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Ondina
Guest
Es verdad que en la Cuba de Batista, a diferencia de otros países latinoamericanos, había grandes almacenes con escaleras mecánicas y aire acondicionado, cadillacs último modelo y un cine en cada esquina. Ahora en La Habana no vas a ver jaguars y range rovers en las calles, ni taco bells y zaras en cada esquina, ni una milla de oro con restaurantes y tiendas de lujo como se pueden ver en cualquier capital latinoamericana (aunque tampoco vas a ver favelas / bidonvilles, ni niños de la calle esnifando pegamento, ni desahuciados pudriéndose en un camastro sin atención medica, ni bebes desnutridos, ni menores cortando caña de sol a sol (yo si los he visto en RD por ejemplo).
Recuerda que Castro y sus correligionarios no hicieron la revolución para poder comer en el mcdonalds del centro comercial los domingos, ni para cambiar de coche y lavadora cada cuatro años y de telefono móvil cada dos, sino para recuperar la soberanía de un país en manos de la mafia y para corregir las brutales desigualdades sociales (tampoco la hicieron para prohibir la importacion de bienes de consumo made in USA eh? pero la revolución tomó los derroteros que tomó, en buena parte por la cerrazón de Washington).
A lo que iba. El éxito de la revolucion cubana habrá que medirlo por tanto no según los estandares del capitalismo post-industrial (es una revolucion socialista recuerdas?) sino en la medida que alcanzó los objetivos que se propuso. Es decir :
- que en Cuba gobierne el gobierno cu-ba-no y no unos intereses corporativos / económicos que no coinciden mecesariamente con los intereses del pueblo cubano.
- construir una sociedad igualitaria, solidaria, abierta al mundo, donde el machismo, el racismo y el clasismo no tienen cabida.
Desde esa perspectiva, la revolución ha sido un éxito, guste o no guste.
Vale, en La Habana no hay tiendas de Gucci y Hermes, ni clinicas de botox, el internet va lento (si es que va) y falta un Disneylandia (o no) , nadie lo niega. Los recursos son limitados y las prioridades son las que son. No es obligatorio que todo esto nos guste pero igual que los cubanos no impusieron su revolución al resto del mundo, tampoco impongamos a los cubanos las bondades de lo nuestro. Dejemos que decidan por si mismos lo que quieren o dejan de querer, sin injerencias,campañas de acoso y derribo, embargos, bloqueos, posiciones comunes y operaciones encubiertas de desestabilización.
PD
Cuba de miserable no tenia nada, ni en los 50, ni antes (ni hoy, se te olvidó añadir) porque el pueblo cubano es un gran pueblo. Pero miseria, analfabetismo, clasismo, opresión y violencia por supuesto que había en la época de Batista y mucha.
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