Es exclusivo de la legión el poder ir con el pecholobo, y la cabra, of course. Son lo más divertido del desfile, aparte de las meteduras de pata de la KK Kuin; si no es por esta gente el desfile es un coñazo severo. Se les permite alguna demostración de su pecholobismo, forma parte de la performance, son un descojone.
Son tíos orgullosos, con la legión española poca broma; tienen un historial en el que antaño se metía ahí lo "mejor" de cada casa, era el único sitio donde podían ganar un sueldo digno, por lo que sus hombres han sido muy tremendos a lo largo de la historia. Antiguamente los tatuajes, por ejemplo, eran cosa de legionarios (y de yonkis del Amor de Madre) o de presos; ahora los llevan por desgracia hasta los policías nacionales, que parece que acaban de salir de Alcalá Meco.
Como los legionarios eran tíos con muchos webos, han tenido fama de brutales siempre, aparte de que la disciplina ha sido la más matadora de todos los cuerpos militares de España.
Un familiar mío acabó ahí encima por decisión propia. Hizo la mili en la legión, le gustó y ahí se quedó. Le ves y te crees que es un apacible hombre elegante y cuando suelta que es legionario se te queda el culo torcido, porque no parece así "de asustar"; él mismo me ha presentado legionarios, y por el carácter de mi familiar, te digo que tienen muy incrustado el sentimiento del honor, compañerismo, mezclado con ser unos fieras a los que es mejor no tocarles mucho la moral. Que a un chaval le tocara en los 80/90 hacer la mili en la legión era lo peor que le podía pasar si eran reacios a hacer la mili. Iban normales y venían tocados jajaja, uno de mi pueblo ni fumaba y ni bebía y cuando llegaba soltaba en el bar "¡¡¡que me pongas el whisky, coñ*!".
Mi familiar se lo pasó genial con esta gente y decidió hacer carrera ahí.
Aquí, legionarios "merendando" echando la tarde, con sus "juguetes", con esta foto se ha liado parda:
