El Rey Juan Carlos operado de un cáncer de piel

según rahola: el rey juan carlos está en fase terminal de cáncer. la monarquía se muere. viva la república
Rahola siempre tan bruta, ¿que tendrá que ver que muera la monarquia para decir que JC esta en fase terminal?..
A menos que ella sepa de verdad que es asi y si no es cierto y yo fuera CR le pondria una querella.
 
No creo, seguro que ya saben el tipo de cáncer que es, le realizarán durante este año dos revisiones y después alta médica...no sabemos que tratamiento le han puesto, si sabemos la medicación sabríamos más
Este tipo de cáncer de piel, aunque maligno, digamos que se comporta benignamente porque no produce metástasis. No comporta tratamiento posterior ninguno. Solo por razones estéticas, unas tiritas especiales para que no quede cicatriz. Las revisiones a estos pacientes es normal que se hagan cada 6 meses. A mi marido le han quitado ya 2 en la espalda, 1 en el brazo y el último en la nariz. No se dedica a tomar el sol, más bien es ratón de biblioteca, pero ha hecho mucha mtb y running. Y solo tienen 60 años, que no es tan mayor!
 
13/04/2019

EL PLAN ‘ANTIAGING’ DE DON JUAN CARLOS
El 22 de marzo, el Rey Emérito apareció con un moratón en la cara. Casa Real dijo 19 días después que le habían quitado una mancha fruto de la exposición al sol. Lucha contra la artrosis y el envejecimiento con un doctor en Barcelona. POR MARINA PINA
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UN MORATÓN EN EL OJO GENERÓ LAS preocupaciones. El Rey Juan Carlos (81) reapareció el pasado 22 de marzo en la presentación del cartel de la Feria de San Isidro con los restos de su última operación. El propio padre de Felipe VI explicó que le habían quitado una mancha. Ahí quedó el debate hasta este miércoles, cuando una revista publicó que le habían extirpado un carcinoma benigno. Empezaron entonces nuevas especulaciones. Sin embargo, fuentes oficiales de Zarzuela han asegurado a La Otra Crónica que le han quitado una mancha producida por el sol y que la intervención ha sido preventiva. No han desvelado ni la fecha de la operación ni si, como se ha publicado, tuvo lugar en Houston (Estados Unidos). Esta pequeña intervención no ha frenado el ritmo del Monarca ni ha supuesto un retroceso en su salud. Un bienestar general que desde que abdicó se ha evidenciado y del que es culpable la disciplina de Don Juan Carlos junto con los consejos de los doctores en los que confía.

Cuando en julio de 2014 Don Juan Carlos dejó el trono, también terminó con algunos privilegios. Entre ellos, contar con un médico en sus viajes privados. Como explican a LOC fuentes de Zarzuela, el Emérito viaja con un equipo de facultativos cuando acude a desplazamientos oficiales. Si asiste a un compromiso privado, en principio, desde Zarzuela no le proporcionan un médico. Si quiere un doctor a su lado, es a título privado. Aunque terminó con el privilegio del profesional 24 horas, Felipe VI mantiene el mismo equipo de médicos que nombró su padre en 2012 y que está encabezado por Miguel Fernández Tapia.

Debido a su edad y a los problemas de salud que ha tenido desde que dejó la Jefatura de Estado, el Emérito cuenta con un grupo de doctores de confianza que le tratan en distintas especialidades y que han diseñado un plan de vida saludable con el que el padre de Felipe VI ha mejorado mucho su salud. La primera decisión que tomó Don Juan Carlos fue prescindir del doctor Villamor como traumatólogo. El facultativo le operó tras la rotura de cadera en Botsuana en abril y noviembre de 2012 y también participó en la sustitución de la prótesis de cadera que el doctor Miguel Cabanela realizó en 2013. Sin embargo, Don Juan Carlos “había perdido la confianza en él y no ha vuelto a consultarle”, explican fuentes próximas al doctor. Tanto es así que hace un año, cuando el Emérito fue intervenido para sustituir la prótesis de su rodilla, se puso en manos de Primitivo Gómez Cardero, jefe de Traumatología del Hospital Universitario La Moraleja.

La salida de Villamor de su vida contrasta con la presencia constante de Manuel Sánchez, el médico que vigila su bienestar casi de manera permanente. Se trata de un facultativo especialista en medicina estética, nutrición, dietética y obesidad. Trabó amistad con el ex Monarca hace más de 15 años, cuando se conocieron en la clínica Planas. En el hospital catalán Don Juan Carlos se somete a revisiones médicas anuales y el doctor Sánchez dirigía el departamento de Nutrición y Antiaging. Tan buena relación mantienen que cuando a Don Juan Carlos le extirparon un nódulo en el pulmón en mayo de 2010 en el Clínic de Barcelona, tras el alta continuó con la recuperación en Planas.

En los años en la clínica barcelonesa, el doctor Sánchez labró grandes amistades entre la alta sociedad catalana, en parte motivadas por su cercanía con Don Juan Carlos. Con esa agenda, en 2017 abrió su propia clínica en la zona alta de Barcelona. Sánchez se ha especializado en medicina proactiva y del bienestar. También tiene un máster en discreción. Nadie de la clínica ha respondido a las llamadas de este suplemento y el doctor tampoco ha contestado al correo electrónico.

El médico es especialista en medicina proactiva y Don Juan Carlos sigue sus consejos. Unas rutinas de ejercicios, alimentación y cuidados diarios con los que ha frenado el deterioro. “El Rey tiene algo más importante que la edad en su contra, y es la genética. Su madre, María de las Mercedes, terminó postrada en una silla. Las articulaciones de Don Juan Carlos ya le han dado varios sustos, y no quiere terminar como ella”. Por eso, el Rey hace ejercicios y cuida su alimentación “aunque sigue bebiendo más de lo que le aconsejan los doctores”, desvelan fuentes cercanas al Emérito.

Tras la abdicación, la agenda del Rey disminuyó radicalmente, lo que le permitió dedicar más tiempo a sus hobbies y a cuidarse. Las manchas que le han extirpado, debajo del ojo izquierdo, le salieron por una exposición excesiva al sol, algo lógico, ya que navega casi todos los meses del año. Desde que dejó el trono, Don Juan Carlos acude con frecuencia a Sanxenxo para participar en regatas con el barco Bribón-Galán de la categoría 6mR que el armador gallego José Cusí compró para que el Emérito volviera al mar. Según informan fuentes del club Náutico a LOC “él participa en casi todas las regatas, nos enteramos prácticamente el día antes, cuando vienen los buzos a supervisar la zona por seguridad”. La última regata se celebró el pasado fin de semana y no estuvo para ver la buena posición en la que quedó su velero.

Aunque desde Casa Real no desvelan la fecha exacta de la intervención, basta con analizar sus compromisos y ausencias en marzo para encontrar el día aproximado en el que le extirparon la mancha producida por exceso de sol. El miércoles 6 de marzo el Rey no estuvo en la fiesta por el 80 cumpleaños de la infanta Margarita porque se encontraba en Florida con los Fanjul. Un viaje de placer en el que también visitó Houston, donde acudió a una fábrica de material para barcos. Se desconoce si en la ciudad tejana visitó a algún especialista médico.

SIN CONFIRMACIÓN

El sábado 9 de marzo fue con la Infanta Elena a la feria taurina de Illescas, donde vio los toros desde la barrera. En Sanxenxo le esperaban el siguiente fin de semana, el del 16 y 17, ya que se celebraba otra regata. Don Juan Carlos no acudió. Reapareció el 22 en la presentación de los carteles de la Feria de San Isidro. En ese momento ya tenía un apósito que tapaba la cicatriz y un derrame en el ojo, por lo que la intervención tuvo lugar entre el lunes 11 y el jueves 21. Las fuentes oficiales de Zarzuela no facilitan el día exacto ni el lugar de la intervención.

Preguntados por si se practicó en Houston, no tienen el dato. Casa Real no dio información hasta 19 días después de la foto del moratón. Cuando el pasado miércoles una publicación hablaba de un carcinoma, las fuentes oficiales aclararon que se trataba de una mancha por exceso de sol.

No es la primera vez que se especula con la salud de Don Juan Carlos. En noviembre de 2011 presidió una audiencia en Palacio y apareció con unas gafas de sol para ocultar un moratón. Se dijo entonces que se había golpeado con una puerta. Luego se supo que se había caído en el cuarto de baño. Información imposible de confirmar por cauces oficiales. Lo mismo ocurrió cuando en 2014 el Rey se atropellaba leyendo el discurso de la Pascua Militar. Se dijo que el problema era la falta de luz. Ahora se sabe que Don Juan Carlos venía de Londres y casi no llega a uno de los principales compromisos del año. Su estado de nervios le provocó los errores.

Su relación con el doctor Sánchez tampoco se hace pública desde Zarzuela. El médico es, junto al jefe del servicio privado de Palacio, quien más conoce cómo se encuentra el Rey. “Hablan por teléfono, pero es que él permite a sus pacientes acceso personal, es otra de sus ventajas”, cuenta un paciente del doctor de Barcelona. Aunque no desvela sus tarifas, en la clínica De Sánchez se hacen tratamientos privados y no tienen concierto con sociedades médicas. Además de la nutrición y el bienestar, practican tratamientos estéticos para mejorar el aspecto exterior.

Manuel Sánchez es quien ayuda al Rey a luchar contra la edad. Le aconseja para intentar retrasar el avance de la artrosis de cadera que tanto él como sus hermanas heredaron de su madre. Ese problema de articulaciones es el que le obliga a caminar apoyado en un bastón, el que ya ha postrado a su hermana Margarita en una silla de ruedas y el que provoca que su pierna derecha no esté recta. “Los ejercicios diarios y el hecho de que se mantiene en un peso estable le ayudan mucho”, insiste la misma fuente. Aunque la salud de la Familia Real siempre es un misterio y Sánchez tiene la confianza real a cambio de silencio, el Rey sigue los cinco consejos que el doctor facilita en su web: comer bien, dormir bien, ejercicio saludable, ser feliz y sentirse bien y, por último: s*x*, amor y sentirse querido.
 
13/04/2019

EL PLAN ‘ANTIAGING’ DE DON JUAN CARLOS
El 22 de marzo, el Rey Emérito apareció con un moratón en la cara. Casa Real dijo 19 días después que le habían quitado una mancha fruto de la exposición al sol. Lucha contra la artrosis y el envejecimiento con un doctor en Barcelona. POR MARINA PINA
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UN MORATÓN EN EL OJO GENERÓ LAS preocupaciones. El Rey Juan Carlos (81) reapareció el pasado 22 de marzo en la presentación del cartel de la Feria de San Isidro con los restos de su última operación. El propio padre de Felipe VI explicó que le habían quitado una mancha. Ahí quedó el debate hasta este miércoles, cuando una revista publicó que le habían extirpado un carcinoma benigno. Empezaron entonces nuevas especulaciones. Sin embargo, fuentes oficiales de Zarzuela han asegurado a La Otra Crónica que le han quitado una mancha producida por el sol y que la intervención ha sido preventiva. No han desvelado ni la fecha de la operación ni si, como se ha publicado, tuvo lugar en Houston (Estados Unidos). Esta pequeña intervención no ha frenado el ritmo del Monarca ni ha supuesto un retroceso en su salud. Un bienestar general que desde que abdicó se ha evidenciado y del que es culpable la disciplina de Don Juan Carlos junto con los consejos de los doctores en los que confía.

Cuando en julio de 2014 Don Juan Carlos dejó el trono, también terminó con algunos privilegios. Entre ellos, contar con un médico en sus viajes privados. Como explican a LOC fuentes de Zarzuela, el Emérito viaja con un equipo de facultativos cuando acude a desplazamientos oficiales. Si asiste a un compromiso privado, en principio, desde Zarzuela no le proporcionan un médico. Si quiere un doctor a su lado, es a título privado. Aunque terminó con el privilegio del profesional 24 horas, Felipe VI mantiene el mismo equipo de médicos que nombró su padre en 2012 y que está encabezado por Miguel Fernández Tapia.

Debido a su edad y a los problemas de salud que ha tenido desde que dejó la Jefatura de Estado, el Emérito cuenta con un grupo de doctores de confianza que le tratan en distintas especialidades y que han diseñado un plan de vida saludable con el que el padre de Felipe VI ha mejorado mucho su salud. La primera decisión que tomó Don Juan Carlos fue prescindir del doctor Villamor como traumatólogo. El facultativo le operó tras la rotura de cadera en Botsuana en abril y noviembre de 2012 y también participó en la sustitución de la prótesis de cadera que el doctor Miguel Cabanela realizó en 2013. Sin embargo, Don Juan Carlos “había perdido la confianza en él y no ha vuelto a consultarle”, explican fuentes próximas al doctor. Tanto es así que hace un año, cuando el Emérito fue intervenido para sustituir la prótesis de su rodilla, se puso en manos de Primitivo Gómez Cardero, jefe de Traumatología del Hospital Universitario La Moraleja.

La salida de Villamor de su vida contrasta con la presencia constante de Manuel Sánchez, el médico que vigila su bienestar casi de manera permanente. Se trata de un facultativo especialista en medicina estética, nutrición, dietética y obesidad. Trabó amistad con el ex Monarca hace más de 15 años, cuando se conocieron en la clínica Planas. En el hospital catalán Don Juan Carlos se somete a revisiones médicas anuales y el doctor Sánchez dirigía el departamento de Nutrición y Antiaging. Tan buena relación mantienen que cuando a Don Juan Carlos le extirparon un nódulo en el pulmón en mayo de 2010 en el Clínic de Barcelona, tras el alta continuó con la recuperación en Planas.

En los años en la clínica barcelonesa, el doctor Sánchez labró grandes amistades entre la alta sociedad catalana, en parte motivadas por su cercanía con Don Juan Carlos. Con esa agenda, en 2017 abrió su propia clínica en la zona alta de Barcelona. Sánchez se ha especializado en medicina proactiva y del bienestar. También tiene un máster en discreción. Nadie de la clínica ha respondido a las llamadas de este suplemento y el doctor tampoco ha contestado al correo electrónico.

El médico es especialista en medicina proactiva y Don Juan Carlos sigue sus consejos. Unas rutinas de ejercicios, alimentación y cuidados diarios con los que ha frenado el deterioro. “El Rey tiene algo más importante que la edad en su contra, y es la genética. Su madre, María de las Mercedes, terminó postrada en una silla. Las articulaciones de Don Juan Carlos ya le han dado varios sustos, y no quiere terminar como ella”. Por eso, el Rey hace ejercicios y cuida su alimentación “aunque sigue bebiendo más de lo que le aconsejan los doctores”, desvelan fuentes cercanas al Emérito.

Tras la abdicación, la agenda del Rey disminuyó radicalmente, lo que le permitió dedicar más tiempo a sus hobbies y a cuidarse. Las manchas que le han extirpado, debajo del ojo izquierdo, le salieron por una exposición excesiva al sol, algo lógico, ya que navega casi todos los meses del año. Desde que dejó el trono, Don Juan Carlos acude con frecuencia a Sanxenxo para participar en regatas con el barco Bribón-Galán de la categoría 6mR que el armador gallego José Cusí compró para que el Emérito volviera al mar. Según informan fuentes del club Náutico a LOC “él participa en casi todas las regatas, nos enteramos prácticamente el día antes, cuando vienen los buzos a supervisar la zona por seguridad”. La última regata se celebró el pasado fin de semana y no estuvo para ver la buena posición en la que quedó su velero.

Aunque desde Casa Real no desvelan la fecha exacta de la intervención, basta con analizar sus compromisos y ausencias en marzo para encontrar el día aproximado en el que le extirparon la mancha producida por exceso de sol. El miércoles 6 de marzo el Rey no estuvo en la fiesta por el 80 cumpleaños de la infanta Margarita porque se encontraba en Florida con los Fanjul. Un viaje de placer en el que también visitó Houston, donde acudió a una fábrica de material para barcos. Se desconoce si en la ciudad tejana visitó a algún especialista médico.

SIN CONFIRMACIÓN

El sábado 9 de marzo fue con la Infanta Elena a la feria taurina de Illescas, donde vio los toros desde la barrera. En Sanxenxo le esperaban el siguiente fin de semana, el del 16 y 17, ya que se celebraba otra regata. Don Juan Carlos no acudió. Reapareció el 22 en la presentación de los carteles de la Feria de San Isidro. En ese momento ya tenía un apósito que tapaba la cicatriz y un derrame en el ojo, por lo que la intervención tuvo lugar entre el lunes 11 y el jueves 21. Las fuentes oficiales de Zarzuela no facilitan el día exacto ni el lugar de la intervención.

Preguntados por si se practicó en Houston, no tienen el dato. Casa Real no dio información hasta 19 días después de la foto del moratón. Cuando el pasado miércoles una publicación hablaba de un carcinoma, las fuentes oficiales aclararon que se trataba de una mancha por exceso de sol.

No es la primera vez que se especula con la salud de Don Juan Carlos. En noviembre de 2011 presidió una audiencia en Palacio y apareció con unas gafas de sol para ocultar un moratón. Se dijo entonces que se había golpeado con una puerta. Luego se supo que se había caído en el cuarto de baño. Información imposible de confirmar por cauces oficiales. Lo mismo ocurrió cuando en 2014 el Rey se atropellaba leyendo el discurso de la Pascua Militar. Se dijo que el problema era la falta de luz. Ahora se sabe que Don Juan Carlos venía de Londres y casi no llega a uno de los principales compromisos del año. Su estado de nervios le provocó los errores.

Su relación con el doctor Sánchez tampoco se hace pública desde Zarzuela. El médico es, junto al jefe del servicio privado de Palacio, quien más conoce cómo se encuentra el Rey. “Hablan por teléfono, pero es que él permite a sus pacientes acceso personal, es otra de sus ventajas”, cuenta un paciente del doctor de Barcelona. Aunque no desvela sus tarifas, en la clínica De Sánchez se hacen tratamientos privados y no tienen concierto con sociedades médicas. Además de la nutrición y el bienestar, practican tratamientos estéticos para mejorar el aspecto exterior.

Manuel Sánchez es quien ayuda al Rey a luchar contra la edad. Le aconseja para intentar retrasar el avance de la artrosis de cadera que tanto él como sus hermanas heredaron de su madre. Ese problema de articulaciones es el que le obliga a caminar apoyado en un bastón, el que ya ha postrado a su hermana Margarita en una silla de ruedas y el que provoca que su pierna derecha no esté recta. “Los ejercicios diarios y el hecho de que se mantiene en un peso estable le ayudan mucho”, insiste la misma fuente. Aunque la salud de la Familia Real siempre es un misterio y Sánchez tiene la confianza real a cambio de silencio, el Rey sigue los cinco consejos que el doctor facilita en su web: comer bien, dormir bien, ejercicio saludable, ser feliz y sentirse bien y, por último: s*x*, amor y sentirse querido.


https://www.elmundo.es/loc/casa-real/2019/04/13/5cb075bc21efa0fb7f8b46e3.html
 

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