Embarazos y partos de las Reinas de España.

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Del secreto ginecológico de 'Las meninas' a las cesáreas de Doña Letizia: los embarazos y partos de las reinas de España

La historia de España se ha escrito a golpe de guerras, alianzas, desuniones territoriales y crónicas de hombres de Estado. Los reyes, generales y conquistadores han copado los...

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La historia de España se ha escrito a golpe de guerras, alianzas, desuniones territoriales y crónicas de hombres de Estado. Los reyes, generales y conquistadores han copado los titulares, dejando en un segundo lugar (en el mejor de los casos) a las mujeres.
Pero ellas, las reinas, también han sido motores de nuestra historia. Sus debilidades, aflicciones, obsesiones e intuiciones han puesto el acento en algunos de los capítulos más honrosos. En el libro 'Embarazos y partos de las reinas de España'ponemos la lupa en sus embarazos y en sus partos, ya que con su vida ginecológica dibujaron ante sus súbditos anhelos y sinsabores, puesto que durante siglos se pensó que ellas eran las únicas responsables de la falta de heredero.
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Ahora, el libro 'Embarazos y partos de las reinas de España. De Isabel la Católica a doña Letizia' (La Esfera de los Libros, 2022), recoge diversos hechos y anécdotas que rodearon a las royals de la Casa de Austria y de la Casa Borbón cuando trajeron a sus hijos al mundo.

Los Austria: partos con testigos, embarazos 'fantasma' y otras anécdotas​

• Una de las figuras clave de la historia de España ha sido Isabel la Católica. Fue ella la que inauguró la tradición de dar a luz en presencia de testigos que pudiesen dar fe que los recién nacidos eran realmente fruto de su vientre. Tras su muerte, su esposo, ya cincuentón, se casó con la francesa Germana de Foix, de tan solo 18 años. Para estar a la altura de las circunstancias no dudó en utilizar el 'viagra' de la época, la cantárida o mosca española. Con su ayuda consiguió lo que parecía imposible, una gestación que bien pudo cambiar la historia de nuestro país.
• La reina Juana, la hija de los Católicos, que ha pasado a la historia con el sobrenombre de 'la Loca', dio a luz al primogénito Carlos, el emperador de dos continentes. Y lo hizo en un excusado durante el transcurso de una fiesta palaciega. La razón era no perder de vista al mujeriego de su esposo, Felipe 'el Hermoso'.
• La emperatriz Isabel fue el gran amor de Carlos V. Esta mujer de rostro ovalado, piel clara y cabello rubio murió en el posparto, un trance frecuente en palacio durante siglos debido a las malas condiciones higiénicas que rodeaban los alumbramientos.
• Felipe II fue rey de España y Portugal durante más de 30 años y 18, respectivamente. Este trono lo compartió con cuatro esposas: una portuguesa, que murió pocos días después de su primer parto; una inglesa, que sufrió 'embarazos fantasmas'; una francesa, que falleció durante el embarazo sin dejar un heredero varón; y una española, que era su sobrina y fue madre del futuro Felipe III. La consanguinidad en los Austria, de hecho, fue la responsable última de que la dinastía se extinguiese.
• Margarita de Austria fue la única esposa del tercero de los 'Felipes' y madre de Felipe IV. Él y su familia fueron inmortalizados por Velázquez en 'Las meninas', una instantánea de la familia real que esconde un secreto ginecológico, en este caso de una de las hijas del rey, Margarita Teresa de Austria. Es posible que padeciese una enfermedad llamada Síndrome de McCune Albright, caracterizado por una pubertad precoz, manchas de color café en la piel y alteraciones óseas. Es posible que cuando Velázquez pintó el cuadro, la infanta ya tuviese la menstruación y por eso aparezca una de las meninas ofreciéndole un búcaro (tierra arcillosa normalmente utilizada para hacer jarras de agua). Según las creencias de la época, la ingesta de barro impedía la menstruación. Así habrían guardado el secreto ginecológico de la infanta.
• Del matrimonio entre Felipe IV y Marina de Austria nació Carlos II, un rey enfermizo y débil. Sus genes llevaban insertos el apocalipsis dinástico, pero eso no lo sabía ni su primera esposa, María Luisa de Orleáns, ni los cortesanos, que no dejaron de reprocharle la falta de descendencia.
• La segunda esposa de Carlos II, Mariana de Neoburgo, fue mucho más hábil y se hizo una verdadera especialista en fingir gestaciones. Aquellos pseudoembarazos terminaban, como no podía ser de otra forma, en abortos ficticios, lo cual sumía a su esposo en una profunda melancolía.

Las 'borbonas' y los 24 embarazos extramatrimoniales de María Luisa de Parma​

• El siglo XVIII se inauguró con un cambio dinástico, sentándose en el trono el primero de los Borbones, Felipe V, un maniaco-depresivo de manual. Fue precisamente él quien promulgó la Ley Sálica en 1713, que excluía a las mujeresdel trono mientras hubiera varones, incluso en las líneas sucesorias laterales.
• Su primera esposa, María Luisa de Saboya, falleció a consecuencia de la tuberculosis, una enfermedad que hizo estragos durante siglos. Ha sido, hasta la fecha, la única reina que ha dado a luz a dos reyes españoles: Luis y Fernando.
• El inicio del siguiente siglo lo protagonizó Carlos IV, que se casó con María Luisa de Parma, una reina que tuvo veinticuatro embarazos durante veintitrés años. En un artículo mortis ella confesó que ninguno de sus hijos lo era de Carlos IV, por lo que la dinastía borbónica se habría extinguido en España con ese soberano.
• Tras la muerte de su primera esposa, Fernando VII, sucesor de Carlos IV, se casó con su prima María Cristina. La reina cumplió su misión y no tardó en alumbrar a una niña, Isabel II. Un parto que provocaría la lucha entre isabelinos y carlistas, los seguidores del hermano del rey.
• Cuando Fernando falleció, su esposa se amancebó con uno de sus guardaespaldas, una unión muy fecunda. Con él se embarazó ocho veces, una situación muy incómoda que trató de ocultar con vestidos holgados.
• Isabel II tuvo una historia obstétrica muy acorde a lo que sucedía en la sociedad española decimonónica, puesto que tuvo doce partos, de los cuales solo cinco de los recién nacidos alcanzaron la edad adulta.
• Tras una efímera aventura republicana, el trono retornó a los Borbones en la figura de Alfonso XII. El soberano perdió a su primera esposa, María de las Mercedes, a consecuencia de una fiebre gástrico-nerviosa, según rezan los informes la época. Su segunda esposa le dio el heredero deseado, Alfonso XIII, un hijo que no llegaría a conocer.
• La boda de este último con Victoria Eugenia de Battenberg introdujo la hemofilia en la realeza española, un azote sanguíneo que alteró la línea sucesoria de los Borbones y que permitió la llegada al trono de Juan Carlos I.
• Fue precisamente su esposa, la Reina Sofía, la primera soberana que alumbró en un hospital. La última derivada de la enfermedad de la sangre ha sido el matrimonio morganático entre Felipe VI y Letizia Ortiz, madre de dos hijas nacidas por cesárea.