara recuerda: "Era muy bailadora. Le encantaba la salsa. Íbamos al Salón Veracruz, que no estaba de moda".
A la ahora reina de España le gustaba comer en la fonda Irma Corajes, que se encontraba a la vuelta de las oficinas del periódico. Le encantaba la carne asada con tortillas recién hechas que ahí servían. En el Bar Barbanegra pasaba largas horas escuchando música en vivo y a su cantante favorita, Sara Valenzuela, del grupo La Dosis. La mayoría de las veces pedía tequila o vino tinto, bebidas que le fascinaban.
Otro de sus escondites era el mercado de Guadalajara, donde compró regalos para su madre y hermanas antes de volver a España, entre ellos varias bolsas de cuero grabadas. También dominaba Puerto Vallarta y Maloapa, una playa hippie donde solía acampar.
Sara, ¿cómo empezó tu relación con ella?
Nos tocaba cubrir los mismos eventos. En ese entonces yo vivía con Fran y como él era español, inmediatamente se identificó con Letizia. Fran era más amigo de ella que yo. Empecé a tener mayor contacto con ella en una fiesta. De repente nos dimos cuenta que no era una niña bonita y hueca. Trabajaba muchísimo. Siempre andaba corriendo. Se movía en camión o lo que fuera. Al principio vivía con una familia de Guadalajara, luego se mudó con nosotros y ahí nos hicimos muy amigas.

Luis Miguel González en Guadalajara.
Luis Miguel González en Guadalajara. (Archivo Quién)


Descríbenos a la Letizia de aquella época...
Era muy sencilla. En el edificio donde vivíamos conocía perfecto al que cuidaba los coches. Era querida y odiada, como toda mujer bonita e inteligente. Era la típica de camiseta y jeans que hacía lo que se le daba la gana, muy independiente e irreverente, defensora de sus ideas.
Me acuerdo que cuando llegaba al periódico, todos los chavos le ofrecían sus computadoras para que trabajara. Por supuesto, ‘ sus compañeras nos poníamos celosísimas. Era muy parrandera. Éramos como una familia. Nuestros novios y amigos eran del diario.
Se trataba de una mujer sensible. Un día lloró por unos perritos que se vendían en el mercado de Santa Tere. Le reclamó al vendedor: "¿Por qué tiene esos animales sin su madre? Pobres criaturas, si pudiera me los llevaba todos".
Cuando llegó a México contaba con 23 años y tenía muy claro su sueño en la vida: triunfar como periodista. Quería viajar y pensaba vivir un año en Australia, aunque América Latina le llamaba mucho la atención, sobre todo por los contrastes entre la riqueza y la pobreza. Se peleaba con el sistema.
¿Qué opinaba sobre las costumbres mexicanas?
Afirmaba que teníamos una cultura muy servicial, que nos rendíamos mucho. Frente a la frase de "mi casa es tu casa", comentaba inquieta: "¡Pero cómo es posible que digan eso!" O cuando le decían "sí señorita", respondía "no me llame señorita, soy Letizia".
Le chocaba que le abrieran la puerta del carro. Recuerdo que una vez le mandaron flores, las rechazó y envió otras al galán con un recado que decía: "Yo también puedo hacer eso".
Se sorprendía con la calidez de la gente. Era muy cariñosa, cosa rara en los españoles. Le gustaba abrazar y aquí sí podía hacerlo.
¿Cuál era su rutina?
Iba a la escuela y de ahí al periódico. Llegaba a casa como a la 1 a.m. Era hiperactiva. Los sábados en la tarde limpiábamos el departamento. A ella le chocaba la cocina. Prefería asear la estancia, barrer y trapear. Lo hacía perfecto.
¿Y sus gustos?
Joaquín Sabina era su músico de cabecera. Le encantaba U2 y, ‘ de México, Maná, a quienes conoció cuando los entrevistó, pero nunca fueron íntimos. Le agradaba Chavela Vargas, porque admiraba a las mujeres fuertes. Se identificaba con ellas. Pero lo que más le gustaba eran los libros. Era una lectora empedernida. Adoraba a Jorge Luis Borges, Juan Rulfo -incluso conoció a su hijo, Juan Carlos Rulfo, cuando éste hacía cine-, la periodista y novelista española Maruja Torres y al periodista argentino Tomás León Martínez.
Letizia no era una niña fashion. Prefería las bolsas de gamuza y ante, sin embargo nunca fue de diseñadores.
Dinos algunas de sus manías o secretos...
Se comía las uñas. Es ambidiestra. Usaba lentes...
La mujer que no se quería casar
Probablemente debido al divorcio de sus padres, la joven Letizia había descartado como proyecto de vida el matrimonio y convertirse en madre.
¿Qué platicaba de su familia?
Su ídolo era su padre (Jesús Ortiz). En ese entonces él trabajaba en la radio. Ella vivía con su mamá (Paloma Rocasolano), con quien se peleaba mucho, como cualquier joven de su edad. Admiraba a sus hermanas (Thelma y Erika). Siempre decía que le hubiera gustado ser tan guapa como una de ellas, no recuerdo cuál, pero ninguna es tan bonita como Letizia.
Sentía admiración por su abuelo paterno. Era muy respetuosa de su familia a pesar de que no quería tener hijos. Creo que todos en algún momento pensamos de esa forma, principalmente cuando estás empezando. El divorcio de sus padres la hizo madurar.
¿Cómo era la relación entre Letizia y el escritor español Alonso Guerrero, con quien estuvo casada de 1998 a 1999?
Un día tuvimos una conversación muy chistosa. Fue una parranda íntima. No teníamos dinero y ninguna de las dos queríamos que nos invitaran a salir, así que abrimos una botella de tequila. Fue una noche fantástica. Lloramos y hablamos de mil cosas. Nos emborrachamos padrísimo, entre amigas, en nuestra casa, a gusto. Cuando le pregunté a qué le tiraba en la vida, respondió: "No me quiero casar. Ya he vivido con Alonso y seguramente voy a volver con él. Tengo muchos planes y un hombre siempre estorba en esas cosas. No me quiero comprometer".
Entonces ella no idealizaba esa parte de su vida...
Jamás. En ese momento (1995) tenía muchos conflictos con Alonso, pues él era un poco celoso. Era como su maestro en la vida, la aterrizaba, le decía que se concentrara en su posgrado, porque ella ‘había elegido no tener días de descanso en el periódico. Y ella le respondía: "¡Joder, tío!, ¿cómo voy a dejar una cosa que me apasiona?" Quería aprender muy rápido, comerse el mundo a mordidas. Letizia era muy mal hablada y le decía Chiqui a su ex marido.
¿Qué pensaba sobre la maternidad?
No podía tener hijos y trabajar al mismo tiempo. Comentaba: "No podría viajar y no voy a dejar de hacer mis cosas. Algún día voy a tener mi programa de televisión." Eso lo tenía clarísimo. Estaba segura que iba a tener éxito.
El amor secreto de La Maja
Letizia es una mujer con mucha personalidad y muy guapa, por lo tanto, no es raro que tuviera muchos pretendientes mexicanos. Hasta mantuvo un amor furtivo en Guadalajara con un hombre casado.
¿Cuántos corazones rompió?
Muchos, pero ninguno en especial. Tuvo un galán muy guapo, rubio, de ojos azules, artista plástico, muy divertido. Ella nunca les llamaba novios sino amigos.
¿Crees que se haya enamorado alguna vez?
Nunca le conocí alguien de quien se haya enamorado.
¿Anduvo con Luis Miguel González, el entoncesdirector del periódico Público de Guadalajara, que en ese entonces estaba casado?
No, no creo. Eran muy buenos amigos, se llevaban mucho. Él era de la bolita, su jefe y amigo. Además, conozco a su esposa y eso no es cierto. Pero la mujer de Luis Miguel se divorció de él después de enterarse de lo de Letizia...
Será por cosas de ellos. De hecho, supe de la separación después de que se fue Letizia. A mí no me consta, y si lo hicieron,‘ lo hicieron muy bien porque ninguno de los dos me lo dijo. Luis Miguel es un hombre muy cabal y profesional. De alguna manera se debe aceptar que Letizia es un ser humano común y corriente que seguramente alguna vez se puso borrachita. Eso de que le estén espulgando a ver qué lado oscuro le encuentran... ¿De qué les vale?
Respecto a esta información, tres fuentes que solicitaron el anonimato, compañeros en el periódico de Luis Miguel y Letizia, coincidieron que entre ellos hubo más que una simple amistad. "Era bien sabido que andaban. No se esforzaban mucho en ocultarlo." Y aseguran que esto fue el detonador para que el matrimonio del mexicano fracasara.
Otra fuente afirmó: "Cuando Letizia volvió a España, una amiga comentó: ‘¿Cómo ven que Luis Miguel hasta lloró cuando supo que Letizia se regresaba?'"
Recién dada la noticia de que la hispana se convertiría en la futura princesa de Asturias, dicen que el propio Luis Miguel mandó un correo electrónico a todos sus amigos de entonces para pedirles que por ningún motivo hablaran sobre la relación que sostuvo con ella, que lo negaran a toda costa.
Sara, ¿cómo fue el adiós de Letizia?
Al principio ella no sabía si volver a España o quedarse en México porque había conocido gente de la misma Universidad que producía videos y estaba muy interesada en seguir en ese campo. Cuando terminó su posgrado se quedó unos meses más para finiquitar algunos proyectos en el periódico y tuvo muchas despedidas. Se llevó tequila, artesanías, libros... Fue muy querida, a pesar de que en un inicio causó muchos celos entre las tapatías por su arrojo con los hombres.
La familia política que no pensó tener
¿Qué contaba de su país?
En esa época finalizaba el periodo del presidente Felipe González, alguien a quien Letizia admiraba. Se preguntaba cómo los españoles podían contemplar un gobierno que no fuera tan negociable y tan inteligente como el de él. Le encantaba la comida de su tierra, el vino tinto y el queso manchego.
¿Y sobre la familia Real?
Una vez unos españoles que vivían en Guadalajara platicaban que el Rey era muy mujeriego. Yo le preguntaba a Letizia por qué la gente no sabía eso aunque era un secreto a voces, y me explicaba que hay un pacto entre la prensa y la familia real: ésta es intocable.
¿Y qué te decía del Príncipe?
Le comenté que se me hacía muy guapo, aunque no era mi tipo. Letizia me contestó: "A mí también se me hace muy guapo, pero los hombres con cabello rizado no me gustan".
¿Cómo percibes su relación con la reina Sofía?
Tengo mis dudas. Que a Letizia le indiquen qué decir, qué hacer, se me hace una situación difícil. Su venida a México, su divorcio, haber ido a la guerra (la de Iraq el año pasado) fueron decisiones suyas. Sus papás jamás lograron tener injerencia en eso.
¿De qué forma te enteraste del compromiso de Letizia con el Príncipe de Asturias?
Vi El País con aquella portada de Letizia y pensé: "No es posible." Llamé a Fran por teléfono, que ahora vive en Madrid, y se encontraba en el mismo estado de shock. Me comentó que había coincidido con ella en un evento de corresponsales apenas unos meses atrás, y me dijo: "La noté rara. Muy alegre, como es ella, pero muy cortante. No charlaba igual que antes".
¿Cuándo fue la última vez que la viste?
En Semana Santa de 2002, en Madrid. Cenamos y nos fuimos de copas. Pasamos un rato muy padre. Ella estaba por entrar a tve y se encontraba muy ilusionada por eso. Estaba adelgazando mucho por el trajín y vivía con su mamá, aunque estaba a punto de tener su departamento.
La discusión de la noche fue si se cortaba o no el pelo. Lo tenía larguísimo, con un flequillo, y siempre andaba de coleta. A la vez estaba muy triste porque su romance con Alonso iba muy mal. La suya era una relación muy apasionada en todo. Se admiraban mutuamente.
Ellos se divorciaron en 1999 y tú la viste en el 2002, ¿continuaban juntos?
Se seguían queriendo mucho. Era una de esas relaciones destructivas, pero con sus buenos momentos. Ella no sabía si volver con él o no, pues también tenía un galán en puerta y no se quería comprometer con nadie.
¿Cómo piensas que Letizia esté lidiando con el hecho de tener que renunciar a todas las cosas por las que ha luchado?
Imagino que está deslumbrada y sacada de onda, porque el hecho tan simple de no poder ir al súper, no creo que le guste. Considero que está muy enamorada. Muchos dicen que es ambiciosa, pero lo es en el buen sentido de la palabra. Fue una magnífica jugada del destino. Está entrando a un mundo tan distinto que no sé si se llegue a acostumbrar.
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Lo que me he reido. Muchas gracias por traerlo. Desesperados por entrar en la alta sociedad, lo que en Asturies no lograron.
"Queria distinguir a JC con la Faba de Oro." Opino que cuando JC se enteró, soltó la carcajada de su vida.

Cuando venía a Asturies se decía: " Al rey le gusta la fabada." Hombre, como a todos. Pero comer fabes y luego tener audiencias...como que no.
@RocioNav

Te juro que lo tuve que leer más de una vez porque no lo creía...:D
 
@Eleonora de Toledo

Eleooo!

Por la diosa madre Isis! De esto no me recordaba!
Gracias por traerlo!

Veo que tienes buen archivo...;) Bien activo como debe de ser!

Cleo :)
Parece ser muy dependiente-adicta a su profesor de instituto.
Recuerdas lo que cuenta Antonio Montero en su libro Paparazzi Cofidencial (Foca 2015) sobre la mala experiencia y los ataques violentos que vivió el periodista Jim Russo, otro amante de la KK , sobre todo uno ataque de histeria total al enterarse que su ex tenía una nueva novia, tal fue la histeria, que salió en coche a perseguir al ex. Una loca.


AZUL Y ROSA
La semana de PeñafielCarta abierta a doña Letizia a propósito de la 'mierda'
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La Reina durante la pasada feria de ARCO GTRES


  • JAIME PEÑAFIEL
12/03/2016 09:51
No sé como encabezar esta carta. Lo correcto sería "Señora" pero me acabo de enterar, por uno de los chats a tu amigo Javier López Madrid, que estás harta de que se dirijan a ti continuamente con ese tratamiento. A lo mejor, lo que te gustaría es Majestad pero, como diría María Dolores Pradera, ya no se estila. Y menos se va a estilar si lo que está por venir... viene. "Compi", tampoco. Porque como te ha dicho Iñaki Gil, director de esta "mierda" de LOC, en la carta publicada el pasado jueves, "no soy ni compañero ni colega".
Según un artículo de Eduardo Haro Tecglen, el 18 de diciembre de 2003 en El País, al referirse a ti, escribió: "La nueva persona real es una proletaria y viene de la nada o peor, del periodismo". Llevaba razón. Por ello, de quien menos te puedes fiar es de la "mierda" de la profesión que conoces muy bien por haberla ejercido. Una profesión tan poco corporativa y caínita ella. ¡Si supieras cuántos ex compañeros dicen de ti lo contrario de lo que escriben!
Cierto es que fuimos "compis" cuando tú eras corresponsal de ABC en la localidad madrileña de Rivas-Vaciamadrid, enviando diariamente crónicas locales. ¡Vaya imaginación la tuya! Uno de tus primeros artículos en el diario La Nueva España de Oviedo, donde realizabas prácticas, fue ¡oh casualidad! sobre la proliferación de... las tarjetas de crédito en España. Después fuiste enviada especial del diario de Luis María Ansón a la cabalgata de los Reyes Magos y en el desastre del Prestige cuando ya trabajabas en TVE. Lo de corresponsal de guerra en Irak, que figura en tu biografía, no fue tal, sino un viaje en el mes de abril de 2003, organizado por el Ministerio de Defensa para llevar material sanitario en el buque Galicia al puerto iraquí de Um Qasar. En esta ocasión fueron muchos los periodistas invitados. Tú en representación de TVE. De aquel viaje, que duró 15 días, queda tu fotografía cubierta con un chador durante una visita a una mezquita. Sobre tu estancia en el Galicia, en el que viviste una apasionada y apasionante aventura viajera, mejor no escribir. Tu currículo profesional, nada que ver con el de los periodistas que trabajan y han trabajado no solo en la "mierda" de LOC sino en EL MUNDO. Tú, difícilmente, con el tuyo hubieras podido.

Te conozco demasiado
No ha sido necesario este chat para conocer cómo las gastas. Tampoco el libro de tu primo David Rocasolano Adiós princesa (Foca 2013). O lo que Jim Russo (tú y yo sabemos de quién hablamos) cuenta en el libro de Antonio Montero Paparazzi Confidencial (Foca 2015). Personalmente conocí tu carácter el 11 de mayo de 2004, cuando nos encontramos, por primera vez, en el cóctel en el Ayuntamiento, tras la entrega, al entonces príncipe Felipe, de la Medalla de Honor de Madrid. El alcaldeRuiz Gallardón fue testigo. El querido compañero José Apezarena recogía en su documentado libro Felipe y Letizia, la conquista del trono (La Esfera) el diálogo entre tú y yo:
-"Mírame a los ojos, ¿tu crees que estoy triste?"-me disparaste sin venir a cuento.
-"Yo no he dicho nunca que estés triste", te contesté desconcertado, "pero estás enfadada conmigo".
-"No estoy enfadada".
-"Pero me estás regañando".
-"Sólo te digo que deberías llamar a la Casa Real para confirmar las informaciones cada vez que quieras publicar algo".
¡Toma ya!, lección de periodismo que me diste. Y todavía no se había casado. Como recordarás, prometimos vernos con más frecuencia. Pero habían de pasar 10 años para que tú y yo nos reencontráramos en la cena en el Hotel Palace, con motivo del XXV aniversario de la fundación de esta "mierda" de periódico. Como soy educado, me acerqué, tendiéndote la mano. Me miraste con la agresividad que tú sabes cuando quieres herir. Pero correspondiste al saludo, mientras yo te recordaba: "Letizia, hace 10 años que no nos vemos". No hubo más. Testigo ¡oh casualidad! Iñaki Gil, el director de esta "mierda" de LOC y autor de la carta a la que ya me he referido.

Mierda en dos idiomas
De tus chats a Javier López Madrid, me sorprende la palabra "mierda" en dos idiomas distintos en menos de 240 caracteres y las palabras "estilo bolero" (que ha dicho alguien) a tu amigo. Me vas a permitir que las apostille:
-"Sabes lo que pienso" (miedo das).
-"Sabemos quién eres" (un presunto).
-"Sabes quiénes somos" (unos imprudentes).
-"Nos conocemos" (tal para cual).
-"Nos respetamos" (ninguno sois dignos de serlo).
Por último. ¿Cómo puede Jaime Alfonsín, "el mudito" Jefe de la Casa de Su Majestad, declarar que, después de estallar el escándalo de las tarjetas black, tú y Felipe rompísteis la amistad con López Madrid? Se olvida que el primer correo tuyo dice textualmente: "Te escribí cuando salió el artículo de lo de las tarjetas en la "mierda" de LOC y ya sabes lo que pienso, Javier". No quisiera recordar aquí las palabras que tu real suegro dijo de ti: "Letizia es una chica muy lista". Aunque lo eres y mucho, a veces haces un gratuito esfuerzo para no demostrarlo. Como en esta ocasión, señora mía. ¡Con perdón!
Chsss...
¡Como puede decir que España es un país difícil cuando permitió que se casara con quien quiso y no con quien debió contra la voluntad de su padre y la bendición de mamá! (...)Se equivocó despidiéndole de tan mala manera, convirtiéndole en el enemigo que es hoy. Su declaración puede resultar incómoda y comprometida (...). Ese payaso de la coleta creyó, por un momento, que se encontraba en el plató de la Sexta, peleándose con mi querido Eduardo y no en el Parlamento. ¡Qué vergüenza y qué desvergüenza! (...)Dicen que está muy apenada por la grave enfermedad de su primo favorito. Ya podría estarlo por lo de su hija, que es mucho peor (...) Las seis de la tarde del jueves, 3 de marzo de 2016, quedará en la historia como el 14 de agosto de 1793, día en que ella también compareció ante un tribunal (...) Al igual que ha hecho esta, aquella se defendió diciendo que no tenía nada que ver, adjudicando a su esposo toda la culpa (...)Me parece una cobardía y una canallada culpar a quien no se puede llamar para que se defienda (...)¿Habrá alguien en alegrarse por la situación que vive? Mucho me temo que sí (...)Intentó realizar el discurso en inglés sin saberlo. ¿Resultado? Un hilarante ri
 
la IVE fue practicada en una clínica autorizada de la Comunidad de Madrid por lo que cabe suponer que se practicó conforme a la ley.. El primo publicó las facturas de las ecografías y la de quirófano. .
En la copia pone anestesia local, supongo que seria de pocas semanas, si no creo que cuando es un aborto de una gestacion avanzada suelen dormirte entera
La monarquia es un show. Viendo la nuestra estamos asistiendo a una comedia.
El problema es que nuestro sistema parlamentario , nuestros politicos son aun peores. Por eso me quedo antes con Leonor que con un Pedro o Pedra Sanchez
 
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