Los niños mejor fuera de estas historias, no hay ninguna necesidad de que un niño asista a la agonía de un ser querido, ni que tenga que despedirse, devardá.
No sabemos si está agonizante. Probablemente está mal, pero logra ver a quienes lo visitan y ver a sus nietos puede brindarle algo de bienestar.
Y a los nietos se les explicará que su abuelo está muy enfermo y quiere verlos. O Quizá pueden saludar a través de un vidrio. Lo cierto es que no sabemos las condiciones en las que está Henri, ni cuan cerca estuvieron los nietos de él.
Partir de este mundo es lo único que tenemos seguro cuando nacemos y dejar que los niños se despidan de su abuelo es parte del proceso de comenzar a manejar su partida.