ES un cotilleo que hasta ahora no he compartido, lo dejo así como cotilleo que nunca he comprobado, que puede ser una maledicencia envidiosa, o no. Esta persona conocía a Seve y a Carmen. Que Carmen no era especialmente inteligente, la persona que me lo contó iba más allá todavía. La persona que me lo contó tenía una lengua demasiado afilada, no sé.