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Algo así he pensado yo. Por cierto, cuidado con la Guardia Civil que se anda metiendo en los foros para manejar los grupos a favor del gobierno.
La supuesta donación de 100 millones de $ del rey de Arabia Saudí a Juan Carlos I
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Algo así he pensado yo. Por cierto, cuidado con la Guardia Civil que se anda metiendo en los foros para manejar los grupos a favor del gobierno.
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4 de mayo de 2020 (12:45 CET)
No corren buenos tiempos para el rey emérito Juan Carlos I. El padre del rey Felipe VI atraviesa uno de los momentos más delicados de su vida. Y en varios aspectos.
Por un lado, porque a sus 82 años no ostenta el mejor estado de salud posible. Tiene la movilidad reducida, y en el funeral de su hermana, la infanta Pilar, se pudo ver lo deteriorado que se encuentra físicamente. El monarca no deja nunca el bastón, y a menudo necesita ayuda para simplemente caminar. Lejos quedan los tiempos en los que se lo pasaba en grande con Corinna.
Además, hay que tener en cuenta que, a su edad, es un miembro de los grupos de mayor riesgo de padecer serios problemas en caso de contraer el coronavirus.
Juan Carlos I, en el punto de mira
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Un estado delicado al que se han sumado los golpes que le ha dado su propio hijo en las últimas semanas. A raíz del escándalo que surgió sobre los presuntos 100 millones de euros cobrados en comisiones de Arabia Saudí por la construcción del AVE Medina-La Meca, Felipe VI le retiró la asignación y renunció a su herencia, en una decisión que ha sido tomada por muchos como una humillación al emérito.
Este paso de Felipe, además habría sumido en una profunda depresión al esposo de la emérita doña Sofía. Y no solo al emérito. El asunto también ha afectado en gran medida al Jefe de Estado.
Felipe VI no se puede contener
Cuenta pilar Eyre que antes de tomar la decisión, Felipe habría mantenido una conversación con Letizia y que esta habría sido muy dolorosa. Tanto como para Sofía y otros miembros de la casa real se lo hubieran encontrado llorando.
“Tienes que desmarcarte públicamente. Tú eres una persona honrada, tienes que explicarlo. ¡Con todo lo que hemos luchado para limpiar la institución y, ahora, esto”, le habría dicho Letizia, según publicó Pilar Eyre en un artículo publicado en la revista Leturas. “Piensa en nuestra hija… No llegará a reina. ¿Es lo que quieres?”, habría añadido la reina.
“Me duele. Para ti, es fácil, figúrate que se tratara de tu padre”., habría contestado Felipe antes de derrumbarse.
https://www.diariogol.com/gossip/la...a-casa-real-y-de-los-gordos_20059428_102.html
A mi que el llamado emerito se hunda en el fango no me da ninguna pena, es mas me parece justo que se hunda en lo que el mismo propicio.
Y del mas preparao tampoco tengo ninguna lastima. Ha demostrado que puede ser muy irresponsable poniendo sus deseos y decisiones personales por encima del Pais.
Si es así, me parece bien su decisión pero que no siga viviendo de la bicoca...vamos que no se puede estar en misa y repicando campanas y es que el nene lo ha querido todo y eso no es de recibo ni de dignidad.
A ver , en mi opinión falla en transparencia, honestidad y dotes de mando. Vamos que no es la persona adecuada para el puesto por el que se le paga.
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Sera por eso que las videoconferencias que están dando todos los días ( junto al tostón) no tienen audio, sera para que la tal Pilar Eyre no lo publique en una revista del hígado.
Por cierto, como o de que murieron? me encantaba pero no vi ese capitulo.
Quise decir que no se priva de nada, salvo de lo que le obliga su salud a privarse.
Anda que NO, por su operacion y para poder continuar viviendo deb llevar un regimen de comidas y nada de bebidas aon alcohol, lo que le producira mucha irritacion y mal humor tener que privarse de las cosas que le gustan comer o beber.
Por lo menos el familiar mio es lo que le sucede, mayormente sigue el regimen sin chistar, pero alguna que otra vez le entra mal humor y unas pocas veces comio de estranquis lo que no debia, en cuanto a beber no hay problema pero en verano y con mucho calor y bochorno ambiental tambien se ha bebido alguna que otra cerveza.
Sí, es que me expresé mal, seguro que seguirá un régimen y tal, y no podrá llevar un ritmo de vida y placeres como acostumbraba. Pero tendrá la misma atención sanitaria y personal de siempre.
Y supongo que las noticias que van apareciendo, le cabrearán mucho.
Él se lo ha buscado.
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SE TRATA DE UNA OPINIÓN TRANSVERSAL, MAYORITARIA EN TODOS LOS RANGOS DE EDAD Y ENTRE LOS VOTANTES DE TODOS LOS PARTIDOS.
Según la encuesta elaborada por Sináptica para En Acción y Público un 79% de los españoles piensa que el rey Juan Carlos debería ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado, en relación al presunto cobro de comisiones.
En contra de esta opinión, un 9,1% piensa que el rey Juan Carlos no debería ser investigado ni juzgado, mientras que un 12% prefiere no opinar al respecto.
La opinión mayoritaria es absolutamente transversal entre los españoles, intergeneracional y compartida por los votantes de todos los partidos con representación en el Congreso de los Diputados.
Así, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía no respondería a una cuestión generacional. De hecho no existe tal debate, el consenso al respecto es absoluto y transversal, todas las cohortes de edad arrojan porcentajes favorables a la investigación y juicio al rey emérito: un 83% de los españoles entre 18 y 34 años, un 80% entre 35 y 49 años, 78% entre 50 y 64 años y un 72% entre los mayores de 65 años.
Fuente: Sináptica
No sólo eso. Según la encuesta elaborada por Sináptica, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía tampoco tendría un sesgo partidista. De nuevo el consenso es transversal entre los votantes de todos los partidos, aunque con cierto gradiente en torno al eje partidista izquierda-derecha. El 97% de los votantes de Unidas Podemos en las pasadas elecciones del 10 de noviembre de 2019 creen que el rey Juan Carlos debería ser investigado y juzgado. Esta opinión también es defendida por el 87,5% de votantes del PSOE, el 69,3% de votantes de Ciudadanos y el 67,8% de los votantes de VOX. El porcentaje desciende hasta el 45% entre los votantes del PP, si bien es la opción mayoritaria, frente al 29% que se muestran contrarios a la investigación y juicio al rey emérito, y el 26% que no saben o prefieren no contestar a la pregunta. Por último, respecto al conjunto de votantes del resto de partidos con representación en el Congreso de los diputados, un 92,5% es favorable a la investigación y juicio al monarca.
Fuente: Sináptica
Al margen de otras opiniones respecto a la monarquía, algo parece claro: el artículo 56 de la Constitución sobre la inviolabilidad de la monarquía, y su actual aplicación respecto al rey Juan Carlos, es mayoritariamente cuestionado por la sociedad española, que cree que el emérito debe ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado.
A la luz de los datos pareciera que los españoles se decantan más por el artículo 14 de la Constitución: «Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, s*x*, religión, opinión o cualquiera otra condición o circunstancia personal o social». Y también, que la crisis del coronavirus ha reavivado cierta pulsión destituyente en la ciudadanía. Lo veremos en los próximos días con la publicación de nuevos datos de nuestra encuesta.
Encuestas
https://fundacionenaccion.org/un-79...stigado-y-juzgado-por-el-cobro-de-comisiones/
Según la encuesta elaborada por Sináptica para En Acción y Público un 79% de los españoles piensa que el rey Juan Carlos debería ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado, en relación al presunto cobro de comisiones.
En contra de esta opinión, un 9,1% piensa que el rey Juan Carlos no debería ser investigado ni juzgado, mientras que un 12% prefiere no opinar al respecto.
La opinión mayoritaria es absolutamente transversal entre los españoles, intergeneracional y compartida por los votantes de todos los partidos con representación en el Congreso de los Diputados.
Así, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía no respondería a una cuestión generacional. De hecho no existe tal debate, el consenso al respecto es absoluto y transversal, todas las cohortes de edad arrojan porcentajes favorables a la investigación y juicio al rey emérito: un 83% de los españoles entre 18 y 34 años, un 80% entre 35 y 49 años, 78% entre 50 y 64 años y un 72% entre los mayores de 65 años.
No sólo eso. Según la encuesta elaborada por Sináptica, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía tampoco tendría un sesgo partidista. De nuevo el consenso es transversal entre los votantes de todos los partidos, aunque con cierto gradiente en torno al eje partidista izquierda-derecha. El 97% de los votantes de Unidas Podemos en las pasadas elecciones del 10 de noviembre de 2019 creen que el rey Juan Carlos debería ser investigado y juzgado. Esta opinión también es defendida por el 87,5% de votantes del PSOE, el 69,3% de votantes de Ciudadanos y el 67,8% de los votantes de VOX. El porcentaje desciende hasta el 45% entre los votantes del PP, si bien es la opción mayoritaria, frente al 29% que se muestran contrarios a la investigación y juicio al rey emérito, y el 26% que no saben o prefieren no contestar a la pregunta. Por último, respecto al conjunto de votantes del resto de partidos con representación en el Congreso de los diputados, un 92,5% es favorable a la investigación y juicio al monarca.
Al margen de otras opiniones respecto a la monarquía, algo parece claro: el artículo 56 de la Constitución sobre la inviolabilidad de la monarquía, y su actual aplicación respecto al rey Juan Carlos, es mayoritariamente cuestionado por la sociedad española, que cree que el emérito debe ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado.
A la luz de los datos pareciera que los españoles se decantan más por el artículo 14 de la Constitución: «Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, s*x*, religión, opinión o cualquiera otra condición o circunstancia personal o social». Y también, que la crisis del coronavirus ha reavivado cierta pulsión destituyente en la ciudadanía. Lo veremos en los próximos días con la publicación de nuevos datos de nuestra encuesta.
Encuestas
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Muy lamentable que ningún partido de la derecha ni el PSOE estén a favor de investigar y juzgar a Juan Carlos y a la monarquia, porque me temo que la politica y los medios de comunicación están haciendo con Felipe y Letizia lo mismo que hicieron con JC durante cuasi 50 años, tapar todo. Resulta absolutamente insolidario con los ciudadanos, en realidad tración, el negarse a publicar todo y a investigarlos juzgarlos venido el caso.SE TRATA DE UNA OPINIÓN TRANSVERSAL, MAYORITARIA EN TODOS LOS RANGOS DE EDAD Y ENTRE LOS VOTANTES DE TODOS LOS PARTIDOS.
Según la encuesta elaborada por Sináptica para En Acción y Público un 79% de los españoles piensa que el rey Juan Carlos debería ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado, en relación al presunto cobro de comisiones.
En contra de esta opinión, un 9,1% piensa que el rey Juan Carlos no debería ser investigado ni juzgado, mientras que un 12% prefiere no opinar al respecto.
La opinión mayoritaria es absolutamente transversal entre los españoles, intergeneracional y compartida por los votantes de todos los partidos con representación en el Congreso de los Diputados.
Así, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía no respondería a una cuestión generacional. De hecho no existe tal debate, el consenso al respecto es absoluto y transversal, todas las cohortes de edad arrojan porcentajes favorables a la investigación y juicio al rey emérito: un 83% de los españoles entre 18 y 34 años, un 80% entre 35 y 49 años, 78% entre 50 y 64 años y un 72% entre los mayores de 65 años.
Fuente: Sináptica
No sólo eso. Según la encuesta elaborada por Sináptica, el debate sobre la inviolabilidad de la monarquía tampoco tendría un sesgo partidista. De nuevo el consenso es transversal entre los votantes de todos los partidos, aunque con cierto gradiente en torno al eje partidista izquierda-derecha. El 97% de los votantes de Unidas Podemos en las pasadas elecciones del 10 de noviembre de 2019 creen que el rey Juan Carlos debería ser investigado y juzgado. Esta opinión también es defendida por el 87,5% de votantes del PSOE, el 69,3% de votantes de Ciudadanos y el 67,8% de los votantes de VOX. El porcentaje desciende hasta el 45% entre los votantes del PP, si bien es la opción mayoritaria, frente al 29% que se muestran contrarios a la investigación y juicio al rey emérito, y el 26% que no saben o prefieren no contestar a la pregunta. Por último, respecto al conjunto de votantes del resto de partidos con representación en el Congreso de los diputados, un 92,5% es favorable a la investigación y juicio al monarca.
Fuente: Sináptica
Al margen de otras opiniones respecto a la monarquía, algo parece claro: el artículo 56 de la Constitución sobre la inviolabilidad de la monarquía, y su actual aplicación respecto al rey Juan Carlos, es mayoritariamente cuestionado por la sociedad española, que cree que el emérito debe ser investigado y en caso de hallarse indicios de delito, juzgado.
A la luz de los datos pareciera que los españoles se decantan más por el artículo 14 de la Constitución: «Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, s*x*, religión, opinión o cualquiera otra condición o circunstancia personal o social». Y también, que la crisis del coronavirus ha reavivado cierta pulsión destituyente en la ciudadanía. Lo veremos en los próximos días con la publicación de nuevos datos de nuestra encuesta.
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pilou12
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Los regalos de los Reyes: de los Ferraris y los maletines... a medallas, libros y corbatas
La lista de regalos institucionales que cada año publica la Casa del Rey está al caer. Repasamos cómo han cambiado los polémicos presentes que reciben sus majestades
Felipe VI con su padre, el rey Juan Carlos I. (Getty)
AUTOR
C. VILLAR
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REY DON JUAN CARLOS
REY FELIPE VI
10/05/2020
Cuando ese mes de junio de 2014 se consumó públicamente el relevo en la Casa Real, Juan Carlos de Borbón y Felipe VI, solo padre e hijo, lo celebraron en la intimidad de las habitaciones de Zarzuela. La importancia del momento estuvo a la altura del vino que eligieron para celebrarlo, uno de los mejores del mundo: una botella de Castillo de Ygay de 1925. Al probar el vino, don Juan Carlos llamó personalmente al bodeguero para darles la enhorabuena y decirles que era uno de los mejores vinos que había probado. Una botella como esta se encuentra en el mercado por no menos de 600 euros, que muy probablemente no salieron del bolsillo de don Juan Carlos.
La anécdota es significativa porque ese relevo se había precipitado, precisamente, por las distintas batallas que libraba desde la famosa cacería de Botsuana Juan Carlos de Borbón. Se había levantado el velo que durante años protegía sus actividades y de uno y otro lado surgían informaciones comprometidas para el monarca. En realidad, son las mismas guerras que estos últimos meses le han llevado a protagonizar titulares tan impensables hace años como el del pasado fin de semana: "Juan Carlos I viajó a Baréin con la excusa de la Fórmula 1 días antes de ingresar 1,5 millones de su emir".
Es la versión que dio en sede judicial el presunto gestor financiero de Juan Carlos I, Arturo Fasana. Según él, Juan Carlos recibió en 2010 un maletín en Baréin, con cerca de dos millones de dólares. De regreso a Europa, paró en Ginebra para depositar su contenido en la Banca Mirabaud, en una cuenta a nombre de la sociedad panameña Lucum, cuyo primer beneficiario es Juan Carlos de Borbón. Es la misma cuenta a la que llegaron dos años después cerca de 100 millones de dólares, esta vez procedentes de Arabia Saudí. Ya sabemos que ese dinero (en torno a 65 millones de euros al cambio) fue donado después por el antiguo monarca a Corinna Larsen, según las versiones de todos ellos, claro.
El rey Juan Carlos, saludando a Corinna Larsen. (EFE)
Por qué el padre de Felipe VI recibió esa cantidad de dinero es objeto de una investigación por parte de la Fiscalía suiza. La versión de Juan Carlos de Borbón, conocida a través de 'El Independiente', es que la donación de fondos millonarios es una "práctica habitual" de agradecimiento en las relaciones internacionales con reyes árabes y que para mantener este tipo de vínculos hay que aceptar estos "gestos y regalos".
Desde el mismo momento en que Felipe VI tomó el mando de Zarzuela, la mayor parte de sus esfuerzos han ido destinados a poner un cortafuegos con esa manera de actuar y salvar de la zozobra la institución. Don Felipe arrancó su reinado en las Cortes con un importante discurso de enorme calado y muy pegado al terreno del contexto histórico de España. El entonces recién proclamado monarca anunció "una monarquía renovada para un tiempo nuevo" y señaló que la Corona debía "velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente".
Rafael Spottorno, quien fuera jefe de la Casa del Rey. (EFE)
Durante sus dos primeros años de reinado, Felipe VI hizo un notable esfuerzo de transparencia. La ciudadanía pudo conocer por primera vez la lista de los regalos institucionales que reciben los monarcas, el sueldo que perciben, puso a tres interventores del Estado a supervisar las cuentas, glosó los gastos que dedican a personal, los contratos que suscribe la Casa y hasta el fondo de contingencia con el que cuentan. Si bien este esfuerzo comenzó ya en tiempos de Rafael Spottorno, ha sido el actual Rey quien más ha satisfecho las ansias de transparencia de los ciudadanos.
En enero de 2015, la Casa del Rey hizo pública la nueva política de la familia para aceptar regalos que, tal y como hemos visto, abría un abismo con los usos anteriores. La nueva norma estipula: "Los miembros de la familia real no aceptarán para sí regalos que superen los usos habituales, sociales o de cortesía, ni aceptarán favores o servicios en condiciones ventajosas que puedan condicionar el desarrollo de sus funciones. En el caso de obsequios que, de acuerdo con estas normas, tengan carácter institucional, se procederá a su incorporación al Patrimonio Nacional. En el caso de regalos personales que excedan dichos usos, seguirán el mismo tratamiento que los regalos de carácter institucional, o bien serán cedidos a una entidad sin ánimo de lucro que persiga fines de interés general o a una administración, organismo o entidad pública que se dedique a la conservación, mantenimiento o actividades similares referidas a bienes de la misma naturaleza que el objeto de regalo". Así, grosso modo.
Una comisión los revisa
Anualmente, todos los objetos recibidos por la familia real en ese período son revisados por una comisión presidida por el secretario general. La comisión valora cada regalo con referencia a, entre otras cosas, su importancia histórica, artística, estética o económica para proponer su calificación como institucional o personal, y su incorporación a Patrimonio Nacional o bien su donación a una entidad sin ánimo de lucro. Después, siguiendo el protocolo, hacen pública la lista de los regalos institucionales (no de los personales) en una lista que se cuelga en su web y se distribuye a los medios, normalmente en el mes de mayo. Tal y como ha podido saber Vanitatis, la Casa ya está preparando la lista de este año, aunque "las circunstancias actuales" podrían retrasar algo su publicación.
En 2018, el último año del que hay datos, la familia recibió 440 regalos institucionales (obsequios que pueden entregarse en el marco de una actividad oficial o que llegan a la Casa de parte de instituciones, entidades o autoridades extranjeras). El rey Felipe encabezó la lista, con un total de 225 regalos solo para él, más otros 79 que estaban destinados tanto para él como para doña Letizia, el mismo número que recibió para ella sola. Entre los obsequios que le llegaron a don Felipe, hay algunos curiosos, además de los típicos libros, medallas conmemorativas y corbatas. Podemos encontrar en la lista desde un zurrón de pastor, que recibió en Fitur, hasta un rosario musulmán, que le entregó el príncipe heredero de Arabia Saudí, pasando por una equipación completa de rugby y balonmano o la camiseta del Real Madrid de baloncesto, que el equipo le entregó tras ganar la Euroliga. Pero hay uno que llamó particularmente la atención de la prensa en su momento: un juego completo de billar, que recibió de manos de Donald Trump en su visita a la Casa Blanca.
Los Reyes, durante su visita a Donald y Melania Trump en 2018. (EFE)
Están, desde luego, en las antípodas de los regalos recibidos por Juan Carlos de Borbón a lo largo de su vida institucional, al menos los que han sido de dominio público. José Bono relata en su reciente libro de memorias un detalle revelador, una confidencia que le hizo el rey Juan Carlos en una ocasión a cuenta de este asunto de los obsequios: "El único bien importante que me han regalado siendo rey es la finca de La Mareta en Canarias. Me la regaló el rey de Jordania y yo pregunté a Carlos Solchaga qué debía hacer con ella; me respondió que tenía que pagar impuestos y entonces la regalé al Estado".
La Mareta, el yate Fortuna, dos Ferraris que Hacienda subastó en 2017 por medio millón de euros, buena parte de los vinos que guarda celosamente en su misteriosa bodega, estilográficas, joyas, obras de arte y hasta un guepardo. Son algunos de los regalos que han trascendido de entre los miles con que fue agasajado Juan Carlos de Borbón en su calidad de monarca, mientras la opacidad era la norma imperante. En muchas culturas, por cierto, la no aceptación de un regalo genera malestar y se considera de mala educación.
En 2019, cuando se cumplió el quinto aniversario de la llegada de los actuales Reyes a la Corona, Vanitatis realizó una encuesta entre los españoles. Las respuestas revelaron que los grandes retos de la monarquía constitucional en los próximos años pasan por que sea capaz de defender la Constitución, pero también por ser más transparente en sus cuentas y actividades.
:format(jpg):quality(99):watermark(f.elconfidencial.com/file/0f2/6d9/13e/0f26d913e1b27ca111e62b656aa354da.png,0,275,1)/f.elconfidencial.com/original/1f5/163/5d7/1f51635d77563b0a51399ad2e5e5a5c6.jpg)
www.vanitatis.elconfidencial.com
La lista de regalos institucionales que cada año publica la Casa del Rey está al caer. Repasamos cómo han cambiado los polémicos presentes que reciben sus majestades
Felipe VI con su padre, el rey Juan Carlos I. (Getty)
AUTOR
C. VILLAR
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REY FELIPE VI
10/05/2020
Cuando ese mes de junio de 2014 se consumó públicamente el relevo en la Casa Real, Juan Carlos de Borbón y Felipe VI, solo padre e hijo, lo celebraron en la intimidad de las habitaciones de Zarzuela. La importancia del momento estuvo a la altura del vino que eligieron para celebrarlo, uno de los mejores del mundo: una botella de Castillo de Ygay de 1925. Al probar el vino, don Juan Carlos llamó personalmente al bodeguero para darles la enhorabuena y decirles que era uno de los mejores vinos que había probado. Una botella como esta se encuentra en el mercado por no menos de 600 euros, que muy probablemente no salieron del bolsillo de don Juan Carlos.
La anécdota es significativa porque ese relevo se había precipitado, precisamente, por las distintas batallas que libraba desde la famosa cacería de Botsuana Juan Carlos de Borbón. Se había levantado el velo que durante años protegía sus actividades y de uno y otro lado surgían informaciones comprometidas para el monarca. En realidad, son las mismas guerras que estos últimos meses le han llevado a protagonizar titulares tan impensables hace años como el del pasado fin de semana: "Juan Carlos I viajó a Baréin con la excusa de la Fórmula 1 días antes de ingresar 1,5 millones de su emir".
Es la versión que dio en sede judicial el presunto gestor financiero de Juan Carlos I, Arturo Fasana. Según él, Juan Carlos recibió en 2010 un maletín en Baréin, con cerca de dos millones de dólares. De regreso a Europa, paró en Ginebra para depositar su contenido en la Banca Mirabaud, en una cuenta a nombre de la sociedad panameña Lucum, cuyo primer beneficiario es Juan Carlos de Borbón. Es la misma cuenta a la que llegaron dos años después cerca de 100 millones de dólares, esta vez procedentes de Arabia Saudí. Ya sabemos que ese dinero (en torno a 65 millones de euros al cambio) fue donado después por el antiguo monarca a Corinna Larsen, según las versiones de todos ellos, claro.
El rey Juan Carlos, saludando a Corinna Larsen. (EFE)
Por qué el padre de Felipe VI recibió esa cantidad de dinero es objeto de una investigación por parte de la Fiscalía suiza. La versión de Juan Carlos de Borbón, conocida a través de 'El Independiente', es que la donación de fondos millonarios es una "práctica habitual" de agradecimiento en las relaciones internacionales con reyes árabes y que para mantener este tipo de vínculos hay que aceptar estos "gestos y regalos".
Desde el mismo momento en que Felipe VI tomó el mando de Zarzuela, la mayor parte de sus esfuerzos han ido destinados a poner un cortafuegos con esa manera de actuar y salvar de la zozobra la institución. Don Felipe arrancó su reinado en las Cortes con un importante discurso de enorme calado y muy pegado al terreno del contexto histórico de España. El entonces recién proclamado monarca anunció "una monarquía renovada para un tiempo nuevo" y señaló que la Corona debía "velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente".
Rafael Spottorno, quien fuera jefe de la Casa del Rey. (EFE)
Durante sus dos primeros años de reinado, Felipe VI hizo un notable esfuerzo de transparencia. La ciudadanía pudo conocer por primera vez la lista de los regalos institucionales que reciben los monarcas, el sueldo que perciben, puso a tres interventores del Estado a supervisar las cuentas, glosó los gastos que dedican a personal, los contratos que suscribe la Casa y hasta el fondo de contingencia con el que cuentan. Si bien este esfuerzo comenzó ya en tiempos de Rafael Spottorno, ha sido el actual Rey quien más ha satisfecho las ansias de transparencia de los ciudadanos.
En enero de 2015, la Casa del Rey hizo pública la nueva política de la familia para aceptar regalos que, tal y como hemos visto, abría un abismo con los usos anteriores. La nueva norma estipula: "Los miembros de la familia real no aceptarán para sí regalos que superen los usos habituales, sociales o de cortesía, ni aceptarán favores o servicios en condiciones ventajosas que puedan condicionar el desarrollo de sus funciones. En el caso de obsequios que, de acuerdo con estas normas, tengan carácter institucional, se procederá a su incorporación al Patrimonio Nacional. En el caso de regalos personales que excedan dichos usos, seguirán el mismo tratamiento que los regalos de carácter institucional, o bien serán cedidos a una entidad sin ánimo de lucro que persiga fines de interés general o a una administración, organismo o entidad pública que se dedique a la conservación, mantenimiento o actividades similares referidas a bienes de la misma naturaleza que el objeto de regalo". Así, grosso modo.
Una comisión los revisa
Anualmente, todos los objetos recibidos por la familia real en ese período son revisados por una comisión presidida por el secretario general. La comisión valora cada regalo con referencia a, entre otras cosas, su importancia histórica, artística, estética o económica para proponer su calificación como institucional o personal, y su incorporación a Patrimonio Nacional o bien su donación a una entidad sin ánimo de lucro. Después, siguiendo el protocolo, hacen pública la lista de los regalos institucionales (no de los personales) en una lista que se cuelga en su web y se distribuye a los medios, normalmente en el mes de mayo. Tal y como ha podido saber Vanitatis, la Casa ya está preparando la lista de este año, aunque "las circunstancias actuales" podrían retrasar algo su publicación.
En 2018, el último año del que hay datos, la familia recibió 440 regalos institucionales (obsequios que pueden entregarse en el marco de una actividad oficial o que llegan a la Casa de parte de instituciones, entidades o autoridades extranjeras). El rey Felipe encabezó la lista, con un total de 225 regalos solo para él, más otros 79 que estaban destinados tanto para él como para doña Letizia, el mismo número que recibió para ella sola. Entre los obsequios que le llegaron a don Felipe, hay algunos curiosos, además de los típicos libros, medallas conmemorativas y corbatas. Podemos encontrar en la lista desde un zurrón de pastor, que recibió en Fitur, hasta un rosario musulmán, que le entregó el príncipe heredero de Arabia Saudí, pasando por una equipación completa de rugby y balonmano o la camiseta del Real Madrid de baloncesto, que el equipo le entregó tras ganar la Euroliga. Pero hay uno que llamó particularmente la atención de la prensa en su momento: un juego completo de billar, que recibió de manos de Donald Trump en su visita a la Casa Blanca.
Los Reyes, durante su visita a Donald y Melania Trump en 2018. (EFE)
Están, desde luego, en las antípodas de los regalos recibidos por Juan Carlos de Borbón a lo largo de su vida institucional, al menos los que han sido de dominio público. José Bono relata en su reciente libro de memorias un detalle revelador, una confidencia que le hizo el rey Juan Carlos en una ocasión a cuenta de este asunto de los obsequios: "El único bien importante que me han regalado siendo rey es la finca de La Mareta en Canarias. Me la regaló el rey de Jordania y yo pregunté a Carlos Solchaga qué debía hacer con ella; me respondió que tenía que pagar impuestos y entonces la regalé al Estado".
La Mareta, el yate Fortuna, dos Ferraris que Hacienda subastó en 2017 por medio millón de euros, buena parte de los vinos que guarda celosamente en su misteriosa bodega, estilográficas, joyas, obras de arte y hasta un guepardo. Son algunos de los regalos que han trascendido de entre los miles con que fue agasajado Juan Carlos de Borbón en su calidad de monarca, mientras la opacidad era la norma imperante. En muchas culturas, por cierto, la no aceptación de un regalo genera malestar y se considera de mala educación.
En 2019, cuando se cumplió el quinto aniversario de la llegada de los actuales Reyes a la Corona, Vanitatis realizó una encuesta entre los españoles. Las respuestas revelaron que los grandes retos de la monarquía constitucional en los próximos años pasan por que sea capaz de defender la Constitución, pero también por ser más transparente en sus cuentas y actividades.
Los regalos de los Reyes: de los Ferraris y los maletines... a medallas, libros y corbatas
La lista de regalos institucionales que cada año publica la Casa del Rey está al caer. Repasamos cómo han cambiado los polémicos presentes que reciben sus majestades
