Creo que Carlos Ríos ha desvirtuado el mensaje que hace años otros nutricionistas llevaban. Y que eran que en tu día a día te alimentaras bien, cuidando que los procesados fueran sanos y primando los alimentos frescos. Pero que cuando salieraso fueras te fiesta, si te apetecía comerte algo "no sano" que te lo comieras sin problema. Porque ese 5%-10% que suponía esa salida, esa boda... no iba a afectar al 90-95% de tu alimentación sana.
Pero ha llegado a un punto en el que se demoniza a aquellas personas que, llevando una alimentación muy sana en la mayoría de su tiempo, se dan el gusto tomándose una pizza , una hamburguesa o unas tapas con los amigos.
Está bien pararse a leer las etiquetas, ser conscientes de lo que comemos, aumentar las verduras y otros productos sanos. Pero no me parece correcto tildar de Satanás a una persona que es capaz, un día, de disfrutar de una comida basura con unos amigos sin sentirse culpable por ello.
De acuerdo 100%, no lo podría haber dicho mejor.