El mayor esperpento de todo esto es la vergonzosa utilización de los niños, da auténtico asco. Han llegado a pedir que los borregos pongan a sus hijos delante de la Guardia Civil en los colegios mientras los suyos, cuando los tienen, se quedan a salvo en casita y el lunes siguen estudiando tan tranquilos en el colegio extranjero privado al que van, donde aprenden lenguas útiles para su futuro. Futuro que consiste, queridos ingenuos independentistas, en seguir pastoreando desde lo alto del cerro y con los dineritos bien guardaros en Suiza a las ovejitas bobaliconas que les apoyan.
Menuda lobotomía hay que tener encima para llevar a los hijos a los centros escolares porque lo diga la del pelo de Playmobil, que no tiene hijos, y mientras los de Junqueras, Puigdemont y cía se quedan en casa. ¿O acaso creéis que van a llevar a los suyos, pardillos?
Seria de agradecer que NO INSULTARAS a quienes no piensan como tu.