Hay ciertas cosas que no leo porque quiero cuidar mi salud mental, aunque viendo las réplicas vuestras ya me puedo formar una idea de las estupideces que se pueden llegar a escribir cuando alguien comete la atrocidad de... ¡oh, Dios mío!, hablar en SU lengua.Provinciano es no querer aceptar y entender que además del castellano -lengua oficial en todo el país- también hay otras lenguas oficiales (por autóctonas de la zona) en sus respectivas comunidades, y como tales, es lógico y natural hablarlas, protegerlas y fomentarlas.
Sorprendería a muchos la perfecta convivencia entre castellano y catalán que hay en Cataluña, pero entiendo que es mucho más cómodo y fácil quedarse con la versión interesada de quienes desde el desconocimiento y el interés político inventan la farsa de la intransigencia.