La idea es que acabe donde los catalanes quieran.De momento no lo sabremos,no por culpa de los políticos separatistas sino por la política de avestruz de la mayor parte de políticos no separatistas,empezando por su Presidente.
Reconozco que los políticos no han hecho las cosas bien,pero cuando no hay ni un mínimo de auto-crítica la cosa es preocupante
Yo sí hago autocrítica: frente al seny, el rigor, la seriedad y el amor al treball ben fet que los catalanes representaban, frente a la improvisación, la desidia, y la chapuza que nos achacaban a los que veníamos del resto de España, he de reconocer que hemos pervertido ampliamente y de sobra a los catalanes. Han cogido todos nuestros defectos y ninguna de nuestras virtudes.
La asonada de Antonete Gálvez por el Cantón de Cartagena resulta sublime al lado de estos folloneros de quinta categoría que han improvisado a base de faroles, ocurrencias grotescas, y frases altisonantes, tomando sus deseos por realidades.