Visita de Estado de los Países Bajos. Junio 20 al 22, 2023


El rey Filip de Bélgica: un monarca que creció en su papel después de equivocarse antes

El rey Willem-Alexander se reunirá con el rey Filip el martes al comienzo de una visita de estado de tres días a Bélgica. ¿Qué clase de persona es su colega belga?

Annelies Bontjes
19 junio 2023

Es el final de 2004, Bélgica. En las elecciones de Flandes, la derecha radical Vlaams Belang obtuvo casi una cuarta parte de los votos. El futuro de una Bélgica unida es incierto. Al menos un hombre no dejará que el país se desmorone. Quiere tomar medidas enérgicas contra aquellos que quieren 'destruirla'. “Les puedo asegurar que tendrán que lidiar conmigo y no se equivoquen: soy un tipo duro si tengo que hacerlo. No dejo que la gente me pisotee". Estas son grandes palabras, y todas conducen al príncipe heredero de Bélgica. Esto lleva a una disputa política y una reprimenda del primer ministro.

Incluso antes de que Filip se convierta en rey de Bélgica, aparece regularmente en las noticias, y por lo general no de manera positiva. Es conocido por ser terco y torpe. Esto puede deberse en parte a su problemática infancia. Filip Leopold Lodewijk Maria nació en 1960 como el hijo mayor del rey Albert y su esposa Paola. Tienen problemas matrimoniales y están en el extranjero con más frecuencia que en el castillo de Belvédère en Laeken. Prestan poca atención a sus hijos. Filip se ha rebelado. "No puede hacerlo", dice un gran mariscal en 1991 -tiene 31 años- sobre él contra el diario De Morgen. Es una declaración que repercutirá en los años venideros.

Según Wim Dehandschieter, periodista de realeza de la sección de televisión VTM News y del periódico Het Laatste Nieuws, su imagen negativa comienza a declinar cuando Mathilde entra en su vida. “Después de años de críticas, de repente alguien dice que puede hacerlo. Ella le da amor, atención y estructura. En ese sentido, ella lo salvó de la soledad”.

Noble, cálida y elegante.

La hija mayor de un noble belga y una condesa polaca (casi trece años menor que Filip) es perfecta para su nuevo papel: es noble, cálida y elegante. “Mathilde se acerca a Filip con respeto. Ella nunca caminará frente a él ni lo interrumpirá. Ella le da el centro de atención”. Los dos se casaron en 1999 y dos años después tuvieron a su primera hija, Elisabeth. Luego le siguen dos hijos más y una hija.

Al igual que el rey Willem-Alexander, Filip lleva ya diez años en el trono. En esos años, mucho ha cambiado entre la población belga en la percepción del rey, según Dehandschieter. “Se ha mantenido libre de escándalos y con eso poco a poco ha ido aumentando la confianza en él. Ha habido cierta conmoción, por ejemplo, cuando fue a Francia con Mathilde para un fin de semana de bienestar después de los ataques en París. Pero eso fue más un error”.

No hay cifras recientes sobre la popularidad del rey, que ahora tiene 63 años, pero la cobertura en general es positiva. “Ha crecido en su posición y ahora todos realmente lo ven como el rey. El hábito hace al monje".

Además, el rey se atreve a enfrentarse a las páginas oscuras de la historia belga. En primer lugar la dolorosa historia familiar con la hija ilegítima de su padre Albert. Cuando la princesa Delphine fue reconocida en 2020 después de años de batalla legal, Filip invitó de inmediato a su media hermana al castillo. Ese mismo año rompió una tradición de silencio sobre el pasado colonial con una carta al presidente congoleño. En una visita al Congo el año pasado, volvió a expresar su "más profundo pesar" por las fechorías del pasado colonial. Reconoció que el régimen de Bélgica se caracterizó por "el paternalismo, la discriminación y el racismo".

Vínculo especial con su hija.

Llama la atención que el propio rey vea un momento completamente diferente como el más destacado, dice el periodista de la realeza Dehandschieter. A saber: la celebración del decimoctavo cumpleaños de su hija Elisabeth.

Mientras que Amalia fue presentada al resto del país con un libro, hubo un evento en Bélgica en el palacio que fue transmitido en vivo por los cuatro canales de televisión belgas. Elisabeth pronunció un discurso impactante, que finalizó con una promesa en los tres idiomas nacionales: “El país puede contar conmigo. Het land kan op mij rekenen. Le pays peut compter sur mon engagement. Das Land kann auf mich zählen.” El hecho de que el rey cite este ejemplo es significativo por el vínculo que siente con su hija.

Filip también logró sorprender a los belgas en los últimos años. Cuando el comediante Philippe Geubels fue a una audiencia, el rey de repente resultó tener sentido del humor. También fue visto en el popular festival techno Tomorrowland y le gusta el kitesurf.

“Aunque se ha desprendido un poco de su imagen de madera, en realidad nunca se convertirá en un hombre débil”, dice Dehandschieter. "Pero eso no es necesario. Para muchos flamencos, tu rey Willem-Alexander es el típico holandés: alguien de voz fuerte, directo y alegre. Eso no es para nosotros. Holanda y Bélgica tienen el rey que mejor se adapta al país”.
 
Me encanta la pamela de Máxima. El conjunto es bueno pero la tela es medio brillosa.
De Mathilde el color es lindo pero no sé. No me convence del todo.
Se parece mucho a un conjunto que uso la princesa Beatriz de York.
 

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