Boda de Kiko Matamoros y María José Giaever (Makoke)

Mucha tele que cortar


DOS ENLACES MUY DIFERENTES, ¿O NO?
Las comparaciones son odiosas: las bodas de Rocío Carrasco y los 'Makokikos', a juicio
Ambos enlaces se han celebrado tras más de década y media de noviazgo, mediante el rito de la exclusiva y han contado con la bendición de las Campos. ¿Pero qué más los une? ¿Y qué los diferencia?
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Fidel, Rocío Carrasco, Kiko y Makoke


Septiembre de 2016 no será recordado por las altas temperaturas que dominaron en su primera quincena, sino por el regreso de las grandes bodas a golpe de exclusiva. La primera: la de Rocío Carrasco y el fiel Fidel (tras16 años de relación) en '¡Hola!', y la segunda, la de Kiko Matamoros y Makoke en 'Lecturas' y 'Semana', 18 años después de su primer encuentro amatorio. En ambas, como testigos de excepción: Juan Peña –que no se salta un bautizo a la torera– y las Campos, a las que después de la emisión de los dos capítulos de su 'docureality' no se las puede seguir comparando con las Kardashian, sino con ‘Las chicas Gilmore’ por su disparatada relación entre ellas, con la comida y los hombres. María Teresa se creía rodando ‘s*x* en Nueva York’.

¿Hasta aquí las coincidencias entre ambos enlaces? Cuenta la leyenda –si a un rumor se le puede tildar como tal– que la desaparecida Rocío Jurado quiso para la primera boda de su hija en 1996 una celebración a la altura de la de la Infanta Elena, celebrada justo un año antes. Hágase su santa voluntad. La niña de la 'más grande’ tuvo la boda más magna. Todo fue tan desproporcionado que sobrepasó, como una ola, las cifras de un enlace real, incluso las alcanzadas por la boda de la madre con José Ortega Cano, también en la finca ‘Yerbabuena’, apenas un mes antes que la de la hija favorita del Rey Juan Carlos en la catedral de Sevilla. El primer enlace de Rociito ha pasado a la historia por la actuación musical del torero en la que compuso e interpretó aquello de “estamos tan a-gustito”. Desde entonces un himno de cualquier celebración.

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Rocío Carrasco, por aquel entonces Rociito, todo un angelito
En el segundo enlace de la hija de Pedro Carrasco, Miguel Poveda cantó ‘Vibro’, de la Jurado, o eso nos han contado. De este momento no han trascendido vídeos. Quién sabe si esta ausencia de pruebas se debe a que no estaba invitado Amador Mohedano, acusado de vender el vídeo musical del padre de José Fernando, que el día menos pensando da la campanada casándose con Michu frente a un cheque en blanco. Tampoco asistieron los hijos que Carrasco Jurado tiene con Antonio David, igual que tampoco aparecieron en la celebración del amor de los Makokikos los cuatro vástagos que Matamoros tiene en común con Marian Flores. El padre fallecido de Makoke también recibió un homenaje en forma de canción; su mujer le dedico ‘Cucurrucucú paloma’ para sorpresa de los presentes.

Rocío Carrasco –que hace 20 años era Rociito y nos divertía con sus trastadas de adolescente tardía– apareció arropada, más que adornada, por kilos de extensiones de pelo natural de Perú (importados y esculpidos por Ruphert), encajes, brillantes, muchos metros de tul y unas lentillas de color azul, un azul que hoy sabemos que es azul 'Frozen', pero que entonces ni nos olíamos la tonalidad porque no se había estrenado la película, y de haberlo hecho tampoco nos hubiésemos coscado porque los largometrajes de princesas, a los niños de los 90, nos llegaban en baja resolución y dobladas en español latino. Qué tiempo tan feliz.

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Kiko Matamoros y Makoke, blanca y radiante va la novia
Aquel despropósito era una caricatura descontrolada del vestido que Petro Valverde confeccionó para la hija mayor de los ahora Reyes eméritos. Dos décadas después, Makoke ha seguido la estela de la ex del guardia civil y se ha casado con un 'look' romántico de joven inocente que se entrega al caballero de capa y sombrero por primera vez. No le ha faltado ni la tiara del s. XIX de estilo prendendor fallero, de oro y diamantes de la joyería Bárcena. Ni el propio Kiko se lo imaginaba así, tan parco en escote. Las extensiones de pelo, también de importación, se las han traído desde Rusia, según ha comentado su peluquero, Manuel Zamorano, que saltó a la fama de la mano, o más bien del peine, de Sara Montiel. La 'diva absoluta’ sí que sabía casarse.

Sería injusto decir que la mujer, que un día fue chica del 'Telecupón' a la vera-verita-vera de Carmen Sevilla, estaba poco favorecida, pero es de justicia admitir que el vestido de Pronovias (de tienda a pie de calle, nada de atelier) con mantilla al más puro estilo reina María Cristina, era desacertado para el castillo de Viñuelas, donde ha dado el 'sí quiero' al colaborador de ‘Sálvame-limón-naranja-Deluxe' y que estaba decorado con infinidad de chupachups a escala –porque no se les puede llamar 'bouquets'– de rosas y claveles rojos.

Más acorde con el entorno (Valdepalacios, Toledo) decorado con flores de Chipiona, se presentó Rocío con un vestido de Hannibal Laguna hecho a media con transparencias y 5.000 cristales cosidos en forma de nardos (flor favorita de Rocío Jurado) y sin rastro del tornasolado que utiliza el diseñador para confeccionar la mayoría de sus prendas. Rocío es consciente de que dobla la veintena y que los velos y las colas son para las primerizas.

El nivel de los invitados, en ambas celebraciones, ha sido de perfil bajo, a excepción de ‘La chica dorada’. Paulina Rubio quiso honrar con su presencia a Fidel y Rocío. Mucha gente de Telecinco (directores, presentadores y altos cargos entre los invitados a ambos enlaces), pero poca 'jet set'. Demasiado poca como para que las tres revistas adelantasen su fecha de publicación.

Hay una sombra, además de la de las notables e importantes ausencias, que ha planeado sobre ambas celebraciones. La gente se pregunta: ¿por qué se casan después de 16 y 18 años de relación? Ambas parejas alegan que era el momento, su momento; tras tantos años de vida conyugal se han dado las condiciones propicias para pasar por el altar. Ambas parejas han dejado a Dios de lado y se han casado en dos ceremonias civiles, ante los ojos de los hombres y de los lectores. Dicen las malas lenguas, que siempre sobrevuelan sobre las exclusivas, que se han dado el 'sí quiero' por pasta, más gansa en el caso de la hija del boxeador y la folclórica.

No está de moda pasar por el altar si no hay razón para el bolsillo. La anécdota más destacada de ambos enlaces la protagonizó María José Cantudo, que, sin estar invitada, decidió acercarse al convento de Santa Clara a dejar unos huevos para que a los 'Makokikos’ no les lloviera. La boda de la Cantudo, esa exclusiva sí que vale un millón. Pero más vale no soñar despiertos e ir centrándonos en la siguiente boda con caché millonario: la de Kiko Rivera, ¿con mamá Pantoja a la fuga?
 
Makoke tiene los 46 años peor llevados que he visto. Acabo de enseñar esta foto a mi chico (que no tiene ni idea de quién es) y le ha echado 55 por lo bajo, así que no es maldad mía.
Cierto que tiene un tipazo pero de cara está fatal.

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el tema "topo" funciona muy bien en sálvame, y son varias/muchas veces las que recurren a él para estructurar los guiones.

está claro que es un tema concertado para pasar la semana, llenar horas de programación no diciendo nada, y como ahora tienen un perfil de televidentes que se conectan a las 5 después del reallity de las kardashian (es lo que antes una telenovela de éxito), publicidad y más publicidad...

Kiko está más que contento que su tema este en parrilla, significa $$$$$$$,
 

Carta de Ajuste


NACHO GAY

CARTA DE AJUSTE

Siempre nos quedará Matamoros

Este es un mensaje para los incrédulos del mundo. Habéis dejado de creer en el amor porque Angelina y Brad han roto, pero el amor perdura. Más allá de la muerte 'quevediana' y, por supuesto, de las exclusivas reventadas
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Ilustración realizada por Jate para Vanitatis
AUTOR
NACHO GAY

TIEMPO DE LECTURA4 min
24.09.2016 – 05:00 H.

Yo también quiero tener, como todo español medio, un propósito nuevo para amargarme esta temporada. Pero prefiero cumplirlo, así que no me planteo ni por asomo ir a un gimnasio y mucho menos dejar de fumar. Este año le he colocado a mi cilicio una foto de las Campos y pienso arrancar todos mis artículos hablando de ellas. Un sacrificio como otro cualquiera, que sin duda me hará mejor persona. ¿Que por qué lo hago? Siento que se lo debo a la España retratada por el Goya más sordo y atormentado, esa que dibuja hoy sus trazos sobre los más de 400.000 píxeles de un lienzo de alta definición.

Dicen los que saben de esto que los mejores textos nacen siempre de la aflicción del autor, así que todos los viernes, justo antes de ponerme a escribir, me enfrento a un pequeño fragmento del programa que hicieron las Campos el pasado verano en Telecinco y cuando ya estoy lo suficientemente atribulado, entonces y solo entonces, me pongo a escribir. La cadena ha confirmado esta semana la renovación del espacio y yo lo celebro, porque ese material garantiza el buen futuro de la Carta de Ajuste.

De todos modos, esta semana no me ha hecho falta recurrir a ese terrible material audiovisual para sentarme ante el PC. La aflicción me ha sobrevenido por sorpresa cuando he conocido la noticia del que sin lugar a dudas es el divorcio del año. Le robo una frase al escritor peruano Santiago Roncagliolo para asegurar sin miedo a equivocarme que esa inesperada ruptura representa “un mordisco que la realidad les da a nuestros sueños”.

Infidelidades, acusaciones cruzadas, exnovias reivindicando su condición de mujer y una polvareda tremenda en Twitter… ¿Están pensando en Brad Pitt y Angelina Jolie? Pues yo lo hacía en Pablo Iglesias e Íñigo Errejón.

Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra, romper podrán los celos los romances más bellos, reventar podrán los topos todas las exclusivas nupciales…. Hora, a su afán ansioso lisonjeraLo de los primeros nos lo podíamos esperar. Quien más quien menos intuía que ahí donde las masas veían la intensidad amorosa de 'Casablanca', en verdad se estaba rodando una película de Almodóvar. Marihuana, navajas, abusos a menores y polvos en el camerino. Falta un travesti, cierto, pero aparecerá de un momento a otro.

Ahora bien, lo de los líderes de Podemos, eso sí que no entraba en nuestros planes. Me refiero a los de los ilusos. A veces me pregunto por qué los ilusos seguimos haciendo planes, cuando nuestra condición los chafa permanentemente. Así que, no, yo ya no creo en el amor. Ayer mismo se lo comuniqué a Ruca, que a las once de la noche estaba abandonando el domicilio conyugal por la puerta cuando, de repente, el amor entró por la ventana. Sí, porque en ese momento, justo cuando el mundo ya no creía en sí mismo, Kiko Matamoros y su recién estrenada esposa Makoke se sentaban en 'Sálvame Deluxe'.


Galería: todas las imágenes de la boda de Kiko Matamoros y Makoke


Vale, es raro que un matrimonio renuncie a su luna de miel para acudir a un programa de televisión. Ustedes pensarán que lo han hecho por dinero, pero nada más lejos de la realidad. Lo han hecho para lanzar un mensaje de amor en tiempos de lo contrario. Y, sí, han cobrado alrededor de 30.000 euros por ello, pero ¿acaso el amor tiene precio?

Que sí, que han trincado otros 90.000 'lereles' por la exclusiva de la boda en dos revistas del 'cuore', pero eso no es lo importante. Lo verdaderamente trascendental de esta historia, lo que hemos aprendido hoy, estimados ingenuos, es que el amor, el de verdad, el que le nace a uno de dentro, ese no puede morir.

Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra, romper podrán los celos los romances más bellos, reventar podrán los topos todas las exclusivas nupciales…. Hora, a su afán ansioso lisonjera.

Este es un mensaje para los incrédulos del mundo. Habéis dejado de apostar por el amor porque Angelina y Brad han roto, porque Errejón e Iglesias han partido peras,pero el amor siempre perdura. Y lo hace más allá de la muerte 'quevediana' y, por supuesto, de las exclusivas reventadas.

No estábamos viendo 'Casablanca', no, pero siempre nos quedará Matamoros.
 
Hay vida después de la menopausia amigas...¿ No os apetece ir corriendo al gimnasio en cuanto véis a la esplendorosa Makoke?
 
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