Princesa Mako visita Paraguay, 7 al 14 de septiembre 2016

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NACIONAL
jueves 8 de septiembre de 2016, 19:15
Secundarios se manifiestan frente a Mburuvicha Róga
Estudiantes secundarios adheridos a la Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (Fenaes) se manifiestan este jueves frente a la residencia presidencial Mburuvicha Róga.


Los estudiantes acusan a Cartes de espionaje. | Raúl Cañete.
El objetivo es expresar su malestar con el supuesto espionaje que realiza el gobierno de Horacio Cartes a organizaciones sociales, estudiantiles y sectores políticos de la oposición, además de hacerse sentir ante la princesa Mako de Japón, quien tendrá una audiencia con el primer mandatario de nuestro país en el marco de su visita oficial.

Mediante un comunicado, la organización repudia la actitud del Gobierno, a quien acusa de realizar un despliegue de inteligencia militar para controlar las actividades de los gremios.


Igualmente, convocan a una "gran marcha" de colegios públicos y privados a realizarse el 16 de septiembre próximo.

Aproximadamente medio centenar de jóvenes se congrega frente a Mburuvicha Róga ante una fuerte custodia policial, informaron.

 

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09 DE SETIEMBRE DE 2016
| AYER EN MBURUVICHA RÓGA
Princesa Mako dialogó con el presidente Horacio Cartes
El presidente Horacio Cartes recibió ayer en Mburuvicha Róga a la princesa Mako del Japón, ocasión en que ofreció una cena en honor a la representante de la realeza nipona, quien visita por primera vez el país. Dialogaron sobre el fortalecimiento del vínculo diplomático entre naciones.

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  La princesa Mako escucha explicaciones en inglés del guía Diego Ricardo (izq.) ayer en el Museo del Barro. / ABC ColorAMPLIAR

Alteza Imperial admiró el arte del Museo del Barro

La princesa de Japón, Mako, visitó ayer al presidente de la República Horacio Cartes en Mburuvicha Róga, ocasión en que su alteza nipona compartió una cena privada con el jefe de Estado y las hijas del mismo.

En la ocasión, la visitante y el mandatario mantuvieron un ameno diálogo en torno a la voluntad de los gobiernos de Paraguay y del Japón de fortalecer los vínculos de amistad que unen a ambas naciones. La princesa llegó a la residencia presidencial a las 19:00 y se retiró poco después de las 21:00.

Agenda

Mako, de 24 años, está en nuestro país en visita oficial que se extenderá hasta el martes 13 de setiembre, respondiendo a una invitación del Gobierno paraguayo, en el marco de los actos conmemorativos del 80º aniversario de la inmigración japonesa a nuestro país iniciada en 1936.

Su alteza imperial visita por primera vez Paraguay y es su segunda visita oficial al extranjero, tras haber viajado a El Salvador y Honduras en diciembre del año pasado.

La visita de la princesa del Japón se da en medio de un estricto protocolo –en algunos casos se restringen las fotografías– y rigurosas medidas de seguridad.

Respecto a la inmigración japonesa, cabe recordar que los primeros colonos que vinieron iniciaron susactividades agrícolas y económicas en La Colmena (Paraguarí). Posteriormente se establecieron en los departamentos de Itapúa, Alto Paraná y Amambay.

Los inmigrantes se dedicaron principalmente al cultivo de soja, maíz, arroz y trigo. Después introdujeron la famosa carne wagyu, originaria de la ganadería de Japón.

De acuerdo con datos oficiales, unos 10.000 japoneses están asentados actualmente en el país, entre originarios, descendientes con raíces en el Japón que hoy llegan a la 5ª generación.

 

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09 DE SETIEMBRE DE 2016

Debe sentirse orgullosa

Visita nuestro país la princesa Mako, nieta del emperador japonés Akihito, hija del príncipe Akishino y de la princesa Kiko, que vino para participar de la conmemoración del 80º aniversario del arribo del primer contingente de inmigrantes japoneses a nuestro país. Cuando regrese a su patria, la princesa puede hacerlo satisfecha, porque pudo verificar que sus compatriotas que llegaron al Paraguay desde el año 1936 fueron y continúan siendo ejemplos de laboriosidad y honradez. Donde fuera que se instalaran, sus colonos se dedicaron a crear condiciones favorables para una intensa labor de desarrollo agrícola, con tecnología apropiada, moderna y mejor aplicada. Estos colonos les enseñaron a muchos de los nuestros a trabajar la tierra de un modo diferente, más inteligente, intensa y provechosamente. La princesa Mako tiene mucho de qué envanecerse en lo que respecta al trabajo que sus compatriotas realizaron en el Paraguay, a la imagen que proyectaron aquí de la nacionalidad y cultura niponas. Los colonos japoneses y sus descendientes representaron al emperador y a la nación japonesa con gran altura y enorme sentido de dignidad y patriotismo.

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• • EDITORIAL DE ABC COLOR

Visita nuestro país la princesa Mako, nieta del emperador japonés Akihito, hija del príncipe Akishino y de la princesa Kiko, que vino para participar de la conmemoración del 80º aniversario del arribo del primer contingente de inmigrantes japoneses a nuestro país. Estos pioneros se instalaron en una zona del departamento de Paraguarí conocida como Colonia La Colmena, dando así principio histórico a una larga y fructífera relación entre nuestro país y el imperio del Japón en las áreas económica y cultural.

Cuando regrese a su patria, la princesa Mako puede hacerlo satisfecha, porque pudo verificar que sus compatriotas que llegaron al Paraguay desde el año 1936 fueron y continúan siendo ejemplos de laboriosidad y honradez. Donde fuera que se instalaran, sus colonos se dedicaron a crear condiciones favorables para una intensa labor de desarrollo agrícola, con tecnología apropiada, moderna y mejor aplicada.

Los colonos japoneses –que llegaron en tres momentos sucesivos: 1936, 1953 y 1960– cultivaron empresarialmente soja, maíz, arroz y trigo; y más tarde impulsaron la producción de colza, girasol y avena. Introdujeron las más actualizadas técnicas en horticultura e hicieron que los consumidores paraguayos tuviesen en sus mesas ciertas legumbres, granos y frutas todo el año, y no solamente en temporadas, como era hasta entonces.

Más recientemente, crearon granjas de producción avícola, piscicultura, e introdujeron la raza de bovinos wagyu, desarrollada en la ganadería japonesa, con fines de consumo interno, pero, principalmente, de exportación, diversificando de este modo ágil y dinámico su producción económica y ampliando sus horizontes de progreso.

Actualmente, serían alrededor de diez mil personas de nacionalidad japonesa y descendientes de japoneses las que residen en nuestro país. Esto significa que los más jóvenes pertenecen ya a la quinta generación, siendo, la gran mayoría de ellos, productores primarios de gran potencialidad económica, demostrando virtudes esenciales como la contracción al trabajo, las buenas costumbres, la frugalidad, el ahorro y el aprendizaje permanente.

No fue extraño, por consiguiente, que la forma de laborar y el conocimiento introducido por los colonos nipones en sus zonas de influencia directa en la agricultura y la horticultura, el modo de conservar y preparar alimentos domésticos, el mercadeo, la disciplina y continuidad necesaria en los métodos de labor para lograr buenos resultados, fueran factores que modificaron sustancialmente las anteriores condiciones técnicas en que se desempeñaban nuestros labriegos. En otras palabras, les enseñaron a muchos de los nuestros a trabajar la tierra de un modo diferente, más inteligente, intensa y provechosamente.

También fueron capaces de surtir mejor y de manera sostenida nuestros mercados de consumidores con sus novedosos productos de huertas y granjas, de manera que debe agregarse a sus méritos el que también nos enseñaran a alimentarnos mejor, diversificando nuestras fuentes de nutrición con productos e ingredientes hasta entonces no conocidos. Estas enseñanzas, estos aportes a nuestra cultura, no poseen valor estimable en cifras, sino solamente en elogios y sentimientos de gratitud, porque modificar en sentido positivo la educación, la salud y la mentalidad de muchas personas es un beneficio de valor incalculable.

La colectividad japonesa en el Paraguay integró, junto a otros contingentes de inmigrantes extranjeros que hallaron en nuestro país refugio, paz y condiciones favorables de tranquilidad para laborar, producir y prosperar, un sector poblacional de gente que se arraigó con facilidad y muy pronto comenzó a aportar al Paraguay sus mejores conocimientos y hábitos, creando condiciones culturales para un avance hacia la modernidad en nuestro ámbito rural. Así se fueron conformando sucesivamente las colonias Federico Chávez, Santa Rosa, La Paz y Fuji.

La última instalación de colonos japoneses en nuestro país se concretó mediante convenios intergubernamentales, dirigida por la empresa Promotora del Exterior del Japón SA –antecesora de la actual Japan International Cooperation Agency (JICA)–, que adquirió los inmuebles rurales destinados a acogerlos. Nacieron entonces las colonias Pirapó, Yguazú y Piraretá, que muy pronto demostraron su capacidad de prosperar y de elevar el nivel de vida a su alrededor, hasta el punto de que hoy exhiben mejores índices de ingreso que la mayoría de las regiones productivas del país. Los campesinos paraguayos que aprendieron de ellos, que los imitaron, están hoy en día en una posición socioeconómica holgada.

En general, los colonos japoneses y sus descendientes nacidos en esta tierra e integrados a diferentes sectores sociales demostraron siempre una conducta personal y colectiva pacífica, sensata, equilibrada y respetuosa de las leyes y normas sociales.

La princesa Mako tiene mucho de qué envanecerse en lo que respecta al trabajo que sus compatriotas realizaron en el Paraguay, a la imagen que proyectaron aquí de la nacionalidad y culturas niponas, generando en los paraguayos el gran respeto y admiración que profesamos hacia su país y su gente. Los colonos japoneses del Paraguay y sus descendientes representaron al emperador y a la nación japonesa con gran altura y enorme sentido de dignidad y patriotismo. Esta es la buena noticia que la princesa puede llevar a sus padres y abuelos, y de la cual ella misma puede sentirse orgullosa.

 

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09 DE SETIEMBRE DE 2016

Hoy en Luque, y mañana en las colonias
La visita oficial de la princesa japonesa Mako proseguirá esta mañana con el acto central conmemorativo del 80 aniversario de la inmigración japonesa al Paraguay, que se desarrollará en el Centro de Convenciones de la Conmebol, en Luque. Allí se prevén varios actos, entre los que se destaca el encuentro con miembros de la comunidad Nikkei.
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• Princesa Mako dialogó con el presidente Horacio Cartes

Mañana, su Alteza Imperial del Japón proseguirá con un viaje hasta la comunidad de La Colmena, en el departamento de Paraguarí, el primer asentamiento creado por inmigrantes japoneses en Paraguay, en 1936.

El domingo 11, Mako recorrerá las colonias japonesas de Federico Chávez y La Paz (departamento de Itapúa), y la ciudad de Encarnación. La visita de la princesa culminará el martes 13. Mako partirá desde Foz de Yguazú con destino a Tokio, el miércoles 14 de septiembre.

 

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09 DE SETIEMBRE DE 2016

Alteza Imperial admiró el arte del Museo del Barro
La princesa japonesa Mako visitó ayer al mediodía el Centro de Artes Visuales/Museo del Barro, de Asunción, donde hizo un recorrido guiado en la sala de cerámica popular. El director del museo, Ticio Escobar, informó que su Alteza Imperial quedó “impresionada” por el cruce intercultural; la diversidad del arte indígena, popular y contemporánea, que reúne el centro. Destacó que la Princesa es museóloga y especialista en arte. “Me llamó la atención su expresividad, le arrancaban suspiros de admiración por las piezas indígenas. Le impresionó las máscaras chiriguanas, las coronas, observó la vitrina del arte de Tobatí, muy impresionada, con preguntas técnicas”, dijo Escobar.

 

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PREPARATIVOS PARA EL EVENTO CENTRAL

 

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09 DE SETIEMBRE DE 2016 11:12

Celebran el 80º aniversario de inmigración japonesa
Con la presencia de la princesa Mako y el presidente de la República, Horacio Cartes, se realizó este viernes por la mañana un acto para celebrar de manera oficial el octogésimo aniversario de la inmigración japonesa en el Paraguay.

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  Princesa Mako, hoy, en la Conmebol. / David Quiroga, ABC ColorAMPLIAR
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JAPÓN

• PRINCESA MAKO

MAKO, PRINCESA DEL JAPÓN
“No dejo de pensar que los inmigrantes llegaron al Paraguay después de un largo viaje. Mis más profundos respetos a los inmigrantes (japoneses)”

Hace 80 años, la primera colonia de inmigrantes japoneses se instaló en La Colmena, en Paraguarí. Este es el motivo principal por el cual la princesa Mako del Japónrealiza una visita desde el miércoles pasado en nuestro país. La celebración oficial se realizó este viernes en el Centro de Convenciones de la Conmebol.

“Los colonos japoneses en base al trabajo y sacrificio, virtudes muy características de los hijos de esa gran nación, cumplieron en el silencio, pero con creces, las condiciones de inmigrantes experimentales a pesar de las muchas adversidades ganando la confianza y simpatía de la población paraguaya”, dijo en parte de su discurso el presidente Horacio Cartes.

“Su visita al Paraguay nos honra profundamente. Tendrá (la princesa Mako) la oportunidad de visitar el interior del país donde podrá recibir de seguro no solo las demostraciones afectivas de las colonias japonesas sino también la calidez y el reconocimiento muy sincero del pueblo paraguayo. Sepa que al volver a su hogar llevará consigo el calor de esta tierra roja”, agregó el mandatario.

La princesa Mako, en su discurso, recordó que su padre Akishino visitó el Paraguay en 2006 para celebrar el 70º aniversario de la inmigración. “Diez años después me toca a mí visitar el Paraguay. Quiero dar gracias por esta calurosa bienvenida”, indicó.

“No dejo de pensar que los inmigrantes llegaron al Paraguay después de un largo viaje. Mis más profundos respetos a los inmigrantes en el Paraguay. Agradezco la hospitalidad del pueblo paraguayo”, manifestó Mako, al tiempo de agradecer también que los inmigrantes enviaran al Japón una tonelada de queso de soja como parte de la ayuda humanitaria tras el terremoto que afectó a ese país en 2011.

Mako se reunirá hoy con miembros de la comunidad Nikkei, en Luque. Luego, irá hasta La Colmena, el primer asentamiento creado por inmigrantes japoneses en Paraguay, en 1936. El domingo 11, Mako recorrerá las colonias japonesas de Federico Chávez y La Paz (departamento de Itapúa), y la ciudad de Encarnación. La visita de la princesa culminará el martes 13. Mako partirá desde Foz de Yguazú con destino a Tokio, el miércoles 14 de setiembre.

 

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