candela paz
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Descanse en paz
Sandra Ortega (hija de Amancio Ortega) es presidenta de Paideia-Galicia, fundada por su madre, Rosalía Mera y que tiene como funcion la integracion de los discapacitados. Es una fundacion con mucha actividad y buena reputacion; desarrolla una buena labor en su ámbito. Era como la joya de Rosalía Mera ( la primera mujer de Amancio O) y la hija de ambos continua con el legado de su madre.El presidente de la Fundación Paideia no es Carlos Fitz-James-Stuart, es Doña Sandra Ortega Mera.
Al margen de la edad que ahí no te discuto lo que dices, los periodistas que mira que son mirados para hacerle críticas a la señora ésta que dicen que es reina, en este caso se la criticó y mucho por la injerencia en la educación del centro, en las normas y en las exigencias fuera de toda realidad de la susodicha señora reina y se explayaron hasta en los programas de radio más lameculos en las diferencias que existían entre la directora y ella y su posterior salida por la puerta de atrás cuando ya tenía fecha para su jubilación.Pues yo si tengo algo más que decir. A mi cuando me hablan de Fundación Paideia lo primero que se me viene a la cabeza es la Fundación Paideia, que fue un proyecto de Rosalía Mera y ahora preside su hija.
https://www.paideia.es
Suelo seguir esta foro y nunca había comentado nada. Pero me ha llamado tanto tanto la atención que digáis que una trabajadora de 70 años con 45 años cotizados a la seguridad social se ha ido a casa por culpa de Leticia que he tenido que darme de alta para comentar.
Trabajo en el sector educativo, he pasado por varios centros y nunca he coincidido con ningún compañero que quiera trabajar más allá de los 65. Aquí hasta hace poco los trabajadores de la pública que tenían 60 años y 30 cotizados a la seguridad social se jubilaban voluntariamente. Los de la concertada se prejubilaban con 61. Todos con los que he coincidido eran grandes profesionales, compañeros de los que se podía aprender un montón. Pero después de toda una vida trabajando querían jubilarse, nunca le escuché a nadie decir que le gustaría trabajar hasta los 70 y más allá. Alguno también decía que la sociedad y los métodos de enseñanza habían cambiado mucho. Si la gente no se jubila a la edad que le corresponde, y siguiera trabajando hasta los 70, 75 u 80 el sistema se colapsaría.