Es que Bernardino heredó la empresa del padre y ya está él muy arraigado en el negocio .
Pero vamos, lo que es por mí, podía poner una mercería!
Ay, es lo malo de las herencias: no se valoran en su justo término porque vienen regaladas.....
En términos más serios , coincido contigo en que estos dos se llevan bien, y que son tal para cual.