Secretos a voces

sí, el cabal y medio. Peor que él señorito, al señorito le encanta que lo tomen por un caradura, el otro va de buenón, no le gusta que una mano sepa lo que hace la otra. Si no enseñas a la novia ligs mucho mejor. La familia encantada, si el tito no sienta cabeza se quedan con todo, y el tito gana pasta hasta decir basta.

No sé si fue en este mismo hilo que escribí sobre el tontaina y medio.Desde entonces le tengo atravesado;En un programa de corazón ,hace muchos años ,entrevistaron al primer novio de Vania Millán y contó algo sobre el tipo éste que no me gustó un pelo. Ojalá alguien lo recordara o pudiera ampliar más la información, porque me dio justo la impresión de lo que decís aquí, que es un personaje que va de enrollado y tal y lo que contó el novio de esta chica sobre él despedía un tufo a machismo y misoginia que asustaban. Por cierto, la que presenta con él en Canal Sur es patética y está puesta ahí a su medida.
 
Última edición:
Fernando era Guapo, pero Antonio es guapisimo ( y supertimido)

Me encantaba Fernando, lo habré escrito un montón de veces y seguiré repitiéndome; era mi ídolo.:love:
A Antonio lo veía no hace tanto con sus perros cerca de casa, ahora ya no.
 
Me encantaba Fernando, lo habré escrito un montón de veces y seguiré repitiéndome; era mi ídolo.:love:
A Antonio lo veía no hace tanto con sus perros cerca de casa, ahora ya no.
Te entiendo. Aunque en mi caso mi ídolo era Antonio. Lo de que pasea a los perros, no eres la primera persona a la que se lo oigo decir.
 
La hijísima (que aún vive) fue un día de excursión con sus compañeras del club de alto copete al que pertenecía (o aún pertenece porque esto ocurrió no hace mucho) en autocar.
En mitad del viaje la hijísima se hace caca.
Acostumbrada que está ella a que la sirvan no se le ocurrió otra cosa que decir en voz alta:
-¡que vengan a limpiarme!.
Naturalmente, todas sus compañeras del autocar se tapaban la nariz y miraban para otro lado disimulando.
Tuvo que ser ella sola la que fue a limpiarse al lavabo del autocar.
 
La hijísima (que aún vive) fue un día de excursión con sus compañeras del club de alto copete al que pertenecía (o aún pertenece porque esto ocurrió no hace mucho) en autocar.
En mitad del viaje la hijísima se hace caca.
Acostumbrada que está ella a que la sirvan no se le ocurrió otra cosa que decir en voz alta:
-¡que vengan a limpiarme!.
Naturalmente, todas sus compañeras del autocar se tapaban la nariz y miraban para otro lado disimulando.
Tuvo que ser ella sola la que fue a limpiarse al lavabo del autocar.

Ni la más remota idea de quien es.
 
La hijísima (que aún vive) fue un día de excursión con sus compañeras del club de alto copete al que pertenecía (o aún pertenece porque esto ocurrió no hace mucho) en autocar.
En mitad del viaje la hijísima se hace caca.
Acostumbrada que está ella a que la sirvan no se le ocurrió otra cosa que decir en voz alta:
-¡que vengan a limpiarme!.
Naturalmente, todas sus compañeras del autocar se tapaban la nariz y miraban para otro lado disimulando.
Tuvo que ser ella sola la que fue a limpiarse al lavabo del autocar.
Pistilla, please
 

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