Uñas, cejas pestañas, pelo y masaje, para terminar anunciando un chándal del Lidl, con el pelo sucio.Yo alucino con esta niña, tanto tratamiento a su edad no tiene sentido.
Mi madre tuvo un salon de belleza ( antes se llamaban así) en Madrid, bastante prestigioso hasta que se jubiló.
No hubo tratamiento bueno e innovador que no me hicieran, pero cuando era jovencita no me hacía más que limpiezas de cutis con mucha hidratación y, por supuesto, no tan a menudo como va mollete, porque no hacía falta y no era bueno para la piel.