Me recuerda a su padre, Philippe, su timidez pero siempre con una sonrisa. Lisa tiene un tipazo y parece que le ha cogido gusto a los taconazos de aguja. Los pendientes no la favorecen.
Se nota que es una persona timida pero transmite calor humano, se nota atenta e interesada. A sus 20 años es normal que no tenga la soltura de su madre en los actos, pero lo que vemos es muy prometedor.
Los Belgas desde luego han dado una excelente educación a sus 4 hijos y la preparación de la heredera hasta la fecha es ejemplar.