Juan Carlos I abandona España. Zarzuela emite un comunicado escueto sobre su destino. El Gobierno no le retirará el título de rey

En lo que edito me refería a lo que escribo justo arriba. Franco (herederos) y Aguirre. Le han tenido tantas ganas, que si al final ni eso, ni la imputación, es que no hay nada (o, ahora que lo pienso, quizá son tan tan listos Franco y herederos, o Aguirre que lo saben esconder muy muy bien)

¿Que...?
 
En lo que edito me refería a lo que escribo justo arriba. Franco (herederos) y Aguirre. Le han tenido tantas ganas, que si al final ni eso, ni la imputación, es que no hay nada (o, ahora que lo pienso, quizá son tan tan listos Franco y herederos, o Aguirre que lo saben esconder muy muy bien)

en la transicion , nuestros abuelos se abrazaron y pelillos a la mar.

en españa no devuleve el dinero ni el tato!

PS
la espe le acabarán pillando, tiempo al tiempo.

eso si, para cuando la pillen habra prescrito el delito o le aplicaran la doctrina botin o potin.
 
La última cena de Juan Carlos, el 'Rey de Sanxenxo', con su corte: “Vuelvo en septiembre”

El rey emérito se reunió con sus íntimos en el pueblo pontevedrés cuyo puerto lleva su nombre, el lugar donde le gustaría pasar sus últimos días.



Juan Carlos, rodeado de amigos en una cena en Sanxenxo en 2017


Había una vez un rey sin reino. Tuvo uno durante más de 40 años, pero fue desterrado. Sus andanzas y desmanes durante todo ese tiempo le acabaron pasando factura y se vio obligado a marcharse para acabar sus días en el extranjero, en las tierras de ultramar. Pero en su camino al exilio, y antes de decir adiós, pasó por su refugio. Por el lugar en el que los súbditos seguían siendo sus súbditos. Por el lugar donde aún se le rinde pleitesía, no se le juzga y hasta el puerto lleva su nombre. Por el pueblo en el que él querría acabar sus días.
En su larga travesía hacia el destierro, hizo noche el rey sin reino en su pequeño refugio. Allí fue recibido por sus acólitos, por su séquito. Por sus más fieles escuderos. Marinos y navegantes que le recibían con toda clase de prebendas. Allí celebró el monarca su última cena antes de emprender su presunto último viaje. Y esa noche, entre vinos y amigos, entre viejos lobos de mar, les reveló que no les decía adiós sino hasta luego: “Volveré. Espero que en septiembre, porque quiero navegar aquí”, fue su despedida, cuentan a EL ESPAÑOL fuentes próximas al entorno del club.

Juan Carlos I, el rey emérito, pasó por Sanxenxo el lunes para encontrarse con su círculo de confianza, con los amigos que no le han abandonado en estos tiempos de zozobra. Cuando su buque iba a la deriva, encontró en ese puerto de la costa gallega el timón que le guió. Aquí nadie le llama “el emérito”, aquí sigue siendo “El Rey”. Juan Carlos y Sanxenxo se unieron en 2005 en una simbiosis de la que ambas partes se aprovecharon.

Y esta unión se ha fortalecido tanto en los últimos cuatro años, que Juan Carlos ya ha avanzado que es allí donde quiere acabar sus días. No en el Caribe, no en los Emiratos Árabes Unidos, no en Ginebra con su hija. Quiere que sea aquí, en las Rias Baixas, donde le dejen acabar su días en paz. Y aunque desde la Casa Real no está por la labor, él tampoco está por obedecer. En Sanxenxo le esperan y creen que volverá en breve. EL ESPAÑOL se ha desplazado hasta Sanxenxo, el pequeño reino del rey desterrado. La joya de la costa gallega, la perla turística en la que el emérito ha encontrado su corte y su sitio.

Galiza monárquica

Galicia, esa pequeña comunidad autónoma al noroeste de España que tiene más kilómetros de costa que la gigantesca Andalucía. Si lo comprueban en un mapa no les saldrán las cuentas, pero así es: su escarpado litoral, con mil recovecos, la hacen ideal para esconderse, para fugarse. Y si hay un lugar de la geografía gallega donde debe estar un rey, ese es Sanxenxo.
La comarca del Salnés es la Costa Azul de Galicia y Sanxenxo es su Saint Tropez. Es el destino estrella, el municipio con más plazas hoteleras de la comunidad (en torno al 13% de todas ellas). Combina unas paradisíacas playas cristalinas con el verde de los robles y los eucaliptos de sus montes. Un lugar en el que hay mil caminos para llegar al mismo sitio, donde el GPS se vuelve loco, donde las sinuosas carreteras de montaña se pierden en mitad de la nada, para salir siempre al mar. El mismo mar en el que Juan Carlos de Borbón recuperó las ganas de vivir y cuyo puerto deportivo lleva su nombre.

No es la primera vez que en la provincia de Pontevedra rinden pleitesía de forma exacerbada a la Casa Real. Ya en 1902 un grupo de empresarios gallegos cedieron a Alfonso XIII, abuelo de Juan Carlos I, una isla para que estableciese allí su residencia estival. Fue la isla de Cortegada, a escasos 30 kilómetros de Sanxenxo. Allí se hicieron planeas colosales: la construcción de un palacio real para pasar el verano, como edificio estrella.
La isla le fue arrebatada cuando se proclamó la república, aunque Franco se la volvió a entregar a Juan de Borbón (padre del rey) después de la guerra. Había un proyecto para construir allí varios bloques de apartamentos, 75 viviendas unifamiliares y un palacio que tendría que ocupar 30.000 metros cuadrados. Nada de eso se hizo y Don Juan acabó vendiendo la isla en 1979 a un promotor inmobiliario por el irrisorio precio de 68 millones de pesetas. Y es que siempre hubo gallegos que quisieron al rey viviendo en su tierra. Y aunque nunca llegó a fructificar, la idea sigue viva.

“Va a volver para quedarse”

Un vecino de la zona pasea, mascarilla en ristre, por el minúsculo andén de la carretera de la playa. Está jubilado y no navega. A pesar de vivir a 200 metros de la orilla, la playa no la pisa desde hace años, “no me acuerdo cuantos”. Pero a pesar de estar tan desconectado del mar, sabe que el emérito ha estado por allí esto días, que viene a navegar, que ama su pueblo y que piensa volver. “Él no quiere irse, él se quiere quedar a vivir aquí en Sanxenxo. Va a volver para quedarse”. Lo afirma el paisano y lo repiten los vecinos como un mantra. La mayoría no lo ha visto nunca en persona, pero siempre tiene un primo de un primo que se lo encontró por casualidad. O un amigo al que saludó. Y todos tienen claro que el rey va a volver.

 
 
Pues yo soy navarra, nacida y criada en Estella (hasta los trece años en que mi familia directa emigró a Bilbao) y con la mayoría de mi familia de Pamplona y no conozco a nadie que hable euskera. Eso no quiere decir nada.

Y’a.....pues en la vieja Lizarra , que significa estrella , lo tradujeron como stella de ahí su nombre, pero que vaya ........yo la conozco bien , y a la entrada pone el nombre original Lizarra , no se que hablarán los 600 alumnos de la Ikastola ???? , hace mucho que no has ido,alomejor es que estaba prohibido , no se , digo yo .
 
Fue un golpista que atentó contra un gobierno legítimamente constituído para arrastrar a España a una guerra destructiva y a 40 años de una dictadura de represión, pobreza y muerte. Copió leyes fascistas (como el fuero de los trabajadores, calcadito de Mussolini), se reunieron él y el cuñadísimo con líderes como Hitler y Himmler (este último alabó los campos de concentración españoles, que estuvieron en plena forma hasta finales de los años 40), firmó sentencias de muerte durante todo su mandato, fue responsable del exilio de cientos de miles de personas que no habían cometido ningún delito y, además, llevó al país a la ruina económica y social con sus políticas: el plan de estabilización de 1959 es el reconocimiento de que las políticas franquistas de los primeros 20 años fueron un fiasco.
Comparar el régimen dictatorial de Franco con cualquier gobierno que haya existido desde 1975 en este país es vergonzoso.

Edito: perdón si me he salido un poco del tema, pero es que este tema me pone mala. Al régimen franquista hay que condenarlo siempre y sin fisuras.
En eso que remarco ¡Bingazo para ti!

Tranquilidad. Muchas cosas hay que ponerlas en su contexto histórico
 
La 'venganza' de Letizia tras años de humillaciones de Juan Carlos: así vivió la marcha de su suegro


"Cómo se entere la prensa de que ha estado en el Caribe…". Aunque esta frase se podía fechar perfectamente en uno de los días de esta semana pasada en el despacho de la Reina Letizia, lo cierto es que fue un comentario de la esposa de Felipe VI a una persona de su equipo a principios del mes de marzo. Las palabras salieron de la boca de Letizia días antes de que se declarara en España el estado de alarma en todo el país cuando su suegro, el Emérito Juan Carlos, llegaba a Zarzuela tras su último viaje, en el que tuvo como anfitriones a los Fanjul, primero en su casa de la República Dominicana y luego, en su mansión de Palm Beach, en Florida. Por eso, si el Emérito se ha instalado en la isla caribeña nadie se extrañaría dentro de la Casa.

"El problema es que la prensa está segura de que se ha visto forzado a irse, pero en realidad, él se lo está tomando como unas vacaciones. El Emérito quería salir al extranjero en agosto, al igual que otros años. Y le ha venido genial esta presión para poder marcharse", confiesa a EL ESPAÑOL una fuente muy cercana a la Reina Letizia. "Porque si se llega a ir de vacaciones y le pillan en pleno escándalo tomando el sol en el Caribe… Así que si quería irse tenía que anunciarlo y aprovechar una salida, que en otros tiempos se hubieran llamado vacaciones, para presentarse como que se está inmolando para quitarle la presión a Zarzuela. Pero él va diciendo a todo el mundo que en septiembre está de vuelta. Y eso saca de quicio a Letizia, le parece tan injusta la solución que se ha tomado", prosigue relatando a este diario el mismo interlocutor.

"Ella ha dicho que no quiere saber mucho de este asunto porque ya le dijo a su marido que hicieran lo que hicieran les iba a perjudicar y mucho. Aunque hay mucha gente que asegura que Letizia se debe estar frotando las manos, lo cierto es que está muy preocupada, pero no por Juan Carlos. No siente ningún cariño por su suegro, pero sí por su marido, él lo está pasando fatal. Ella es consciente de que Felipe ha querido dar un golpe de efecto con esto, pero sabe que el tiro les puede salir por la culata. Desde luego, ella jamás hubiera dejado que se marchara a la República Dominicana, de esto estoy segura", asegura una amiga de la Reina a este diario.

Vacaciones distintas o no, la verdad es que Letizia no le tiene mucho cariño a los días que pasa en Mallorca, ya que ella no los considera como de descanso, sino más bien como un traslado de oficina. Pero con los años, la cosa ha mejorado sustancialmente para la esposa de Felipe VI, ya que antes tenía que pasar la semana en Baleares con sus suegros, Juan Carlos y Sofía, sus cuñadas, las Infantas Elena y Cristina con sus maridos y sus respectivas proles. Pero verano tras verano, de la ecuación multitudinaria que se montaba en Marivent y de la que nadie conocía el resultado, se han ido cayendo muchos de los componentes para quedarse tan solo con su suegra, con la que mantiene, desde la famosa Crisis de las Reinas un pacto de no agresión. "Así que para ella la cosa ha mejorado bastante. A Sofía sólo la ve cuando es necesario, al igual que ocurre en Madrid, así que pasa los días en la isla mucho mejor. Y desde que no va su suegro, pues feliz", añade la misma persona.

La batalla personal

La batalla personal entre Juan Carlos y Letizia viene desde el primero momento en el que la ex periodista pisa Zarzuela en 2003. Para el Emérito una mujer divorciada no es "lo mejor" para su hijo y mucho menos para la Corona. Así que ambos están unidos, además de por Felipe VI, por la animadversión que se profesan el uno al otro desde el primer momento. Una grieta insalvable que se abrió el primer día que su hijo le anunció su intención de casarse con Letizia Ortiz Rocasolano. El entonces Jefe del Estado le dijo a su heredero: "Te vas a cargar la Monarquía si te casas con ella". Poco podía imaginar que era él, casi dos décadas después el que la iba, con sus negocios poco ejemplares quien iba a hacer peligrar la institución.

Las personas cercanas a la Consorte reconocen que lo que no le perdona a Juan Carlos -por encima de todo lo demás- es el grave daño que le está causando a una institución por la que tanto están trabajando su familia y ella. La Reina sufre por el hecho de que Leonor y Sofía estén siendo utilizadas -en cierta manera- como máquinas para endulzar y limpiar la imagen de la Corona en estos duros momentos. Justo ahora, cuando las dos hijas de los Reyes comenzaban a dar sus primeros pasos públicos al frente de la Casa es el momento en el que más machacada se encuentra la institución por culpa de los asuntos que afectan sólo a Emérito.

Pero esta historia viene de muy atrás. "Ella fue tildada de fría, altiva y calculadora por su suegro y sus cuñadas. Pero para ella fue un verdadero shock cuando entró a vivir en Zarzuela en noviembre de 2003 -por motivos de seguridad- y se topó con una realidad de la que los españoles nos estamos enterando en dosis pequeñas. De familia real nada, sino una familia completamente desestructurada con una aparición nueva en un año: Corinna" cuenta a EL ESPAÑOL otra persona muy cercana a Letizia.

Con el estallido del Caso Nóos, con Iñaki Urdangarin y la Infanta Cristina sentados en el banquillo de los acusados, una grieta enorme se abrió en el dique de contención que sujetaba las aguas supuestamente tranquilas de Zarzuela. Pero la presa se rompió tras el accidente de Juan Carlos en Botsuana en 2012, lo que produjo una cascada de noticias del todo comprometedoras para el Emérito y que en la actualidad, siguen saliendo a la luz sin control. Hasta que se produjo la abdicación y el relevo en la Corona en 2014, Letizia vivió un calvario que se vio reflejado en la crisis matrimonial que vivieron los actuales Reyes en 2013.

"Que se divorcien"

La consorte abandonó la isla de Mallorca, de forma inesperada, dejando a su marido y a sus dos hijas en el Palacio de Marivent sin explicación ninguna. Fue entonces cuando su suegro le pidió con insistencia a su hijo Felipe que se divorciara de la ex periodista. ‘Esas semanas fueron muy duras para ellos dos. Sobre todo, por el padre de él, quien no paraba de decir que la mejor solución era que se divorciara, que nunca se tenía que haber casado con ella. Y eso delante de todo el mundo, daba igual que fuera personal del servicio, miembros de seguridad o unos invitados a una cena. Él lo soltaba así sin más, y por entonces todavía era el Rey", recuerda la misma fuente.

Ya con Felipe VI en el trono, la casi nula relación entre la Reina y su suegro ha sido imposible de arreglar. Letizia no ha querido ni disimular más que lo justo y salvo en ocasiones muy señaladas, no ha querido aparecer junto a su suegro. Eso fue lo que ocurrió en 2016 cuando todos los Borbón celebraron el 80 cumpleaños de la Infanta Pilar. La Reina, a pesar de que sabía que iba a dar mucho que hablar, no acudió. En el mismo aniversario -80 años-, pero esta vez de Juan Carlos, sí estuvo presente en la celebración que tuvo lugar en Zarzuela, pero fue lo justo y necesario para hacerse la foto. Una fotografía en la que, por cierto, aparecía Juan Carlos tullido. Luego la reina desapareció con sus dos hijas rumbo al Pabellón del Príncipe, su casa.

En la triste Crisis de las Reina, entre Letizia y su suegra a la salida de la Misa de Resurrección de 2018, don Juan Carlos afeó el gesto de su nuera diciéndole a su hijo: "Si no quiere venir, que no venga", delante de las cámaras de televisión. Claro, que con el gesto de la esposa de Felipe VI el comentario del Emérito pareció una minucia.

"Lo único bueno, si es que tiene un lado positivo, es que ella va a salir reforzada de todo esto porque al final Letizia tenía razón. Igual no es tan campechana como los Borbón, pero va a resultar que es mucho más profesional y real que el resto de la familia", sentencia una amiga de la Reina.

 
Rumores de que lo de la foto en Emiratos Arabes Unidos solo fue un despiste porque se trataba de una escala técnica antes de proseguir el vuelo hacia Nueva Zelanda.

https://www.elnacional.cat/enblau/e...da-auckland-abu-dhabi-alcazar_528891_102.html
No es por nada especial, solo faltaria al Willy Fog nacional de españa que al llegar a Auckland hubiera alguno de los terremotos habituales en esta zona y ya veo a Willy Fog nacional de españa salir despedido como un bolido hasta aterrizar sus reales posaderas dentro de uno de los grandes charcos de agua caliente sulfurosa que hay en los pueblos maories de la zona de Roturoa.

Puede que luego de la inmersion involuntaria hasta se le curan al instante todos sus problemas oseos y se queda unos dias para rematar el descanso , ponerse en forma y quitarse el olor a podrido de las aguas sulfurosas.

Si despues de todo esto el Willy Fog nacional de españa se le ocurre regresar alla por el mes de septiembre, a kk le daria el parraque definitivo y al preparao un ataque de cagalera aguda.

Claro es que esta ruta de Abu Dabi a Aucckand hay mas de 14.000 kilometros, por lo que el viaje puede que lo haga en cuatro o cinco etapas, de lo contrario el parraque definitivo puede darle al Willy Fog nacional de españa, su corazon no es probable que resistiera por mucho que este ilusionado en tomarse unas vacaciones en Nueva Zelanda.
 
No es por nada especial, solo faltaria al Willy Fog nacional de españa que al llegar a Auckland hubiera alguno de los terremotos habituales en esta zona y ya veo a Willy Fog nacional de españa salir despedido como un bolido hasta aterrizar sus reales posaderas dentro de uno de los grandes charcos de agua caliente sulfurosa que hay en los pueblos maories de la zona de Roturoa.

Puede que luego de la inmersion involuntaria hasta se le curan al instante todos sus problemas oseos y se queda unos dias para rematar el descanso , ponerse en forma y quitarse el olor a podrido de las aguas sulfurosas.

Si despues de todo esto el Willy Fog nacional de españa se le ocurre regresar alla por el mes de septiembre, a kk le daria el parraque definitivo y al preparao un ataque de cagalera aguda.

Claro es que esta ruta de Abu Dabi a Aucckand hay mas de 14.000 kilometros, por lo que el viaje puede que lo haga en cuatro o cinco etapas, de lo contrario el parraque definitivo puede darle al Willy Fog nacional de españa, su corazon no es probable que resistiera por mucho que este ilusionado en tomarse unas vacaciones en Nueva Zelanda.

Hace un viaje por el mundo y si está en Nueva Zelanda tiene la ventaja de librarse de los calores estivales del hemisferio norte porque allí es invierno y además es un país con una de las tasas de contagio de covid-19 más bajos del planeta aunque deberá someterse a una cuarentena al llegar. Ideal para alguien como él por ser ser una persona de alto riesgo debido a su edad y antecedentes médicos. En septiembre estaría regresando a España para instalarse comodamente en Galicia.
 
La 'venganza' de Letizia tras años de humillaciones de Juan Carlos: así vivió la marcha de su suegro


"Cómo se entere la prensa de que ha estado en el Caribe…". Aunque esta frase se podía fechar perfectamente en uno de los días de esta semana pasada en el despacho de la Reina Letizia, lo cierto es que fue un comentario de la esposa de Felipe VI a una persona de su equipo a principios del mes de marzo. Las palabras salieron de la boca de Letizia días antes de que se declarara en España el estado de alarma en todo el país cuando su suegro, el Emérito Juan Carlos, llegaba a Zarzuela tras su último viaje, en el que tuvo como anfitriones a los Fanjul, primero en su casa de la República Dominicana y luego, en su mansión de Palm Beach, en Florida. Por eso, si el Emérito se ha instalado en la isla caribeña nadie se extrañaría dentro de la Casa.

"El problema es que la prensa está segura de que se ha visto forzado a irse, pero en realidad, él se lo está tomando como unas vacaciones. El Emérito quería salir al extranjero en agosto, al igual que otros años. Y le ha venido genial esta presión para poder marcharse", confiesa a EL ESPAÑOL una fuente muy cercana a la Reina Letizia. "Porque si se llega a ir de vacaciones y le pillan en pleno escándalo tomando el sol en el Caribe… Así que si quería irse tenía que anunciarlo y aprovechar una salida, que en otros tiempos se hubieran llamado vacaciones, para presentarse como que se está inmolando para quitarle la presión a Zarzuela. Pero él va diciendo a todo el mundo que en septiembre está de vuelta. Y eso saca de quicio a Letizia, le parece tan injusta la solución que se ha tomado", prosigue relatando a este diario el mismo interlocutor.

"Ella ha dicho que no quiere saber mucho de este asunto porque ya le dijo a su marido que hicieran lo que hicieran les iba a perjudicar y mucho. Aunque hay mucha gente que asegura que Letizia se debe estar frotando las manos, lo cierto es que está muy preocupada, pero no por Juan Carlos. No siente ningún cariño por su suegro, pero sí por su marido, él lo está pasando fatal. Ella es consciente de que Felipe ha querido dar un golpe de efecto con esto, pero sabe que el tiro les puede salir por la culata. Desde luego, ella jamás hubiera dejado que se marchara a la República Dominicana, de esto estoy segura", asegura una amiga de la Reina a este diario.

Vacaciones distintas o no, la verdad es que Letizia no le tiene mucho cariño a los días que pasa en Mallorca, ya que ella no los considera como de descanso, sino más bien como un traslado de oficina. Pero con los años, la cosa ha mejorado sustancialmente para la esposa de Felipe VI, ya que antes tenía que pasar la semana en Baleares con sus suegros, Juan Carlos y Sofía, sus cuñadas, las Infantas Elena y Cristina con sus maridos y sus respectivas proles. Pero verano tras verano, de la ecuación multitudinaria que se montaba en Marivent y de la que nadie conocía el resultado, se han ido cayendo muchos de los componentes para quedarse tan solo con su suegra, con la que mantiene, desde la famosa Crisis de las Reinas un pacto de no agresión. "Así que para ella la cosa ha mejorado bastante. A Sofía sólo la ve cuando es necesario, al igual que ocurre en Madrid, así que pasa los días en la isla mucho mejor. Y desde que no va su suegro, pues feliz", añade la misma persona.

La batalla personal

La batalla personal entre Juan Carlos y Letizia viene desde el primero momento en el que la ex periodista pisa Zarzuela en 2003. Para el Emérito una mujer divorciada no es "lo mejor" para su hijo y mucho menos para la Corona. Así que ambos están unidos, además de por Felipe VI, por la animadversión que se profesan el uno al otro desde el primer momento. Una grieta insalvable que se abrió el primer día que su hijo le anunció su intención de casarse con Letizia Ortiz Rocasolano. El entonces Jefe del Estado le dijo a su heredero: "Te vas a cargar la Monarquía si te casas con ella". Poco podía imaginar que era él, casi dos décadas después el que la iba, con sus negocios poco ejemplares quien iba a hacer peligrar la institución.

Las personas cercanas a la Consorte reconocen que lo que no le perdona a Juan Carlos -por encima de todo lo demás- es el grave daño que le está causando a una institución por la que tanto están trabajando su familia y ella. La Reina sufre por el hecho de que Leonor y Sofía estén siendo utilizadas -en cierta manera- como máquinas para endulzar y limpiar la imagen de la Corona en estos duros momentos. Justo ahora, cuando las dos hijas de los Reyes comenzaban a dar sus primeros pasos públicos al frente de la Casa es el momento en el que más machacada se encuentra la institución por culpa de los asuntos que afectan sólo a Emérito.

Pero esta historia viene de muy atrás. "Ella fue tildada de fría, altiva y calculadora por su suegro y sus cuñadas. Pero para ella fue un verdadero shock cuando entró a vivir en Zarzuela en noviembre de 2003 -por motivos de seguridad- y se topó con una realidad de la que los españoles nos estamos enterando en dosis pequeñas. De familia real nada, sino una familia completamente desestructurada con una aparición nueva en un año: Corinna" cuenta a EL ESPAÑOL otra persona muy cercana a Letizia.

Con el estallido del Caso Nóos, con Iñaki Urdangarin y la Infanta Cristina sentados en el banquillo de los acusados, una grieta enorme se abrió en el dique de contención que sujetaba las aguas supuestamente tranquilas de Zarzuela. Pero la presa se rompió tras el accidente de Juan Carlos en Botsuana en 2012, lo que produjo una cascada de noticias del todo comprometedoras para el Emérito y que en la actualidad, siguen saliendo a la luz sin control. Hasta que se produjo la abdicación y el relevo en la Corona en 2014, Letizia vivió un calvario que se vio reflejado en la crisis matrimonial que vivieron los actuales Reyes en 2013.

"Que se divorcien"

La consorte abandonó la isla de Mallorca, de forma inesperada, dejando a su marido y a sus dos hijas en el Palacio de Marivent sin explicación ninguna. Fue entonces cuando su suegro le pidió con insistencia a su hijo Felipe que se divorciara de la ex periodista. ‘Esas semanas fueron muy duras para ellos dos. Sobre todo, por el padre de él, quien no paraba de decir que la mejor solución era que se divorciara, que nunca se tenía que haber casado con ella. Y eso delante de todo el mundo, daba igual que fuera personal del servicio, miembros de seguridad o unos invitados a una cena. Él lo soltaba así sin más, y por entonces todavía era el Rey", recuerda la misma fuente.

Ya con Felipe VI en el trono, la casi nula relación entre la Reina y su suegro ha sido imposible de arreglar. Letizia no ha querido ni disimular más que lo justo y salvo en ocasiones muy señaladas, no ha querido aparecer junto a su suegro. Eso fue lo que ocurrió en 2016 cuando todos los Borbón celebraron el 80 cumpleaños de la Infanta Pilar. La Reina, a pesar de que sabía que iba a dar mucho que hablar, no acudió. En el mismo aniversario -80 años-, pero esta vez de Juan Carlos, sí estuvo presente en la celebración que tuvo lugar en Zarzuela, pero fue lo justo y necesario para hacerse la foto. Una fotografía en la que, por cierto, aparecía Juan Carlos tullido. Luego la reina desapareció con sus dos hijas rumbo al Pabellón del Príncipe, su casa.

En la triste Crisis de las Reina, entre Letizia y su suegra a la salida de la Misa de Resurrección de 2018, don Juan Carlos afeó el gesto de su nuera diciéndole a su hijo: "Si no quiere venir, que no venga", delante de las cámaras de televisión. Claro, que con el gesto de la esposa de Felipe VI el comentario del Emérito pareció una minucia.

"Lo único bueno, si es que tiene un lado positivo, es que ella va a salir reforzada de todo esto porque al final Letizia tenía razón. Igual no es tan campechana como los Borbón, pero va a resultar que es mucho más profesional y real que el resto de la familia", sentencia una amiga de la Reina.



Ahora los lameculos se dedican a limpiar el culo de kk para despues ensalzar su imagen. Me divierto con todo esta comedia de enredos que se han montado.
 
Hace un viaje por el mundo y si está en Nueva Zelanda tiene la ventaja de librarse de los calores estivales del hemisferio norte porque allí es invierno y además es un país con una de las tasas de contagio de covid-19 más bajos del planeta aunque deberá someterse a una cuarentena al llegar. Ideal para alguien como él por ser ser una persona de alto riesgo debido a su edad y antecedentes médicos. En septiembre estaría regresando a España para instalarse comodamente en Galicia.
Fijate tu yo NO sabia que en Nueva Zelanda es invierno, bueno en todo caso las aguas sulfurosas de Roturoa esta muy calientes tanto en invierno como en verano. Yo como estoy en España NO me entero de si en septiembre se instalara comodamente en Galicia o marchara a Punta Arenas a ver los pingüinos . De Willy Fog nunca se sabe a donde piensa ir, va y con un poco de suerte nos enteramos tiempo despues.
 
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