C
claro que sí
Guest
Claro que sí. Es que a la prensa sólo hay que creerla cuando cuenta alguna metedura de pata de la Letis, que es cuando cuenta la verdad y nada más que la verdad. Cuando cuenta los negocios sucios de Hurtangarin es todo mentira, puras invenciones para perjudicar al rubísimo, altísimo, guapísimo y perfecto padre y marido.