MEDIO AMBIENTE

El pueblo que se alimenta de todo
En Olot (Girona) un sistema de energía geotérmica, fotovoltaica y de biomasa nutre a una decena de edificios del centro


1507040753_227608_1507041490_noticia_normal.jpg


ISABEL VALDÉS
9 OCT 2017 - 10:00 CEST



Olot no se levantó en cualquier sitio. Lo hizo en medio de cráteres y conos volcánicos, hayas, encinas, alcornoques y robles; en medio del Pirineo Oriental, en el punto central de los 120 kilómetros cuadrados que ocupa el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrocha. Mucho tiene que ver toda esa exuberancia verde que la rodea para que acabara convertida en el único lugar de España con un sistema de trigeneración de energía —geotermica, fotovoltaica y de biomasa, esta última de kilómetro cero proporcionada por empresas cercanas— que proporciona calor, frío y electricidad a varios edificios en el centro de la ciudad.

Allí, en el casco histórico de esta población de Girona de 34.000 habitantes, con huella modernista y sede del mejor estudio de arquitectos del mundo, el antiguo Hospital de Sant Jaume ha pasado de tener paritorios a dos salas de acumulación de biomasa con dos calderas que alcanzan los 450 y 150 kilovatios de potencia, tres bombas geotérmicas de sesenta kilovatios, placas solares fotovoltaicas y dos acumuladores de agua caliente de 20.000 litros. Se ha convertido en la central de la red de climatización de este distrito inteligente, puesta en marcha por Gas Natural Fenosa y Wattia Innova, que se extiende a algunos comercios y edificios públicos. Una apuesta que, según Josep Maria Corominas, el alcalde, es el camino por el que las administraciones deberían ir: “Son proyectos que no solo hacen ilusión, sino que son un reto, suponen un ahorro energético y monetario importante para todos y son imprescindibles para el entorno”.

1507040753_227608_1507041822_sumario_normal.jpg

Gas Natural Fenosa, Wattia y el Ayuntamiento de Olot activan la primera red de climatización de España basada en tres energías renovables. GNF

Las residencias geriátricas Montsacopa, Sant Jaume y La Caritat, el Mercado, el Museo Comarcal de la Garrotxa, la Oficina de Turismo, el edificio multiusos Can Monsà, sede de la Fundación de Estudios Superiores, entre otros organismos, son los inmuebles que gozan del suministro de renovables. “Además del centro donde nuestros abuelos van a bailar, una tienda Mango y un Abacus (cooperativa de venta de material escolar). Todo funciona con estos tipos de energía y un control automático que permite suministrar frío, calor y electricidad de la forma más eficiente. A través de sus 1.800 metros de red llega a dar servicio a 40.000 metros cuadrados”, explica Francesc Comino, director general de Wattia, la empresa de eficiencia energética y especializada en automatización de edificioscon la que Gas Natural Fenosa contó para el proyecto.

Ángel Gonzalo, responsable del proyecto de la energética en Olot, recuerda cómo comenzó todo a través de una licitación del consistorio, coincidiendo con las obras que iban a comenzar en la plaza del Mercado y en cuyo subsuelo acabaron excavando 24 pozos geotérmicos. “La cosa había empezado incluso antes, con el EspaiZero”, apunta Comino, el director de Wattia. El EspaiZero fue el primer centro de trabajo estatal autosuficiente energéticamente, terminado en 2013 y prueba de que se puede funcionar, también en espacios propiedad del Estado, sin ningún tipo de energía externa. “Cuando llegó la remodelación del mercado de Olot, empezó a florecer la idea de aprovechar esas obras para crear algo parecido al EspaiZero. Y así fue como nació el germen de este District Heating and Cooling Multienergía de Cataluña”.

1507040753_227608_1507222787_sumario_normal.jpg

El exterior de la central de la red inteligente de Olot. WATTIA


El Ayuntamiento de Olot arrimó el hombro institucional, Wattia el conocimiento del entorno y la tecnología, y Gas Natural Fenosa la financiación: 1,7 millones de euros en una concesión a 15 años. El proyecto, incluido en el Plan de Energía y Cambio Climático de Cataluña 2012-2020, supondrá un ahorro anual de emisiones de cerca de 750 toneladas de CO2 y una reducción de la factura energética de los edificios municipales incluidos en el proyecto. Todavía no se atreven a dar cifras. “Con solo unos meses, no se puede hacer balance con perspectiva”, apunta Comino. Aunque tienen previsiones: “Podría llegar a ahorrar, por año, 750 toneladas de CO2, es decir, las mismas emisiones que podrían absorber 290 hectáreas de bosque”.

Esa reducción es gracias, sobre todo, a la previsión del tiempo que hará el día siguiente y la configuración de cada sistema energético en función de ello: “Con un protocolo de comunicación abierto entre los distintos sistemas para que los aparatos puedan ‘hablar’ entre sí y decidir cuál es la energía más eficiente en cada momento”. Todo esto, según Comino, tiene además un filón pedagógico y social: “Ha de ser algo que pueda aprenderse y divulgarse, es esencial el conocimiento sobre eficiencia energética”. Su EspaiZero ya acumula más de 2.000 visitas de escolares, universitarios e investigadores; el distrito inteligente es, si cabe, más “abierto”. Cuenta Comino que la planta baja de lo que ahora es la central de esa red se ha cubierto de cristaleras para que se vea el interior, donde están los tubos, las máquinas y los tanques, y al lado de cada uno, letras adhesivas que indican qué es: “Ahora, el objetivo es seguir haciendo crecer esta red".

https://elpais.com/economia/2017/10/03/actualidad/1507040753_227608.html
 
1507273562_095548_1507274599_noticia_normal.jpg

Renovables
¿Revolución renovable? La ‘nube’ como almacén de energía solar
Por
Jorge G. García
En España el futuro es incierto, En Alemania y Reino Unido, la eléctrica E.ON abandera el ‘cloud computing’ para que empresas y usuarios saquen el máximo rendimiento a las placas fotovoltaica

Madrid 8 OCT 2017 - 11:39 CEST

Las nubes se han convertido en aliadas de las placas solares. Nadie pensaría que un cielo encapotado fuera una solución para sacar el máximo rendimiento posible a esta energía renovable. La culpable de esta paradoja es la nueva tecnología del cloud computing y la apuesta por este sistema de la eléctrica alemana E.ON. Resume perfectamente las intenciones de la multinacional Karsten Wildberger, director de operaciones de la compañía: “Los clientes deberían vernos como los pioneros del nuevo mundo energético”.

El plan de la firma germana comenzó en abril de este año. Con vistas a facilitar el consumo eléctrico de sus clientes tanto en Alemania como en Reino Unido, puso a su disposición una nube para que pudieran manejar a su antojo la energía que produjera los paneles solares. Es decir, los usuarios tienen al alcance de la mano una cantidad ilimitada de megavatios para venderlos, utilizarlos o simplemente guardarlos. “Estamos derribando las barreras más antiguas del sistema eléctrico para que la sociedad diseñe libre, personal y eficientemente su consumo energético”, añade Wildberger.

Para comprender el funcionamiento de la nube solar, solo hay que pensar en cómo se emplea para el almacenamiento de documentos. En este caso, en vez de archivos se mandan megavatios. Una consideración importante, tal y como indica Jorge Morales de Labra, vicepresidente de la Fundación Renovables, es que toda la energía guardada no tendrá el mismo valor. “No almacena kilovatios por hora, sino euros. Depende de la hora a la que se genere, tendrá un precio u otro. Es decir, cuando se venda o consuma el valor que tenga fluctuará en función de cuando se haya producido”, precisa.

Otra arista del empleo de esta nueva tecnología es el acuerdo que alcanzó con Google para maximizar el rendimiento de las placas fotovoltaicas en Alemania. Conjuntamente desarrollaron una app, E.ON Solar, que extrae los datos de Google Earth e informa a los clientes de E.ON de cuánta energía solar puede generar su casa. Para que la información no se pierda por el camino, esta aplicación también permite el acceso a un enlace a través del cual comprar e instalar toda la tecnología necesaria y, de esta forma, convertir a quien quiera en un pequeño productor de las renovables.


Un crecimiento imparable

1507273562_095548_1507274857_sumario_normal.jpg

El consumo de energía solar a nivel mundial no es, ni mucho menos, el primero del ranking. El carbón y el gas natural prosiguen liderando esta clasificación. Aún así, grandes compañías como Google están enarbolando la bandera de las renovables y sí han apostado decididamente por los paneles fotovoltaicos. Según un estudio de la petrolera BP, el crecimiento del consumo de energías fósiles se ha visto ralentizado en los últimos años. En 2015, por ejemplo, el empleo del carbón ha descendido un 4%; por el contrario, en el caso de la solar se ha incrementado más de un 30 y el de la eólica está muy cerca del 20.

Alemania, al igual que China, están a la cabeza del mercado de paneles fotovoltaicos con más de 40.000 megavatios instalados en ambos Estados según la Agencia Internacional de Renovables (IRENA en sus siglas en inglés). España, uno de los países europeos con más horas de sol al año, sin embargo tiene una potencia 40 veces inferior. Los cambios legislativos desde 2007, momento en el que el Gobierno subvencionó esta energía, y las penalizaciones al autoconsumo y al intercambio energético entre particulares, el denominado impuesto al sol, no han ayudado al impulso de un sector que crece a marchas agigantadas en otras regiones del mundo.

“Adoptar el cloud computing en España supondría dinamitar las reglas del juego eléctrico. Es casi como algo de ciencia ficción. Hay que tener presente que las empresas de este mercado controlan todo”, razona Morales. Desde el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital señalan que se trata de garantizar la sostenibilidad del sistema. “El autoconsumidor tiene que contribuir con los costes de la red, igual que el resto de usuarios, tanto para las eléctricas como para el resto de servicios De no hacerlo, se estaría beneficiando sin hacer las aportaciones correspondientes”, concluye.

Algunas compañías eléctricas, como Endesa, tienen presente que las mayores críticas que recibe el sistema son por la mala regulación del autoconsumo. Soluciones como las de E.ON están todavía muy lejos de llegar a España mientras la legislación se mantenga igual de rígida. “La prohibición de que los clientes puedan vender los vertidos impide en España cualquier aplicación similar. Si se eliminara esta restricción, esta y muchas otras posibilidades tecnológicas podrían implementarse”, aseguran desde Endesa.


1507273562_095548_1507274889_sumario_normal.jpg


El futuro fotovoltaico en España es incierto. Pese a que el precio de los paneles solares haya descendido un 72% y la inversión mundial se haya disparado un 906% desde 2005, tal y como demuestran las cifras de IRENA y PVinsights, las leyes vigentes tienen que cambiar para equiparse a países como Alemania. El vicepresidente de la Fundación Renovables pide que los reguladores tengan la mente abierta y vean en la revolución tecnológica y digital una puerta abierta también en el sector eléctrico. “El usuario que quiera utilizar la nube que lo haga. Ahora bien, estos pioneros tendrán muchísimos problemas y será un calvario en casi todo”, zanja Morales.

E.ON ha decidido dar un salto tecnológico y explorar las soluciones que mejor se adecuan a su sector. “Si te asocias con una compañía solvente en el entorno digital, esto solo puede aportar ventajas a tu empresa”, argumentaba Andreas Stender, experto en energía, en una entrevista en Handelsblatt. La multinacional alemana está marcando el paso al resto de competidores. El camino en España para que los usuarios decidan qué hacer con su energía se atisba lejano, pero Jorge Morales arroja un pequeño rayo de luz. “El presente es aplicar las nuevas tecnologías y compartir datos e información entre los clientes. Terminaremos conviviendo con estas soluciones y las grandes plantas energéticas”, matiza.


https://retina.elpais.com/retina/2017/10/06/innovacion/1507273562_095548.html
 
La contaminación del pasado está escrita en los pájaros
Investigadores usan aves de museos ennegrecidas por el hollín para rastrear la polución que había en las ciudades

MIGUEL ÁNGEL CRIADO
9 OCT 2017 - 23:02 CEST
Ampliar foto
A la izquierda, alondras cornudas procedentes de las ciudades industriales del este de EE UU. A la derecha, ejemplares de la costa oeste. CARL FULDNER Y SHANE DUBAY


Los ornitólogos y los taxidermistas ya se habían dado cuenta: muchos de los pájaros disecados que guardan los museos de historia natural desde hace décadas son más oscuros que sus parientes actuales. ¿Selección natural o artificial? ¿Deriva genética o mutación de los genes de la pigmentación? No, simplemente sus plumas están contaminadas por el hollín de las fábricas y de cuando se usaba carbón para calentar los hogares. Ese ennegrecimiento del plumaje de las aves ha permitido ahora a dos investigadores reconstruir la historia de la contaminación del aire en las ciudades industriales.

"Queríamos hacer un proyecto aprovechando las colecciones de historia natural para evaluar el cambio a través del tiempo, en este caso, el cambio medioambiental. Nos fijamos en los ejemplares de pájaros del Museo Field de Chicago, un museo de historia natural como el [español] Museo Nacional de Ciencias Naturales. Uno de los responsables nos comentó que los especímenes de hace 100 años eran mucho más oscuros que los actuales. Se pensaba que esta decoloración se debía a la polución por negro de carbón, pero nunca se había confirmado", explican en un correo los autores de la investigación, los estudiantes de posgrado de la Universidad de Chicago (EE UU) Shane G. DuBay y Carl C. Fuldner.

Los dos investigadores confirmaron por medio de un microscopio electrónico (ver imagen) que no se trataba de un caso de melanismo industrial como el de la mariposa de los abedules, que se mimetizó con los arboles oscurecidos por el carbón. En este caso, el hollín ambiental se adhería a los pájaros. Así que buscaron sí había algún patrón temporal en su ennegrecimiento. Y, de encontrarlo, averiguar qué y cuánta contaminación había un siglo atrás.

Para ello, seleccionaron 1.347 pájaros capturados entre 1880 y 2015 de tres de las mayores colecciones ornitológicas de EE UU, entre ellas la del Museo Field. Los ordenaron cronológicamente y los fotografiaron. Los dos investigadores se aprovecharon de un doble fenómeno. Por un lado, el hollín tiene un muy bajo nivel de reflectancia de la luz, así que las variaciones indicarían proporciones diferentes de hollín en las alas del pájaro y, por tanto, en el ambiente en el que volaba. Por otro lado, las cinco especies estudiadas (dos de gorriones, una alondra, un pájaro carpintero y un rascador zarcero) mudan sus plumas cada año. Por lógica, llevaban en sus plumas un reflejo de la polución atmosférica en el año en que fueron capturados, disecados y añadidos a la colección.

"El hollín en las plumas de los pájaros nos permitió rastrear la cantidad de negro de carbón en el aire a lo largo del tiempo", comenta DuBay. Vieron que el ennegrecimiento iba en paralelo al consumo de carbón. Desde inicios del siglo pasado, los gorriones de campo o las alondras cornudas que se iban añadiendo a las colecciones tenían sus pechugas cada vez más negras. "Durante la Gran Depresión, hubo una drástica bajada del negro de carbón en los pájaros ya que el consumo de carbón cayó", añade. La cantidad de hollín repuntó durante la II Guerra Mundial y en la década siguiente. Pero desde los años 60. los pájaros fueron recuperando su color blanco.

Como explican en los resultados de su trabajo, publicados en PNAS, a mediados de los 50, EE UU aprobó la Air Pollution Control Act, la primera legislación federal sobre contaminación atmosférica. Entonces ya se sabía que las partículas de negro de carbón provocaban enfermedades respiratorias, pero aún no que también provoca cáncer. El blanqueamiento de los pájaros se vio favorecido por la acelerada sustitución del carbón por otras fuentes de energía como el gas y la electricidad para calentar los hogares. La eficiencia energética y la concentración industrial ayudaron a que el hollín redujera su presencia.

1507529646_742858_1507568536_sumario_normal.jpg
ampliar foto
Imagen con microscopio electrónico de las plumas de un gorrión de campo de 1906 y otro de 1996.


Para validar sus resultados, los compararon con los obtenidos de varios estudios basados en el análisis de las partículas atrapadas en cilindros de hielo obtenidos de Groenlandia. Como los anillos de los árboles, la profundidad del hielo se puede usar como una máquina del tiempo. Salvo para las dos primeras décadas de su estudio, el hollín atrapado en el hielo presenta una evolución paralela al detectado por ellos en los pájaros. La gran ventaja de estos es que son testigos de la contaminación local, la que les rodeaba, mientras que al hielo de Groenlandia llega polución de todo el hemisferio norte.

Lo que no pueden desvelar los pájaros negros es cuánta contaminación había. Su color es un valor relativo que indica si ese año hubo más o menos hollín que el año anterior o el posterior. Pero los autores de esta investigación ya piensan en cuantificar la polución del pasado: comparando el ennegrecimiento de las plumas de los ejemplares que hace un siglo volaban sobre las ciudades industriales americanas o europeas con el de los pájaros que hoy vuelan los cielos de Pekín o Nueva Delhi.

https://elpais.com/elpais/2017/10/09/ciencia/1507529646_742858.html
 

La complejidad de España va más allá de la política: un país con 15 climas
Los accidentes geográficos en la Península, Canarias y Baleares condicionan la meteorología diaria

DANIEL SANTOS MUÑOZ
14 OCT 2017 - 10:38 CEST

Imagen del Teide. CORBI

España es un país complejo, pero no solo en los asuntos políticos —como se ha evidenciado estas semanas con el pulso independentista catalán—, sino que el propio territorio se caracteriza por la multiplicidad de accidentes geográficos que le confieren un especial carácter. Montañas y valles, zonas volcánicas, riberas de ríos y costas condicionan el clima de cada zona y la meteorología diaria.

El clima es el resultado de una serie de características promedio de situaciones meteorológicas. Una simplificación de los climas de España los clasifica en seis tipos: oceánico, continental, mediterráneo, de montaña, subtropical y semidesértico. Sin embargo, la realidad es mucho más diversa.

A principios del siglo XX, un geógrafo, meteorólogo, climatólogo y botánico ruso de origen alemán, Wladimir Peter Köppen, confeccionó un sistema de clasificación del clima mundial. Para su elaboración tomó como base los valores medios mensuales de la precipitación y de la temperatura en una zona. Köppen y otros climatólogos modificaron la clasificación inicial en 1918 y 1936. La última modificación, la de 1936, recibe el nombre de Köppen-Geiger, e identifica cada tipo de clima con una serie de letras. Las letras mayúsculas de la A a la E se reservan para los climas principales: tropical, seco, templado, continental y frío. Además, se establecen subtipos y variedades dependiendo de la cantidad de precipitación y la temperatura media anual.

Esto hace que, según los Atlas Climáticos Ibérico y de los Archipiélagos de Canarias, Madeira y Azores, se puedan definir hasta 15 zonas con climas distintos. Todas ellas —sean de la Península, Baleares o Canarias— se enmarcan dentro de los tipos seco, templado y frío, sin que se registren zonas de tipo tropical ni continental. En Tenerife, por ejemplo, la existencia de diversos subtipos y variedades nos permite pasar en escasos kilómetros por seis clases de clima: de un clima de desierto cálido a uno de estepa fría, para finalizar con un clima frío con verano seco y fresco en el Teide.

La orografía escarpada de España da lugar a comportamientos meteorológicos muy diversos aunque el patrón general atmosférico sea el mismo. El conocimiento local en un valle, en una zona costera, en la ribera de un río o en las estribaciones de una montaña puede ser fundamental para afinar en una predicción que a los modelos por ordenador aún les resulta esquiva. Sin embargo, todas estas clasificaciones se pueden ir al traste si los cambios en el clima que se avecinan, como consecuencia del calentamiento global, varían las características del tiempo en España.

CLASIFICACIÓN DE KÖPPEN-GEIGER APLICADA A LOS CLIMAS DE ESPAÑA
1507732755_103673_1507735509_sumario_normal.jpg

Mapa de la clasificación de los climas de la Península y Baleartes ATLAS CLIMÁTICO IBÉRICO AEMET-IM


En España podemos encontrar estos cuatro tipos de clima, que junto a sus subtipos y variedades dan lugar a 15 agrupaciones distintas:

Climas Secos - Tipo B

BWh – desierto cálido; BWk – desierto frio; BSh – estepa cálida BSk – estepa fría.

Climas Templados - Tipo C

Csa – templado con verano seco y caluroso; Csb – templado con verano seco y templado; Csc – templado con verano seco y fresco; Cfa – templado sin estación seca con verano caluroso; Cfb – templado sin estación seca con verano templado; Cfc – templado sin estación seca con verano corto y fresco.

Climas Fríos - Tipo D

Dsb – frio con verano seco y templado; Dsc – frio con verano seco y fresco; Dfb – frío sin estación seca y verano templado; Dfc – frío sin estación seca y verano fresco.

Climas Polares - Tipo E

ET – tundra.

https://politica.elpais.com/politica/2017/10/11/tiempo_al_tiempo/1507732755_103673.html
 
Los precios del vino se disparan por las malas cosechas en toda la UE
España espera mantener el liderazgo en la exportación con fuerte incremento de los ingresos


VIDAL MATÉ
Madrid 17 OCT 2017 - 06:49 CEST
1503664399_622229_1503664542_noticia_normal.jpg

Imagen de una cata de vinos. MARIO RUIZ EFE


Los precios del vino, especialmente los de venta a granel, se han disparado en todos los mercados en origen. Los incrementos medios en bodega en las zonas de mayor producción como Castilla-La Mancha son del 65% para los tintos y del 72% para los blancos, según los datos manejados por algunas de las bodegas más importantes de la zona. Fuentes de las cooperativas señalan unos precios medios mínimos de venta para los vinos a granel de 0,64 euros en tintos y de 0,53 euros para los blancos. La pasada campaña, los precios medios del vino a granel exportado se situaban en 0,40 euros litro.

De acuerdo con estos datos, se espera una fuerte subida de los vinos más baratos al consumo. En el caso de los de más calidad, especialmente en las denominaciones de origen más castigadas por las heladas, los precios de la uva llegaron a los dos euros kilo en zonas como Bierzo y a superar ampliamente los dos euros en otras como Rioja o Ribera del Duero duplicando sus cotizaciones.

Según los datos manejados por el sector, el coste de la uva supone entre un 40% y un 50% del coste total en la elaboración de un vino joven del año. Por este motivo, medios bodegueros de estas zonas ven imposible repercutir el incremento de los precios de la materia en la cuantía final del vino joven y consideran que el mercado solamente podría asumir un incremento del 20%. Esta es la razón por la que estiman que se verán obligados a reducir al mínimo esta campaña la elaboración de vinos jóvenes, reducir márgenes y apostar por elaborar caldos reservas o grandes reservas dada la gran calidad de la vendimia.

Para el presidente de las Cooperativas Agroalimentarias y del sector del vino, Ángel Villafranca, dadas las bajas cosechas en todo el mundo y muy especialmente en el conjunto de la Unión Europea, España se halla ante una gran oportunidad para mantener el liderazgo en la venta de vino en el mundo y generar ingresos muy superiores.

Fuerte bajada de producción
Según los datos provisionales de la vendimia, la producción española de vino se estima entre los 35 y 36 millones de hectolitros, frente a los 44 millones fijados finalmente por la Administración en la campaña pasada. El descenso no ha llegado al 20% en las grandes zonas de producción, mientras esa caída fue especialmente grave en denominaciones de origen como Ribera del Duero con una pérdida de dos terceras partes; o del 50% en otras zonas como Bierzo, Rioja o Rueda.

A pesar de este descenso general, no hay ningún problema de abastecimiento si se tiene en cuenta que la demanda de vino en España es solo de 10 millones de hectolitros y que al inicio de campaña las existencias en bodegas eran de 31,8 millones, 2,9 millones más que en la campaña anterior, aunque ligeramente por debajo de la media de la última década.

Campaña reducida en toda Europa
La subida de los precios del vino del año viene determinada fundamentalmente por la existencia de muy bajas cosechas en el conjunto de los países comunitarios y muy especialmente en aquellos como Italia o Francia donde normalmente la demanda para su mercado interior y la exportación es inferior a su producción. Esta campaña, la producción comunitaria de vino ha sido de solo 145 millones de hectolitros, frente a una media de 168 hectolitros y a los 169,4 millones de la campaña anterior. Se trata de la segunda cosecha más baja de las últimas décadas, solo por encima de los 140,6 millones de hectolitros de la campaña 1982/83. En Italia la cosecha es solo de 40 millones de hectolitros, con un descenso del 21%; y en Francia de 37,2 millones de hectolitros con un recorte del 18%.

España exportó en los últimos años una media de 23 millones de hectolitros de los que casi cinco van a Francia prácticamente en su totalidad a granel a unos precios medios de 0,40 euros litro, lo que ha levantado las protestas de los viticultores franceses contra los productores españoles y contra los industriales galos.

https://elpais.com/economia/2017/10/16/actualidad/1508143944_253902.html
 
Los volcanes empujaron al colapso al antiguo Egipto
Las partículas expulsadas a la atmósfera cambiaron el régimen de lluvias abortando la crecida del Nilo

MIGUEL ÁNGEL CRIADO
17 OCT 2017 - 17:36 CEST

Egipto siempre ha vivido a lo largo del Nilo. JEFF SCHMALTZ/NASA GSFC

En el año 30 antes de nuestra era, Cleopatra VII se quitó la vida. Con ella acababa la milenaria historia del antiguo Egipto. Varios años de hambrunas, inestabilidad interna y el acoso de los romanos acabaron con los restos del imperio de los faraones. Pero todo empezó en el Nilo. En el verano del año 43, el río no creció. Sin la crecida anual, no hubo cosecha el año siguiente para alimentar al pueblo, llenar los graneros de los sacerdotes o pagar impuestos. Ahora una compleja investigación señala que el principio del fin pudo empezar con una erupción volcánica muy lejos de allí.

Historiadores y climatólogos han repasado la historia de los últimos 300 años del antiguo Egipto (323 a.C.- 30 a.C.), el de la dinastía de los Ptolomeos, y han encontrado que muchos de sus vaivenes fueron precedidos por erupciones volcánicas, algunas producidas a miles de kilómetros. Aunque rechazan la idea de que exista un determinismo ambiental, sí muestran cómo los volcanes de Islandia o el Cinturón de Fuego del Pacífico pudieron influir en las crecidas del Nilo. Mejor dicho, en su supresión y los problemas sociales y políticos que las sucedieron.

Entonces, la egipcia era una de las principales civilizaciones hidráulicas, como fueron la del valle del Indo o las ciudades sumerias antes. Todo el sistema dependía de la crecida anual del Nilo que anegaba los campos en verano. A finales de septiembre y en octubre amplias llanuras de lo que hoy es desierto reverdecían con los brotes del cereal. Las buenas cosechas daban de comer al pueblo y, por medio de los impuestos, permitían a los reyes egipcios guerrear con sus rivales, los romanos al oeste y el Imperio seléucida al este.

Pero si no llovía en la planicie ecuatorial africana y la meseta etíope, las fuentes del Nilo, no había crecida. Eso fue lo que pasó 14 años antes del su***dio de Cleopatra, en el 44 a. C. "Todas las pruebas que tenemos señalan hacia una reducción de las precipitaciones sobre la cuenca del Nilo y, por tanto, una menor crecida en verano como resultado del impacto de una erupción volcánica como la del Pinatubo o las que se producen en altas latitudes del hemisferio norte, como en Islandia", dice el historiador del Trinity College de Dublín (Irlanda) y principal autor del estudio, Francis Ludlow.

La clave aquí es el enfriamiento climático tras la erupción: "Las erupciones volcánicas arrojan grandes cantidades de gases sulfurosos a la estratosfera, donde se oxidan formando pequeñas partículas, los aerosoles de sulfato. Estos aerosoles son muy buenos reflejando la luz solar incidente al espacio. Esto provoca que llegue menos energía a la superficie, por lo que tenemos enfriamiento, menos evaporación y menos potencial para la lluvia", añade este experto en paleoclimatología.

Se produjo además un segundo fenómeno. Si la erupción se desató en algún volcán del hemisferio norte, como la concentración de partículas atrapadas en el hielo parece indicar, el enfriamiento de esta parte del globo pudo empujar hacia el sur la conocida como zona de convergencia intertropical (ZCIT), la región en la que los vientos de ambos hemisferios se encuentran. Esto provocaría que los vientos monzónicos no llegarían hasta las tierras altas etíopes donde el Nilo Azul se atiborra de agua.

"Los antiguos egipcios dependían casi exclusivamente de las crecidas veraniegas del Nilo, provocadas por la acción de los monzones en el este de África, para sus cosechas. En los años afectados por una erupción volcánica, las crecidas del Nilo eran menores, lo que provocaba una tensión social que podía desencadenar revueltas u otras consecuencias económicas y políticas", sostiene el profesor de Historia y Estudios Clásicos de la Universidad de Yale (EE UU) y coautor del estudio, Joseph Manning.

Otra cosa es que las erupciones provocaran todo el caos. "Sobre la sequía como causa, lo que sí podemos afirmar es que los Ptolomeos parece que fueron razonablemente resilientes, pero no tuvieron reparos en llevar a sus sociedades más allá del límite mediante el abuso en los impuestos y la producción de trigo sensible a la sequía", explica. "Pero es imposible saber si el pueblo pasaba más penurias que en el pasado. La década de los 40 a. C. fueron malos tiempos, pero cómo esto está conectado con el fin de la dinastía es, hoy por hoy, difícil de saber con certeza", añade.

La conexión se repite en otros acontecimientos históricos. Papiros y estelas recogen diversas revueltas internas, como la de Tebas en 207 a.C., iniciadas en los años posteriores a una erupción volcánica. Los mismo sucede con la venta de tierras. Base del sustento familiar, vender propiedades era el último recurso para que los que no podían pagar los impuestos evitaran perder la libertad. Tras cada una de las 18 erupciones producidas en este periodo histórico, se produjo un repunte del traspaso de propiedades, según muestran en la revista Nature Comunications.

Con las guerras el patrón fue algo diferente. Casi al mismo tiempo que Ptolomeo I creaba el último Imperio egipcio, otro de los herederos de Alejandro Magno, Seleuco, levantaba el imperio de los seléucidas. La historia dice que ambos duraron tres siglos y que los dos sucumbieron ante el empuje de los romanos. También dice que entre ambos imperios se produjeron nueve grandes guerras. Los investigadores no han encontrado ninguna conexión entre alguna erupción volcánica, la sequía del Nilo y el inicio de una de estas guerras. Lo que sí han comprobado es la asociación contraria: Cinco de ellas coincidieron con erupciones volcánicas y en todas los egipcios se apresuraron a firmar la paz.

https://elpais.com/elpais/2017/10/17/ciencia/1508227377_259419.html
 
El nuevo desastre medioambiental que acecha a China: las baterías


  • 1 de 11
    Imagen de una planta de baterías para coches eléctricos en China. (REUTERS)

    Batteries for electric vehicles are manufactured at a factory in Dongguan, China September 20, 2017. Picture taken September 20, 2017. REUTERS Bobby Yip TO MATCH INSIGHT CHINA-BATTERIES RECYCLING


    Galeria:https://www.elconfidencial.com/mult...aterias-coches-electricos-reciclaje_1466374#0


    25.10.2017 – 05:00 H. - ACTUALIZADO: 2 H.
    China mira con interés al coche eléctrico. Lo hace pensando en el problema de polución que sufren ciudades como Pekín o Shangai. Tecnológicas de todo tamaño ya trabajan para hacer de este sistema de transporte una norma habitual en los próximos años en el gigante asiático.

    Sin embargo, el crecimiento de esta tecnología rodante puede tener un problema añadido: las baterías. No por la fabricación sino por la vida útil de las misma y la gestión de su reciclaje. Muchos gigantes locales, como Shangai Jincao, JG Lithium o GEM Co. han invertido en instalaciones propias para poder reutilizar estas 'pilas' cuando se acaben y poder hacer negocio en este sector.

    Lo cierto es que los vehículos eléctricos en China no dejan de crecer. El pasado año ya fueron medio millón de unidades vendidas, el doble que en 2015. El Ejecutivo quiere que para 2020 se vendan 2 millones de estos utilitarios cada doce meses y que, en 2025, sean una quinta parte de la producción total de automóviles. Según la Agencia Internacional de la Energía, China representó cuatro de cada diez ventas de coches eléctricos el último curso, le siguió Europa y EE UU, quien fue desbancado como mercado con mayor cantidad de estos vehículos.

    Obviamente, la producción de baterías de litio que alimentan estos coches se ha disparado. Hasta agosto, los fabricantes chinos produjeron 6.700 millones de baterías, un 51 por ciento más que el año anterior, según datos del Ministerio de Industria. Datos que hace que muchos quieran hacer negocio para evitar que las baterías acabadas se conviertan en el próximo reto medioambiental en China.
 
Rechazo divino a los combustibles fósiles
Más de 40 asociaciones religiosas anuncian que dejarán de invertir en energías no renovables

1509027701_838999_1509040451_noticia_normal.jpg


ALBERTO G. PALOMO
Madrid 30 OCT 2017 - 08:12 CET


El cambio climático cuenta con el respaldo científico. También con el religioso. La preocupación por el medioambiente y por la degradación del entorno ha congregado a más de 40 asociaciones católicas, que han firmado un documento en el que se apuntan a desinvertir en combustibles fósiles. Esta postura, adoptada por entidades financieras y colectivos vinculados al Vaticano, trata de concienciar sobre el problema atmosférico al que nos enfrentamos. El aumento de la temperatura global, causante de desastres naturales y de la desaparición de ecosistemas, está relacionado con el uso de energías no renovables y el agotamiento de recursos. El anuncio se produjo el pasado 4 de octubre por sus impulsores, la red Tiempo para la Creación, coincidiendo con la festividad de San Francisco.

Nadie mejor para hablar de ese mandato ético y divino que Pablo Canziani, miembro del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, organismo que ganó el premio Nobel de la Paz en 2007 junto al candidato a la presidencia estadounidense Al Gore. Según este experto, el clima se enfrenta a unas amenazas irrevocables. “El uso intensivo de los suelos o las emisiones industriales, de transporte o domiciliarias ya han generado desestabilizaciones en las estaciones. El invierno se ha atrasado y la primavera adelantado, provocando la desaparición de los ecosistemas y especies más sensibles”, expone. “Además, la temperatura del agua ha aumentado entre 0,3 y 0,4 grados centígrados y uno la atmósfera, por lo que los fenómenos extremos (sequías, inundaciones, tormentas severas, olas de calor), que antes eran descritos como eventos del siglo porque ocurrían una vez cada 100 años, hoy suceden mucho más frecuentemente. En algunas regiones del mundo, en la última década, inclusive casi todos los años”.

El paso al frente de estas instituciones no comporta ninguna reivindicación nueva. Ya desde el documento redactado por Papa Pablo VI en 1967, la iglesia Católica viene “cuestionando y alertando sobre cuestiones fundamentales del desarrollo y de la cuestión socio-ambiental”, apunta Canziani, también coordinador de la Red Argentina de Ambiente y Desarrollo (RAAD). De hecho, el estado de la Santa Sede fue el primero en neutralizar las emisiones. “Si Dios creó todo, materia y espíritu, y eso incluye las relaciones que rigen la evolución y comportamiento de la materia y de la vida, la evolución del pensamiento científico para describir y comprender la naturaleza no está reñida con la fe. Es más, el conocimiento científico bien entendido puede ser camino de fe para muchos. Si pensamos desde la ciencia, desde la física cuántica más específicamente, donde la descripción del objeto y su estado depende de la posición del observador y de su método de observación, ¿por qué no podemos pensar que según como se observe la naturaleza, la Creación, percibo en unos casos su dimensión material y en otros su dimensión espiritual?”, reflexiona Canziani.

Cada año, el uso de combustibles fósiles ha ido mermando, según lo recogido por la Agencia Internacional de la Energía (IEA, en sus siglas originales). En un gráfico elaborado por el Banco Mundial desde 1960 hasta 2015, el consumo de estos recursos no renovables —que comprenden el carbón, el aceite, el petróleo y el gas natural— ha pasado de ser el 94% del total al 81%. Es decir, que existe un descenso de casi 14 puntos, pero continúa siendo la opción mayoritaria. Y eso que la tendencia de energías como la solar o la eólica es muy positiva: en 2015, la instalación mundial de paneles solares fue un 50% mayor que el año anterior, tal y como documentaba SolarPower Europe. Y el uso del viento para producir energía creció un 12,6%, remarcaba la Asociación Empresarial Eólica. Grandes potencias como Estados Unidos o China son parte de este impulso hacia lo limpio (aunque sigan sin cumplir algunos tratados o se desvinculen de acuerdos como el de París). Incluso Francia, tradicional defensor de la energía nuclear, se ha comprometido a cerrar 17 reactores antes de 2025.

“Los remedios necesarios para frenar el proceso de calentamiento global y el consiguiente cambio climático pasan principalmente por la reducción de emisiones de los principales gases de efecto invernadero (dióxido de carbono, metano y óxido nitroso), así como poner fin a la destrucción de ecosistemas naturales fundamentales para la regulación del sistema climático”, señala Canziani. El también fundador del Movimiento Católico Mundial por el Clima (GCCM, en inglés), una de las entidades principales en la toma de esta decisión, ve otro alivio “menos contado”: poner fin a la desigualdad. “Los más ricos (un 25% de la humanidad) consumen más del 80% de los recursos del planeta. Y los más pobres (poco menos del 50%), el 5%”, esgrime. Por eso emplaza a un “cambio de costumbres domésticas” para una mayor eficiencia energética.

Tomando precauciones concretas desde un círculo más íntimo, alertando desde organismos internacionales o legislando en todos los niveles, de lo local a lo global, se consigue el Bien Común al que invocan en su llamamiento. El Sacro Convento y varias diócesis de Asís, “hogar espiritual de los hermanos franciscanos del mundo” en el centro de Italia, la Conferencia Episcopal Belga o el Banco para la Iglesias y Cáritas de Alemania son algunos ejemplos de los firmantes, que calculan una pérdida de inversión multimillonarias. “Creemos que la Tierra pertenece a Dios y que el ser humano tiene la tarea divina de cuidarla. El uso abusivo de combustibles fósiles está dañando el producto de la Creación y los cambios en el clima están ocasionando pobreza ahora y en el futuro”, rubrican en el acta en la que se comprometen a la desinversión en compañías vinculadas a los combustibles fósiles.

Por primera vez después de 15 años ha vuelto a incrementarse el número de hambrientos en el mundo, lo cual prueba que no hace falta producir más sino dejar de desperdiciar. “Hay suficiente alimento, desde el punto de vista de proteínas y carbohidratos, para alimentar toda la población mundial prevista para el 2050 (9.500 millones de personas) pero se desecha hasta un 40%”, relata Canziani. “Y la producción no responde a la pirámide nutricional necesaria para las personas, con un gran exceso de granos y falta de frutas y verduras”, anota. Algo que se ha convertido en la segunda causa de emisiones en el mundo y en primera de derroche de agua así como de su contaminación, según el experto, coautor de La atmósfera: piel de la vida.

“En mi país, Argentina, más del 50% de las emisiones corresponden a la agroindustria y el cambio de uso de suelo, mayoritariamente por deforestación, que es también causada por crecimiento de la frontera agrícola a expensas de ecosistemas naturales”, dice Silvia Alonso, compañera de Canziani en la coordinación de RAAD. “Es necesario reemplazarla por producción agroecológica, orgánica, etcétera. En EE UU se calcula que se pierden por lo menos el 30% de los alimentos. En nuestro país la agroindustria no produce alimentos sino biomasa y a un costo humano y ambiental gravísimo por el uso intensivo de agroquímicos (pesticidas y fertilizantes)”, lamenta.

Por primera vez después de 15 años ha aumentado el hambre en el mundo,no hace falta producir más sino dejar de desperdiciar

Daniela Finamora, coordinadora de los programas de inversión del Movimiento Católico Mundial por el Clima, dirige los esfuerzos a cada sector de la sociedad y cita el “enfoque holísitico” sugerido en Laudato Si, la carta “sobre el cuidado de la casa común” enviada por el Papa Francisco en mayo de 2015. “El planteamiento es el de la ecología integral: un tema ambiental basado en evidencias científicas y estrictamente conectado a la conversión ecológica, la espiritualidad, la promoción de la justicia, el compromiso social y la denuncia de injusticias. Ninguno de ellos puede tratarse por separado”, aclara.

Y sigue: “El GCCM está poniendo remedios reales en términos de sensibilización, que es esencial. En particular, con la campaña de desinversión millonaria se tiene la intención de hacer que las instituciones católicas de todo el mundo sean conscientes de que sus inversiones podrían financiar directa o indirectamente un sistema energético que está dañando nuestro hogar común y que afecta principalmente a las comunidades más pobres y menos resistentes”. Como dictan en su web: “Recemos, actuemos”.


https://elpais.com/elpais/2017/10/26/planeta_futuro/1509027701_838999.html

 
LA CORTINA PUNTIAGUDA QUE NOS ECHA DE LA DUCHA A LOS CUATRO MINUTOS
Todos tenemos a un miembro de la familia o compañero de piso que por las mañanas acapara la ducha, gastando la preciosa agua caliente mientras intentamos desesperadamente prepararnos para ir al trabajo.



Elisabeth-Buecher-ducha-ahorrar-agua_.jpg




Bueno, pues ahora los usuarios de ducha exprés estamos de enhorabuena, ya que la artista londinense Elisabeth Buecher ha diseñado la solución para la ducha perfecta, muy apropiadamente llamada "spiky" (puntiaguda).

¿Hartos de las personas que cantan en la ducha mientras intentas prepararte para ir al trabajo?

Elisabeth_Buecher_ducha_ahorrar_agua_10.jpg



Su cortina, equipada con temporizador, cuenta con suaves pinchos inflables que se hinchan cuando la ducha ha estado funcionando durante más de cuatro minutos.


Elisabeth_Buecher_ducha_ahorrar_agua_11.jpg



De forma no dañina pero a la vez muy molesta, estos coloridos objetos empujan eficazmente al usuario (muy probablemente mientras está en mitad de la interpretación de su canción favorita), apartándole de debajo del agua y obligándole a terminar.


Elisabeth_Buecher_ducha_ahorrar_agua_12.jpg



Aunque aparentemente es la solución perfecta para salvar al mundo de los acaparadores de duchas, la cortina "spiky" también aumenta nuestra conciencia sobre el consumo de agua y promueve un uso mínimo.

A través de este divertido método, los pinchos inflables actúan como "sicarios" a favor de la conservación del agua, obligando a los consumidores excesivos, como nuestro hermano menor o compañero de piso, a ser más conscientes de su derroche de agua.


Elisabeth_Buecher_ducha_ahorrar_agua_13.jpg



Como tal, la instalación artística "spiky" de Elisabeth Buecher forma parte de "my shower curtain is a green warrior" (mi cortina de ducha es un guerrero verde), que tiene como objetivo provocar debate sobre los problemas del agua y hacer que las personas seamos más conscientes de su consumo.


Todas las imágenes cortesía de Elisabeth Buecher

http://culturainquieta.com/es/arte/...os-echa-de-la-ducha-a-los-cuatro-minutos.html
 
Última edición por un moderador:
MEDIO AMBIENTE
El pulmón submarino de la isla
Posidonia: Formentera prefiere el medio ambiente antes que los yates
15097397543335.png

Barrera de posidonia en el Mediterráneo. GUILLEM ROCA


La calidad del litoral Mediterráneo depende de la posidonia, una planta submarina que oxigena y depura las aguas


Impactos diversos como los vertidos, la pesca de arrastre, el fondeo de barcos y el calentamiento global están afectando a su conservación

Formentera, que alberga la mayor pradera de posidonia de España, va a regular el fondeo de yates para evitar que deterioren este importante recurso

Pierre-Yves Cousteu se prepara para sumergirse en la punta de Sa Pedrera, un rincón al norte de Formentera donde una terraza de arenisca se interna abruptamente en el agua, como un balcón de piedra tostada sobre el azul Mediterráneo. Es una tarde de un octubre veraniego, el sol luce con fuerza y el agua está a 23º, condiciones ideales para la inmersión.

El menor de los hijos del comandante Jacques Cousteu -el famoso pionero francés del submarinismo y de la divulgación marina- está dedicado a visitar los fondos que su padre filmó, años atrás, para comparar imágenes de distintas épocas y ver cómo han evolucionado en las décadas transcurridas. El resultado es, a menudo desolador. Algunos de ellos, explica, "se han perdido casi por completo y la biodiversidad se ha reducido en un 90%".

La contaminación, los excesos pesqueros y otros impactos humanos han destruido lugares que, hace solo unas décadas, estaban llenos de vida.

Cousteu utiliza estas filmaciones de ayer y de hoy como una herramienta de concienciación ambiental y, por medio de su proyecto Cousteau Divers, llama la atención sobre el deterioro ambiental que sufre el planeta. Pero en esta ocasión el resultado será distinto.

Cuando salimos de la inmersión, el joven Cousteau lo hace con una gran sonrisa de satisfacción. Hemos visto multitud de alevines, grupos de atunes, meros, pulpos, bancos de barracudas y hasta caballitos de mar moviéndose sobre un telón rico en formas y colores. "Estos fondos están entre los mejores del Mediterráneo", dice Cousteau, un vivo retrato de su padre, con la misma mirada azul, su nariz aguileña y un cuerpo tan flaco que hasta el neopreno le queda holgado.

15097402033631.png

Un caballito de mar delante de una mujer que bucea. JORGE JIMÉNEZ



A su lado comparte alegría el escocés Richard Aspinall, un fotógrafo submarino de revistas internacionales especializadas, que sale eufórico del agua: "¡Por fin un caballo de mar, por fin!". Lleva años haciendo inmersiones y no había podido ver hasta hoy una especie que se ha vuelto sumamente escasa.

El guía del grupo, el biólogo Manu San Félix, estrella del programa Pristine Oceans de National Geographic, para quien ha filmado desde Patagonia hasta la Polinesia, asiente satisfecho. Aunque últimamente da vueltas por el mundo, su hogar está en Formentera. Hace 25 años que vive en la isla y ha dedicado ese tiempo a fotografiar sus fondos y advertir sobre su conservación.

Encuentro de expertos en Formentera
Todos ellos participan en el Posidònia Forum, un congreso enmarcado en el Save Posidonia Project, una iniciativa del Consell Insular de Formentera y el Patronato de Turismo para reflexionar sobre el futuro de un enclave con grandes valores naturales pero sometido a una creciente presión turística.

Las aguas donde han buceado Cousteau y compañía son Patrimonio de la Humanidad desde 1999. La UNESCO otorgó esta distinción al Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera porque alberga una de las praderas de posidonia (Posidonia oceanica) más extensas y mejor conservadas del Mediterráneo.

La posidonia sólo crece en este mar y es un organismo singular. Aunque viva bajo el agua, es en realidad una planta; tiene raíces, flores y frutos y es pieza clave del litoral, pues mantiene limpias las aguas y arenales y estimula vida marina. Realiza en nuestras latitudes muchas de las labores que los corales cumplen en los trópicos.

Pese sus virtudes, la posidonia es una gran desconocida para la mayoría de las personas. Muchos no sabrán ponerle nombre, pero cualquiera que haya veraneado en el Mediterráneo la habrá visto, o al menos sus hojas. Son esas cintas pardas o verdes que aparecen flotando en la orilla, especialmente en los días de oleaje y que a menudo son percibidas como algo que ensucia la playa. En realidad la posidonia hace lo contrario: ayuda a limpiarla y, de hecho, a crearla.

Lo explica Raquel Vaquer-Sunyer, investigadora del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA-CSIC-UIB). La planta crece a escasa profundidad, allá donde hay luz, lo que en las mejores condiciones no supera los 40 metros de profundidad. En esas zonas cercanas a la costa forma grandes praderas verdes que consolidan el sustrato al mismo tiempo que capturan y retienen los sedimentos flotantes; además, su actividad de fotosíntesis libera oxígeno.

15097405980447.png

Biodiversidad marina JORGE JIMÉNEZ



Todo ello ayuda a mantener la claridad de las aguas y a proteger las playas, porque la pradera hace un efecto barrera que frena el oleaje y los restos de posidonia que llegan a las playas hacen de colchón protector de la arena durante los temporales y contribuyen a compactar y estabilizar los arenales.

Y no terminan ahí los servicios que presta la planta submarina. Si un fondo sin posidonia podría ser un arenal yermo, con ella se convierte en zona de reproducción de peces y todo tipo de organismos, al ofrecer comida, refugio y diversidad de ambientes, explica Guillem Roca, otro investigador del IMEDEA, quien lidera un proyecto de ciencia ciudadana (Observadores del Mar) en la que se pide a buceadores que documenten lo que encuentran bajo el agua.

Entre los muchos organismos que viven en la posidonia están aquellos que generan las apreciadas arenas blancas de Baleares. Un estudio realizado en 2013 en la famosa playa de ses Illetes de Formentera por Enrique Torres y Sunna Farriol, de la Universidad de Barcelona, demostró que el 90% de la arena está formado por los restos calcáreos de minúsculos moluscos gasterópodos y bivalvos que viven en las praderas submarinas. Son cerca de 200 especies distintas que crean una fina playa de minúsculos restos de concha made in ... posidonia.

Para Manu San Félix, es un "organismo insuperable", una planta que se ha adaptado a la vida submarina mostrando gran éxito evolutivo y ofreciendo un ecosistema de capital importancia. Las praderas no solo crecen en extensión, sino también hacia abajo. Año tras año depositan la materia orgánica en suspensión sobre el suelo y crean una suerte de arrecifes de metros de espesor. Estas formaciones fósiles son una especie de turbera submarina que retira más CO2 anual de la atmósfera que los bosques tropicales, según han demostrado varias investigaciones.

El problema es que es muy sensible a la alteración del ecosistema. La bióloga marina Nuria Marbá, del IMEDEA, realizó un estudio publicado en 2014 en la revista Biological Conservation donde se advertía que las praderas submarinas de todo el Mediterráneo han retrocedido entre el 13% y el 38% en el último medio siglo. Además, su densidad, otro factor fundamental, ha bajado un 50% en los últimos 20 años.

http://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2017/11/04/59fcbe28468aebd1508b46ed.html
 
Residuos en el mar de las islas Cayos Cochinos / Caroline Powers
MEDIO AMBIENTE
Un mar de basura de hasta 5 millas: las terribles consecuencias de no reciclar
Bolsas de plástico, botellas de cristal, platos, ropa y hasta una televisión, fue lo que cubría la superficie del mar.


NOV 04 / 2017
Caroline Powers se dedica a la fotografía subacuática, explora la vida submarina buceando. Pero las imágenes a las que se enfrentó en las islas Cayos Cochinos en la costa norte de Honduras fueron devastadoras.

Bolsas de plástico, botellas de cristal, platos, ropa y hasta una televisión, fue lo que cubría la superficie del mar que se extendía a unas cinco millas.

24236.jpg


“La falta de educación sobre el mantenimiento del medio ambiente y la importancia del reciclaje, hace que muchas veces la gente tire la basura a los ríos o a las playas”, explica Caroline en una entrevista en The Telegraph.

Hace tiempo que la costa de Honduras lidia con graves problemas de polución, pero nunca se ha visto en condiciones tan deterioradas.

24235.jpg


24237.jpg


https://www.gonzoo.com/actualidad/s...-terribles-consecuencias-de-no-reciclar-6380/

 
¡CADA AÑO EMPIEZAN ANTES!
Este año, el medio ambiente y tú pagaréis mucho más caro el árbol de Navidad
Madrid, la ciudad que más consume en iluminación navideña, anuncia que este año costará más. Mientras, los abetos en España están siendo esquilmados por el cambio climático
imagen-sin-titulo.jpg


Un árbol de Navidad hecho de neumáticos a las afueras de Ciudad Juárez (José Luis González / Reuters)

AUTOR
ANTONIO VILLARREAL
Contacta al autor
@bajoelbillete
TAGS
TIEMPO DE LECTURA3 min
07.11.2017 – 05:00 H. - ACTUALIZADO: 2 H.

Los regalos van y vienen, pero para los dos componentes fundamentales del árbol de Navidad —abetos y luces— no corren buenos tiempos.

Parece difícil de creer, pero España es el principal productor de abetos naturales del sur de Europa. Bien es cierto que la gran mayoría se venden fuera, pero el 90% de los que se compran en nuestro país procede de los alrededores del macizo barcelonés del Montseny o el cercano paraje de Les Guilleries, que incluye un bosque de abetos catalogado como parque natural.

Estos ejemplares podrían no verse tan afectados a lo largo de este siglo por el cambio climático, pero para la mayoría de bosques españoles de 'Abies alba' resultará ruinoso, según revela un nuevo estudio publicado hoy en PNAS por científicos de la Universidad Pablo de Olavide y el Instituto Pirenaico de Ecología del CSIC.

"Localidades a mayor altitud, más húmedas y frescas, con abetos, por ejemplo Boumort o Montseny podrían no verse tan afectadas por las tendencias más limitantes del siglo XXI, incluso mejorar sus condiciones de crecimiento en algunos casos", explica a Teknautas Raúl Sánchez Salguero, "sin embargo las localidades más al sur y de menos altitud, más cálidas y secas, verían seriamente peligrar su estabilidad por la mayor vulnerabilidad a fenómenos de decaimiento o mortalidad forestal".



imagen-sin-titulo.jpg

Distribución de los abetos en Europa (UPO)


En cuanto al pinsapo, otra especie de abeto que suele darse en la mitad sur de la península, el cambio climático está afectando a la retracción de los tradicionales bosques de esta especie en la Sierra de las Nieves, en Málaga y Grazalema, en Cádiz.

En cualquier caso, los investigadores han notado que, incluso dentro de los mismos bosques, algunos árboles resisten más que otros. "Frente a eventos extremos en una misma localidad existen individuos con capacidad para resistir o recuperarse tras esas bajadas drásticas del crecimiento", explica Sánchez Salguero, "con lo cual podrían ser buenos candidatos para la futura conservación de la especie in situ, pero también ex situ, mediante migración asistida".



imagen-sin-titulo.jpg

Pala de Montinier, en Aragón, tras la sequía de 2013 (UPO / CSIC)


Menos consumo, pero más gasto
Vamos con las luces del árbol. Según se podía leer ayer en el Boletín Oficial del Estado, y pese a que desde hace unos años el Ayuntamiento de Madrid emplea luces LED de bajo consumo en la iluminación navideña, el consistorio gastará para estas próximas fiestas una cifra récord: 5.047.015 euros.

El contrato, que la empresa cordobesa Iluminaciones Ximénez lleva obteniendo ininterrumpidamente desde 1973, fue descendiendo durante los años de la crisis pero volvió a subir tras 2014. Un año más tarde se negociaron unos emolumentos de unos 4,6 millones de euros por las navidades de 2015 y 2016.

Aunque es cierto que las luces LED han reducido la parte del coste que corresponde a consumo eléctrico (está en torno al 1% del montante), una de las explicaciones para el aumento de precio es que, como suele comentarse en la calle, cada año empiezan antes: este año comenzará en torno al 23 de noviembre, en 2016 fue el día 24, en 2015 el 27 y un año antes, el 28 de noviembre. El final de la iluminación, eso sí, suele estar marcado en el 6 de enero desde tiempos inmemoriales.




https://www.elconfidencial.com/tecn...rbol-navidad-mas-caro-medio-ambiente_1473579/
 
Back