Crimen guardia urbano

Teatrillo en el juicio de la Guardia Urbana
El jurado presencia una representación de lo que contó que vio la hija de Rosa Peral la noche del asesinato de Pedro Rodríguez

Al revoltijo de maridos, novios y amantes, relaciones paralelas y solapadas y a los hijos mezclados de parejas actuales y anteriores que salpica el caso de la Guardia Urbana se sumó este martes un debate jurídico-lingüístico. Las partes no convencieron al juez para que Antonia, la novia de Rubén, exmarido de Rosa Peral, explicase lo que le dijo la hija de este sobre lo que vio la noche del asesinato de Pedro Rodríguez. El magistrado lo vetó al considerarla una testigo de referencia (dice lo que le dicen). Que el jurado supiese lo que contó la niña fue prioritario para las acusaciones en el segundo día en la Audiencia de Barcelona.

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La menor, hija de Rosa y Rubén, estaba la noche del 1 al 2 de mayo de 2017 en su casa de Cubelles donde su madre y Albert López están acusados de asesinar a Pedro. La cría explicó días después a Antonia que había visto a Pedro, al que apodaban Titi, coger a su madre del cuello; más tarde, a su madre bajar a Pedro, un fornido exculturista, como atontado por las escaleras; luego, a su madre limpiarse sangre de la mejilla y a Albert López, al que llamaban, también con cariño, El tonto del bote, en el primer piso de la casa. El relato de la niña consta en la investigación, pero no declarará en el juicio contra su madre.


“Cuéntenos lo que vio que representó la menor”, pidió finalmente una de las acusaciones, mirando de reojo al juez. “Eso sí, eso es una percepción directa”, concedió el magistrado. Antonia, que declaró desde otra sala por videoconferencia, con un sonido pésimo, se levantó de la silla, se cogió a sí misma de los hombros, como si sus manos fuesen las de Rosa cogiendo a Pedro, y los movió de lado a lado, como si bajase unas escaleras. “Como un robot. Plof, plof, plof”, describió. Antonia también se agarró a sí misma del cuello, como si sus manos fuesen las de Pedro, y su cuello, el de Rosa Peral. Por último, se restregó la mejilla, imitando un supuesto gesto de Rosa limpiándose la “sangre”. El juez le pidió al jurado que obviase lo de la “sangre”.

Antes que Antonia declaró Rubén Carbó, pareja de Rosa durante 16 años. También por videoconferencia, definió a Rosa como una mujer “jovial”, “extrovertida”, con un “carácter enérgico”, con quien mantenía una “buena relación”. Se sobrepuso a su primera infidelidad con Albert en 2013, que descubrió por unas fotos: “Era mi mujer, estaba muy enamorado de ella. Siempre he creído en las segundas oportunidades”. Tres años después, tras una nueva foto de los dos acusados y sus dos hijas en el Camp Nou, optó por hacer su vida y conoció a Antonia. En diciembre de 2016, cuando Rosa lo descubrió, rompió con ella. “No se lo tomó bien”, contó, a pesar de que en aquel momento Rosa ya salía con Pedro, al que presentó a su familia en Navidad.

La relación degeneró entre ambos por la custodia de las niñas y se cruzaron las denuncias con Pedro. El fiscal mantiene que Rosa y Albert intentaron cargar a Rubén el asesinato de Pedro yendo hasta la casa de este con el móvil de este encendido para que la policía lo localizase allí al reconstruir sus pasos. “Me enteré por los medios de que sospecharon de mí”, contó Rubén, que no ha hablado nunca con sus hijas de lo sucedido. Solo les ha contado que su madre está “castigada en un sitio al que se castigan a los mayores”.

Rosa y Albert siguieron sentados todo lo lejos que les permite el banquillo de acusados. Rosa solo sonrió a su padre, que describió el amor de su hija y Pedro: “Los veía muy bien a los dos, felices”. Incluso lloró al recordar el último día que pasaron todos en familia. No ahondó en su “equivocación” cuando declaró que vio a Pedro en Cubelles cuando ya estaba muerto, según la investigación. “¿No es cierto que llamó llorando a los Mossos y admitió que lo dijo porque se lo pidió su hija?, preguntó el abogado de Albert. “No lo recuerdo”, zanjó.

¡Menuda pieza! Intenta implicar a su ex, compromete a su padre. ¡ Qué capacidad de manipulación debe tener en todos los aspectos !
Porque serán cómplices, pero el cerebro debe ser ella, no creo que el Albert esté muy sobrado de neuronas..
 
, pero el cerebro debe ser ella, no creo que el Albert esté muy sobrado de neuronas..

no,si hasta las hijas de ella lo llamaban "el tonto del bote" parece que muy lumbreras no es, no

esto de que la victima cogía del cuello a Rosa no lo he acabado de entender bien

se refiere a un intento de agresion del futuro asesinado a Rosa, intentarlo estrnagularla o algo asi

o que como iba mediodromado se agarraba a ella para no caerse?
 
no,si hasta las hijas de ella lo llamaban "el tonto del bote" parece que muy lumbreras no es, no

esto de que la victima cogía del cuello a Rosa no lo he acabado de entender bien

se refiere a un intento de agresion del futuro asesinado a Rosa, intentarlo estrnagularla o algo asi

o que como iba mediodromado se agarraba a ella para no caerse?
Son secuencias un poco inconexas, será que la niña era demasiado pequeña para explicarse mejor, no sé..
Primero el Titi coge del cuello a Rosa, vale, podría ser por la discusión, un intento de callarla o algo así.
Pero ya que Rosa le lleve dirigido como a un robot cogido por los hombros, es lo que menos encajo, a no ser que le hubiese dado algo para atontarlo antes del asesinato. Y ya lo de "el tonto del bote"..?‍♀️
Yo estos detalles no recuerdo que se dijeran en su momento, solo que la niña dijo ver subir a su madre ensangrentada.
 
Son secuencias un poco inconexas, será que la niña era demasiado pequeña para explicarse mejor, no sé..
Primero el Titi coge del cuello a Rosa, vale, podría ser por la discusión, un intento de callarla o algo así.
Pero ya que Rosa le lleve dirigido como a un robot cogido por los hombros, es lo que menos encajo, a no ser que le hubiese dado algo para atontarlo antes del asesinato. Y ya lo de "el tonto del bote"..?‍♀️
Yo estos detalles no recuerdo que se dijeran en su momento, solo que la niña dijo ver subir a su madre ensangrentada.

Pues fíjate qué curioso que el juez le ha dicho al jurado que esa parte de limpiarse Rosa una mancha de sangre de la cara no lo tuviera en cuenta ¿Por qué?
 
Un agente desmonta la coartada de la principal acusada del 'Crimen de la Urbana'
EFE05.02.2020 - 16:48h
Un jurado popular a los guardias urbanos Rosa Peral (d) y Albert López (i).
Imagen de los dos acusados durante el juicio.EFE / Quique Garcia
El relato de un agente de la Guardia Urbana de Barcelona ha desmontado en menos de una hora la coartada de Rosa Peral, la principal sospechosa de haber asesinado junto a su colega y amante Albert López al también compañero del cuerpo Pedro Rodríguez, con quien mantenía una relación de pareja.
La policía entrando al domicilio de Rosa Peral.
Todas las dudas y certezas del caso de los dos guardias urbanos acusados de matar a un compañero

El testigo ha tumbado la versión de Rosa ante el jurado popular de la Audiencia de Barcelona, que deberá dilucidar si esta y Albert, para quienes el fiscal pide hasta 25 años de cárcel, asesinaron en mayo de 2017 a Pedro, cuyo cadáver apareció dentro de su coche calcinado en las inmediaciones del pantano de Foix.
Tal como ha relatado el policía, dos días después de que apareciera el cuerpo de Pedro, Rosa lo invitó a él y a su mujer a cenar a su domicilio de Vilanova i la Geltrú (Barcelona), al que también acudió Albert.

Durante la velada, el agente dijo "sorprenderse" por la actitud "tranquila y muy normal" de Rosa, que mostró un "trato cotidiano" con el otro acusado a pesar de que, en principio, ya no mantenían ninguna relación amorosa.
"Era como si hubieran vuelto", ha aseverado el urbano, quien ha matizado que no intercambiaron abrazos ni otras muestras explícitas de afecto pero sí se trataron "como hacían habitualmente antes de cortar".
En un momento dado, ha continuado, Rosa incluso le dijo a Albert que se cortara la barba porque "le quedaba mejor".
Además, antes de que Albert llegara al domicilio, Rosa intentó incriminar a su exmarido Rubén, que fue uno de los primeros sospechosos del crimen después de que los acusados acercaran el móvil del difunto hasta los alrededores de su domicilio construyendo así una pista falsa por si la policía rastreaba la señal.
Los acusados del crimen de la Urbana, este lunes, durante el juicio.
El fiscal ve "mal gratuito" en el crimen de la Guardia Urbana de Barcelona


Las testificales de este miércoles han arrojado luz sobre los cambios de versión de Rosa a medida que avanzaron los días posteriores al crimen: en un primer momento dijo que sospechaba de la "mafia", luego trató de salpicar a su exmarido y, más tarde, a Albert.
Así lo han corroborado distintos testigos, entre ellos una amiga de Rosa, a quien la acusada habló de la "mafia" y cuya historia contrasta con la del urbano y su mujer, ante quienes la enjuiciada apuntó a Rubén.
El tercer pilar de la historia lo ha construido otro agente del cuerpo, Issam O., adscrito a la unidad de tiro, que entabló amistad con Rosa después del crimen y sobre quien la Fiscalía conjetura que fue doblemente manipulado.
La acusación sostiene que Rosa podría haberse acercado a él para conseguir la bala que faltaba en su pistola -aunque el testigo lo ha negado-, así como para manipularlo e infundirle sospechas sobre Albert.
"Yo no me sentí así", ha aseverado Issam, quien ha admitido no obstante que, "evidentemente", no tuvo "toda la información" sobre lo sucedido.
El agente ha detallado que Rosa le insinuó que Albert podría estar detrás del asesinato de Pedro porque era una persona "violenta y agresiva", que la había estado amenazando y que "tenía mucho miedo explícito" de que la hiriera si lo delataba.
Un jurado popular a los guardias urbanos Rosa Peral (d) y Albert López (i).

El juez rechaza relato de un testigo clave en el crimen de la Guardia Urbana porque no presenció directamente los hechos

"Tengo miedo de que tome represalias, de que diga 'voy a ir a por ti' o me incrimine. Que se le vaya la castaña", le dijo Rosa en una conversación telefónica entre ambos que se ha escuchado durante el juicio y en la que la acusada asegura: "Si lo cuento, vendrán a por mí y a por las niñas (sus hijas). Y si no lo cuento, me puede perjudicar".
En estos momentos Rosa asegura que Albert es el verdadero asesino de Pedro, que solo accedió a ayudarlo a quemar el cadáver de su novio porque la amenazó con herirla a ella y a sus hijas y que prueba de su culpabilidad es que se tuvo que cortar la barba porque se la había chamuscado durante el incendio.

Por otro lado, en la sesión han desfilado también otros testigos que han explicado que Albert "rehizo su vida" cuando terminó su relación con Rosa, aunque una de las pruebas clave del día ha acabado truncada.
Se trataba de un amigo de Albert que durante la instrucción del caso declaró ante el juez que el acusado le había comentado, tras aparecer el coche de Pedro, que este había fallecido "con un tiro en la cabeza".
Sin embargo, a preguntas de la acusación, este miércoles ha señalado que "no lo recordaba" y que "no profundizaron" en la noticia del hallazgo del cadáver.

 
¿Y ese cambio del amigo de Albert?menudo circo.No acordarte,supuestamente,de como dijo el acusado que había muerto la víctima...
Qué malas vibraciones da este caso.Vaya dos piezas que deben de ser pero lo de ella es de mantis religiosa.
 
¿Y ese cambio del amigo de Albert?menudo circo.No acordarte,supuestamente,de como dijo el acusado que había muerto la víctima.

parece una constante del juicio, todos los declarantes han rebajado respecto a sus declaraciones en instruccion

extracto de La VAnguardia

. La mayoría de los testigos se han expresado con una menor contundencia de lo que lo hicieron durante la investigación del caso. Desde Osman, un amigo que la acusación cree que “utilizado” por Rosa Peral para alejarse de Albert y acusarle del crimen que, sin embargo, afirmó que “no se sintió manipulado”; la exdirectora de la prisión de Wad-ras que expulsó a Peral del centro por desequilibrar a las presas y que hoy se ha limitado a decir que la intervención de Rosa generaba enfados entre las internas; y la reclusa de Wad-ras que ha obviado las graves acusaciones que vertió sobre Peral. Durante la instrucción hilvanó todo el relato de cómo se produjo el crimen y hoy sólo ha recordado algunas partes. Con Peral mirándola fijamente durante toda la declaración, la reclusa ha negado sentirse amenazada, pero sí ha recordado que “ Rosa me dijo que si la traicionaba, me haría daño”.


https://www.lavanguardia.com/sucesos/20200206/473309812518/rosa-peral-presa-envenenar-victima.html
 
Alucino muchísimo con esta historia.
Dejando aparte el hecho tan horrible de quitar la vida fríamente a una persona, no entiendo cómo la gente se complica la vida de esta manera.
Si has dejado de querer a una persona, por qué no la dejas? O si te has liado con la mujer de un otro, cómo se te pasa por la cabeza matarlo???
Supongo que al ser policías se creerían muy listos para no dejar pruebas y pensarían que les saldría bien.

Y además, flipo con que quisiera inculpar al padre de sus hijas. Joder!!! Premio a la madre del año. Además del pobre Pedro esas dos niñitas marcadas para los restos. Y el asesino pues lo mismo, vaya par!!!

Espero que los encierren muchos años. Pobre Pedro, me da mucha pena ese hombre
 
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