Juan Carlos I abandona España. Zarzuela emite un comunicado escueto sobre su destino. El Gobierno no le retirará el título de rey

Pregunto. Quien era la otra mujer?

Gran decepción

"Mi padre sufría un cáncer de páncreas y le habían pronosticado solo unos meses de vida", explica zu Sayn-Wittgenstein. "Así que decidí pasar tiempo con él, éramos muy cercanos".
"Para mi gran sorpresa, justo después del funeral, el rey me dijo que mantenía una relación con otra mujer desde hacía tres años".
"Literalmente quedé devastada, era lo último que esperaba. Necesitaba apoyo emocional después de la muerte de mi padre y la noticia supuso un choque monumental para mí emocionalmente".
"Simplemente no me lo esperaba después de que me hubiera pedido matrimonio y de haber visitado a mi padre. Estuve muy mal por unos meses".
Sin contar con la reina Sofía, zu Sayn Wittgenstein dice que creía que tenía una relación exclusiva con el rey Juan Carlos I.
 
Nunca fueron de la misma liga. No hay lugar a comparar. ( Leti juega en provincias y Cori en Internacionales)


ya, pero se llevaron diferentes premios en la rifa de la vida, Corinna se llevó una bolsa de almendras garrapiñadas y la Leti se llevó la muñeca chochona; ten en cuenta que una cosa es llegar a reina de un país del sur de Europa y otra llevarte unos milloncejos de euros, lo primero está más cotizado que lo segundo
 
OPERACIÓN CORINNA: CULPAR A ELLA, SALVAR AL REY
PEOPLE

25 JULIO 2020

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La perversidad femenina ha constituido un relato recurrente del heteropatriarcado desde el Jardín del Edén hasta la construcción del mito cinematográfico de la femme fatale que tiene en Gilda un icono en el que la violencia machista se glorifica mediante una dolorosa estilización artística. Ahora que tenemos un Rey emérito en apuros vuelve el viejo truco de señalar a una mala mujer como motivo de las desdichas masculinas. Cierta prensa de obediencia monárquica está en ello y publica artículos en los que se diluyen las sospechas sobre el rey Juan Carlos I en acusaciones hacia Corinna Larsen.
Un tertuliano aseguró en la cadena SER que lo del Rey emérito podía justificarse ya que perdió la cabeza por amor. Y sugirió que eso le sucede a los hombres muy a menudo a partir de cierta edad. Las mujeres maduras no se enamoran igual (suponemos).
Luego llegó Rafael Hernando como elefante en cacharrería y lanzó un tuit denominando "mujerzuela" a Corinna, al añejo estilo de los hombretones con olor a coñá y Varón Dandy.

De paso añadió Rafael Hernando, prohombre del PP donde los haya, el nombre de Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, privándola (por supuesto) del apellido y pretendiendo un juego de manos en el que la controversia monárquica se cambie por el eterno debate venezolano.
Nadie va a afirmar de antemano la inocencia de Corinna Larsen por el hecho de ser mujer pero hay algo indecente en el uso de arquetipos femeninos pasados de fecha.
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La atractiva fémina maligna que conduce a la perdición al honrado anciano sólo existe en las fabulaciones de otra época, véase El ángel azul y Marlene Dietrich sometiendo a Emmil Jannings. Y tampoco parece que Corinna Larsen se parezca a la psicópata pavorosa que en Atracción fatal interpretaba Glenn Close allá en la década de los 80 del pretérito siglo XX.
Puede que Corinna Larsen no resulte un personaje inocente. Sin embargo, algunas de sus frases han sido certeras. Por ejemplo, cuando definió el carácter de Juan Carlos I: "Es como un niño. No sabe distinguir lo legal de lo ilegal". Y quizá ahí resida el problema. En el trauma que para Juan Carlos de Borbón supuso una infancia y juventud en la que vivió en precario gracias al dinero de aristócratas afines a la causa monárquica. Recuperada la corona gritó (como Escarlata O'Hara): "¡Juro que no volveré a pasar hambre!". Y lo cumplió con creces.
Pero no echemos la culpa a la mujer, a esa mala mujer que surge en los cuentos para adultos que son las viejas películas del noir. Corinna Larsen no es Barbara Stanwyck ni Veronica Lake ni tampoco Cruella de Vil. Sólo una persona que se asoció con un hombre poderoso y entre ambos decidieron (según los indicioes expuestos hasta ahora) amasar una fortuna mediante el ejercicio del comisionismo.
La relación personal entre ambos tampoco importa.
O importa poco.
Lo más disparatado (en pleno siglo XXI) es que si se cometió algún delito será Corinna Larsen quien pague mientras que el Rey emérito, de momento, no puede ser encausado debido a su condición de monarca.
Ese es el debate. Si la monarquía tiene algún sentido a estas alturas.
Dejad a Corinna Larsen en paz.
DANIEL SERRANO

Acerca de esto mismo he escrito esta tarde un post. Me alegro de ver plasmadas más opiniones con las que estoy completamente de acuerdo.

Dejémonos de citar a la "malvada Corinna" y centrémonos en el delincuente, que es lo serio y lo justo.
 
Entiendo. Pero yo haría una sola declaración pública explicando que soy perseguida , apuntando a quien lo hace y dejando claro a quien hago responsable de mi situación y luego me llamo a silencio. A veces me pregunto qué pensarán los hijos de esta mujer . Deben ansiar la invisibilidad.
Como nos gusta marear la perdiz!!! Corinna está hablando a la prensa para protegerse DE LAS AMENAZAS DE MUERTE QUE ESTÁ RECIBIENDO.
Si le pasa algo a ella o a su hijo, saben donde tienen que buscarlos.
EN ESPAÑA
 
ya, pero se llevaron diferentes premios en la rifa de la vida, Corinna se llevó una bolsa de almendras garrapiñadas y la Leti se llevó la muñeca chochona; ten en cuenta que una cosa es llegar a reina de un país del sur de Europa y otra llevarte unos milloncejos de euros, lo primero está más cotizado que lo segundo
No comparaba sus logros sino sus niveles personales. Idiomas, autocontrol, tablas, técnicas de comunicación, capacidad de expresar ideas, de desenvolverse en círculos sociales altos... Leti está ahí igual que la Markel: enredando a UN personaje. Cori es libre y se abre paso solita.
 
Blanco y en botella. EMPRESA FAMILIAR
La que liaron con Ruiz mateos....... para ahora enterarte de esto. QUE ASKO DE POLÍTICOS ESPAÑOLES
Claro, porque Corinna, que está imputada, va a decir necesariamente la verdad.
De todos modos, lo de la empresa familiar desde hace 40 años. ¿Quién más estaba en "la familia"? Porque hace 40 años Felipe, al que tantos intentan meter en lo de "la familia" tenía 12 años. Pelín precoz el crío, ¿no? Sobre todo cuando a la vez se puede leer que no sabe hacer la o con un canuto ni ahora?
 
Claro, porque Corinna, que está imputada, va a decir necesariamente la verdad.
De todos modos, lo de la empresa familiar desde hace 40 años. ¿Quién más estaba en "la familia"? Porque hace 40 años Felipe, al que tantos intentan meter en lo de "la familia" tenía 12 años. Pelín precoz el crío, ¿no? Sobre todo cuando a la vez se puede leer que no sabe hacer la o con un canuto ni ahora?

El primo Orléans y el Dos-Sicilias
 
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