Divanes cercanos
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Hablando de gordos, vuelvo a Don Juan Carlos, el Rey con más (estrellas) Michelin(es), y de paso vuelvo a mí misma, que siempre tuve tendencia y, ahora que he dejado de fumar, más. Qué bien que se lleven los trajes de baño enteros, porque en biquini estoy arrebatadora. Mis piernas, dóricas de nacimiento, ahora son corintias, con cartuchera incorporada. Una engorda siempre de donde no quiere. Miro la foto de Don Juan Carlos y compruebo que tiene más t*tas que yo. Qué tristura. ¿Hay algo peor que ser gorda y plana?
Cambio de tercio y alabo el traje de novia de Beatrice Borromeo firmado por Valentino, marca de la que su familia es accionista. Yo creo que no es rosa, sino lila, lavanda... Sólo ella puede convertir en epítome de la sofisticación y el buen gusto ese color otrora hortera y propio de dama de honor americana. Necesitábamos la boda de Pierre y Beatrice para olvidarnos de las de Helen Lindes y Alba Carrillo.
Aquellos que no sois periodistas ignoráis lo que la prensa rosa y de moda hemos sufrido este último año. Todos, más bien todas, hemos recibido mil emails diarios ofreciéndonos entrevistas absurdas con titulares insólitos de estas dos chicas que sólo son noticia por su físico o sus relaciones personales. Si al menos hubieran inventado algo del 'star system' como la Preysler o las Kardashian... Ahora que lo pienso, el fanatismo por esta familia me asusta: nuestras antepasadas lucharon por el voto y por otras cosas muy serias, no porque se nos siguiera valorando como objetos sexuales al servicio de los hombres. Las Kardashian lo único que hacen es eso, reseñar sus atributos y hablar de trapos, bodas y bebés. Cuando posan, lo hacen desnudas. Eso sí que es trabajar en pro de los derechos de las mujeres. A mi humilde juicio esto es un retroceso, hoy estamos peor que las amas de casa de los 50 que anunciaban aspiradoras y le hacían masajes en los pies a sus maridos al llegar a casa.
Dicho esto, que no se engañen Helen y Alba (y que por favor, no actualicen sus cuentas de instagram ni sus blogs en los próximos diez años por lo menos años porque hemos acabado hasta el moño): sus bodas son de barriada de cinturón industrial si las comparamos con las monegascas, que dan lecciones de estilo tanto en enlaces civiles como en religiosos, ya que ambos ritos los celebran en días distintos y al menos mantienen el misterio y encanto en algunas cosas, aunque luego nos enteremos de ellas.
Deseo toda la felicidad del mundo a la ingeniera y la arquitecta (no, perdón, a la ex miss y a la madre del hijo de Fonsi Nieto), pero por favor, que nos dejen descansar una temporada. Lo cierto es que la culpa de la fama de estos personajes la tienen los medios que les dan pábulo y las marcas que las contratan... Vaya ejemplo que tienen las nuevas generaciones, no ,e extraña el éxito de Mujeres y hombres y viceversa. Yo creía que se amortizaban las bodas 'invitando' a los invitados a que se paguen el cubierto. Para estas chicas no es suficiente. Han conseguido gratis los vestidos, los zapatos, las alianzas... De lo que dieron cuenta a los medios, a diario y durante un año, de ahí nuestro suplicio, marcas como Rosa Clará, Mascaró, Rabat... Si os fijáis en la foto, los novios enseñan bien a los paparazzi las etiquetas de las botellitas de Moët & Chandon porque era otra de las marcas patrocinadoras del enlace, que les puso el champán. Yo si hubiera ido de invitada a esas bodas hubiera pedido derechos de imagen. En fin, no tengo nada en contra de estas chicas, es más, en el fondo les agradezco que nos regalen sobremesas criticonas... Lo que quería decir es que echo de menos tanto los posados de gente con clasón de verdad... El cuore ya no es lo que era... No se puede mezclar una exclusiva de Feliciano con camisa de rayas bajo el chaqué (WTF) con reportajes de las mansiones de las Marzotto, madre y abuela de Beatrice.
Apenas hay personajes de nivel. En fin.Borromeo.
Y bueno, bueno, bueno (con tono de señora escandalizada). Si me horroriza la muerte del pobre león Cecil, me deja estupefacta la historia del doctor Criado, el psiquiatra de la jet sevillana y terapeuta de Matilde Solís, esa mujer que parecía la protagonista de 'Calle Mayor', de juan antonio Bardem, o la señora Bates, por extraña y espigada, y resulta que la pobre tenía razones para ser así si es que son ciertos los delitos de los que acusa al Dr. Criado. El otro día le pedí en Twitter a los Almodóvar que hicieran una película sobre el asunto. Mi amiga María, que es ginecóloga y cuñada de mi otra amiga Bárbara, sugirió el título: 'Divanes lejanos'. “Bueno, no, mejor dicho cercanos, dadas las circunstancias", se corrigió por whatsapp. Por otro lado, mi seguidora Isabel respondía al tuit sugiriendo otro telefilme sobre el yerno de Villar Mir y la dermatóloga Elisa Pinto. Confieso que ser periodista es interesante en estos tiempos que corren. No quiero juzgar al doctor Criado, sólo os doy un dato que no he visto publicado en ningún sitio y que se nos pasó incluir en el texto de LOC que escribió mi compañera Pilar Vidal, conocida como 'garganta de seda' en esta sección: el psiquiatra no hacía historias clínicas de sus pacientes. WTF otra vez. Una y mil veces más.
Y con esto y un bizcocho, me despido a lo Helen Mirren. Sueño con un día por y para mí, sin familia ni amigos, de rebajas remate final y manipedi, antes de prender la mecha de mis vacaciones. Me parece grande, mejor dicho, enorme, ver a la actriz británica en Nápoles sola, bajo una sombrilla, descansando de verdad. Sin marido, ni padres, ni hijos, ni nadie. Un libro, el sol, el mar. No le hace falta más. Bueno, sí, un vino blanco y unas gambitas.
Feliz verano a todos.
Gracias siempre por leerme.
Zzzzz. Nos vemos en los mares y en los bares.
PD.- Para comentarios, consultas, loas y/o críticas podéis escribirme a beatriz.miranda@elmundo.es, a Facebook y Twitter
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Hablando de gordos, vuelvo a Don Juan Carlos, el Rey con más (estrellas) Michelin(es), y de paso vuelvo a mí misma, que siempre tuve tendencia y, ahora que he dejado de fumar, más. Qué bien que se lleven los trajes de baño enteros, porque en biquini estoy arrebatadora. Mis piernas, dóricas de nacimiento, ahora son corintias, con cartuchera incorporada. Una engorda siempre de donde no quiere. Miro la foto de Don Juan Carlos y compruebo que tiene más t*tas que yo. Qué tristura. ¿Hay algo peor que ser gorda y plana?
Cambio de tercio y alabo el traje de novia de Beatrice Borromeo firmado por Valentino, marca de la que su familia es accionista. Yo creo que no es rosa, sino lila, lavanda... Sólo ella puede convertir en epítome de la sofisticación y el buen gusto ese color otrora hortera y propio de dama de honor americana. Necesitábamos la boda de Pierre y Beatrice para olvidarnos de las de Helen Lindes y Alba Carrillo.
Aquellos que no sois periodistas ignoráis lo que la prensa rosa y de moda hemos sufrido este último año. Todos, más bien todas, hemos recibido mil emails diarios ofreciéndonos entrevistas absurdas con titulares insólitos de estas dos chicas que sólo son noticia por su físico o sus relaciones personales. Si al menos hubieran inventado algo del 'star system' como la Preysler o las Kardashian... Ahora que lo pienso, el fanatismo por esta familia me asusta: nuestras antepasadas lucharon por el voto y por otras cosas muy serias, no porque se nos siguiera valorando como objetos sexuales al servicio de los hombres. Las Kardashian lo único que hacen es eso, reseñar sus atributos y hablar de trapos, bodas y bebés. Cuando posan, lo hacen desnudas. Eso sí que es trabajar en pro de los derechos de las mujeres. A mi humilde juicio esto es un retroceso, hoy estamos peor que las amas de casa de los 50 que anunciaban aspiradoras y le hacían masajes en los pies a sus maridos al llegar a casa.
Dicho esto, que no se engañen Helen y Alba (y que por favor, no actualicen sus cuentas de instagram ni sus blogs en los próximos diez años por lo menos años porque hemos acabado hasta el moño): sus bodas son de barriada de cinturón industrial si las comparamos con las monegascas, que dan lecciones de estilo tanto en enlaces civiles como en religiosos, ya que ambos ritos los celebran en días distintos y al menos mantienen el misterio y encanto en algunas cosas, aunque luego nos enteremos de ellas.
Deseo toda la felicidad del mundo a la ingeniera y la arquitecta (no, perdón, a la ex miss y a la madre del hijo de Fonsi Nieto), pero por favor, que nos dejen descansar una temporada. Lo cierto es que la culpa de la fama de estos personajes la tienen los medios que les dan pábulo y las marcas que las contratan... Vaya ejemplo que tienen las nuevas generaciones, no ,e extraña el éxito de Mujeres y hombres y viceversa. Yo creía que se amortizaban las bodas 'invitando' a los invitados a que se paguen el cubierto. Para estas chicas no es suficiente. Han conseguido gratis los vestidos, los zapatos, las alianzas... De lo que dieron cuenta a los medios, a diario y durante un año, de ahí nuestro suplicio, marcas como Rosa Clará, Mascaró, Rabat... Si os fijáis en la foto, los novios enseñan bien a los paparazzi las etiquetas de las botellitas de Moët & Chandon porque era otra de las marcas patrocinadoras del enlace, que les puso el champán. Yo si hubiera ido de invitada a esas bodas hubiera pedido derechos de imagen. En fin, no tengo nada en contra de estas chicas, es más, en el fondo les agradezco que nos regalen sobremesas criticonas... Lo que quería decir es que echo de menos tanto los posados de gente con clasón de verdad... El cuore ya no es lo que era... No se puede mezclar una exclusiva de Feliciano con camisa de rayas bajo el chaqué (WTF) con reportajes de las mansiones de las Marzotto, madre y abuela de Beatrice.
Apenas hay personajes de nivel. En fin.Borromeo.
Y bueno, bueno, bueno (con tono de señora escandalizada). Si me horroriza la muerte del pobre león Cecil, me deja estupefacta la historia del doctor Criado, el psiquiatra de la jet sevillana y terapeuta de Matilde Solís, esa mujer que parecía la protagonista de 'Calle Mayor', de juan antonio Bardem, o la señora Bates, por extraña y espigada, y resulta que la pobre tenía razones para ser así si es que son ciertos los delitos de los que acusa al Dr. Criado. El otro día le pedí en Twitter a los Almodóvar que hicieran una película sobre el asunto. Mi amiga María, que es ginecóloga y cuñada de mi otra amiga Bárbara, sugirió el título: 'Divanes lejanos'. “Bueno, no, mejor dicho cercanos, dadas las circunstancias", se corrigió por whatsapp. Por otro lado, mi seguidora Isabel respondía al tuit sugiriendo otro telefilme sobre el yerno de Villar Mir y la dermatóloga Elisa Pinto. Confieso que ser periodista es interesante en estos tiempos que corren. No quiero juzgar al doctor Criado, sólo os doy un dato que no he visto publicado en ningún sitio y que se nos pasó incluir en el texto de LOC que escribió mi compañera Pilar Vidal, conocida como 'garganta de seda' en esta sección: el psiquiatra no hacía historias clínicas de sus pacientes. WTF otra vez. Una y mil veces más.
Y con esto y un bizcocho, me despido a lo Helen Mirren. Sueño con un día por y para mí, sin familia ni amigos, de rebajas remate final y manipedi, antes de prender la mecha de mis vacaciones. Me parece grande, mejor dicho, enorme, ver a la actriz británica en Nápoles sola, bajo una sombrilla, descansando de verdad. Sin marido, ni padres, ni hijos, ni nadie. Un libro, el sol, el mar. No le hace falta más. Bueno, sí, un vino blanco y unas gambitas.
Feliz verano a todos.
Gracias siempre por leerme.
Zzzzz. Nos vemos en los mares y en los bares.
PD.- Para comentarios, consultas, loas y/o críticas podéis escribirme a beatriz.miranda@elmundo.es, a Facebook y Twitter
