Cuando posa de frente se le nota mucho que la pierna izquierda la tiene más corta que la derecha.
Debe ser por eso que siempre se pone de lado.
El atuendo es esperpéntico. Las sandalias, inenarrables. Y la cara aún más demacrada que de costumbre.
Debe ser por eso que siempre se pone de lado.
El atuendo es esperpéntico. Las sandalias, inenarrables. Y la cara aún más demacrada que de costumbre.