«Ay, coñe, que había gentuza aquí que saludar. Anda, y aún hay más gente más hacia la derecha. Así no hay forma de quedar bien en las fotos y le fastidian a una el posado, que es lo que realmente me importa».
Lo hace muy a menudo esto de olvidarse de saludar, y tener incluso que retroceder, por estar siempre pendiente de sí misma y no de los demás.
No puedo con ella, de verdad. Y lo digo otra vez: es tonta con balcones a la calle y grosera de campeonato del mundo en pista cubierta.
Tienes mucha razón.
Lo peor de ella es su actitud.
Solo pendiente de la foto.
No se entrega a nada solo pendiente de ella y sus zapatos.
Carece de empatia. Y esto lo estropea todo.
ES DE VERGUENZA.