Y no podía faltar ella, mi Tina, absolutamente genial, única... también la vi en concierto. Siempre me he preguntado qué se sentirá en un escenario ante esas multitudes de gente vitoreándote, aplaudiéndote, queriéndote... ¡debe de ser la pera, de ponerte los pelos de punta!. ¡Qué grandes años de conciertos vivimos!.
Yo no tuve la oportunidad de verla en directo jamás, será mi pena para siempre.