Helados

Cómo hacer helados saludables y caseros con pocos ingredientes

Son los piscolabis más consumidos durante el verano, pues refrescan el paladar, ponen el sabor a las sobremesas estivales o endulzan los momentos veraniegos. Aprende elaborar helados caseros fácilmente y con pocos ingredientes


Sonia Fernández. Mie, 15 Ago 2018

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Con el aumento de las temperaturas en los termómetros durante la época estival el paladar pide refrigerios que lo refresquen y el cuerpo viandas que aplaquen el sopor veraniego. Los helados son los dulces que cumplen perfectamente con dichos cometidos. De fresa, de chocolate, de vainilla, de frutas..., las carta de sabores heladeros ofrece toda una suerte de alternativas clásicas o más creativas y sorprendentes para todos los gustos. Claro que, cuando nuestra intención es cuidar la línea, estos placeres helados se convierten en poco recomendables. Aunque los helados industriales nos hacen felices, pues activan el centro del placer del cerebro y recrean sensación de complacencia, suelen ser ricos en grasas ( entre el 8 % y el 12 %), en estabilizantes, en colorantes artificiales, en hidratos de carbono y, por ende, en calorías.


Los helados caseros son más saludables y permiten descubrir sabores distintos



Por tanto, los helados son poco amigos de una dieta sana y enemigos de la báscula. Sin embargo, siempre existe la opción de crearlos en casa y, así, saborear propuestas más sanas y saludables o descubrir sabores distintos e innovadoresno disponibles en las cartas de helados. He aquí algunas versiones heladas hechas con pocos ingredientes, ricas y sabrosas, para cuya elaboración no es necesario ser un maestro heladero profesional.

Con un ingrediente
  • De plátano. Únicamente con esta fruta se puede crear un rico y saludable refrigero veraniego. Lo único que hay que hacer es cortar tres o cuatro plátanos (cuanto más maduros, mejor) en rodajas, congelarlas durante unas tres horas y, finalmente, pasarlas por la licuadora hasta crear una crema homogénea. En caso de querer darle un toque salado, se pueden añadir frutos secos, como nueces o almendras. Si, por el contrario, se busca conferir un matiz más dulzón, lo ideal es echarle frutas desecadas, como los dátiles o las uvas pasas.
Esta receta helada también admite de buen grado otras frutas, como fresas, incluso una macedonia de varias. El proceso de elaboración es el mismo que para el caso del plátano y el resultado es igual de refrescante, de sabroso y de saludable, pues carece de azúcares y grasas.



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Foto: iStock


  • De yogur. Para crear este capricho helado solamente hay que verter el yogur del sabor elegido en un bol, introducirlo en el congelador durante aproximadamente tres horas y, finalmente, batirlo con las varillas para eliminar los restos de hielo y, así, lograr una crema fina y bien ligada. Las variedades naturales o griego de este postre lácteo pueden resultar un poco monótonas. Para darle un poco de alegría o potenciar su sabor, se pueden añadir varios toppings: frutos secos, virutas de chocolate, trozos de galleta o pedazos de frutas, mejor si están previamente congeladas.
  • De zumo. Con dos sencillos gestos se logra una propuesta helada saludable, nutritiva e hipocalórica, que, además, constituye una excelente opción para reinventar los jugos más clásicos, como el de naranja, el de melocotón o el de piña. Lo único que hay que hacer es verter el zumo, mejor casero que industrial, en un molde y congelarlo durante unas cuatro horas. En el caso de los jugos de cítricos, hay quien opta por añadir un chorro de algún licor con matices dulces, como Cointreau o Amaretto, para contrarrestar su sabor ácido.


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Foto: iStock



También se pueden crear polos refrescantes y con un toque chispeante, sobre todo para los pequeños de la casa, con refrescos de cola, de naranja o de limón. Para hacerlos, se comienza hervir el líquido durante una media hora. Trascurrido dicho tiempo, se deja que temple. Posteriormente, se echa en un molde y se introduce el palo que sustentará el polo. Finalmente, se mete en el congelador durante cinco o seis horas.

Con dos y tres ingredientes
  • De coco. Esta propuesta es una de las más exóticas del universo heladero y una excelente alternativa a los sabores clásicos. Se crea mezclando la nata previamente montada con crema de coco y congelando la mezcla. El truco para que la mixtura quede sin grumos y uniforme está en removerla cada cierto tiempo. Unas hojas de menta darán un toque aromático y distintivo a este manjar helado.
  • De vainilla. Con leche condensada y nata montada se crea este sabor clásico del repertorio heladero. Para ello, únicamente hay que mezclar la leche condensada y la nata montada, remover hasta lograr una crema sin grumos y uniforme y meterla en el congelador durante cuatro o cinco horas. Para añadir un extra de sabor a este dulce refrigerio, se puede regar con unas gotas de licor, de sirope de caramelo o chocolate y agregar chips de chocolate o de galleta.


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Foto: iStock


  • De chocolate. Nata, leche y chocolate negro son los ingredientes que se necesitan para crear este sabor helado universal. El proceso de elaboración es fácil: fundir el chocolate con la leche al baño maría, montar la nata, mezclar todos los ingredientes y, para terminar, congelar durante seis horas aproximadamente.
  • De café. Con nata, leche condensada y café soluble se crea este dulce helado. El proceso es tan sencillo como el resto de las propuestas: mezclar el cafésoluble y la nata previamente montada y, finalmente, congelar durante unas doce horas. Para que el resultado sea perfecto, se aconseja que la nata esté bien fría a la hora de montarla. Además, es importante remover periódicamente la mezcla en su proceso de congelación para evitar la aparición de grumos, que esta se cristalice y, por tanto, se produzcan modificaciones en la textura.

https://www.alimente.elconfidencial...-15/hacer-helados-pocos-ingredientes_1599646/
 
Mi helado preferido depende d ela calidad. Por ejemplo dependiendo de esto podría decir que me encanta el helado de frambuesa bien hecho, artesanal, con mucho sabor o soy incapaz de terminarlo si me sabe demasiado artificial. Partiendo de esta premisa me gusta mucho el de turrón, mantecado, regaliz, fresa, frambuesa, chocolate (si no es bueno es el peor que me pueden ofrecer), crema de coco y nata. Nata, según mi opinión es el más difícil de conseguir, porque como no lleva más aroma, ahí se nota la calidad de la leche, pero si lo hacen bien una delicia, me encanta con frutas escarchadas, el tutti frutti antiguo.
Pero debo reconocer que en fruta me gusta más el sorbete, y el chocolate en sorbete también me gusta más que el helado de chocolate. Dentro de los sorbetes el que más me gusta es el de cassis o grosella.
Lo que no me gusta mucho son esos helados nuevos con toda clase de cookies dentro, me empalagan.

En cuanto al helado casero, también con las heladeras normales, es muy difícil de conseguir, le falta algo. Para casa queda mejor el semi-frio, parfait, semifreddo, biscuit o como quiera llamarse que contiene más huevo y nata montada, es como una crema bavaresa pero sin gelatina. como no tiene la consistencia tan firme como el helado, lo sirvo a rebanadaso desmoldado. Suelo hacer lo de moca.
 
Cómo hacer helados saludables y caseros con pocos ingredientes

Son los piscolabis más consumidos durante el verano, pues refrescan el paladar, ponen el sabor a las sobremesas estivales o endulzan los momentos veraniegos. Aprende elaborar helados caseros fácilmente y con pocos ingredientes


Sonia Fernández. Mie, 15 Ago 2018

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Con el aumento de las temperaturas en los termómetros durante la época estival el paladar pide refrigerios que lo refresquen y el cuerpo viandas que aplaquen el sopor veraniego. Los helados son los dulces que cumplen perfectamente con dichos cometidos. De fresa, de chocolate, de vainilla, de frutas..., las carta de sabores heladeros ofrece toda una suerte de alternativas clásicas o más creativas y sorprendentes para todos los gustos. Claro que, cuando nuestra intención es cuidar la línea, estos placeres helados se convierten en poco recomendables. Aunque los helados industriales nos hacen felices, pues activan el centro del placer del cerebro y recrean sensación de complacencia, suelen ser ricos en grasas ( entre el 8 % y el 12 %), en estabilizantes, en colorantes artificiales, en hidratos de carbono y, por ende, en calorías.


Los helados caseros son más saludables y permiten descubrir sabores distintos



Por tanto, los helados son poco amigos de una dieta sana y enemigos de la báscula. Sin embargo, siempre existe la opción de crearlos en casa y, así, saborear propuestas más sanas y saludables o descubrir sabores distintos e innovadoresno disponibles en las cartas de helados. He aquí algunas versiones heladas hechas con pocos ingredientes, ricas y sabrosas, para cuya elaboración no es necesario ser un maestro heladero profesional.

Con un ingrediente
  • De plátano. Únicamente con esta fruta se puede crear un rico y saludable refrigero veraniego. Lo único que hay que hacer es cortar tres o cuatro plátanos (cuanto más maduros, mejor) en rodajas, congelarlas durante unas tres horas y, finalmente, pasarlas por la licuadora hasta crear una crema homogénea. En caso de querer darle un toque salado, se pueden añadir frutos secos, como nueces o almendras. Si, por el contrario, se busca conferir un matiz más dulzón, lo ideal es echarle frutas desecadas, como los dátiles o las uvas pasas.
Esta receta helada también admite de buen grado otras frutas, como fresas, incluso una macedonia de varias. El proceso de elaboración es el mismo que para el caso del plátano y el resultado es igual de refrescante, de sabroso y de saludable, pues carece de azúcares y grasas.



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Foto: iStock


  • De yogur. Para crear este capricho helado solamente hay que verter el yogur del sabor elegido en un bol, introducirlo en el congelador durante aproximadamente tres horas y, finalmente, batirlo con las varillas para eliminar los restos de hielo y, así, lograr una crema fina y bien ligada. Las variedades naturales o griego de este postre lácteo pueden resultar un poco monótonas. Para darle un poco de alegría o potenciar su sabor, se pueden añadir varios toppings: frutos secos, virutas de chocolate, trozos de galleta o pedazos de frutas, mejor si están previamente congeladas.
  • De zumo. Con dos sencillos gestos se logra una propuesta helada saludable, nutritiva e hipocalórica, que, además, constituye una excelente opción para reinventar los jugos más clásicos, como el de naranja, el de melocotón o el de piña. Lo único que hay que hacer es verter el zumo, mejor casero que industrial, en un molde y congelarlo durante unas cuatro horas. En el caso de los jugos de cítricos, hay quien opta por añadir un chorro de algún licor con matices dulces, como Cointreau o Amaretto, para contrarrestar su sabor ácido.


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También se pueden crear polos refrescantes y con un toque chispeante, sobre todo para los pequeños de la casa, con refrescos de cola, de naranja o de limón. Para hacerlos, se comienza hervir el líquido durante una media hora. Trascurrido dicho tiempo, se deja que temple. Posteriormente, se echa en un molde y se introduce el palo que sustentará el polo. Finalmente, se mete en el congelador durante cinco o seis horas.

Con dos y tres ingredientes
  • De coco. Esta propuesta es una de las más exóticas del universo heladero y una excelente alternativa a los sabores clásicos. Se crea mezclando la nata previamente montada con crema de coco y congelando la mezcla. El truco para que la mixtura quede sin grumos y uniforme está en removerla cada cierto tiempo. Unas hojas de menta darán un toque aromático y distintivo a este manjar helado.
  • De vainilla. Con leche condensada y nata montada se crea este sabor clásico del repertorio heladero. Para ello, únicamente hay que mezclar la leche condensada y la nata montada, remover hasta lograr una crema sin grumos y uniforme y meterla en el congelador durante cuatro o cinco horas. Para añadir un extra de sabor a este dulce refrigerio, se puede regar con unas gotas de licor, de sirope de caramelo o chocolate y agregar chips de chocolate o de galleta.


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  • De chocolate. Nata, leche y chocolate negro son los ingredientes que se necesitan para crear este sabor helado universal. El proceso de elaboración es fácil: fundir el chocolate con la leche al baño maría, montar la nata, mezclar todos los ingredientes y, para terminar, congelar durante seis horas aproximadamente.
  • De café. Con nata, leche condensada y café soluble se crea este dulce helado. El proceso es tan sencillo como el resto de las propuestas: mezclar el cafésoluble y la nata previamente montada y, finalmente, congelar durante unas doce horas. Para que el resultado sea perfecto, se aconseja que la nata esté bien fría a la hora de montarla. Además, es importante remover periódicamente la mezcla en su proceso de congelación para evitar la aparición de grumos, que esta se cristalice y, por tanto, se produzcan modificaciones en la textura.

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El de los plátanos maduros lo hago de vez en cuando pra mis hijos, se hace en un pispas y a ellos les gusta mucho. Siempre tengo plátanos en el congelador, muy buenos para los batidos, les da cuerpo y se ahorra azúcar.
 
Helado casero de avellanas
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Info.
Ingredientes para Helado casero de avellanas
  • 200 g. de avellanas tostadas
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 3 yemas de huevos grandes
  • 300 ml de leche entera.
  • 150 ml de miel gallega
  • 300 ml de nata montar o crema de leche 35% MG


Cómo preparar un helado de avellanas. Seguimos con recetas de helados cremosos que tanto gustan en casa, después del helado de turrón le llega el turno al segundo favorito en casa, el helado de avellanas.

Después de varias pruebas nos quedemos con esta receta, un postre lleno de sabor a avellanas que satisface nuestra pasión por los frutos secos, con toda la untuosidad de la base láctea y el dulzor de la mejor miel gallega que recoge mi amigo Suso en sus colmenas lucenses.

Las avellanas son una buena fuente de proteínas y grasas monoinsaturadas, reducen el colesterol malo e incrementan ligeramente el colesterol bueno, además son ricas en vitamina E que mantiene súper sana nuestra piel y el corazón. Quizás son uno de los mejores frutos secos y debemos comerlas habitualmente, bien en una ensalada, salteadas, con los cereales para el desayuno o como en este postre helado.

En la despensa de casa siempre tenemos unas cuantas ya que se conservan mejor que otros frutos secos al contener menos grasas y actuar su vitamina E como conservante. Os recomiendo comprarlas enteras, ya que las trituradas contienen menos nutrientes.

Os dejo con un helado súper fácil de hacer sin ningún ingredientes raro, sólo huevos, leche, nata, miel y frutos secos, una combinación genial y todo un clásico. Para que veáis que para hacer un helado cremoso y suave no hace falta utilizar azúcar invertido, montar claras, crema de leche, nata o añadirle creme fraiche.

No tenéis excusa para poneros manos a la obra y hacer vuestro propio helado de avellanas casero.

Preparación de la pasta de avellana
Este helado lo podemos hacer con o sin heladera, la diferencia es mínima pues la base grasa de los aceites de las avellanas y los lácteos, facilita su preparación. Os explico como hacerlo de las dos maneras.

  1. Añadimos la nata líquida y la leche entera a una cazuela y calentamos hasta que se temple.
  2. Trituramos con la picadora las avellanas hasta que queden lo más finas posible.
  3. Apartamos unos 50 g de las avellanas picadas para añadir al final del proceso de mantecado y el resto lo pasamos por mortero, hasta que se forme una crema ligera.
  4. Primero convertiremos en polvo las avellanas trituradas y luego. Ayudado con dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra, haremos una pasta de avellana.
  5. El proceso de triturado nos llevará unos 15 minutos. En él la avellana soltará su aceite y se transformará en una papilla líquida simplemente deliciosa. Ideal para este helado o para otros postres.
  6. Imprescindible para poder hacer el famoso praliné que empleamos en otras recetas dulces.
Preparación de la base de nuestro helado de avellanas
  1. Una vez preparada la pasta base de avellanas para el helado. Separamos los huevos. Lo mejor es cascar el huevo con más cuidado de lo normal.
  2. Exactamente por el centro para realizar una abertura entre las dos mitades en la que quepa el dedo pulgar. Nos podemos ayudar de un cuchillo.
  3. Sostenemos el huevo sobre un cuenco y con el extremo más ancho hacia abajo. Levantamos con cuidado la mitad más pequeña de la cáscara.
  4. Caerá parte de la clara en el cuenco, mientras que la yema permanecerá en la mitad más grande de la cáscara.
  5. Deslizamos con cuidado la yema hacia el trozo pequeño de la cáscara y luego de nuevo hacia la grande para que el resto de la clara caiga en el cuenco.
  6. De ahí a otro cuenco con el resto de la yemas que hemos separado. Parece fácil y lo es, pero lo mejor es hacerlo varias veces, la práctica hará que sea súper sencillo.
  7. Batimos las yemas manualmente con unas varillas o un simple tenedor hasta que se quede como una crema.
  8. Añadimos a la crema de leche-nata las yemas, la miel y las avellanas.
  9. Batimos todo muy bien hasta que los ingredientes estén bien integrados.
  10. Dejamos unos minutos a fuego lento y sin dejar de remover. Así lograremos que la crema se integre bien hasta que espese un poco. Importante que no debe llegar a hervir o se cortará.
Preparación del helado de avellanas. Manualmente
  1. Dejamos enfriar la crema de avellanas completamente antes de meterla en un recipiente o táper.
  2. Metemos toda la mezcla en la nevera. Debemos dejarla allí por lo menos tres horas antes de empezar a trabajar con ella.
  3. Si hacemos el helado con heladera tenemos que dejar la crema varias horas en la nevera y luego podremos mantecarlo. Mantecar es convertir la crema que tenemos en una especie de mantequilla donde debemos ir rompiendo los cristales de hielo a través del movimiento e introduciendo aire a la mezcla.
  4. Es el paso más importante para lograr nuestro objetivo: el helado cremoso. Introducimos el aire en la mezcla ya sea con el batido manual o con heladera.
  5. Manualmente. Cuando hagamos el helado sin heladera mi recomendación es tener la crema en la nevera unas tres horas y luego pasar al congelador otra hora más de reposo.
  6. Finalmente estaremos otras dos horas y media removiendo el helado en el congelador cada poco tiempo para ir rompiendo la cristalización.
  7. Para remover, lo sacamos y pasamos la crema a un bol de metal que previamente hemos tenido en la nevera. Tiene que estar muy frío.
  8. Batimos con unas varillas para evitar la formación los cristales. Ya que por mucha grasa que tenga la base del helado se pueden llegar a formar.
  9. Durante la primera hora recomiendo hacerlo cada diez minutos. Después cada treinta minutos y así unas tres veces.
  10. Al final de todo, añadimos las avellanas picadas. Luego dejamos definitivamente en el congelador hasta el día siguiente.
Preparación de la base de nuestro helado de avellanas. Con heladera
  1. Con Heladera. Este método es mucho más fácil.
  2. Sacamos la crema de la nevera y pasamos a la heladera que habremos tenido en el congelador durante 24 horas.
  3. Batimos la crema con la espátula de manera constante. Así entra aire en la mezcla, con lo que los cristales son más pequeños y la mezcla más ligera.
  4. El proceso llevará de 15 a 30 minutos, dependiendo de la calidad de la heladera.
  5. Una vez que veamos que la crema empieza a mantecar añadimos las avellanas picadas que tenemos reservados para crear ricos tropezones en el helado.
  6. Si vemos que tarda en mantecar el truco es mantecar durante 15 minutos.
  7. Volvemos a meter en el congelador todo (cubilete con el helado) otra media hora, y volver a repetir el proceso.
  8. Una vez que tengamos la mezcla mantecada, sólo tenemos que pasarla a un táper y congelar hasta el día siguiente.
Y aquí lo tenéis, uno de los mejores helados que hayáis preparado nunca. Enganchaos a los helados de rechupete.

No dejéis de disfrutar de todos los dulces de rechupete en nuestras recetas de postres.

Recordad que en casa podemos preparar helados increíbles utilizando productos sencillos como base, leche, nata, azúcar y huevos. A partir de estos preparar helados de casi cualquier sabor, chocolate, helado de vainilla, helado de yogurt, turrón, … Imaginación al poder.

Equipo Recetas de Rechupete
 
Helado de pistacho
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Receta de helado de pistacho casero




¡Un postre que enamora! Helado de pistacho, con su aroma y color tan especial. ¿Sabías que hace 7000 años ya se comían pistachos en lo que hoy es Turquía? Estos frutos secos son muy apreciados por su gran cantidad de beneficios. En otro artículo hicimos helado de cerveza, hoy otro de pistachos.


Los pistachos tienen más calcio que la leche


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Los pistachos son muy calóricos como casi todos los frutos secos, aportan 570 calorías, pero también tienen mucha fibra 10.60 gramos y la fibra no se digiere. Nuestro cuerpo la descompone y usa para otras funciones, por eso es tan beneficiosa para la digestión o para regular los niveles de colesterol.

helado de vainilla casero, es fácil de preparar, puedes hacerlo el día anterior o varias horas antes. Una vez listo lo reservamos en el congelador. También puedes usar helado de vainilla comprado y usarlo como ingrediente en la receta.


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  • En un cazo añade 150 ml de agua y los pistachos, deja que llegue a ebullición para que se blanqueen los pistachos durante unos minutos. Luego escurrir, pelar y aplastar los pistachos en un mortero.
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  • Si no tienes mortero ponlos en un cuenco y aplasta con la base de un vaso pequeño.
  • En un cazo hierve la leche y añade los pistachos machacados, dejar hirviendo 5 minutos a fuego medio removiendo de vez en cuando. Apagar el fuego y dejar reposar prueba la mezcla y añade el edulcorante Stevia si hace falta.
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  • Cuando la mezcla este a temperatura ambiente, saca el helado de vainilla del congelador. Introduce 15 segundos en el microondas a media potencia o un poco más si está muy duro.
  • A continuación mezcla el helado de vainilla con el pistacho y la leche del paso 3º.
 
Si quieren hacer helados fundamento científico y no con recetas de la abuela que en ocasiones salen bien de chiripa, les recomiendo la biblia del heladero profesional

LOS SECRETOS DEL HELADO. EL HELADO SIN SECRETOS. LIBRO DEL HELADERO ANGELO CORVITTO

125 fórmulas equilibradas para heladería y restaurante, preparación de materias primas y procesos de elaboración paso a paso, composición y parámetros de todos los ingredientes utilizados en el helado, elaboración de helado a partir de utensilios como el roner o la pacojet, consejos y recursos profesionales. los secretos del helado. el helado sin secretos es el título y subtítulo del libro que presentan angelo corvitto y grupo vilbo. El maestro heladero vierte en esta obra sus extensos conocimientos, sus investigaciones y su dilatada experiencia en torno a este producto, abordando en profundidad todos y cada uno de los aspectos de los que depende la elaboración del mejor helado artesano. Como se adelanta en el título del libro, Ángelo Corvitto desvela en detalle todos los secretos del helado, desde la selección y preparación de materias primas e ingredientes hasta la obtención del producto, su conservación, transporte y servicio, pasando por todas las fases de fabricación. Asimismo se abordarán conceptos de la importancia del poder anticongelante, el poder edulcorante, así como las diferentes temperaturas de servicio del helado, bien para su exposición y venta en vitrina, bien para su servicio en restauración y pastelería. Todo ello con la máxima claridad explicativa y con los consejos prácticos del maestro.

https://www.booksforchefs.com/es/libros-heladeria/234-los-secretos-del-helado-angelo-corvitto.html
 
Helado de crema de cereza










Verter la leche y la nata en un recipiente cuya capacidad sea el doble del mix.

Añadir la leche en polvo (LPD) y la dextrosa a la leche y la nata, y batir la mezcla con una batidora Usar la trituradora para cerciorarse que no queden grumos.

Calentar el mix, preferiblemente al baño maría.

Cuando la temperatura alcance los 40º, añadir el neutro mezclado con un poco de sacarosa (use un molinillo de café eléctrico para convertirlo en polvo) y el resto de la sacarosa. Remueva continuamente con un batidor manual hasta que alcance los 85º.

Retire el recipiente con la mezcla y enfríelo inmediatamente. Yo introduzco el recipiente en el fregadero y le añado agua fría, también se puede añadir cubitos de hielo o meterlo directamente en el congelador hasta que alcance los 4º. Debe procurar que el periodo de enfriamiento debe durar menos de una hora.

Introduzca el recipiente en la parte baja del frigorífico cuya temperatura está en torno a los 4º. Si no está seguro de la temperatura, puede colocar un vaso de leche en la parte baja del frigorífico y medir la temperatura con un termómetro digital,

Una vez que el mix está a una temperatura de 4º, se debe dejar reposar a esa temperatura en la parte baja del frigorífico durante un periodo que oscila entre 6 y 12 horas.

Lave las cerezas y séquelas, quíteles los huesos y guardélas en el frigorífico. Sáque las cerezas frías del frigorífico, use una licuadora, picadora, o batidora de vaso para obtener el jugo e introduzcalo en el frigorífico para que tenga una temperatura de 4º.

La cereza tiene un PH de 4 superior a 3, por lo tanto se puede echar el jugo de cereza justo antes de mantecar con el resto mix en la heladera. En caso de que la fruta tenga un PH inferior a 3, hay que dejar pasar un minuto antes de echar el jugo de la fruta y cuando la mantecadora alcance una temperatura de 2º, se vierte el zumo por el orificio de la mantecadora. Esto se hace para evitar que el mix se precipite por culpa del ácido de la fruta.

El mix debe estar en la mantecadora hasta que las palas del agitador dejen de moverse y debe dejarse al menos 20 minutos en la mantecadora antes de proceder a su conservación.

El armario congelador debe tener una temperatura que oscile entre -22º y -24º, introduzca la mezcla dentro de una cubeta de acero inoxidable o de policarbonato y tapelo para que no penetre el frío. Deje reposar entre 5 y 8 horas.

http://gelatodiy.blogspot.com/2017/08/helado-de-crema-de-cereza.html
 
Affogato, un postre de helado con un chorro de café o licor

Un affogato (la traducción del italiano es "ahogado") es un postre basado en el café. Por lo general toma la forma de una cucharada de helado de vainilla o helado cubierto o "affogato" con una inyección de espresso caliente. Algunas variaciones también incluyen un chorro del licor de Amaretto, del Bicerin (una bebida tradicional caliente y sin alcohol típica de Tur) o del otro licor. Se considera una bebida, no una combinación de café y helado.

Aunque los restaurantes y cafés en Italia han clasificado el affogato como un postre, muchos restaurantes occidentales y cafés parecen tener dificultades para decidir si el affogato es una bebida o un postre. Esto ha llevado a algunos a añadir extravagancias tales como coco, bayas, panel de abeja y múltiples sabores de helado con el fin de justificar un precio mucho más alto.

Según el Oxford English Dictionary, el "affogato" entró en el idioma Inglés en 1992.

Mientras que la receta del affogato es más o menos estándar en Italia, consistente en una bola de helado de vainilla rematado con un chorro del espresso, existen variaciones en restaurantes europeos y americanos.







Fuente: https://en.wikipedia.org/wiki/Affogato
 
Kulfi: Cómo hacer el helado originario de La India

El postre congelado originario de La India se ha hecho muy popular, se hace con la leche condensada caramelizada. Pero... ¿Se necesita realmente cocinar la leche por cuatro horas? ¿Qué sabor es mejor? ¿Y cómo se saca de los moldes?



El kulfi perfecto

Kulfi (el nombre propio de los hielos en forma de dalek, figuran al final de los menús de restaurantes hindúes en las raras ocasiones en que el apetito vaya tan lejos) no es sólo la palabra hindú para referirse a helados de crema - y no se trata sólo de lo exótico de los ingredientes que hacen que su sabor sea tan especial.

Mientras los helados occidentales están basados en una crema pastelera hecha de huevo, a menudo con crema añadida, el kulfi se hace tradicionalmente a partir de leche sola , a fuego lento calentada durante horas - lo que hace perder parte del volumen pero por contra, gana en un magnífico sabor a nuez caramelizada. Realmente es muy diferente a cualquier otro helado.

Las versiones modernas para hacer el kulfi que se sirve en la mayoría de las casas de curry británicas, se sustituye el ingrediente principal por leche evaporada comercial, pero los expertos no se impresionan; Como Caroline y Robin Weir escribieron en su obra maestra, Ice Creams, Sorbets and Gelati: "La forma original de hacerlo lleva mucho tiempo y es tedioso, pero realmente vale la pena el esfuerzo no como las versiones rápidas de esta receta que no tienen el mismo sabor y textura. Ellos están en lo cierto ¿Pero una persona común puede descubrir la diferencia?


El kulfi de Caroline y Robin Weir

La leche

La receta tradicional del Weir (también ofrece una versión más rápida de la receta que condenan con un elogio débil y la califican como "un postre muy aceptable para seguir un curry el hogar") . Calienta la leche entera hasta que queda reducida en volumen en dos tercios. Esto puede, advierten, llevar hasta cuatro horas. La mía, por supuesto, tarda aún más, y no es algo que permita dejar que sus propios utensilios de cocina hagan el trabajo; Mientras se reduce el volumen de la leche contenida en la cacerola, se requiere remover la leche"con mucha frecuencia". Necesitará algo de música decente o, posiblemente, un periódico de fin de semana extendido junto a la encimera para mantenerse entretenido. Los resultados valen la pena sin embargo. Tiene la auténtica textura al masticarlo, y un precioso sabor sutil de caramelo que compensa el hecho de haber perdido todo el sábado por la mañana.

Pero hay otros que intentan truncar el proceso de varias maneras. Rick Stein reconoce que el kulfi tiene un sabor que le recuerda al helado de vainilla pero con sabor a cardamomo" combina la leche y la leche evaporada en su libro The India, y los reduce a la mitad, lo que dura poco más de una hora. La textura es buena, pero el sabor es menos interesante que la versión de los Weirs.

Meera Sodha , autor de Made In India, escribe la evocadora pasión de su familia bengalí por los helados, utiliza una mezcla de leche evaporada y la doble crema en su método rápido, cocidas a fuego lento durante sólo cinco minutos. Los resultados son asombrosamente buenos para una receta tan fácil: rica y cremosa, con un sabor encantador - pero todavía carece del sabor fugaz de caramelo de mi primer esfuerzo.

La receta de Charmaine Salomón in the India and Pakistan volume of her Complete Asian Cookbook
(en el volumen de la India y Pakistán de su completo libro de cocina asiática) espesa tres cuartas partes de la leche con arrurruz, y hierve el resto hasta lograr una consistencia de "pasta espesa" antes de la agitación para lograr crema espesa. Tiene una buena textura, pero de nuevo, aunque delicioso (seamos honestos, es difícil hacer un helado que no es tal), el sabor no es exactamente el correcto.


El kulfi de Rick Stein

Manju Malhi, la escritora sobre alimentación y chef en la TV, también utiliza un espesante; en su caso, la harina de maíz mezclada con un poco de leche, pero no solo cambia eso; En lugar de la leche combina variedades de leches evaporadas y condensadas con crema doble grasienta para lograr un resultado cremoso que sabe asombrosamente como el chocolate blanco. Sé de todo corazón, incluso cuando termino la tina, que no son atajos para lograr el kulfi perfecto. La leche, reducida su volumen en dos tercios, es el único camino a seguir.

Azúcar

La receta de Malhi tiene al menos el beneficio de no requerir azúcar extra porque utiliza leche condensada que ya la contiene. Sodha utiliza caster (un azúcar blanco muy popular en el Reino unido), Salomón no especifica, los Weirs sugieren azúcar granulado sin refinar y Stein recomienda una mezcla de azúcar caster y panela (un azucar tradicional no centrifugado consumido en Asia, África y algunos países en América). Por mucho que me encante el último, su sabor picante acentúa las notas de caramelo natural de la leche condensada, haciendo que cuatro horas de trabajo no tengan sentido. Puede resultar vergonzoso usar el azúcar refinado, por el contrario, el azúcar moreno (demerara) es la mejor opción, y no abusar demasiado de azúcar tampoco; los postres indios ya son notoriamente dulces, usted deberia apreciar también el sabor de la leche.


El kulfi de Meera Sodha

Aromas

Como de costumbre, esto es mucho una cuestión de gusto personal. Procuro varias veces el pistacho y el agua de rosas de los Weirs, el pistacho y el azafrán de Sodha, el cardamomo y el anacardo de Stein, la kewra de Salomón, la almendra y el pistacho y el simple cardamomo de Malhi. Mi favorito es el kulfi pesado de pistacho de Sodha cuyo sabor explota en la boca gracias al sutil sabor del azafrán, pero siéntase libre de sustituirlo por cualquiera de los anteriores, o de hecho, experimentar con sabores propios si se siente con ganas de experimentar. Lichi, mango e incluso paan (betel) son comunes en la tierra natal del Kulfi. Sea lo que sea que use, la pizca de sal de Stein confiere un buen equilibrio.


El kulfi de Charmaine Solomon.

Método

Malhi agita su mezcla de kulfi con una batidora de mano antes de la congelación, y Solomon sugiere remover cada pocas horas para mantener las nueces distribuidas uniformemente, pero no creo que sea necesario removerlo, a diferencia de los helados que se remueven con intensidad para añadir aire a la mezcla, la congelación de Kulfi tal cual, le otorga su consistencia dura como una piedra tan distintiva.


El kulfi de Manju Malhi

Los moldes de kulfi cónicos son sorprendentemente difíciles de encontrar, incluso en los supermercados asiáticos del este de Londres, pero los encuentro on line. También se puede congelar en un recipiente normal, como lo hacen Malhi y Solomon, funciona perfectamente. Observará en las fotografías que resulta casi imposible sacarlas de los moldes de una sola pieza, entre otras cosas porque las mías vienen sin el soporte necesario para mantenerlas en posición vertical en el congelador, así que queda resto de kulfi al fondo de los moldes al desmoldarlo. ¡Cualquier consejo para evitar esto será muy apreciado!

Cómo hacer el kulfi perfecto

(5 porciones)

1,25 L de leche entera

75g de azúcar demerara (azúcar moreno sin refinar)

Una pizca de sal

Una pizca de azafrán

Aceite para engrasar

40 g de pistachos finamente picados

En una cacerola ancha o en una sartén limpia, ponga la leche hasta lograr la ebullición, yo les recomiendo que usen una cacerola especial para hacerlo al baño maría, removiendo constantemente. Tenga en consideración el volumen inicial de la leche dentro de la cacerola en este momento.

Bajar un poco el fuego y cocina a fuego lento hasta que se reduzca a aproximadamente un tercio de de su volumen original, aproximadamente 415 ml (coja un cucharón y eche el contenido en un recipiente resistente al calor para comprobarlo), remueva regularmente y raspe los lados de la sartén hasta el fondo con un cucharón. Tenga cuidado, esto llevará alrededor de 4 horas, así que asegúrese de tener un taburete, y algo interesante para leer o ver, cerca de la encimera.

Agregue el azúcar, la sal y el azafrán, y cocine a fuego lento durante otros 5 minutos. Deje enfriar.

Utilice moldes para kulfi si los tiene, y espolvoree la mezcla con pistachos finamente picados. Revuelva el resto en la mezcla y agregue a los moldes. Si no las tiene, revuelva la mayor parte de las nueces en la mezcla y vierta en un recipiente a prueba de congelación, manteniendo una cucharada de nueces como guarnición.

Congelar durante al menos 6 horas. Para liberar, sacar del congelador unos 5 minutos antes de que quiera servir y sumergir los moldes, si se usa, brevemente en agua caliente.

Kulfi - ¿Eres un fan de los dalek?s, en caso contrario, ¿Qué postre indio le gustaría recomendar a la gente? Y si es así, ¿qué otros sabores recomendaría? Y Otra pregunta - ¿Cuál es la mejor manera de sacar kulfi de los moldes sin problemas?

• Este artículo fue modificado el 4 de septiembre de 2014. Una versión anterior se refiere a la primera mención de la reducción de la leche a un tercio de su volumén en lugar de dos tercios.

Fuente: https://www.theguardian.com/lifeandstyle/wordofmouth/2014/sep/03/how-to-make-perfect-kulfi




http://gelatodiy.blogspot.com/2016/12/kulfi-como-hacer-el-helado-originario.html
 
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