Las cloacas de Interior. Comisario Villarejo & Company. La corrupción en el poder.

Villarejo quiere desvelar audios sobre el 11-M de varios mandos policiales tras 15 años


El comisario jubilado ha enviado un comunicado desde prisión donde avisa que hará públicos "con nombres y apellidos" la información que presuntamente guarda desde hace tres lustros, sobre el mayor atentado de la historia de España y en el que murieron 193 personas. De esta forma desvelará quién ocultó el 11-M, justo la semana en que su 'socio' el comisario Enrique García Castaño se enfrenta a la petición de entrada en prisión que ya solicitó la Fiscalía y que el juez aplazó.




El comisario Villarejo y el ex DAO Eugenio Pino, en la única foto donde aparecen juntos.

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MADRID
05/03/2019 07:17 Actualizado: 05/03/2019 07:17
PATRICIA LÓPEZ

@patricialopezl
Empezó siendo la Operación Tándem, pero va a acabar por ser la Operación Maraña. O ese parece el claro objetivo del comisario José Manuel Villarejo con los comunicados que emite alertando de sus oscuras intenciones. En el último, vuelve a avisar de lo que ya anunció en Navidades y de lo que lleva difundiendo a través de sus acólitos desde hace un mes: que sacará a la luz audios de altos mandos policiales que pondrán patas arriba la investigación y el juicio de los atentados del 11-M, al BBVA, al CNI, a la inteligencia internacional y a todo el que se cruce en su camino de salir de prisión.

Los candidatos a salir en los audios son tres comisarios José Luis Olivera, Juan Antonio González - a quienes puede considerarse 'amigos' de Villarejo- y Eloy Quirós - a quien ya ha intentado meter en algún otro lío al acusarle de eliminar eurórdenes previo pago-, según ha podido saber Público de diferentes fuentes, todos con competencias en unidades de la Comisaría General de Policía Judicial o incluso destinados fuera de Madrid durante los atentados e incluso tiempo después.

Por eso las fuentes consultadas señalan que "en realidad la 'víctima' de los audios de Villarejo será Jesús de la Morena, comisario general de Información cuando ocurrieron los atentados y la persona que se opuso a la tesis de ETA, porque la tarjeta del móvil que se recuperó en una de las mochilas conducía a la vía yihadista que finalmente fue juzgada".

Salvar a García Castaño y atacar al CNI
Precisamente este comunicado y la amenaza de tirar de una manta guardada desde hace tres lustros, coincide con la declaración ante el juzgado de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional de Enrique García Castaño, a quien la fiscalía acusa de ser uno de los socios de ese Tándem -que en realidad sería un 'trío' si sumamos al comisario Carlos Salamanca, detenido en noviembre de 2017-, y que el miércoles se juega el ingreso en prisión. Algunas fuentes señalan este como el motivo de que su compañero haya enviado una misiva desde la cárcel.




Enrique García Castaño, 'El Gordo', en una imagen de archivo. / PL.

El comisario García Castaño, que estuvo destinado en la Comisaría General de Información hasta que Público desveló que era conocedor del chantaje que Villarejo y sus infiltrados Eduardo Inda y Manuel Cerdán estaba haciendo al Centro Nacional de Inteligencia y a la casa Real- es un pieza clave en la investigación de los atentados en los que murieron 193 personas. El mismo se autoproclamó como el hombre que había investigado el atentado a la salida de la Audiencia Nacionalla primera vez que Villarejo sacó este tema ante el juez, vinculándolo, como hace en esta misiva, con el asalto de Sacyr al BBVA. Sin embargo, no existe ninguna diligencia firmada por él en el sumario y lo mismo pasa con Villarejo.

Quién sí tuvo que ir a declarar al juicio de los atentados fue el ex comisario general Jesús de la Morena, que desechó la tesis de ETA frente a las presiones del gobierno de José María Aznar después de que en la mochila que no explotó en los atentados y que apareció en Vallecas, se encontrase un teléfono móvil con unas tarjetas prepago que llevaron hasta el locutorio de Lavapiés donde comenzaron las detenciones a los pocos días del 11-M.

Presuntamente esta información sobre los teléfonos móviles se la suministró García Castaño a De la Morena, trabajando codo con codo durante todos esos días, sin dormir incluso o al menos así lo han comentado en algunas ocasiones ambos policías, como pudo comprobar este medio de primera mano. Sin embargo, según una de las conversaciones del año 2005 que aparecen en la causa Tándem, al comisario también conocido como Blasillo por su relación con Fuerza Nueva -y al que defiende el despacho de Baltasar Garzón- no le sentó bien que su superior abandonara la Policía para irse de director de seguridad a Iberia.

Villarejo y Castaño bautizaron al ex comisario general de Información como "Jesulín" y Blasillo -también conocido como el Gordo- le contó a Villarejo como queja que "está entregado al CNI".

Por eso sospechan las fuentes consultadas por Público, "que Villarejo esté intentando presionar a la fiscalía y al juez instructor para echarle un cable a su compañero García Castaño y volver a reconducir una relación que algunos señalan como deteriorada, pero que se pueden reconciliar sin problema como ha pasado en muchas otras ocasiones".

Meter miedo a los comisarios del IBEX
Villarejo pide en su comunicado -también deberá hacerlo por vía judicial, aún sabiendo que será denegada porque su deseo va en contra de la ley que rige a los servicios secretos-, que el juez "pueda solicitar al CNI y a la Dirección General de Policía que se remitan todos los oficios, informes, notas de servicios, gastos y otra, en cualquier soporte, elaborados por mi y otros funcionarios policiales y/o agentes o colaboradores del CNI que guarden relación directa o indirecta con el intento de control del banco que encabezó la mercantil Sacyr y el Sr. Del Rivero, las investigaciones realizadas sobre el tráfico de llamadas e interceptaciones telefónicas que se investigan en este caso y quien las obtuvo y quien luego me las facilitó actas de las reuniones que mantuve con miembros del CNI sobre el atentado del 11-M y sobre el intento de control del BBVA".

Según Villarejo, podría destapar incluso "qué Estado diseñó el protocolo de actuación del atentado del 11 de marzo de 2004, produciendo una ejecución a través de una muy bien estudiada operación de inteligencia cuyo fin último era
condicionar -como así ocurrió- las maleables actitudes y el volátil comportamiento del votante español". Algo que, según él mismo, ni PP ni PSOE quisieron investigar en realidad.

El testigo sería un narcotráficante que estuvo encausado por el juez Baltasar Garzón en el año 2002 dentro de la causa contra el BBVA Privanza
En la carta asegura además que: "Puedo probar que los servicios de información dejaron de seguir pistas fundamentales para poder descubrir quiénes planearon el mayor atentado de nuestra historia reciente y que cambió para siempre el curso de los acontecimientos políticos en España. No hubo voluntad política de que se conociera la autoría intelectual de aquella infame atrocidad. Lamentablemente, nadie quiso adentrarse en toda la documentación que conseguí obtener, y que sin duda, a mayor abundamiento, estará en el Ministerio de Interior y con toda seguridad, en los archivos secretos del CNI".

En esta línea, apuntan algunas fuentes consultadas, Villarejo retomaría una antigua línea de investigación que ya surgió durante la instrucción y que estaría relacionada con una información que llegó al Unidad de Delincuencia y Crimen Organizado (UDYCO), en la que se encontraba el comisario Eloy Quirós, y que dependía de la Comisaría General de Policía Judicial. Este mismo testigo también entró en contacto con la Unidad Central de Información Exterior, dependiente de la Comisaría General de Información.

El testigo sería un narcotráficante que estuvo encausado por el juez Baltasar Garzón en el año 2002 dentro de la causa contra el BBVA Privanza y que días después del atentado se puso en contacto un amigo del ex juez, policía de estupefacientes que pasó a ser director de seguridad de Renfe, Manuel Luis Rodríguez Simmons.

Sin duda, Villarejo, los comisarios ya imputados como García Castaño o el ex número dos de la Policía, Eugenio Pino -encargado del dispositivo que debía guardar las pertenencias de las víctimas del accidente y donde apareció la mochila de los teléfono- y la legión de ilustres bufetes personados en Tándem, como el del ex juez Baltasar Garzón, o el letrado y ex juez Javier Gómez Bermúdez -que dictó la sentencia del 11M- harán mucho porque lo que lleva 15 años presuntamente oculto salga a la luz.

https://www.publico.es/politica/villarejo-quiere-desvelar-audios-11-m-mandos-policiales-15-anos.html

Si hay delito en esas grabaciones habrán prescrito. Por eso las sacará.
 
Todo lo que ya sabemos sobre la cloaca policial


El uso que el Gobierno de Mariano Rajoy realizó de la Policía para investigar, desacreditar y espiar a sus rivales políticos sigue avanzando en los juzgados, ante el silencio cómplice de una gran parte de los medios y la impunidad de los principales responsables de unas tropelías difíciles siquiera de imaginar

Ignacio Escolar
72 comentarios

28/03/2019 - 22:29h
Ningún cese. Ninguna dimisión. Ninguna disculpa. Ninguna explicación. El uso que el Gobierno de Mariano Rajoy realizó de la Policía para investigar, desacreditar y espiar a sus rivales políticos sigue avanzando en los juzgados, ante el silencio cómplice de una gran parte de los medios y la impunidad de los principales responsables de unas tropelías difíciles siquiera de imaginar.




El actual líder del PP se niega siquiera a contestar. "No hay informaciones contrastadas, cuando las haya, podré opinar", dice Pablo Casado. En parecida defensa se enroca su número dos, Teodoro García Egea: "Con las cuestiones que se están juzgado soy especialmente escrupuloso y respetuoso con la Justicia, todos deberíamos hablar en base a sentencias y no a conjeturas".

Y es cierto, aún no hay una sentencia. Como tampoco la hay del juicio del procés, por ejemplo, y eso no impide que desde el PP llamen cada día golpistas a los procesados sin escrúpulo alguno. Pero sí sabemos bastante sobre la policía política que anidó en Interior, sobre la cloaca en la que chapoteó el Gobierno de Rajoy, como para que al menos su partido nos dé una explicación. Estos son algunos de los datos que sabemos sobre lo que pasó. En los enlaces hay más información contrastada que el PP dice desconocer. La mayor parte forma parte de los varios sumarios que hoy investiga la Audiencia Nacional.

1. En el año 2012, durante el gobierno de Mariano Rajoy, y con Jorge Fernández Díaz en el Ministerio del Interior, se creó una unidad secreta en la Policía Nacional cuyo primer objetivo fue investigar a los políticos independentistas sin orden judicial.

2. Esta unidad secreta e ilegal –en España la Policía solo puede investigar a una persona a petición de la Justicia– estuvo detrás de las investigaciones prospectivas contra la familia Pujol. Entre los agentes que lideraron esta policía política destaca un nombre entonces anónimo: el comisario José Villarejo.

3. El jefe de gabinete de Mariano Rajoy, Jorge Moragas, maniobró para hacer explotar el caso Pujol. Moragas animó a la exnovia de uno de los hijos de Pujol para que denunciase el manejo de dinero negro de su expareja: "Si dieses una entrevista y lo contases todo salvarías a España", le escribió en unos mensajes que en su momento publicó eldiario.es.

4. Cuando la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola se animó a salvar a España y vino a Madrid a declarar ante la Policía, fue el abogado Rafael Redondo quien acudió a recogerla al AVE y la acompañó hasta su visita a la UDEF. Redondo es socio del comisario Villarejo, ha estado hasta hace poco en prisión preventiva, y hoy sigue imputado junto a él en la Audiencia Nacional.

5. El propio ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, confesó estas investigaciones prospectivas contra los independentistas catalanes en una relevante grabación que difundió publico.es y donde habla con el director de la Oficina Antifraude de Catalunya sobre cómo la Fiscalía "te afina" una información comprometedora para políticos de Convergencia.

6. Pero la cloaca policial no solo se dedicó a los independentistas y la enorme fortuna oculta de los Pujol. Podemos también fue su objetivo a abatir. A falta de informaciones comprometidas –los millones en Andorra de los Pujol no se los puso en su cuenta Villarejo– en el caso de Podemos, la cloaca se las inventó.

7. La policía política fabricó un dossier sin sello y sin firma lleno de mentiras y medias verdades sobre Pablo Iglesias: el informe PISA (Pablo Iglesias SA). Ese informe fue después filtrado a varios medios de comunicación –Ok Diario y El Confidencial– que dedicaron sendos titulares en enero de 2016 a denunciar la "financiación ilegal de Podemos" justo en las semanas en las que se desarrollaban las negociaciones entre PSOE y Podemos para formar Gobierno.

8. Tras su salto a los medios, el informe PISA fue judicializado por varias denuncias, todas ellas archivadas ante el Supremo o la Audiencia Nacional. La Justicia certificó que no había base para denunciar financiación ilegal, cosa que no evita que de forma cotidiana el PP acuse a Podemos de ese delito.

9. En esas mismas fechas –enero de 2016, tras las elecciones en las que Rajoy perdió su mayoría absoluta– alguien robó el móvil de una colaboradora de Pablo Iglesias. El volcado informático de ese teléfono apareció años después en los archivos del comisario Villarejo, que ha confesado ante el juez que investigó a Iglesias. Por supuesto, sin orden judicial.

10. De ese teléfono robado salió mucha información, que la policía política utilizó. También conversaciones personales, como unos pantallazos de un chat privado donde Iglesias hablaba de "azotar" a la presentadora de televisión Mariló Montero, que pocos meses después publicó Ok Diario. Este hecho, junto al papel que desarrollaba el comisario que guardaba una copia del móvil, hace sospechar a los investigadores que el robo del terminal fue un encargo del Ministerio del Interior.

11. Pero la labor de la cloaca no solo sirvió para torpedear un gobierno alternativo al de Rajoy, o para investigar de forma prospectiva a los independentistas catalanes. Sus funciones llegaron mucho más allá. También se usó la cloaca para tapar las miserias del Partido Popular.

12. La Policía usó los fondos reservados para pagar un soborno al chófer de Luis Bárcenas con el fin de que espiase al extesorero del PP. Como siempre, sin ninguna orden judicial que avalase una intervención así. El chófer ha confesado ya.

13. El conductor de Bárcenas no solo cobró 48.000 euros de los fondos reservados por su trabajo como topo de la policía política. También se ganó un enchufe posterior en la Policía.

14. La Justicia también investiga el misterioso asalto de ese hombre disfrazado de cura que entró a punta de pistola en la casa de Luis Bárcenas, secuestró a su mujer, a su hijo y a la asistenta, y les amenazó para que le entregaran las pruebas que el extesorero del PP escondía sobre la cúpula del PP.

15. Según sospechan los investigadores que llevan el caso, el falso cura también actuó a sueldo de la policía política para destruir pruebas en manos del extesorero que pudieran implicar al PP. Este hecho, parte de la investigación de la Operación Kitchen, sigue bajo instrucción judicial en la Audiencia Nacional, aunque es dudoso que el falso cura tire de la manta. Tiene sus facultades mentales muy mermadas, tras varios años en prisión.

16. Que tras estallar esta sucesión de escándalos, los líderes del Partido Popular puedan hacer campaña con total normalidad demuestra que, en la política española las responsabilidades no se exigen por igual. La cloaca sale gratis, no mancha ni cuando sale a la luz. O al menos no parece por ahora que esa basura vaya siquiera a salpicar al partido responsable de un abuso de poder intolerable en cualquiera de esas democracias europeas a las que queremos emular.

https://www.eldiario.es/escolar/sabemos-cloaca-policial_6_882671759.html

No he visto declaraciones ni de Pedro Sanchez ni de Albert Rivera, ni por supuesto de Pablo Casado ni de Santiago Abascal sobre todo éste estercolero e inmundicia que se ha propagado.

DE Pablo Casado ni de Abascal nadie lo pone en duda. Son tal para cual.

El que calla otorga. ¿No tiene opinión Albert Rivera de lo que ha ocurrido? ¿Le parece bien?

¡Y que vamos a decir del actual Presidente del Gobierno! Ni una palabra. ¿No le dejan sus """mayores""" decir nada y representa lo que es, un títere, un muñeco de plástico dentro del PXXE? Creo que con dejar que INDRA se presente y gane el concurso para el recuento del 28 A ha demostrado lo suficiente.

Pues nada, a ver si con C's cubre la mayoría para gobernar...Muy dificil lo veo dada la fragmentación que hay, a no ser que el recuento lo amañe INDRA.:cautious:
 
LA SOMBRA DE VILLAREJO
PP, PSOE y Cs rechazaron dos veces que Villarejo compareciera en el Congreso para hablar de la policía política
  • Unidos Podemos reclamó que el excomisario declarase en la comisión de investigación sobre el uso partidista del Ministerio del Interior con el PP y volvió a solicitarlo en octubre de 2018, en ambas ocasiones sin éxito
  • La comisión de investigación concluyó que la policía política de la época de Jorge Fernández Díaz como ministro había cometido un "abuso de poder" para perseguir a "adversarios políticos"
https://www.infolibre.es/noticias/p...a_congreso_pasada_legislatura_93415_1012.html

¿Y ahora en que lugar queda el tripartito de C's. PXXE y PP? ¿Querían tapar? ¿Estaban todos metidos en el ajo?
 
ESPIONAJE A PABLO IGLESIASGobierno y oposición callan sobre la guerra sucia de las cloacas contra Podemos


Nada interesados en conocer la verdad del caso, los rivales políticos de Podemos prefieren ignorar uno de los mayores escándalos que pueden darse en una democracia: el espionaje a un rival político y la elaboración de informes policiales falsos para desacreditarlo que se filtraban a través de medios y periodistas afines a las cloacas.




Pablo Iglesias sale de la Audiencia Nacional, donde se ha personado como perjudicado en el caso Villarejo. (JUAN CARLOS HIDALGO | EFE)

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MADRID
29/03/2019 22:13 Actualizado: 29/03/2019 22:13
JORGE OTERO

jorgeotero99
A menos de un mes de las elecciones generales, el Gobierno y los tres partidos que lideran las encuestas —PSOE, PP y Ciudadanos— han optado por ponerse de perfil —cuando no directamente callar— sobre la guerra sucia desatada en 2016 contra Pablo Iglesias y Podemos desde la cúpula del ministerio del Interior cuando Jorge Fernández Díaz dirigía el departamento. Nada interesados en conocer la verdad del caso, los rivales políticos de Podemos prefieren ignorar uno de los mayores escándalos que pueden darse en una democracia: el espionaje a un rival político —con robo de un un teléfono móvil incluido—, y la elaboración de informes policiales falsos para desacreditarlo que se filtraban a través de medios y periodistas afines a las cloacas.

Salvando las distancias, se podría decir que este un pequeño watergate a la española: desde las llamadas cloacas del Estado se espió y se elaboró información falsa contra Pablo Iglesias para intentar evitar un pacto entre el PSOE y Podemos tras las elecciones de 2016. La Audiencia Nacional ya está investigando el montaje orquestado por esa policía política que contaba con las bendiciones de la cúpula del ministerio del Interior y que tenía como eje al comisario jubilado José Manuel Villarejo, actualmente en prisión. Esta misma semana Pablo Iglesias ha declarado como testigo y también lo ha hecho el propio Villarejo como imputado en el marco del caso Tándem.



Pero ni los medios de comunicación —salvo honrosas excepciones, entre ellas Público, que fue el primero en informar sobre las cloacas— ni los partidos políticos le están prestando una gran cobertura a la noticia que se ha producido esta semana. El propio Iglesias lamentaba este viernes por la mañana en una entrevista en la cadena Ser no haber recibido mensajes de apoyo de ninguno de los dirigentes del resto de partidos, ni tan siquiera del Gobierno o del presidente Pedro Sánchez.

Ese escaso interés de los medios de comunicación, especialmente los inclinados a la derecha, le ha venido bien a los rivales políticos de Iglesias. Pablo Casado, el presidente del PP, el partido que gobernaba entonces, ha preferido hablar de otros asuntos durante la semana, desde la polémica con el presidente de México sobre la conquista de América a la siempre socorrida independencia de Catalunya. Los periodistas apenas le han preguntado una vez por la operación contra Iglesias. Su respuesta puede considerarse todo un monumento a las palabras huecas: "No hay informaciones contrastadas cuando las haya podré opinar", dijo el jueves el líder del PP, evitando valorar el caso.

Ciudadanos también ha optado por escurrir el bulto. Ningún dirigente del partido naranja ha hecho mención alguna al caso. Es como si no existiera. Y de ahí parece que no se van a mover.

Sorprende más la actitud del PSOE, que tampoco ha mostrado mayor interés en denunciar un caso que supuestamente le beneficia, pues entonces estaba en la oposición, pero como ha recordado Iglesias en la Ser, "el PSOE unió dos veces sus votos al PP para impedir una comparecencia de Villarejo en la comisión de investigación sobre las cloacas el Congreso de los Diputados". Aquella comisión se cerró en falso, en parte porque el comisario jubilado no pudo explicar su versión de los hechos.

La reacción del Gobierno también ha sido muy tibia. El primero en referirse a la guerra sucia contra Podemos y su líder fue el actual ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien el jueves, a preguntas de los periodistas, afirmó: "Es una vergüenza que se haya podido supuestamente utilizar instituciones del Estado con fines absolutamente abyectos". Marlaska reclamó "responsabilidades políticas" a quienes dirigían el ministerio del Interior y calificó el asunto de "grave" sin ir más allá.

Este viernes, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros, la ministra portavoz Isabel Celáa se ha limitado a decir que el Gobierno está a disposición del poder judicial para ayudar en "todo lo que pida". Sin embargo, no ha querido hacer más valoraciones amparándose en que el caso está bajo secreto de sumario. "No podemos hablar sobre ello, el Gobierno debe mantener una línea roja". Una línea roja que también le impide valorar las cada vez más cuestionables actuaciones de la policía política que auspició el Gobierno del PP desde el ministerio del Interior.

https://www.publico.es/politica/esp...no-oposicion-callan-guerra-sucia-cloacas.html

¡Menuda vergüenza de país! Todos calladitos empezando por el presidente del Gobierno, que es al fin y a cabo quien nos representa.

¡Menos mal que ésto es una democracia! De boquilla desde luego pero vemos que quien tendría que velar por el cumplimiento de la ley y la transparencia en el juego político es quien se pone perfil ante un escándalo de éstas dimensiones.

Y ya no digamos nada del tripartido de la derecha, a esos ni se les espera.
 
Tres años de mentiras del PP contra Podemos
Por ppfobico, 29 mar 2019, 03:54
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El spanishgate es un escándalo que afecta no solamente a la imagen, sino a la esencia misma de nuestra democracia. Se trata de una trama pensada para evitar que la ciudadanía pueda elegir a una fuerza política llamada a democratizar el Estado.

 
NOS HAN ROBADO LA DEMOCRACIA

Seguimos destapando el Watergate español. La trama según la cual el Ministerio del Interior del Partido Popular, su policía y sus voceros (Eduardo Inda) conspiraron, fabricacron y divulgaron información falsa sobre Podemos y Pablo Iglesias.

El objetivo hacer caer al líder de Podemos e influir en el resultado de las elecciones del año 2015 y 2016.

Sin duda, esta trama mafiosa influyó de manera decisiva para frenar el imparable auge de Podemos e inflar a la extrema derecha de Ciudadanos.



Ja,ja,ja, como le quieren cortar a Ekaizer.

Mi pregunta es: ¿Seguirá Inda de tertuliano en todas los canales como lo ha hecho hasta ahora?

Y las noticias de los telediarios pasando de prisita y de perfil. Por supuesto que si el espiado hubiera sido Arrimadas, Rivera, Casado o Abascal ésto daría para desayunos, comidas, cenas y meriendas durante meses.

Y vuelvo a incidir...¡Pucherazo! No desaparecen un millón de votos tan de repente en una formación política.
 
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