Bueno, mi padre era jovencísimo, digamos que cuando te haces militar ya sabes, donde te manden y a obedecer. Amaba Argelia decía que era un país muy hermoso y muy rico. Supongo que por eso en la madurez lo dejó y aunque trabajaba para el ejercito era ya civil. Efectivamente no aprendemos y la historia está ahí. Yo en estos casos me quedo con algo que dijo una vez uno de mis jefes, que estuvo en lo más alto y en lo más bajo y por último en lo más alto: "nadie que haya llegado tan alto lo ha hecho sin pisar antes mucha mierda". Con perdón pero lo dijo así literal y cuanto mayor me hago más veo que razón tenía. Yo, como todos he tenido mis ídolos y cuando te haces mayor o ellos caen ves que como humanos que somos todos tenemos cosas buenas y malas, unos más que otros, pero efectivamente el poder corrompe y es raro el que no ha llegado a cierto nivel y no tenga algún esqueleto en el armario. Haces bien en decirme Indochina porque yo apesar de mi edad nunca digo Vietnam, es raro en mi, suelo decir Indochine y soy una gran amante del país. Supongo que porque siempre se oía así en casa, mi padre tenía dos amigos que estuvieron allí y uno de ellos hizo una pequeña fortuna, algún día contaré como. Te podría contar cosas increibles de la descolonización de ambos y de verdad que hubo cosas que dejan tantísimo que desear no sólo como políticos sino como personas.Bueno, al menos puso fin a la guerra de Argelia, que era una guerra pérdida, como Vietnam (la Indochina francesa). No sé cuál sería la postura de tu padre, así que aquí lo dejo...
En mi opinión, la France no supo hacer bien el proceso de descolonización, la "Grandeur" de los conservadores provocó que se resistieran a dar la independencia a sus colonias con sendas guerras en Argelia e Indochina. Un grave error que provocó muchas muertes y horrores. ( Que conste que España cometió el mismo error, sobre todo en Cuba y Filipinas, y sigue con la misma mentalidad de imposición y represión en sus conflictos territoriales, no aprenden de la Historia).
Si, he leído cosas sobre De Gaulle, de santo nada, un militar-politico para el que la razón de Estado lo justificaba todo.