Sencilla, clásica y correcta para el acto. La cuestión es ponerle pegas hasta a los flecos que le cuelgan de la cintura. Podría haberse disfrazado con la misma ropa que se puso ayer Laurentien de los Países Bajos y Letizia nos amenizaba el día de todos, ¿no? Lástima que no se puso las mallas de cuero negro para entregar el Cervantes porque en vez de 15 páginas de hilo llevaríamos 400 páginas y sumando....