Discrepo compi coti. El vídeo del twitero es de baja calidad, una copia mala vaya. Alguien decidió filtrarlo sin el consentimiento de los mandamases. Una vez publicado, no hubo más remedio que publicar los buenos. Demasiado follón para esconderlos.
Puede ser, aunque siempre han sido expertos en tapar cosas. A mí lo que más me sorprende es la reacción de la prensa. No digo que se quedaran callados, pero sí que le hubiesen quitado importancia. Artículos que se han leído en El Mundo o en El País, dos periódicos importantes en España, hubiesen sido inconcebibles hasta hace no muy poco tiempo. Incluso atacando a la princesa de Asturias. El tiempo dirá si de verdad algo está cambiando o al final todo quedará en nada.