Farmacología

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¿Por qué mucha gente con esquizofrenia deja de medicarse?

La esquizofrenia es un trastorno complejo, que genera graves dificultades y un elevado nivel de disfuncionalidad y sufrimiento a quienes la padecen y/o a su entorno. Esta alteración es considerada crónica y precisa de un tratamiento continuado y permanente, siendo la medicación fundamental para mantener controlados los síntomas del paciente y mantener al sujeto estable y sin brotes psicóticos.

Sin embargo, son muchas las personas con esquizofrenia que incumplen el tratamiento farmacológico prescrito a lo largo del tiempo. ¿Por qué mucha gente con esquizofrenia deja de medicarse? A lo largo de este artículo vamos a ver algunos de los motivos más frecuentes para ello.

La esquizofrenia: un trastorno considerado crónico
La esquizofrenia es un trastorno mental de tipo psicótico cuyo diagnóstico requiere la presencia durante al menos seis meses de síntomas tales como alucinaciones, delirios, alteraciones del habla (estando como mínimo uno de estos tres presente) junto a otras alteraciones como inquietud motora, catatonia, alogia o empobrecimiento del pensamiento, aplanamiento afectivo o abulia.

El padecimiento de este trastorno supone una gran alteración en el día a día de la persona, afectando a todos o casi todos los ámbitos vitales tales como la interacción personal, la pareja, el trabajo, los estudios o el ocio. Es posible que algunos de estos sujetos no sean conscientes de la presencia de alteraciones o que no las consideren como tales sino como parte de su realidad, pero por lo general supone sufrimiento tanto para gran parte de quienes la padecen como para sus familias.

Se trata de un trastorno que puede presentar muy diferentes cursos dependiendo de la persona y el tipo de sintomatología que presente. Sin embargo, estamos ante un trastorno crónico para el que no se dispone en la actualidad de una cura, centrándose el tratamiento en el control de los síntomas. Dicho tratamiento, de cara a mantener la estabilidad del paciente, requiere ser continuado a lo largo de la vida del sujeto. En gran medida, parte del bienestar que se puede llegar a gozar depende del uso de estos fármacos.

Motivos que llevan a la gente con esquizofrenia a dejar la medicación
Pese a que por norma general se pone una gran atención a dejar clara la necesidad de un tratamiento continuado, un gran porcentaje de las personas con esquizofrenia decide dejar de tomar la medicación o no se ajusta a las pautas indicadas por los médicos. De hecho, diferentes estudios indican que menos de la mitad siguen dichas pautas médicas tal y como se indica(algunos por defecto, otros por exceso). Se calcula que de entre las personas que abandonan el 25% lo hace durante los primeros diez días, la mitad al año y 75% a los dos años. ¿Por qué? A continuación indicamos una serie de motivos por los cuales es frecuente el abandono de la terapia farmacológica.

1. No conciencia de enfermedad
Uno de los motivos que pueden llevar a una persona con esquizofrenia a no tomar la medicación, especialmente en las fases iniciales tras el diagnóstico, es la ausencia de conciencia con respecto a su trastorno. No saber qué tienen o no tener capacidades para reconocer la existencia de alteraciones (por ejemplo, pacientes con deterioro cognitivo) hace que no se considere la posibilidad o necesidad de consumir fármacos.

Estos pacientes pueden tomar la medicación en un momento dado por inercia o por prescripción médica inicial, pero terminar por abandonarla al considerar que su consumo no tiene sentido.

2. Reacción de pánico o huida ante el diagnóstico
Ser diagnosticado de un trastorno mental, especialmente uno considerado crónico como la esquizofrenia, es algo muy duro y difícil de asumir. No es raro que en los momentos iniciales aparezca una negación del diagnóstico y un rechazo profundo a la idea de medicarse o tratarse, como si hacerlo supusiera aceptar que se tiene esa enfermedad. Ello puede provocar que personas diagnosticadas de este trastorno se nieguen a empezar a medicarse o que, aunque hayan empezado a hacerlo, de repente decidan dejarla. Al igual que en el caso anterior, esto es especialmente frecuente en los primeros momentos tras el diagnóstico.

3. Alteraciones producidas por el propio trastorno
En algunos pacientes, el propio trastorno puede generar el abandono de la toma de medicación. Por ejemplo, un sujeto paranoide puede empezar a ver el hecho de medicarse como una prueba de que está intentando ser envenenado o controlado externamente y reaccionar aversivamente a ello. Si bien los efectos de la medicación en principio aliviarían los síntomas psicóticos, la adquisición de tolerancia o la falta de efectividad de un medicamento en un caso concreto puede provocar que aparezca sintomatología alucinatoria que generara dicho rechazo.

4. Reactancia
Otro de los posibles motivos por los que alguien puede llegar a dejar de medicarse es su reactividad a la idea de estar obligado a tomársela. Ello puede darse en pacientes que son obligados inicialmente a tomar la medicación o bien en personas que sienten rechazo a la idea de tener que tomarse algo de por vida, reaccionando con aversión a dicha idea y propiciando que terminen por abandonar la medicación. También puede darse reactancia o incluso miedo a la idea de depender de la toma de pastillas el resto de su vida.

5. Efectos secundarios

El principal y más frecuente motivo que lleva a una persona con esquizofrenia a dejar de medicarse es la existencia de efectos secundarios provocados por la medicación. Y es que muchos de los antipsicóticos y fármacos empleados pueden generar graves molestias en quienes los utilizan, especialmente cuando hablamos de los neurolépticos clásicos. Algunos de los más habituales son la somnolencia y sedación, junto al aumento de peso.

Entre ellos podemos encontrar el surgimiento de problemas motores tales como la aparición de acatisia o inquietud motora, discinesias, movimiento incontrolables o incluso temblores de tipo parkinsoniano. En ocasiones se añaden antiparkinsonianos a la medicación a tomar precisamente por este motivo. También pueden generar síntomas de tipo sexual, como ginecomastia, galactorrea (expulsión de leche por los pechos independientemente del s*x*), amenorrea o disfunción eréctil. También pueden aparecer mareos, alteraciones gastrointestinales, taquicardias y otras alteraciones como una elevación del nivel glucémico en sangre (facilitando la aparición de diabetes). En algunos casos incluso pueden surgir problemas más peligrosos, como el síndrome neuroléptico maligno o la agranulocitosis (que pueden llegar a ser mortales).

6. Somnolencia y disminución de capacidades
Si bien forma parte de los efectos secundarios anteriormente mencionados, se ha separado este elemento debido a su gran prevalencia entre los pacientes que deciden dejar de medicarse. Y es que uno de los motivos por los que más personas deja de medicarse es la sedación que muchos de estos fármacos producen, que a su vez genera repercusiones en una gran cantidad de dominios vitales.

Aunque el fármaco puede tener los síntomas de la esquizofrenia bajo control, muchos pacientes indican tener problemas para concentrarse o rendir mentalmente, así como fatigarse y estar somnoliento durante gran parte del día. También se ha mencionado una disminución de la creatividad, de la energía y de las ganas de hacer cosas. Ello puede generar alteraciones en la vida familiar, en el ocio o en el trabajo.

6. Falta de efectividad
No todos los medicamentos funcionan igual en todos los casos, existiendo incluso la posibilidad de que algunos fármacos no presenten efectividad en el tratamiento de algunos casos o que el sujeto sea resistente a ellos. Si bien el procedimiento a seguir sería modificar la dosis o el fármaco, algunos pacientes pueden sentirse desesperanzados y abandonar el tratamiento.

7. Mejoría estable
Un motivo de que algunas personas dejen de medicarse, tanto en la esquizofrenia como en otros trastornos (por ejemplo, es común en la depresión o el trastorno bipolar), la ausencia más o menos estable de sintomatología evidente durante un periodo relativamente prolongado de tiempo. El sujeto puede pensar que ya ha superado el problema y que ha dejado de ser necesario tomar dicha medicación, habiéndose curado ya con la medicación previa. Desafortunadamente, los síntomas suelen terminar reapareciendo con el tiempo o con la presencia de estresores.

La importancia de la adherencia al tratamiento
Los motivos anteriormente descritos son múltiples y, en muchos casos, entendibles. Sin embargo, la esquizofrenia es un trastorno que genera una gran disfuncionalidad en la vida de quien la padece si no es tratada, tanto en la vida de la persona como en su entorno. Es necesario emplear un tratamiento continuado a lo largo del tiempo. Se hace imprescindible para los profesionales que traten a los pacientes con este trastorno realizar psicoeducación para el paciente y su entorno, explicando su funcionamiento, la necesidad de medicarse y presentan una elevada adherencia al tratamiento, los riesgos de no hacerlo y dar espacio a la expresión de miedos, dudas, pensamientos, sentimientos y preguntas.

Si un fármaco no fuera efectivo o tuviera efectos secundarios muy graves es posible buscar diferentes alternativas y sustancias que puedan sustituirla. También se dispone de presentaciones depot intramusculares que hace que muchos sujetos no tengan que tomar medicación de forma frecuente (cosa que solucionaría una aversión a un consumo de fármacos frecuente o al olvido real de las dosis y necesidad de tomar la medicación), e incluso algunos preparados como el palmitato de paliperidona que pueden inyectarse mensualmente (o en algunos casos incluso trimestralmente).

Ello no es óbice para que no se sigan investigando nuevos fármacos y alternativas que permitan hacer frente a este trastorno de una manera menos aversiva. De hecho, fue dicha preocupación la que generó la exploración e investigación que llevó al surgimiento de los antipsicóticos atípicos o de segunda generación, así como a numerosos avances que hoy en día se aplican.


TÓPICOS


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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.


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Urbason (Metilprednisolona): qué es, usos y efectos secundarios
Un potente antiinflamatorio que, a pesar de ser eficaz, puede tener efectos secundarios graves
Las inflamaciones son algo muy frecuente en una gran cantidad de lesiones y enfermedades, sean estas localizadas o generalizadas y pudiendo tener un origen muy diverso. Se producen como respuesta del sistema inmune a una lesión o infección, como reacción a la entrada en el organismo de partículas que el mismo identifica como nocivas sin serlo, siendo este el caso de las reacciones alérgicas o la causa de enfermedades como la esclerosis múltiple.

Si bien la mayoría de inflamaciones que tendremos a lo largo de la vida serán leves, lo cierto es que también existen procesos en que pueden poner en riesgo la vida de la persona, algo que ha generado la necesidad de crear fármacos que puedan parar el proceso inflamatorio. Uno de estos fármacos, relativamente conocido entre la población general, es el Urbason. Veamos qué es y cómo funciona.

Urbason: ¿qué es?
Se conoce como Urbason a un tipo de fármaco de tipo antiinflamatorio esteroide o corticosteroide cuyo principal principio activo es la metilprednisolona. Concretamente formaría parte de los glucocorticoides, los cuales funcionan reduciendo la actividad del sistema inmune de nuestro organismo y reduciendo la formación de sustancias que participan en reacciones inflamatorias.

Este fármaco, de gran potencia y siendo un corticoide de vida intermedia, tiene como principal mecanismo de acción la interacción de sus componentes con la membrana celular para conseguir generar un complejo que tras entrar en el núcleo contribuirá a incrementar o frenar la síntesis de proteínas inflamatorias.

También altera el metabolismo, a la par que inhibe la actuación de vitaminas como la D (algo que a su vez se vincula con disminuciones en los niveles de calcio). También funciona como vasodilatador, disminuye el uso de glucosa en la mayoría de sistemas y aumenta el nivel de azúcar en sangre. Actuaría de forma análoga a la cortisona, la hormona del estrés, producida en el eje

Este fármaco dispone de varias presentaciones y vías de administración, pudiendo emplearse por vía oral en forma de comprimido o en caso de urgencia también puede encontrarse a modo de inyectable por vía intravenosa o intramuscular.

Es importante asimismo tener en cuenta que, y especialmente cuando se ha empleado de manera continuada y en dosis altas, nunca debe dejarse el tratamiento de golpe puesto que puede generar síndromes de gran gravedad que incluso podrían provocar la muerte.

Indicaciones principales
Urbason es un fármaco de gran potencia y utilidad en el tratamiento de diversas condiciones, tanto para el tratamiento de enfermedades concretas como cuando se precisa de un tratamiento inmediato y de efectos rápidos (en el caso de inyectables, generalmente cuando existe peligro para la vida).

Por lo general estamos hablando de un uso focalizado al tratamiento de inflamaciones y alteraciones en las que se da una respuesta excesiva o peligrosa por parte del sistema inmune.

Entre las condiciones para las cuales se prescribe se encuentran el tratamiento de shocks anafilácticos, intoxicaciones, insuficiencia adrenal, lupus eritematoso o esclerosis múltiple. También resulta especialmente relevante en el tratamiento de edemas graves tales como los cerebrales (se usa por ejemplo en algunos accidentes de tráfico) o los de las vías aéreas, así como ante respuestas de rechazo a trasplantes.

En muchas ocasiones se emplea como fármaco para ayudar a la acción de la quimioterapia o incluso de la radioterapia. También se emplea en la enfermedad de Addison, en que existe una hipofunción de las glándulas suprarrenales que pueden generar insuficiencias graves.

Otras condiciones en que se ha mostrado de utilidad son las crisis asmáticas severas, la EPOC, distintos tipos de artritis y reumatismos, anemias y problemas de tipo hematológico, urticarias o procesos inflamatorios como la hepatitis o la neuritis óptica.

Efectos secundarios
Tal y como hemos dicho el Urbason, aunque de uso relativamente frecuente en diferentes condiciones y alteraciones, como corticosteroide que es se manifiesta como un fármaco de alta potencia que si bien puede ser de gran utilidad e incluso salvar vidas también puede llegar a generar diversos tipos de efectos secundarios.

Algunos de los más frecuentes son un aumento del apetito y el peso, así como hiperglucemia y aumentos colesterol y triglicéridos, junto con retención de líquidos, hirsutismo (crecimiento de vello), alteraciones cutáneas, enlentecimiento de la cicatrización y alteraciones de la distribución de las grasas. Otros habituales son la debilidad muscular, mareos, irregularidad en el ciclo menstrual, sudoración y fatiga.

También hay que tener en cuenta que se trata de un fármaco que disminuye la respuesta del sistema inmune, de tal manera que en ocasiones va a facilitar la aparición de infecciones y enfermedades.

Asimismo puede generar disfunción eréctil, problemas hormonales, alteraciones del crecimiento, arritmias, trombosis, convulsiones. problemas musculares, úlceras o glaucoma. También favorece la osteoporosis, al reducir como hemos comentado anteriormente los niveles de calcio.

Otro tipo de efectos secundarios que el Urbason puede generar son los de tipo psicológico: este fármaco es uno de los antiinflamatorios esteroideos o corticoesteroides que mayor propensión tiene a la hora de contribuir a la aparición de sintomatología, especialmente en la que se refiere a variaciones del estado de ánimo.

Generalmente relacionados con la dosis utilizada (por lo general se considera que son algo más frecuentes a partir de los 80 mg/día), algunos de los síntomas psíquicos que pueden aparecerson manía (siendo este el más frecuente), depresión o psicosis, así como también estados confusionales.

Su retirada súbita y no gradual puede generar también graves consecuencias, entre las cuales podemos encontrar dolores, problemas respiratorios, pérdida del apetito, hipotensión o hipoglucemia e incluso insuficiencia adrenocortical que podría llevar a la muerte.

Contraindicaciones
El uso de Urbason puede ser de utilidad, pero no todo el mundo puede tomarlo dado que puede resultar peligroso para determinados sectores de la población. Para empezar, lo tienen contraindicado todas aquellas personas que padezcan alergia a este tipo de fármaco.

Asimismo la elevación de la glucemia que produce puede resultar un peligro para aquellos pacientes que presenten diabetes, debiéndose tener en cuenta la necesidad de regular la insulina y medicación utilizadas. Tampoco deberían tomarlo o hacerlo con precaución y bajo recomendación médica aquellas personas con cardiopatías, pacientes que vayan a realizarse algún tipo de cirugía.

También lo tienen contraindicado o al menos debe consultarse en aquellas personas que presenten úlceras, infecciones o enfermedades como el herpes, glaucoma, alteraciones hepáticas o en caso de embarazo o lactancia.

Tampoco se recomienda (salvo caso de necesidad, como en urgencias médicas) en personas con trastornos del estado del ánimo o psicóticos. En caso de estar tomando otros fármacos, deberá consultarse con el médico la posibilidad de utilizarlo o no, ya que existen muchos medicamentos que interaccionan con Urbason.

Referencias bibliográficas:
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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.
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Iproniazida: usos y efectos secundarios de este psicofármaco

Era uno de los primeros fármacos antidepresivos, y fue descubierto por casualidad.

La depresión es un problema de salud mental que ha acompañado al ser humano a lo largo de toda la historia. Ya en la antigua Grecia se hablaba de la melancolía como una enfermedad con características semejantes a lo que hoy consideraríamos depresión, con un estado de ánimo triste y anhedónico. Siendo además en la actualidad uno de los trastornos más prevalentes a nivel mundial, la búsqueda de un tratamiento efectivo ha generado a lo largo del tiempo un gran interés y se ha tornado una necesidad cada vez más acuciante.

Son diversos los métodos empleados para tratar esta afección, entre ellos la psicofarmacología. Uno de los primeros fármacos que se encontraron y sintetizaron fue la iproniazida, de la cual hablaremos a lo largo de este artículo.


Iproniazida: el primer IMAO
La iproniazida es un psicofármaco clasificado como antidepresivo que tiene además una gran importancia a nivel histórico. Y es que es uno de los primeros antidepresivos sintetizados, junto a sustancias como la imipramina.

Su descubrimiento fue en realidad casual, por serendipia, dado que su síntesis estaba dirigida a encontrar un fármaco que fuera efectivo contra la tuberculosis. En los ensayos con pacientes con tuberculosis se observó que presentaba un efecto elevador del estado de ánimo, algo que con el tiempo sería analizado y aplicada a la población con trastornos depresivos (concretamente, su uso sería aprobado en 1958).

Este medicamento forma parte del grupo de los inhibidores de la monoaminooxidasa o IMAOs, los cuales afectan al sistema nervioso bloqueando la metabolización de determinados neurotransmisores. La iproniazida es de hechoel primero de los IMAOs comercializados y fue junto a otras sustancias derivadas de ella uno de los tratamientos de elección para pacientes con depresión. Su acción se da de manera inespecífica e irreversible, siendo sus efectos continuados durante al menos quince días.

A nivel de efectos, su aplicación genera un aumento en el estado de ánimo y en la activación, siendo eficaz en el tratamiento de la sintomatología depresiva y disminuyendo la inactividad y pasividad de quienes la utiliza.

Sin embargo la observación de la existencia de fuertes efectos secundarios que ponían en riesgo la salud de quienes lo consumían, entre los que destacan problemas hepáticos severos y favorecimiento de la hipertensión arterial hasta niveles peligrosos, y la generación de nuevos fármacos que no suponen tanto riesgo han hecho que los IMAOs y especialmente los primeros o clásicos sean desplazados y usados sólo cuando otros fármacos fallan. En el caso de la iproniazida en cuestión, en la actualidad ha dejado de comercializarse dado que posee una gran peligrosidad a nivel de toxicidad, pudiendo hallarse solo en algunos países.


Mecanismo de acción
La iproniazida es, como hemos dicho, un inhibidor de la monoaminooxidasa o IMAO de tipo irreversible no selectivo. Como IMAO que es ejerce sus efectos a nivel cerebral mediante la inhibición de una enzima, la MAO, cuya principal función es degradar las monoaminas mediante oxidación con el fin de eliminar el exceso de neurotransmisores generado por las neuronas monoaminérgicas (que son aquellas que generan dopamina, noradrenalina y serotonina) en el espacio sináptico así como también la tiramina.

Así, inhibiendo la monoaminooxidasa no se produciría dicha destrucción de monoaminas, con lo que los niveles de serotonina, noradrenalina y dopamina aumentarán en el cerebro. La acción de la iproniazida, pues, sería fundamentalmente de tipo agonista respecto a las monoaminas, favoreciendo su acción. Ello generará una mejoría de la sintomatología depresiva al aumentar neurotransmisores que en la depresión mayor se encuentran disminuidos.

Hay que tener en cuenta que existen dos tipos de monoaminooxidasa: la MAO A y la MAO B. La primera se vincula y se encarga de metabolizar y destruir el exceso de noradrenalina, serotonina y tiramina, siendo las dos primeras las sustancias más vinculadas a la depresión. La MAO B hace lo propio con la dopamina, influyendo también al igual que la anterior en la tiramina.

El hecho de que se considera irreversible y no selectivo implica que la iproniazida actúa en todo tipo de MAO, de tal manera que no es solo que la monoaminooxidasa se reduzca sino que es completamente destruida de nuestro cerebro hasta que este vuelva a sintetizar más (algo que puede tardar alrededor de quince días). Pero lo cierto es que la enzima en cuestión resulta de utilidad al cerebro, y el aumento de neurotransmisores que genera (especialmente en el caso de la tiramina y noradrenalina) puede tener peligrosos efectos sobre la salud.

Principales indicaciones

La iproniazida es un fármaco que en la actualidad no se comercializa debido al elevado nivel de riesgo que supone a nivel de toxicidad a nivel hepático y a la existencia de fármacos mucho más seguros y con menos efectos secundarios.

Sin embargo, la principal indicación de este fármaco era en los casos de depresión mayor, siendo eficaz en el tratamiento de la sintomatología a nivel de estado de ánimo (el cual contribuía a aumentar) y anhedonia y sensación de fatiga. Asimismo, ocasionalmente también ha sido empleado con el propósito para el cual de hecho fue inicialmente pensado: el tratamiento de la tuberculosis.

Efectos secundarios, contraindicaciones y riesgos

La iproniazida es un fármaco que tiene gran utilidad en el tratamiento de la sintomatología depresiva, pero que como hemos comentado ha sido retirado del mercado debido a su alto nivel de riesgo y a los efectos secundarios que tiene. En este sentido, algunos de los efectos secundarios más conocidos de la iproniazida, que de hecho comparte con algunos otros IMAOS, son los siguientes.

En primer lugar y uno de los principales motivos de su retirada es el elevado nivel de toxicidad que este fármaco puede llegar a tener para el hígado. Asimismo otro de los posibles efectos secundarios que mayor riesgo tiene es el de la aparición de crisis hipertensivas severas ante su interacción con un gran número número de alimentos ricos en proteínas, que puede llegar a contribuir incluso a la aparición de derrames cerebrales o problemas cardíacos y vasculares con potencial mortal.

También puede generar problemas renales. Otros síntomas de menor gravedad son la aparición de insomnio, aumento de peso y dificultades o imposibilidad de alcanzar el orgasmo, la eyaculación retardada o la disminución de líbido.

Todo ello hace que haya determinados tipos de población que tienen totalmente contraindicada esta medicación. En este sentido destacan todas aquellas personas que padecen de base algún tipo de patología o daño hepático, así como aquellas con cardiopatías o con problemas renales. Personas que precisen de una dieta hiperproteica también lo tienen altamente contraindicado. Personas con diabetes y celíacos tampoco deberían tomar este fármaco. La iproniazida y otros IMAOS tienen un elevado nivel de interacción con otros fármacos, estando también contraindicada su uso con otros antidepresivos y otros fármacos.

Referencias bibliográficas:




    • Manzanares, J. y Pita, E. (1992), Fármacos antidepresivos. Rev. Asoc. Esp. Neuropsiq., 13 (supl. 1).
    • López-Muñoz, F. y Álamo, C. (2007). Historia de la psicofarmacología. La revolución de la psicofarmacología: sobre el descubrimiento y desarrollo de los psicofármacos. Tomo II. Madrid. Editorial Médica Panamericana.
    • Salazar, M.; Peralta, C.; Pastor, J. (2011). Manual de Psicofarmacología. Madrid, Editorial Médica Panamericana.
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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.
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Nolotil (metamizol) uso, características y efectos secundarios.
Traumatismos, cortes, inflamaciones, infecciones… Son muchos los elementos que pueden causarnos diferentes tipos y grados de dolor físico. Pese a que la percepción del dolor es en principio adaptativa ya que nos permite saber que algo no funciona correctamente o nos está causando algún daño (pudiendo intentar hacer algo para evitarlo), lo cierto es que por lo general es extremadamente aversivo, siendo algo que la mayoría de personas preferiría evitar experimentar.

Además el dolor, cuando es intenso, puede ser altamente invalidante hasta el punto de impedir nuestra funcionalidad, especialmente cuando se debe a elementos sobre los que no tenemos un control directo o que precisan de un proceso para poder curarse o solucionarse. Afortunadamente, a lo largo de la historia se han ido descubriendo y posteriormente sintetizando diferentes sustancias que disminuyen la nocicepción o percepción de dolor. Uno de ellos es el fármaco conocido como Nolotil, del que vamos a hablar en este artículo.

¿Qué es y para qué sirve el Nolotil?
El nombre de Nolotil hace referencia al nombre comercial de un fármaco relativamente habitual en nuestro país, cuyo principal principio activo es el metamizol o dipirona. El mecanismo de acción de este medicamento no es por entero conocido, si bien se ha observado inhibir la síntesis de prostaglandinas que contribuyen a la activación de los nociceptores.

Se trata de un fármaco cuyo uso más conocido es el que proviene de sus efectos como analgésico, disminuyendo y tratando el dolor propio de diferentes enfermedades y alteraciones. Además de ello posee también efecto antipirético, siendo capaz de reducir la fiebre, y antiespasmolítico (es decir que también tiene efecto reduciendo los espasmos musculares y el dolor asociado a estos). Aunque técnicamente no es un antiinflamatorio, en dosis supraterapéuticas ha manifestado ser de utilidad para calmar y rebajar inflamaciones, si bien la dosis empleada para ello puede generar toxicidad.

Está disponible en una gran variedad de posibles presentaciones entre las cuales destaca la más habitual: en forma de cápsula dura para tomarse por vía oral. Sin embargo también puede encontrarse en forma de ampolla (también para utilizarse por vía oral). Además existe presentación como inyectable por vía parenteral (si bien sólo debe utilizarse en casos muy concretos) o incluso por vía anal en forma de supositorio.

El Nolotil posee mayor potencia que otros de uso habitual como el paracetamol o el ibuprofeno, pero por contra también tiene mayores riesgos y efectos secundarios e incluso tóxicos que ha hecho que en algunos países se haya prohibido.

Indicaciones principales
Tal y como hemos dicho el Nolotil tiene propiedades analgésicas, antipiréticas, antiespasmódicas e incluso en determinadas dosis antiinflamatorias, pudiendo emplearse para el tratamiento de una gran variedad de trastornos.

Lo más habitual es su uso en dolores agudos, especialmente en el caso de aquellos propios de intervenciones quirúrgicas o derivados de traumatismos. También se emplea para aliviar dolores de tipo oncológico (es decir generados por tumores) o en cólicos y espasmos de origen visceral o muscular. No es infrecuente también su uso a nivel odontológico.

Pese a su poder para bajar la fiebre, suele usarse únicamente cuando esta no se rebaja con otros fármacos antitérmicos. Si bien a nivel popular se utiliza en ocasiones para la cefalea o dolor de cabeza, no resulta recomendable debido a los riesgos que supone.

Efectos secundarios
Nolotil es un fármaco que goza de gran popularidad y que ha manifestado una gran utilidad en el tratamiento del dolor provocado por diversas enfermedades y condiciones, mas sin embargo también puede generar una serie de efectos secundario e incluso tóxicos que hay que merece la pena tener en cuenta.

Entre los más frecuentes podemos encontrar un probable descenso de la tensión arterial, pudiendo llegar a generar hipotensión. También pueden aparecer reacciones alérgicas y erupciones, molestias gastrointestinales y dificultades respiratorias.

Más graves y menos frecuentes son la presencia de arritmias, reacciones alérgicas graves (pudiendo llegar a shock anafiláctico), leucopenia o disminución de glóbulos blancos en sangre, necrólisis tóxicas en la piel, dificultades en la micción, inflamación renal, hemorragias en el tubo digestivo o incluso que la anteriormente citada tensión arterial baje de una forma brusca y extrema (algo que reviste gran peligro).

Uno de los posibles efectos secundarios de su administración y una de las causas que se haya prohibido en países como Reino Unido o Estados Unidos es la agranulocitosis (alteración en que uno de los tipos de leucocitos o glóbulos blancos se reducen de tal manera que el cuerpo está mucho más frágil, pudiendo conducir a la muerte). Otro posible efecto secundario con potencial mortal podría ser una sepsis o infección generalizada, así como el fallo renal.

Contraindicaciones
Además de los anteriores efectos secundarios y en parte en base a ellos es necesario tener en cuenta que el Nolotil presenta también contraindicaciones o situaciones en que debe analizarse detenidamente la idoneidad de su uso.

Para empezar deben evitar tomar Nolotil todas aquellas personas que presenten hipersensibilidad o alergia a este fármaco o a otros de composición semejante, incluyendo obviamente todos aquellos que hayan presentado agranulocitosis derivada de aplicaciones previas del mismo. También personas con asma de cualquier tipo, reacciones alérgicas por analgésicos, casos de porfiria hepática intermitente aguda, problemas de médula ósea o sangre o problemas genéticos relativos a la glucosa 6-fosfato-deshidrogenasa.

Se encuentra también contraindicada durante el embarazo y en la etapa de lactancia, tanto en la madre como en el menor. No es recomendable tampoco en personas de edad muy avanzada o con problemas renales o hepáticos, así como en aquellos con la tensión arterial ya de por sí baja o inestable. También se recomienda precaución en el uso de vehículos o maquinaria peligrosa si se emplea en dosis elevadas, y debe evitarse su consumo junto a alcohol u otras drogas (teniendo precaución también en el caso de fármacos).

Referencias bibliográficas:
  • Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (2011).Prospecto: Información para el usuario. Nolotil 575 mg cápsulas duras. Metamizol magnésico. [Online]. Disponible en: https://www.aemps.gob.es/cima/pdfs/es/ft/47633/47633_ft.pdf
  • Buitrago-González, T.P.; Calderón-Ospina, C.A. y Vallejos-Narváez, A. (2014).Dipirona: ¿Beneficios subestimados o riesgos sobredimensionados? Revisión de la literatura. Revista Colombiana de Ciencias Químico-Farmacéuticas, 43 (1). Bogotá.
https://psicologiaymente.com/salud/nolotil
 
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Hidroxil (B1-B6-B12): funciones y efectos secundarios de éste fármaco.

Nuestro cuerpo es un conglomerado de sistemas y órganos integrados y organizados de forma efectiva y eficaz, siendo su funcionamiento lo que permite nuestra supervivencia y adaptación al medio. Para dicho funcionamiento no es ni autosuficiente ni eterno, necesitando nuestro organismo de gran cantidad de oxígeno y nutrientes. Entre estos últimos podemos encontrar diversos tipos de vitaminas, esenciales para gran cantidad de sistemas corporales.

La ausencia de dichas vitaminas, sea por no integrar bastantes en nuestra alimentación o producto de alguna patología, puede tener consecuencias de severidad variable y en múltiples sistemas corporales, como por ejemplo debilidad, aparición de inflamaciones o dolor.

Afortunadamente contamos con diferentes fármacos y complementos que pueden ayudar a intentar suplir una carencia concreta o a incrementar las cantidades de algunas vitaminas presentes en el organismo que pueden tener un efecto beneficioso en alguna dolencia. Es el caso del Hidroxil B1-B6-B12, del cual vamos a hablar continuación.

¿Qué es el Hidroxil B1-B6-B12?
Recibe el nombre de Hidroxil B1-B6-B12 un medicamento compuesto por diferentes vitaminas del grupo B y que se emplea fundamentalmente en estados de carencia de dichas vitaminas o ante determinados problemas vinculados al dolor y la inflamación de vías nerviosas, estando indicado para personas mayores de doce años de edad.

Concretamente estamos ante un fármaco en formato de comprimidos recubiertos con película que está principalmente formado por las vitaminas B1, B6 y B12, también conocidas como tiamina hidrocloruro (B1), piridoxina hidrocloruro (B6) y cianocobalamina (B12). Este conjunto de vitaminas se asocia al metabolismo de los carbohidratos y proteínas, estando especialmente asociado al que se produce en el sistema nervioso y neuroendocrino.

Así, este fármaco tiene cierto efecto modulador que puede alterar el funcionamiento de diversos neurotransmisores además de propiciar la salud y la transmisión de la información (también se relaciona con la síntesis de la mielina que recubre las neuronas) de dichos sistemas. Asimismo su asociación tiene una influencia sobre la transmisión de la información relacionada con la percepción del dolor a nivel tanto talámico como espinal, algo que hace que tenga la propiedad de mediar y reducir el nivel de dolor de diversas condiciones.

¿Para qué es? Principales funciones
El Hidroxil B1-B6-B12 es como acabamos de mencionar un fármaco que tiene repercusiones a nivel de las vías nerviosas, estando muchas de las indicaciones principales de este fármaco profundamente vinculadas a dicho sistema.

Principalmente, se considera que el Hidroxil está especialmente indicado en aquellas personas que tienen algún tipo de anemia con deficiencia de vitaminas del grupo B, además de en aquellas condiciones en que se presente un estado de convalecencia y debilidad. Otra posible indicación es la presencia de astenia, generalmente relacionada con la anterior sintomatología, y fatiga.

También está indicado para el dolor de la lumbalgia o la ciática, así como a los efectos derivados de la neuritis y otras neuropatías, dados sus efectos en la modulación del dolor y de diferentes neurotransmisores.

Efectos secundarios y contraindicaciones
El Hidroxil B1-B6-B12 es un compuesto formado principalmente por vitaminas del grupo B, algo que puede parecer en principio algo totalmente sano e inocuo. Sin embargo, un exceso de estas vitaminas en nuestro organismo puede ser perjudicial y tener efectos secundarios severos.

Como síntomas secundarios se han observado que el fármaco puede causar mareo y agitación, cefaleas, así como conjuntivitis, hormigueos, somnolencia o insomnio, diarrea o pérdida de apetito. Puede generar cambios en la coloración de la orina, debido a que su alto contenido en vitaminas puede generar problemas o alteraciones renales o hepáticas. También fotosensibilidad con erupciones cutáneas, pudiendo aparecer dermatitis.

En algunos casos se ha observado trombocitopenia púrpura (déficit de plaquetas en sangre que dificulta la coagulación) o la aparición de rosácea fulminans, además de aumentar el riesgo de contraer gota. En el caso de la vitamina B6, un consumo excesivo o muy prolongado puede ser tóxico a nivel neuronal, pudiendo generar neuropatía sensorial periférica (una condición vinculada a la pérdida de sensibilidad de las extremidades y de los nervios periféricos).

Puede generar también alteraciones en la memoria, problemas autoinmunes y efectos en el sistema visual. También se ha vinculado con la aparición de rosácea fulminans, además de aumentar el riesgo de contraer gota y poder generar dificultades respiratorias. En casos raros podría aparecer una reacción alérgica grave o generar un descenso del ácido fólico.

Debido a estos efectos secundarios, el Hidroxil cuenta con diversas condiciones en que está contraindicada. El primero de ellos y tal vez el más obvio es el caso de todas aquellas personas que presenten alergia o hipersensibilidad a alguno de sus componentes. Además de ello tampoco deben tomarla aquellas personas con problemas renales o hepáticos, así como tampoco la población de menos de doce años de edad.

Resulta totalmente contraindicado también en el embarazo y lactancia, dado que puede alterar la función nerviosa y la propiocepción del feto, generar dependencia en él o incluso cortar la lactancia. Si se toma alguna otra medicación de manera continuada debe consultarse al médico la idoneidad de seguir tomando este fármaco, debido a que presenta numerosas interacciones con diferentes grupos de medicamentos. También debe evitarse el consumo conjunto con alcohol u otras drogas.

Referencias bibliográficas:
TÓPICOS

https://psicologiaymente.com/autores/oscar-castillero-mimenza
Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.

https://psicologiaymente.com/salud/hidroxil
 
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Memantina: Uso y efectos secundarios de este fármaco.

La memantina es un fármaco que pertenece al grupo de los antagonistas de los receptores NMDA. Como tal, sirve para el tratamiento de las manifestaciones del Alzheimer, tanto en nivel moderado como grave, aunque también se utiliza para tratar distintos tipos de dolor crónico.

A continuación veremos con más detalle qué es y para qué sirve la memantina, así como sus indicaciones y algunos de sus principales efectos adversos.

¿Qué es la memantina?
La memantina es un fármaco utilizado para tratar la pérdida de memoria. Se trata de un medicamento especialmente usado en síntomas de Alzheimer. Este último es un trastorno neurodegenerativo relacionado con distintas alteraciones en los receptores N-metil-D-aspartato (NMDA), que se ubican en las células del asta posterior de la médica espinal y están encargados de regular la transmisión de señales eléctricas en el cerebro.

La actividad de dichos receptores es fundamental en procesos cognoscitivos como la memoria y el aprendizaje, así como en la plasticidad neural y algunos estados de dolor. Por lo mismo, una actividad alterada de estos receptores, especialmente cuando se debe a la presencia de niveles altos de toxicidad, está relacionada con enfermedades como el Alzheimer.

¿Para qué sirve este fármaco?
La memantina sirve precisamente como un antagonista de los receptores NMDA. Esto quiere decir que bloquea o detiene el estrés oxidativo asociado con el aumento de una molécula llamada “péptido amiloide B”, que es el mecanismo asociado a la pérdida de funciones cognitivas.

Dicho de otra manera, aunque la memantina no tiene la capacidad de revertir definitivamente enfermedades neurodegenerativas, sí tiene funciones neuroprotectoras y potenciadoras de distintas funciones cognitivas. Es así ya que protege las conexiones cerebrales de los niveles tóxicos de calcio, cuestión que a su vez permite transmitir señales de manera regular entre las neuronas.

Además, la memantina no sólo se utiliza en las manifestaciones del Alzheimer sino que puede aliviar algunos dolores neuropáticos, psicosomáticos y dolores crónicos, algunos tipos de neuralgia y traumatismo, lesiones de la médula espinal, entre otros.

Administración y dosis recomendada
La memantina se administra por vía oral. Se comercializa en presentación de comprimidoscuya toma puede acompañarse de alimentos, pero no necesariamente. Los comprimidos están recubiertos con una película, y contiene 10 mg de principio activo, que es el hidrocloruro de memantina (equivalente a 8.31 mg de memantina).

Otros componentes químicos que se encuentran en este medicamento son celulosa microcristalina, estearato de magnesio, croscarmelosa sódica y sílice coloidal anhidra. Así mismo, la película que cubre el comprimido está hecha de alcohol polivinílico, dióxido de titanio, talco, macrogol 3350 y óxido de hierro amarillo.

Tal como ocurre con otros medicamentos, la recomendación general es tomarla a la misma hora diariamente. Además, suele tomarse en una dosis inicial pequeña, que aumenta de manera gradual con el transcurso de las semanas.

La primera semana se recomienda la toma de medio comprimido de 10 mg. al día. A partir de la segunda semana se recomienda doblar la dosis hasta alcanzar dos comprimidos de 10 mg. en la cuarta semana. Esta utima dosis se mantiene a lo largo del tratamiento.

Lo anterior son indicaciones generales que pueden variar según la recomendación del especialista, dado que siempre es el personal médico el que debe indicar cómo tomar este fármaco tras una consulta personalizada.

Contraindicaciones
Es necesario tomar precauciones en caso de antecedentes de crisis epilépticas y en caso de haber sufrido un ataque al miocardio recientemente.

Así mismo en el caso de tener enfermedades cardiacas o hipertensión no controlada, en insuficiencia renal y en caso de estar tomando otros fármacos con propiedades antagonistas de los receptores NMDA. Esto últimos son aquellos utilizados para el tratamiento de Parkinson, como la amantadina; la ketamina, que se utiliza como anestésico, o el dextrometorfano, utilizado para la tos.

En el mismo sentido es necesario tomar precauciones ante el cambio radical de dieta, por ejemplo de carnívora a vegetariana, y es importante evitar la toma durante el embarazo y el periodo de lactancia.

Efectos adversos
Los efectos adversos de la memantina suelen dividirse según si son frecuentes, poco frecuentes o si se presentan en casos muy puntuales. Cada una de estas divisiones se corresponde también con el nivel de gravedad de los efectos.

1. Efectos frecuentes
Suelen presentarse en 1 a 10 personas de cada 100, e incluyen síntomas como dolores de cabeza, funcionamiento alterado del hígado, estreñimiento, alteración del equilibrio, vértigo, falta de aliento, hipertensión e hipersensibilidad al medicamento.

2. Efectos poco frecuentes
Se presentan en 1 a 10 de cada 1000 personas y se trata de manifestaciones como cansancio, alucinaciones, vómitos, alta probabilidad de infecciones por hongos y coagulación en el sistema venoso (es decir, desarrollo de trombosis), insuficiencia cardiaca y alteración de la marcha.

3. Efectos muy raros
Menos de 1 persona de cada 10 000 puede presentar convulsiones. Además, la toma de este medicamento durante el tratamiento de Alzheimer se ha relacionado con inflamación de páncreas, desarrollo de hepatitis, reacciones psicóticas, depresión e ideación suicida y/o su***dio.

No obstante, la relación entre la memantina y estos últimos efectos adversos no se ha investigado de manera suficiente, por lo que la información sobre su posible implicación es incierta.

Referencias bibliográficas:
  • AEMPS. (2013). Prospecto: información para el usuario. Memantina Tarbis 10 mg comprimidos recubiertos con película EFG. Recuperado 11 de octubre de 2018. Disponible en https://cima.aemps.es/cima/dochtml/p/78230/P_78230.html.
  • Neira, F. y Ortega, J.L. (2004). Antagonistas de los receptores glutamatérgicos NMDA en el tratamiento del dolor crónico. Revista de la Sociedad Española del Dolor, 11(4): 2010-222.
  • Tanovic, A. y Alfaro, V. (2006). Neuroprotección con memantina (antagonista no competitivo del receptor NMDA-glutamato) frente a la excitotoxicidad asociada al glutamato en la enfermedad de Alzheimer y en la demencia vascular. Revista de neurología, 42(10): 607-616.
https://psicologiaymente.com/psicofarmacologia/memantina
 
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Clexane: Funciones y efectos secundarios de este medicamento

Los problemas cardiovasculares son probablemente junto con las demencias y el cáncer algunos de los que mayor preocupación causan a la mayoría de la población, dada la importancia que tiene para nuestra supervivencia el hecho de que la sangre circule con normalidad por nuestro organismo y que el corazón la siga bombeando de la forma habitual.

Y es un hecho que una gran proporción de personas de edad avanzada padecen algún tipo de problema cardíaco o circulatorio.

Sin embargo, los avances médicos han permitido el desarrollo de fármacos que permiten tratar algunos de estos tipos de patología, como son el archiconocido Sintrom o bien el fármaco sobre el que vamos a hablar a lo largo de este artículo: Clexane.

¿Qué es el Clexane?
Denominamos Clexane a un tipo de fármaco de tipo anticoagulante de gran uso en el ámbito médico, como respuesta a problemas cardiovasculares complejos que ponen en peligro la vida de quien los padece.

Como anticoagulante, su función es la de reducir la coagulación de la sangre, que si bien por lo general resulta positiva ya que ayuda a detener hemorragias en casos concretos en que este proceso se da en gran medida puede llegar a dificultar el paso de la sangre e incluso provocar un trombo. Así, gracias al anticoagulante es posible mantener la sangre circulando de manera líquida y fluida y disminuyendo el riesgo.

Clexane es un medicamento cuyo principio activo es la enoxaparina sódica, siendo una de las heparinas de bajo peso molecular (las cuales se derivan de las no fraccionadas) que se obtiene de las tripas del cerdo. Se trata de un fármaco cuya principal vía de administración es la endovenosa o subdérmica, comercializándose como jeringuillas preparadas. No se aplica por vía oral ni intramuscular.

Sus funciones
Clexane es un fármaco ampliamente utilizado en diversas condiciones en las cuales puede llegar a salvar vidas, ya sea como tratamiento o incluso como prevención de algunas situaciones con potencial mortal, siendo todas ellas vinculadas al sistema cardiovascular.

Una de las principales indicaciones se da en el tratamiento de la trombosis venosa profunda, una alteración en la cual los coágulos de sangre taponan una de las venas del organismo, generalmente dirigida a las extremidades, y que puede generar importantes consecuencias (incluyendo una posible embolia pulmonar).

Asimismo no solo durante el tratamiento sino también como prevención en casos de alto riesgo o para evitar que vuelva a ocurrir en personas que ya lo han padecido con anterioridad.

También se emplea en el tratamiento de síndromes coronarios agudos, incluyendo algunos tipos de anginas de pecho e infartos, por lo general como paso previo o de manera conjunta con otras medicaciones, así como en la prevención de recidivas. Asimismo, se ha demostrado eficaz para prevenir posibles trombos en casos de insuficiencia respiratoria o cardíaca, así como en personas en coma o que deben mantenerse en posición yacente (por ejemplo en una convalecencia larga) e incluso para prevenir posibles coágulos en el caso de pacientes que deben someterse a hemodiálisis.

Hay que tener en cuenta que Clexane puede ser utilizado a cualquier edad a partir de la adultez, incluyendo edades muy avanzadas si es necesario. Sin embargo no hay suficientes estudios llevados a cabo con menores que permitan conocer si se trata un fármaco seguro, siendo un fármaco que solo debe aplicarse a mayores de edad.

Posibles efectos secundarios
Este fármaco ha demostrado ser de gran utilidad y ha salvado múltiples vidas desde su descubrimiento, pero al igual que todos los fármacos no está exento de riesgos y efectos secundarios.

En primer lugar, y al igual que ocurre con el resto de anticoagulantes, debe tenerse en cuenta que el hecho de que se impida la coagulación de la sangre hace que puedan surgir hemorragias de diversa severidad por cualquier parte del cuerpo.

Heridas y golpes en apariencia simples pueden llegar a sangrar o generar hematomas internos de gran relevancia, debiendo ser necesario tener mucha precaución al respecto. Este es el síntoma secundario más frecuente. Asimismo y derivado de ello también puede aparecer anemia por pérdida de sangre. En ocasiones estas hemorragias pueden ocurrir a nivel intestinal, espinal o intracraneal, siendo su peligrosidad mucho mayor.

También se ha observado la posibilidad de aparición así como de edemas, eritemas, alopecia dermatitis o incluso fiebre. Se ha observado que en algunos casos aumenta excesivamente el nivel de potasio en sangre o llegar a incluso triplicarse los niveles de transaminasas y otras enzimas hepáticas. Más graves son los casos de necrosis o vasculitis cutánea, lesiones hepáticas o trombocitopenia que puede paradójicamente generar trombosis (algo que hace necesario hacer periódicamente un recuento de plaquetas del sujeto).

Contraindicaciones
Como hemos visto pese a ser de gran utilidad el Clexane también puede generar peligrosos efectos, los cuales pueden llegar a poner en riesgo a determinados sectores de la población. Es por ello que cuenta con diversas contraindicaciones.

Una de estas contraindicaciones puede hallarse en los casos de aquellas personas que tengan alergia o hipersensibilidad tanto a este fármaco como a otras heparinas, así como a sus múltiples componentes. Está totalmente contraindicado en personas con riesgo alto de hemorragia, incluyendo personas que van a someterse a cirugías o van a realizarse punciones, personas con úlceras, aneurismas o problemas vasculares en que las paredes de los vasos sean más frágiles.

También en personas con trombocitopenia inducida por heparina. Personas con niveles altos de potasio en sangre deberían evitarlo, y tampoco resulta recomendable en insuficiencia renal grave (con la posible excepción de su uso en diálisis), así como debería extremarse la precaución en el caso de insuficiencia hepática.

Tampoco se recomienda, o al menos se requiere gran precaución y control, en pacientes diabéticos debido a las alteraciones adrenales que puede provocar. Pacientes con infrapeso o con obesidad deben ser monitorizados, ya que existe mayor riesgo de hemorragia o trombos. Debe consultarse el uso de Clexane en personas que toman otros fármacos. Finalmente, y como hemos indicado con anterioridad, dado que no hay datos al respecto está contraindicado en niños.

Referencias bibliográficas:
TÓPICOS

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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.
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Amitriptilina: Uso, efectos secundarios y precauciones

Aunque la tendencia actual se dirija hacia la utilización mayoritaria de los antidepresivos inhibidores de la recaptación de serotonina (ISRS) en detrimento de los antidepresivos tricíclicos, todavía quedan algunos de estos últimos que gozan de gran popularidad.

Uno de estos fármacos es la amitriptilina, un antidepresivo muy utilizado en casos de depresión mayor, y con una gran variedad de usos tanto en el tratamiento como en la prevención de ciertas alteraciones tanto físicas como psicológicas.

¿Qué es la amitriptilina?
La amitriptilina, conocida comercialmente bajo algunos nombres como Elavil, Sarotex o Tryptizol, es un fármaco de acción antidepresiva. Concretamente, la amitriptilina se categoriza dentro de los antidepresivos tricíclicos. Este tipo de medicación antidepresiva se distingue por inhibir, en las mismas cantidades, la recaptación de serotonina y norepinefrina.

Por lo tanto, al inhibir la recaptación de estos neurotransmisores, los niveles de estos aumentan. De esta manera, la amitriptilina facilita el mantenimiento de un equilibrio emocional, el cual se ve disminuido en los trastornos depresivos, entre muchos otros.

A diferencia de otros antidepresivos tricíclicos, la amitriptilina presenta prácticamente la misma eficacia que los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, por lo que se ha constituido como uno de los antidepresivos más utilizados dentro de su categoría.

¿En qué afecciones se utiliza?
Al igual que otros de sus muchos equivalentes antidepresivos, la amitriptilina se administra para el tratamiento de una gran variedad de trastornos mentales.

Uno de los principales focos de administración es el tratamiento de los síntomas del trastorno depresivo mayor. Este trastorno emocional se caracteriza por provocar profundos sentimientos de angustia y tristeza, unidos a una baja autoestima y que permanecen a largo plazo, provocando grandes interferencias en la vida cotidiana de la persona.

Además, también presenta una comprobada eficacia en el tratamiento de algunos trastornos de ansiedad tales como fobias específicas o trastornos de pánico y en el tratamiento de trastorno por déficit de atención e hiperactividad o trastorno bipolar en aquellos pacientes que no presentan mejoras con los tratamientos tradicionales para estas afecciones.

En mucha menor medida, este antidepresivo tricíclico se administra en algunos casos de trastornos de la alimentación y la neuralgia postherpética, una enfermedad causada por ciertos tipos de herpes y que ocasiona grandes sensaciones de dolor en aquel que la padece.

Muchas investigaciones han demostrado que la amitriptilina puede resultar particularmente útil en la prevención de ciertas dolencias o afecciones. Entre algunas de ellas se incluyen:

  • Migrañas.
  • Cefaleas por tensión.
  • Dolor neuropático por fibromialgia.
  • Neuropatía diabética.
  • Enuresis nocturna.
  • Insomnio.
  • Algunos síntomas de psicosis como la esquizofrenia o la depresión psicótica.
¿Cómo se administra?
Por el momento, la amitriptilina solamente está disponible en tabletas para su consumo por vía oral. Aunque habitualmente se recomienda administrarla en cuatro tomas diarias y aproximadamente siempre a la misma hora, el médico pertinente puede indicar la manera de consumo que más crea conveniente para cada paciente en concreto.

A continuación, describimos una serie de indicaciones genéricas que si bien pueden ser utilizadas como guía para su consumo, siempre es más conveniente seguir las instrucciones del facultativo o en su defecto acudir a él ante la aparición de cualquier duda acerca del tratamiento.

Por regla general, y como ocurre con la mayoría de medicación psiquiátrica, es recomendable iniciar el tratamiento con amitriptilina de manera progresiva, empezando por dosis más reducidas y distanciadas que se incrementan con el progreso del tratamiento.

Es necesario recalcar que, aunque en un principio el paciente no experimente los efectos esperados, este nunca debe alterar o modificar las dosis recomendadas, ni por exceso ni por defecto. Esto significa que en ningún caso el paciente puede tomarse la libertad de tomar más o menos medicación de la recomendada.

En aquellos casos en los que el paciente decida alterar la dosis o dejar de tomar la amitriptilina, este puede experimentar síntomas propios del síndrome de abstinencia, así como cambios graves y bruscos del estado de ánimo o problemas de sueño entre muchos otros.

¿Qué efectos secundarios puede provocar este fármaco?
Debido a sus efectos como antidepresivo tricíclico inhibidor de la recaptación de serotonina y norepinefrina, la amitriptilina puede llegar a ocasionar una gran variedad de efectos secundarios en en el paciente. A pesar de esto, este no deberá dejar de consumirla por su cuenta, sino que es recomendable que, ante la aparición frecuente o prolongada de estos informe al médico que las recetó, para así ajustar o cambiar el tratamiento.

En el listado de efectos secundarios más frecuentes pero poco graves se encuentran:

  • Sensación de debilidad, falta de energía o cansancio.
  • Somnolencia.
  • Náuseas.
  • Vómitos.
  • Cefaleas.
  • Alteraciones del sueño y/o pesadillas.
  • Sensación de confusión.
  • Sequedad bucal.
  • Problemas de visión o visión borrosa.
  • Alteraciones gástricas con o sin estreñimiento.
  • Problemas de micción.
  • Sensación de dolor o entumecimiento de manos o pies.
  • Hiperhidrosis o aumento de la sudoración.
  • Alteraciones en el deseo y/o el rendimiento sexual.
  • Alteraciones en el apetito y cambios en el peso.
Aunque no es lo habitual, la amitriptilina también puede provocar una serie de efectos secundarios graves, los cuales pueden comprometer el estado de salud de la persona. Si alguno de ellos aparece, el paciente deberá contactar con el médico de manera inmediata. Entre ellos se incluyen:

  • Mareos y desmayos.
  • Habla lenta o dificultades en el habla.
  • Debilidad o adormecimiento de un brazo o pierna completo.
  • Dolor o presión pectoral fuerte.
  • Alteraciones o inestabilidad del ritmo cardíaco.
  • Alteraciones cutáneas como sarpullidos o urticarias.
  • Coloración de la piel con un tono amarillento.
  • Temblores incontrolables.
  • Espasmos en mandíbula, cuello o espalda.
  • Derrames o cardinales sin causa aparente.
  • Convulsiones.
  • Alucinaciones.
¿Qué precauciones se deben tomar con su consumo?
Antes de iniciar el tratamiento con amitriptilina, el paciente deberá informar de cualquier condición especial de salud en la que se encuentre, sobre todo si esta está relacionada con cualquier tipo de afección cardíaca.

Además, también se deberá comunicar si el paciente posee cualquier tipo de alergia, así como el consumo de algún otro tipo de medicación, suplemento dietético o vitamínico. Finalmente, existen algunos compuestos realizados con hierbas naturales, tales como la hierba de San Juan, que también pueden interferir con el tratamiento.

En aquellas pacientes embarazadas con previsión de embarazo o en periodo de lactancia, también deberán de informar al médico de su estado, puesto que la amitriptilina puede ocasionar alteraciones fetales o una vez nacido el bebé.

En cuanto a las precauciones que se deban tomar debido a los efectos sedantes de la amitriptilina, aquellos pacientes en que su rutina diaria implique la conducción o el manejo de maquinaria pesada deberán prestar especial atención a los efectos de este e, incluso, evitar este tipo de tareas o actividades.

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Isabel Rovira Salvador
Psicóloga Sanitaria y Sexóloga

Licenciada en Psicología por la Universitat de València. Especializada en Sexología Clínica y Terapia de Pareja por el Instituto Superior de Estudios Psicológicos (ISEP) donde, entre otras cosas, descubrió su pasión por la psicología de la infertilidad. Para completar su formación clínica, realizó el Máster de Psicología General Sanitaria en la Universitat de Valencia.

Ha desempeñado labores de psicóloga en diversos centros, entre ellos la Unidad de Salud Mental del Hospital Clínico Universitario de Valencia y el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) en Barcelona.

Actualmente, Isabel compatibiliza su trabajo con un blog divulgativo llamado “Sexplícitamente Hablando”. En el que reflexiona sobre aspectos psicológicos de las relaciones personales y sobre la sexualidad.
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Yasmin (pastillas anticonceptivas): usos, efectos secundarios y precio

Este medicamento anticonceptivo se usa en muchos países, y puede generar efectos secundarios graves.

por Oscar Castillero Mimenza
Unas pastillas anticonceptivas basadas en la drospirenona y el etinilestradiol.

El s*x* es una parte importante de nuestras vidas, siendo mucho más que el mero coito y representando uno de los mayores placeres físicos y sensoriales de los que puede gozar. Pese a que a lo largo de la historia ha sido tabuizado y censurado, afortunadamente con el paso de los tiempos hemos podido ir viendo cómo la sensualidad y la sexualidad se han ido naturalizando cada vez más en las últimas décadas, siendo el disfrute de este elemento algo buscado y deseado de manera habitual hoy en día.

Sin embargo, el s*x* sin protección puede tener consecuencias: desde la posibilidad de infectarse con una enfermedad de transmisión sexual a la llegada de un embarazo no deseado. Es por ello que la profilaxis es muy importante, empleándose productos como los preservativos con el fin de eliminar o reducir en la medida de la posible cualquier riesgo.

En lo que respecta a la posibilidad de embarazo, existen también otro tipo de productos de uso muy común en las mujeres (tanto con este fin como con otros): los anticonceptivos orales. Se trata de fármacos que a través de su acción en el organismo pretenden impedir el embarazo. Uno de ellos es Yasmin, del cual vamos a hablar a lo largo de este artículo.

¿Qué es Yasmin y cómo actúa?
Recibe el nombre de Yasmin la marca comercial de un tipo de anticonceptivo reversibledesarrollado por Bayer, el cual ejerce su actuación a partir de la administración de hormonas en el organismo de quien la consume. Concretamente estamos ante un anticonceptivo hormonal combinado, los cuales se caracterizan por estar compuestos por más de un principio activo con efecto en el organismo.

Se trata de un fármaco relativamente frecuente que se vende en forma de comprimidos recubiertos con película, conteniendo cada envase en su presentación más habitual un total de 21 comprimidos los cuales deben tomarse diariamente siempre a la misma hora. Una vez terminados debe dejarse pasar una semana de descanso (momento en el que se debería producir la menstruación), tras la cual y aún en el caso de que no se haya acabado la menstruación deberá empezarse el siguiente envase.

Su mecanismo de acción se basa en la introducción de hormonas en el cuerpo, concretamente de dos de ellas: drospirenona (3 mg por pastilla) y etinilestradiol (0,03 mg por pastilla).

La primera de ellas es un tipo de progestina, sustancias sintéticas similares a la progesterona, la cual contribuye a regular el ciclo menstrual (y en embarazo, a proteger y mantener el estado de gestación) y tiene efecto antiandrogénico y antimineralocorticoide.

El etinilestradiol es un tipo de estrógeno que por sí solo tiene utilidad para contribuir a controlar los síntomas del climaterio o el desarrollo de los caracteres sexuales, pero que en combinación con el anterior sirve como anticonceptivo al no permitir que se produzca la ovulación a la par que modifica el endometrio y aumenta la densidad del fluido vaginal.

Precios
Yasmin se comercializa en una gran cantidad de países, con un precio que puede variar en gran medida según la localidad. Por ejemplo en España su precio medio en la citada presentación oscila entre 14,85€ y 16,95€, mientras que en Colombia puede llegar a los 60.500 pesos (si bien próximamente su precio va a verse reducido) y en México puede encontrarse por 230-244,50 pesos.

Sin embargo, debido a que pese a su efectividad también se ha observado que su consumo puede generar efectos secundarios importantes y incluso se ha asociado con muertes por trombosis, en países en que inicialmente sí se distribuía actualmente ha dejado de recetarse, como Holanda o Reino Unido.

Principales indicaciones
Yasmin es como hemos dicho un anticonceptivo, siendo como tal su indicación más habitual la de prevenir el embarazo. En este sentido se trata de un fármaco de elevada eficacia, a pesar de que debe tenerse en cuenta de que no tiene ningún tipo de actuación ni evita la posibilidad de infecciones de transmisión sexual.

Sin embargo y a pesar de que no está indicado a nivel de prospecto es habitual que algunos médicos también lo receten para tratar alteraciones del ciclo menstrual como irregularidades o sangrados excesivos, así como en el tratamiento del síndrome de ovario poliquístico.

Finalmente también se ha utilizado en el tratamiento del acné o en ocasiones en el trastorno disfórico premenstrual, si bien estos efectos suelen ser secundarios a su uso anticonceptivo.

Efectos secundarios y riesgos
Tal y como hemos mencionada antes, Yasmin puede ser un anticonceptivo eficaz, pero lo cierto es que su uso implica también la posibilidad de aparición de efectos secundarios.

Como efectos secundarios más habituales podemos observar que la toma de esta fármaco se asocia a cefaleas, molestias gastrointestinales, aumento de peso, alteraciones de la presión arterial, alteraciones en la menstruación (hemorragias intermensuales) o dolores en áreas como los pechos o el abdomen, alteraciones del estado del ánimo de tipo depresivo o infección vaginal por hongos. También puede elevar los niveles de potasio en sangre.

También pueden aparecer alteraciones en la líbido, erupciones cutáneas, retención de líquidos, cambios de peso, picores, asma, galactorrea o dificultades de audición.

Pero sin duda uno de los riesgos y posibles efectos secundarios más graves es el hecho de que el uso de Yasmin aumenta el riesgo de sufrir trombosis y tromboembolismos, en los cuales se forman coágulos de sangre que pueden llegar a taponar arterias y venas (algo que como hemos reflejado anteriormente ha generado debate respecto a su nivel de peligrosidad y procesos judiciales contra el fabricante debido a la existencia de casos severos e incluso fallecimientos). Este riesgo es más elevado durante el primer año de tratamiento o cuando se vuelve a él tras dejarlo.

Contraindicaciones
Yasmin es un fármaco potente que puede generar efectos secundarios relevantes, y que puede resultar especialmente peligroso para determinados sectores de la población los cuales van a tenerlo contraindicado.

Para empezar y teniendo en cuenta el hecho de que eleva el riesgo de padecer trombos, está totalmente contraindicado en aquellas personas que tienen o han tenido algún tipo de trombo o embolia con anterioridad o que tienen un riesgo mayor de lo habitual de padecerlos.

Tampoco deben tomarlo personas que hayan padecido infartos, anginas de pecho o ictus, o que padezcan algún trastorno de coagulación de la sangre. Personas diabéticas, especialmente si existen lesiones en vasos sanguíneos, también lo tienen contraindicado. Del mismo modo aquellas personas que tienen o han tenido cáncer en hígado, mamas o genitales, hemorragias vaginales de causa desconocida o insuficiencia renal o hepática deberán evitarlo.

Además de todo ello, las personas que tengan alergia a alguno de sus componentes tampoco deberán tomar Yasmine. No se debe tomar en el embarazo y no se recomienda en la lactancia. Finalmente está contraindicado su consumo con alcohol, tabaco y otras drogas, y en caso de tomar otras medicaciones deberá consultarse detenidamente con el médico.

Referencias bibliográficas:
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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.
 
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Lurasidona: Efectos, funcionamiento y usos de este medicamento.

Son múltiples las sustancias y compuestos, algunos obtenidos directamente de la naturaleza y otros sintetizados por el hombre, que se han descubierto eficaces y útiles para tratar diferentes dolencias. La investigación de las propiedades de estas sustancias es lo que ha dado lugar a la farmacología. Y no solo a la dedicada al ámbito médico centrado en el cuerpo, sino también en la mente: la psicofarmacología.

Ésta última permite mantener estabilizadas diferentes alteraciones tales como el trastorno bipolar o la esquizofrenia, así como servir de ayuda en el tratamiento de otros trastornos a través de los diferentes fármacos que se han ido elaborando a lo largo de la historia. Uno de estos fármacos usados principalmente en el tratamiento de la esquizofrenia es la lurasidona.

¿Qué es la lurasidona?
La lurasidona es un psicofármaco clasificado dentro del grupo de los antipsicóticos atípicos, los cuales son sustancias que mediante la alteración de diferentes elementos a nivel cerebral tratan de combatir los síntomas de la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos.

El hecho de que se clasifique dentro de los antipsicóticos atípicos se debe a que es uno de los productos de la investigación realizada para generar medicamentos que no tuviesen tantos efectos secundarios como los primeros antipsicóticos que se descubrieron y a la vez se intentara mejorar la efectividad en el tratamiento de la sintomatología negativa (que disminuye la funcionalidad del paciente reduciendo su activación), algo en lo que los típicos o clásicos no producían ningún efecto e incluso podían empeorar..

La lurasidona contribuye a disminuir principalmente las sintomatología denominada positiva(no porque sea buena sino porque añade elementos e hiperactiva al sujeto) tales como las alucinaciones, la hiperactivación vegetativa y la sensación de inquietud y nerviosismo. Asimismo, como antipsicótico atípico que es, también reduce la como la alogia, la anhedonia y la pasividad y bajo nivel de energía. También se ha observado que aumente el sueño y el apetito en aquellos pacientes con esquizofrenia y trastornos similares.

Mecanismo de acción
El funcionamiento de la lurasidona se basa, como ocurre en la mayoría de antipsicóticos, en el bloqueo de los receptores de dopamina D2 de la vía mesolímbica. Y es que se ha observado que la sintomatología positiva, como las alucinaciones y delirios, podrían ser provocadas por un exceso de dopamina en dicha vía. También tiene una interacción relevante con el sistema serotoninérgico, y a nivel menor con la noradrenalina.

El primero de estos efectos podría ser conseguido por antipsicóticos típicos, pero estos cuentan con la desventaja de que su actuación bloqueando la dopamina es inespecífica y afecta a otras muchas vías cerebrales en que no existe una alteración dopaminérgico o incluso existe una falta de éste (siendo este déficit en la vía mesocortical lo que se considera responsable de la sintomatología negativa), provocando alteraciones secundarias desagradables e incluso peligrosas. Por eso se buscar alternativas y se terminaron por generar los antipsicóticos atípicos.

Y es que estos, entre ellos la lurasidona, destacan porque aunque su mecanismo de acción pasa por el bloqueo de los receptores D2, también tiene un efecto sobre la serotonina cerebral, reduciéndola. Este neurotransmisor tiene un efecto inhibitorio en la síntesis de dopamina, y además se encuentra en mucha mayor cantidad en la corteza cerebral, con lo que al bajar los niveles de serotonina suben los de dopamina en aquellas áreas diferentes a la vía mesolímbica.

De esta manera la acción antagonista del fármaco hacia la dopamina reduce en la vía mesolímbica los niveles de esta hormona, pero en el resto del cerebro no se produce una alteración debido a que la disminución que generaría el fármaco se ve compensado por la bajada de la serotonina como inhibidor de su síntesis (e incluso en la vía mesocortical produce un ligero aumento, mejorando sintomatología negativa).

¿En qué se usa?
La lurasidona es un fármaco cuya principal indicación es la esquizofrenia, en la cual tiene una efectividad considerable reduciendo tanto síntomas positivos como negativos. Además de ello, también resulta efectiva en otros trastornos psicóticos tales como el trastorno delirante crónico.

Pero su uso no se limita únicamente a trastornos dentro del espectro psicótico. La lurasidona es también bastante efectiva ante la presencia de episodios depresivos en el contexto de un trastorno bipolar, aumentando los niveles de energía y reduciendo la anhedonia propia de dichos episodios

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Efectos secundarios, riesgos y contraindicaciones
Aunque tiene un menor número de efectos secundarios y un mayor nivel de seguridad que los antipsicóticos típicos, lo cierto es que la lurasidona puede generar diferentes molestias e incluso estar contraindicada en algunos pacientes.

Se ha observado que el consumo de esta sustancia puede generar sedación, mareos, hipertermia, aumento de peso, hiperglucemia, aumento de la sed y el hambre, hipersalivación, alteraciones sexuales como disminución del deseo sexual o secreción de leche por los senos (independientemente del s*x*), agitación, temblores, náuseas y vómitos, sensación de ahogo o taquicardias, entre otros. También se está observado bradicinesia, movimientos involuntarios bucales y orofaciales como la discinesia y en algunos casos incluso convulsiones.

A nivel de contraindicaciones, deben evitar este fármaco o tener especial precaución embarazadas, personas que tomen otras medicaciones (especialmente psicofármacos como antidepresivos) y ancianos con demencia (los cuales tienen mayor probabilidad de muerte con el consumo) o que hayan padecido un accidente cerebrovascular.

TÓPICOS

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Oscar Castillero Mimenza
Psicólogo en Barcelona | Redactor especializado en Psicología Clínica

Graduado en Psicología con mención en Psicología Clínica por la Universidad de Barcelona. Máster en Psicopedagogía con especialización en Orientación en Educación Secundaria. Cursando el Máster en Psicología General Sanitaria por la UB.
 
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