Ya te digo, si ayer Teresita volvió a referirse a las habitaciones y a las hijas del patán sigue sin nombrarlas. No sabe cuantas camas ponerle a Paulito , que si la juvenil de Galicia o la de matrimonio que le sobra, además de su cuna, que si esta habitación para los días pares y la otra para los impares, pero a las hijas igual les cede ese hueco que le queda entre el mueble del lavabo y la pared, que dice Teresa que no sabe como aprovecharlo. Pues ahí te regalo una idea. De nada.Ayer el tarzán de la "Pampanatas" logró conseguir varios planos, eso sí, sin ser yo muy profesional del sector, le puso tornillos al pladur a diestro y siniestro, como bien ha dicho la prima, para que lo viéramos trabajar.
Todo, todo, todo es un despropósito.
Teresita sigue hablando como si solo tuvieran un hijo. Es que me repatea, porque me la estoy imaginando en sus inicios, cuando el guaperas (para ella porque hay que ver...) le dijera que tenía dos hijas, la muy hipócrita le diría ay que bien, qué monas, para mí serán como hijas, y ahora es como si no existieran, no entran en ninguno de sus planes ni presentes ni futuros. Por eso para mí ese hombre no vale nada, es un pelele que hace lo que le va dictando la última mujer con la que está. A ver la siguiente por qué camino lo lleva, porque tengo claro que la arquitecta de Cuartillos no será la última.
Por cierto, me da a mí que las placas fotovoltaicas serán una colaboración en toda regla, solo vamos a tener que esperar un poco para salir de dudas. Lo que me sigue asombrando es que haya una sola empresa, por muy cutre que sea, que colabore con esta pandilla.
Ayer me meaba yo sola de ver a ese "hombre" haciendo equilibrios poniendo una pierna en el marco de la ventana como para decir: mira como controlo. Y cómo se sonríe al saberse grabado como un niño pequeño. Ayyy qué pena.
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