Visita de Estado a Portugal del 10 al 12 de Octubre

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Discurso del Rey

Señor presidente,

Mi esposa y yo apreciamos mucho la cálida bienvenida que hemos recibido aquí en el Palácio da Ajuda. Gracias también por sus amables palabras testimonio de nuestra amistad.

Portugal es una de las naciones más antiguas del mundo, con una frontera que apenas ha cambiado en el transcurso de ocho siglos. Al mismo tiempo, su país es reconocido por su capacidad de transformación. Una y otra vez se ha reinventado en respuesta a un mundo cambiante.

Cualquiera que sepa lo primero de la historia sabe que los holandeses tienen mucho que agradecer a los portugueses. Fueron sus antepasados los que abrieron el mundo para sus conciudadanos europeos, incluido nosotros. Fueron sus audaces compatriotas quienes descubrieron nuevas rutas marítimas y navegaron a orillas distantes. Usted encabezó el camino. Tomó un tiempo antes de que seguimos a tu paso.

El hecho de que nuestros países se conviertan en rivales es una de las ironías de la historia. Pero una cosa es cierta: debemos parte de nuestro éxito comercial a su experiencia marítima. Nuestra Edad de Oro reflejaba el brillo de tu brillante ejemplo.

Esa impresionante historia hace de Portugal un país muy especial. Siempre ha sido la cabeza de puente de Europa; un poste avanzado mirando hacia el mar. El portugués es una lengua mundial, hablada en cuatro continentes. Sus lazos con muchos pueblos y culturas diferentes merecen ser apreciados, ahora y en el futuro. Portugal entiende el valor de la diversidad, de la tolerancia, de la apertura y el intercambio. Valores que están bajo presión en tantos lugares del mundo, pero que consideramos como la esencia de nuestra sociedad libre.

La Unión Europea tiene suerte de tener un Estado miembro de este tipo. Usted, señor Presidente, sabe lo mucho que los portugueses han trabajado para hacer de su nación lo que es hoy. Usted creció en un país que no era libre, pero que se transformó en una democracia por sus propios esfuerzos. Usted pertenecía a la primera generación de representantes libremente elegidos, y trabajó activamente para elaborar una constitución que establezca los principios de la democracia bajo el estado de derecho.

Portugal se alió con la comunidad europea de naciones libres. Juntos, los portugueses han logrado profundas reformas. La transformación económica del país ha requerido sacrificios y ha exigido mucho a la resistencia del pueblo portugués. Los últimos años han afectado a sus compatriotas. Muchos jóvenes todavía luchan por encontrar empleos dignos de sus habilidades.

Y sin embargo, hay motivos para el optimismo sobre el futuro!

Vemos y admiramos la forma en que Portugal está tomando la delantera en la transición a la energía sostenible.

Vemos cómo está forjando un nuevo vínculo con el mar, centrándose exitosamente en la "economía azul".

Vemos cómo Lisboa, la 'Gran Vieja' de Europa, ha encontrado una nueva vida, encantando a visitantes de todo el mundo y creando así nuevas oportunidades.

Vemos a Portugal ganando el Euro 2016 con un fútbol inmejorable, y el Eurovision Song Contest con un jazz íntimo.

Vemos a Portugal como un aliado de la OTAN que hace una valiosa contribución a la paz y la seguridad.

Y vemos a destacados líderes portugueses llamados a altos cargos. Tome el Secretario General de la ONU António Guterres - para quien mi esposa, la Reina Máxima, trabaja como Defensor Especial de la Inclusión Financiera para el Desarrollo.

Además de todo esto, estamos fascinados por el estilo de vida portugués. Se dice que los portugueses tienen mil recetas diferentes para bacalhau. Eso ilustra su ojo para el detalle. La atención que prestan a las pequeñas cosas que hacen la vida tan especial y valiosa.

Cualquiera que haya experimentado la hospitalidad y la calidez de este país siempre anhela regresar. Portugal te abraza. En palabras de la famosa canción de la reina del fado, Amália Rodrigues:

Dos brazos a mi espera

É uma casa portuguesa, com certeza!

Puedo pedirles a todos que levanten sus gafas.

¡A su salud, señor Presidente!

¡A la cálida amistad entre la República Portuguesa y el Reino de los Países Bajos!
 
La banda que lleva es la Orden del Infante Dom Henrique,quizás la ha colocado así en el vestido porque la ha recibido hoy de manos del Presidente Portugués y no ha querido dejar de utilizarla por cortesía ,no lo sé ,es una opción,aunque a mí me gusta la forma de colocarla

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Yo a esta mujer la veo muy triste. Supongo que será por lo de su padre pero le falta la alegría que mostraba, la risa fácil, la amplia sonrisa. Aún así, su forma de trabajar y su saber estar son impecables. Y con el vestido verde está guapísima.
 
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