A pesar de la conexión física, pronto quedó claro que como pareja, Paxti y Amparo eran incompatibles. El cantante es expeditivo al hablar sobre el tema: “Yo decidí casarme con una persona con la que entendí que se podía iniciar un proyecto de vida que, efectivamente, rápidamente se descubrió que no, porque en catorce meses de matrimonio nos separamos cuatro veces”. Amparo fue más concreta y dura en sus memorias: “De Patxi solo tengo malos recuerdos. Lo pisoteó todo: mis ilusiones, mis inquietudes, mis anhelos, mi amor. Me anuló”.
Además, se produjo una siniestra coincidencia con lo que le ocurría a su personaje de La otra alcoba: en la película, Diana se quedaba embarazada, pero sufría un aborto y a partir de ahí se desencadenaba una depresión. En la vida real, Amparo se quedó embarazada al poco de casarse, pero al tercer mes, sucedía esto: “Los primeros dolores se presentaron una noche. Como estábamos enfadados, no le dije nada. Cuando a mediodía no pude aguantar más, nadie me hizo caso. Al tercer día, no había forma de controlar la hemorragia. Intentaba no quejarme. Pensaba que si me hacía la fuerte, tal vez podría salvar al niño. Patxi, por supuesto, no estaba en casa”. Con 22 años, la actriz sufre una depresión y no encuentra apoyo en su ya renqueante matrimonio, y hasta apoda a su marido “El triste”.
En una entrevista años después aduciría además disparidad de criterios sobre el trabajo: “No me dejaba desarrollarme. En aquel momento me llovían los contratos, pero empezó a crearme una inseguridad tremenda diciéndome que era mala actriz. Me cortó las alas”. En otras entrevistas volvería a incidir sobre esa percepción: “Siempre me decía que yo no era una buena actriz y que lo único que buscaban los directores de mí era mi físico, que saliera en pelotas”. Se podría ver en aquellos reproches el tópico de hombre de los 70 muy comprometido políticamente pero en el que el machismo más ramplón seguía vivo y coleando. En la revista Pronto señalaban que él “en un tiempo declaró que Amparo era casi analfabeta y él había intentado en vano culturizarla”. Se separaron en 1978 y en 1983 se divorciaron."
En marzo Patxi concedió una entrevista y dijo esto de Amparo:
- ¿Por qué a mediados de los 80 se retiró a un segundo plano?
- Porque el éxito de temas como 'Uno, dos y tres' o mis papeles de actor en películas y musicales me llevaron a un lugar de la industria musical en el que yo no quería estar. También me casé con una señora que había sido Miss Universo y eso ayudó a ponerme en un sitio indeseado. Decidí parar para digerir el asunto y ver si podía volver a hacer lo que quería hacer.
Además, se produjo una siniestra coincidencia con lo que le ocurría a su personaje de La otra alcoba: en la película, Diana se quedaba embarazada, pero sufría un aborto y a partir de ahí se desencadenaba una depresión. En la vida real, Amparo se quedó embarazada al poco de casarse, pero al tercer mes, sucedía esto: “Los primeros dolores se presentaron una noche. Como estábamos enfadados, no le dije nada. Cuando a mediodía no pude aguantar más, nadie me hizo caso. Al tercer día, no había forma de controlar la hemorragia. Intentaba no quejarme. Pensaba que si me hacía la fuerte, tal vez podría salvar al niño. Patxi, por supuesto, no estaba en casa”. Con 22 años, la actriz sufre una depresión y no encuentra apoyo en su ya renqueante matrimonio, y hasta apoda a su marido “El triste”.
En una entrevista años después aduciría además disparidad de criterios sobre el trabajo: “No me dejaba desarrollarme. En aquel momento me llovían los contratos, pero empezó a crearme una inseguridad tremenda diciéndome que era mala actriz. Me cortó las alas”. En otras entrevistas volvería a incidir sobre esa percepción: “Siempre me decía que yo no era una buena actriz y que lo único que buscaban los directores de mí era mi físico, que saliera en pelotas”. Se podría ver en aquellos reproches el tópico de hombre de los 70 muy comprometido políticamente pero en el que el machismo más ramplón seguía vivo y coleando. En la revista Pronto señalaban que él “en un tiempo declaró que Amparo era casi analfabeta y él había intentado en vano culturizarla”. Se separaron en 1978 y en 1983 se divorciaron."
En marzo Patxi concedió una entrevista y dijo esto de Amparo:
- ¿Por qué a mediados de los 80 se retiró a un segundo plano?
- Porque el éxito de temas como 'Uno, dos y tres' o mis papeles de actor en películas y musicales me llevaron a un lugar de la industria musical en el que yo no quería estar. También me casé con una señora que había sido Miss Universo y eso ayudó a ponerme en un sitio indeseado. Decidí parar para digerir el asunto y ver si podía volver a hacer lo que quería hacer.