Ha sacado otro rincón de la casaSupongo que ya le habrá dicho el Leuro que no saque el interior de la casa, que no le apetece que todo el mundo pueda verla y que ya le vale. Así que las fotos quedan limitadas al cachito del borde de la piscina, a algún matojo y a los primeros planos de los platacos de comida que se mete entre pecho y espalda.