En eso estamos de acuerdo, es muy peligroso hacerlo, nadie en esta tierra es un dios, pero lo hecho está hecho. Y no se puede pretender ahora que no sea así. Se puede tratar de aprender para otras ocasiones, de aquí en adelante, pero en su momento se endiosó, y eso le llevó a una vida de mierda. Y seguramente ser drogadicto y multimillonario y considerado un dios en la tierra sí lleva a tener comportamientos violentos, contra uno mismo y contra los demás.Si si, ser deogadicto es una efermedad, pero ser un maltratador,un misogino y una larga lista de descalificaciones no lo es.
Me parece que todo lo que hizo en los 80, quedó anulado por todas sus "sombras".
Me da exactamente igual lo buen futbolista que fuera.
Es muy peligroso mitomanizar a alguien en vida, muy oeligroso para él y muy peligroso para quien lo sigue.
Igual que lleva directamente a una vida de mierda, por mucho dinero que se tenga, si eres drogadicto tu vida va a ser una basura.
Además, no se puede juzgar comportamientos tan a la ligera, el ser humano es complejísimo.
Es que no sé, no lo entiendo. Einstein era un misógino, opacó a su mujer y nunca la dejó sobresalir, siendo una científica excelente y contribuyendo a sus mejores teorías, Picasso era un tipo bien bien rarito y Lewis Carrol ped*filo. Pero seguimos trabajando con las teorías de Einstein, los cuadros y obras de Picasso cada vez valen más y “Alicia en el País de las Maravillas” es verdaderamente una historia única, con una filosofía compleja y valiosa detrás.
Quiero decir, ser un “monstruo” (para mí no lo era, yo entiendo, no lo justifico, ser violento, un mal ejemplo, un desgraciado, perderse en la vida) no invalida un aporte importante a la sociedad, venga de la forma que venga. No es lo mismo desarrollar la teoría de la relatividad a meter goles, es cierto, pero no somos nadie para juzgar el valor positivo que un acto o una persona deja en la sociedad. Si en su momento su figura aportó, no somos nadie para tirarlo por tierra, porque en ti no tuvo efecto, pero en millones de personas sí, y el dolor ajeno, el afecto se respeta y se deja ser.