Yo no creo que tenga que ver con los excesos, que los tuvo en su juventud, pero como mucha gente de su edad. Hay quienes siguen fumando hasta la vejez y nunca desarrollan nada y se mueren de viejos, hay quien nunca ha fumado y desarrolla ésta y otras enfermedades pulmonares por cuestiones genéticas o medio ambientales. Mette Marit dejó de fumar muy jóven y lleva una vida sana. Yo tiendo a pensar, por el largo proceso hasta el diagnóstico, que probablemente es algo genético que desarrolla en ella autoinmunidad. Es arriesgar con esta afirmación, pero tengo esa sospecha. En todo caso, su padre murió de cáncer de pulmón: está claro que este órgano no es el fuerte, genéticamente hablando, en su familia.A mi me da que esta mujer cometió muchos excesos en su juventud.No digo que no le pueda pasar a cualquiera pero está claro que la vida que llevaba de joven no era la adecuada.
Todas las personas que conozco con adicciones independientemente de que las suelan superar o no, no suelen acabar muy bien.
Al llegar o aproximarse a los cincuenta años les termina pasando algo.
El cuerpo tiene memoria y lo acumula todo.