Máxima perdió una hermana pero supongo que como es madre sabe que debe estar entera para la suya.Yo sí, la veo triste pero entera para lo que le ha pasado.
Cuando hemos pasado momentos duros he estado fuerte por mis hijos, aunque por dentro me haya querido morir y hayan tenido casi que recogerme del suelo en privado, no se si sea el caso de Máxima pero ella es, de por si, una mujer muy fuerte, en el mejor sentido de la palabra. En esos momentos todo el mundo reacciona distinto, yo me desplomo antes y después, durante me encierro en mi misma y no me sacan una palabra mas que para cuestiones de logística. Nadie puede dudar que adoraba a su hermana pequeña.
Hemos visto funerales en los que los deudos lloran a mares, se descomponen e incluso deben ser atendidos, y a los pocos meses están peleando por la herencia. En otros funerales algunos deudos son el pilar fuerte que está dispuesto a recibir el afecto y los saludos de la gente que se acerca a saludar y luego arrastran depresiones por muchos meses. El duelo debe hacerse. Antes o después el llanto, los golpes, la impotencia, la tristeza y la despesperación se manifiestan. Estas imágenes representan los escasos minutos de Máxima en su instancia de "duelo" que son fotografiados. No estuvimos en el primer contacto con su madre al llegar a Buenos Aires, no fuimos testigos de cuando recibio la noticia ni se las contó a sus hijas, y no sabremos lo que serán sus noches en los meses o años que sigan cuando se termine la agenda. AHI ESTÁ EL DUELO Y ES PRIVADO y de terapeutas.
Yo veo una familia triste y sentida, sobre todo en las chicas que no tienen filtros y si las chicas están así de tristes será por el arraigo afectivo que esta tía que vivía a miles de kilómetro ha sembrado en ellas por el contacto que su madre les ha propiciado. Eso lo dice todo.