Tampoco estaría mal que Sánchez dejara de mentir.
Y que de paso la UE arrgle el entuerto porque el Gobierno de Venezuela sigue en poder de Maduro y no de Guadió, y por lo tanto la vicepresidenta de ese país se puede reunir con sea sin tener que esconderse, porque es una persona con cargo oficial en una país en el que se ha celebrado elecciones.