Y dale. Cuando a una persona le dan su sueldo, sea funcionario o sea empresa privada, tiene derecho a gastarselo en lo que quiera.Hay una cosa q se ha dicho, q si tiene amantes es problema de él y de sofía... Pues no, el problema es de todos que con nuestros impuestos pagamos los caprichos (también en señoras) de Juan Carlos
Que si se lo pagara de su bolsillo trabajando picando piedra, no me meto. Pero no es el caso
Una vez se lo dan, es suyo.
Acaso te piensas que todos esos politicos del Gobierno actual -y de pasados- no tendran tambien sus amantes que tambien se pagan con el dinero del pueblo?