Visita de Estado del Presidente de la Confederación Suiza. 23 - 25 noviembre 2022

En el concierto de gala de regreso de la visita de estado belga a Dinamarca (marzo de 2017), la reina Mathilde usó estos hermosos aretes nuevos por primera vez. Parecen aretes de diamantes en un estilo distintivo de los años 50.

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El presidente de la Confederación Suiza, Ignazio Cassis y su esposa, viajarán por primera vez a Bélgica para una visita de Estado de dos días los días 24 y 25 de noviembre

24 de noviembre


La pareja presidencial suiza será recibida oficialmente por el Rey Philippe y la Reina Mathilde en las escaleras del Palacio Real a las 9 a.m.

Ignazio Cassis y su esposa irán luego a la Tumba del Soldado Desconocido donde depositarán una ofrenda floral.

La pareja presidencial se trasladará luego al Parlamento Federal donde serán recibidos por los Presidentes de la Cámara y del Senado. El presidente también se reunirá al final de la mañana con el primer ministro belga, Alexander De Croo.

Al comienzo de la tarde, el presidente y su esposa serán recibidos en el Ayuntamiento de Bruselas por el alcalde Philippe Close (PS).

A continuación, la pareja presidencial y los soberanos visitarán el Museo de Instrumentos Musicales.

Una cena de Estado ofrecida en el Château de Laeken cerrará este primer día.


25 de noviembre

Al día siguiente, la pareja presidencial viajará a Lieja donde se reunirá, en particular, con el gobernador de la provincia, el alcalde de la Ciudad Ardiente y visitará la Catedral de San Pablo.

A continuación, Ignazio Cassis y su esposa se dirigirán a Lovaina para visitar el Gran Beaterio y la Casa de la Salud.

La visita de estado terminará con un concierto en Bozar en presencia de la pareja real y presidencial.

Poca actividad de los reyes en esta visita de estado.
 

Filip y Mathilde “sucumbieron a los encantos de Suiza”​

El rey Philippe (62) y la reina Mathilde (49) reciben al presidente suizo y su esposa en visita de Estado a Bélgica. La oportunidad ideal para fortalecer los lazos entre los dos países y compartir recuerdos personales. Porque el país alpino ya le trajo a la familia real muchas alegrías y tristezas.
“Como muchos belgas, mi familia también ha sucumbido a los encantos de su país”. El rey Felipe se lo dijo al presidente suizo Ignazio Cassis durante la cena de Estado. Es conocido por disfrutar esquiando con su familia en el moderno complejo de deportes de invierno de Verbier, y representa a Bélgica en el Foro Económico Mundial en Davos casi todos los años. El monarca dejó ambos aspectos sin mencionar en su discurso. Reflexionó sobre los lazos históricos entre Suiza y la familia real.
“En 1898, el Príncipe Felipe, Conde de Flandes, compró la Villa Haslihorn: una residencia de campo en Horw (en el cantón de Lucerna, ed.) . Durante su estancia allí, su esposa, Marie de Hohenzollern-Sigmaringen, salió a dibujar y pintar los paisajes de las orillas del lago de Lucerna”, cuenta Filip. “Para mi bisabuelo, el rey Alberto I, el Haslihorn era el punto de partida de sus viajes de escalada. Practicó el alpinismo aquí, de incógnito y con pasión”.
“Durante la regencia posterior a la Segunda Guerra Mundial, el rey Leopoldo III, mi abuelo, vivía con su familia en Pregny (cerca de Ginebra, ed.) . Por eso sus hijos iban a la escuela en Suiza en esos años. Mi tío, el difunto rey Balduino, completó allí su educación. Siempre mantuvo un vínculo especial con Suiza más adelante. Y mi padre, el rey Alberto, tiene buenos recuerdos de su infancia y de sus días de colegio en Suiza. Recuerdos que naturalmente regresaron durante la visita de Estado a su hermoso país con la Reina Paola en el año 2000”.
Filip también señaló que Bélgica y Suiza están unidas por eventos trágicos. “La muerte de mi abuela la reina Astrid en 1935 en Küssnacht. Pero también el terrible accidente del autobús escolar en Sierre en 2012, que conmemoramos juntos esta primavera”.
El presidente Cassis y su esposa se encuentran en una visita de estado de dos días a Bélgica. Filip y Mathilde les dieron la bienvenida con una ceremonia en el palacio real el jueves y los llevaron al Museo de Instrumentos Musicales de Bruselas. Los suizos están en Lieja y Lovaina el viernes.
La cena de estado, el jueves por la noche en el castillo de Laeken, fue la actividad más glamurosa. Para la ocasión, la reina Mathilde sacó su vestido de capa rosa claro de Armani que usó anteriormente en la investidura del emperador Naruhito de Japón en 2019.
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