Por cierto, estos días he hablado con una tía mía muy mayorina a la que quiero mucho. No la veo todo lo que me gustaría (vivimos a 600 km), pero la llamo siempre que puedo. Es muy mayor (+90) pero mantiene la lucidez y la brillantez de siempre. Me encanta hablar con ella, porque relativiza mucho todo, con la distancia que le da el haber vivido mucho. Comentar los temas de actualidad con ella es un cachondeo, porque le saca punta a todo y siempre te terminas riendo. No solemos hablar de cosas tristes, pero salió el tema de la guerra (pese a su edad es una intrepida internauta y lee mucho), no mencionamos mucho, pero me dijo una cosa que me hizo mucha gracia y quiero contaros aquí, porque como decía Fray Guillermo, la risa es el mejor antídoto contra el miedo.
El caso es que me dice: A ese que sale siempre de Ucrania, que está siempre que parece que le deben dinero, ya sólo le falta sacar a Franco en el discurso y echarle la culpa de todo. Y cuando haga rezongado bien de Franco, entonces que empiece a quejarse de la ETA. Que no critique más al Putin, que eso ya es muy aburrido, que saque a Franco y la ETA que le va a ir mejor. Mira los políticos españoles que bien viven gracias a esos dos temas.
Me salió un carcajadón que casi me cae el teléfono. Y luego pensé, que lo que me decía era una gran verdad. Ay, mi tía, cuánto la quiero!
El caso es que me dice: A ese que sale siempre de Ucrania, que está siempre que parece que le deben dinero, ya sólo le falta sacar a Franco en el discurso y echarle la culpa de todo. Y cuando haga rezongado bien de Franco, entonces que empiece a quejarse de la ETA. Que no critique más al Putin, que eso ya es muy aburrido, que saque a Franco y la ETA que le va a ir mejor. Mira los políticos españoles que bien viven gracias a esos dos temas.
Me salió un carcajadón que casi me cae el teléfono. Y luego pensé, que lo que me decía era una gran verdad. Ay, mi tía, cuánto la quiero!