El principe Hamzah bin Hussein y el intento de golpe de estado para derrocar la monarquía. Carta de disculpas

Os lo traigo.


PELEAS
Lucha por el trono

Los secretos que Noor contó de Rania antes del escándalo: "Presionó en la sucesión"​

La semana de la mayor crisis en la corte jordana, el columnista rememora la última semana de vida del rey Hussein, que él pasó en Amán a la espera de su muerte. Noor de Jordania le contó, años después, sus sospechas sobre Rania. ¿Está ella detrás de la detención de Hamza por conspirar contra la corona?
Rania y Noor en 1999

Rania y Noor en 1999GTRES

PREMIUM
  • JAIME PEÑAFIEL
Actualizado Sábado, 10 abril 2021 - 00:00
Comentar
Entre las fotografías dedicadas por personalidades que he conocido y entrevistado a lo largo de mi ya dilatada vida profesional, se encuentra en lugar destacado de mi despacho y de mi corazón una de la reina Noor de Jordania (69) con la siguiente dedicatoria: "A Jaime, con mis mejores deseos y sincero aprecio por su interés y afecto por mi amado esposo y por Jordania".
Con estas palabras, la reina Noor reconoce mi interés tanto por el fallecido rey jordano como por el país del que fue reina consorte desde el 15 de junio de 1978, día de su boda, hasta el 7 de febrero de 1999, cuando el corazón de Hussein se detuvo para siempre. Yo llevaba seis días en Amán esperando su muerte.
"En ese momento yo me hallaba junto a su lecho, con su mano entre las mías, rodeado por nuestros hijos Hamzah (41), Hashim (39), Faisal (57) y Ali (45) estos dos últimos, hijos de Muna y Alia respectivamente. Me volví hacia Abdalá y le dije: El rey ha muerto; larga vida al rey y lo abracé", me contaba la reina en nuestro reencuentro en la pequeña casa de dos plantas muy cerca de los almacenes Harrods, de Londres, que el rey Hussein compró en su día para las estancias en la capital británica.
Como resultado de aquella visita fue la entrevista que yo publicaba en las páginas de EL MUNDO, concretamente en Crónica, el domingo 24 de agosto de 2003, en la que recordaba la otra entrevista, en octubre de 1982, en Amán cuando demostró el afecto que me tenía comunicándome la noticia que todavía nadie conocía en el país: "Estoy embarazada de cuatro meses de mi tercer hijo". Sería una niña, Imán (37).
Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de Jordania

Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de JordaniaArchivo personal

También recordaba nuestro encuentro en marzo de 1985 en el que me confesó: "Ser reina no es ningún cuento de hadas porque la historia de las reinas no siempre tiene un final feliz".

¿RANIA CONTRA NOOR?​

Palabras desgraciadamente premonitorias. Sobre todo por lo que ha sucedido estos días durante los cuales su hijo y ex heredero Hamzah ha sido arrestado, acusado de conspirar contra su hermanastro, el actual rey Abdalá. Noor ha tachado de calumnia las acusaciones contra su hijo. ¿Está Rania detrás de esta intriga palaciega? Antecedentes hay.
Las dos reinas juntas en la boda de Hamza

Las dos reinas juntas en la boda de HamzaGTRES
A la muerte del rey Hussein se esperaba le sucediera el mayor de los hijos habidos en su matrimonio con Noor, el príncipe heredero Hamzah: "Pero mi marido designó a Abdalá, de 37 años, heredero. Apoyé la decisión contrariamente a lo que afirmaba Rania", desveló Noor. Una palestina convertida, desde que es reina, en la representación más frívola del reino hachemita por su pasión desbordada por el lujo y la alta costura de los grandes diseñadores europeos como Armani o Valentino. Incluso la llaman la carolina jordana. Noor siempre sostuvo que Rania afirmaba que ella "había estado presionando al rey para que nombrase sucesor a Hamzah, de 18 años".
Lo sucedido el día 25 de enero, cuando se dirigían en coche de Amán al aeropuerto para emprender vuelo a Rochester, en los Estados Unidos, en un desesperado intento de salvar la vida del rey, me lo contó también la reina. "Abdalá, ya heredero, iba en el asiento delantero junto a su padre, mientras que su esposa Rania y yo viajábamos atrás. Intenté calmar la angustia y los temores que le asaltaban ante la posibilidad de que en ausencia del rey se intentara interferir en la sucesión de su marido. La expresé mi convencimiento de que nadie contravendría los deseos del rey". Pero sobre todo los de Rania.
Cuando Hussein falleció, se produjo un hecho insólito en las monarquías. La que había sido reina a lo largo de 21 años y seguía siéndolo por real decreto del nuevo monarca, reina Noor, por deseo de Rania no es bien recibida en Amán. Nunca la quiso. Como tampoco soporta al príncipe Hamzah de 41 años,
"Rezo para que prevalezca la justicia para las víctimas inocentes de estas perversas calumnias", ha dicho estos días Noor en medio del escándalo de la detención de su hijo Hamza por, supuestamente, conspirar contra la corona, aunque el príncipe ya ha firmado una declaración de lealtad a su hermano. En lo que Noor denomina "perversas calumnias" se ve, se presiente, la mano de Rania, la esposa del rey Abdalá, quien desplazó al príncipe Hamzah, primogénito del fallecido rey Hussein y Noor, y a quien le hubiera correspondido, por expreso deseo de su padre, ser rey de Jordania. Rania maniobró en la sombra para que no lo fuera. "Por supuesto que ha habido personas que me han defraudado, pero no tengo ningún rencor ni odio en mi corazón", me dijo Noor cuando ya era viuda, en aquella entrevista en Londres.
En mi vida profesional no sólo he sido testigo de bodas reales. También de funerales de reyes, como Pablo de Grecia, Federico de Dinamarca o Balduino de los Belgas; de emperadores como el Sha de Persia y princesas consortes como Gracia de Mónaco. Incluso de princesas que mantuvieron su título tras el divorcio, como Diana.
Pero ningún funeral como el del rey Hussein, el soberano que me había honrado con su amistad y cuya muerte, el 7 de febrero de 1999 y a la que ya nos hemos referido, conmocionó al mundo entero.

ESCENAS DE UN FUNERAL​

Inolvidable para mi, por su fuerza dramática, la imagen de la viuda Noor, con sus hijas Raiyah e Iman; Haya, la hija de la difunta reina Alia, y Abir, la adoptada por ésta; y Alia, hija de Dina, junto a la princesa Basma, hermana de Hussein, que había donado su médula para el último trasplante realizado al Rey.
Todas de negro y las cabezas cubiertas con el pañuelo blanco, en señal de luto, dando su adiós desde la distancia, desde la puerta del palacio real en el que había velado el cadáver del soberano.
Rania y Noor en el funeral de Husein

Rania y Noor en el funeral de HuseinGTRES
Después del funeral, la reina Noor se dirigió al palacio Zahra, donde todas las mujeres de la familia real iban a recibir el pésame de otros muchas mujeres dolientes venidas de otros países árabes y del resto del mundo. Aunque el encuentro solo era para féminas, Noor me permitió que entrara en el palacio, donde tuve la oportunidad de conocer y saludar a Rania. Vestida de negro con su pañuelo blanco cubriendo la cabeza, no se distinguía ni diferenciaba, en absoluto, del resto de mujeres que Noor me fue presentando. Nada que ver con la Rania que conocemos vestida de Armani o de Valentino. Aquel día, que ya era esposa del nuevo rey Abdalá, me pareció lo que era: una palestina de origen plebeyo nacida al norte de Cisjordania en el seno de una humilde familia que emigró a Kuwait. Me pareció insignificante. Nada en ella llamaba la atención. Recordando aquel día, difícil imaginar que aquella mujer que se mezclaba con el resto de las dolientes mujeres de la corte iba a echar de Jordania a la glamurosa y bellísima reina Noor.

¿UNA QUINTA ESPOSA?​

Sucedió en 1992, seis años antes de la muerte del rey y cuando ya le habían detectado graves problemas de salud. En Amán corría el rumor de que Hussein se había enamorado de una joven jordana que trabajaba en una oficina de la corte.
"La distancia que venía percibiendo entre nosotros me daba qué pensar, no tenía forma de averiguar lo que realmente estaba pasando", reconoció Noor en sus memorias. Pero para no seguir torturándose, Noor decidió preguntar directamente a su marido "aunque se me hacía un nudo en el estómago": "No sé lo que estará pasando le comenté. Sólo tú puedes resolverlas antes de causarme más angustia. Si hay alguna verdad en lo que se cuenta y si tu felicidad dependiera de otra persona, por amor, dímelo, porque te amo lo bastante como para dejarte ir".
¡Qué demostración de amor! ¡Qué elegancia! ¡Qué generosidad la de Noor!
"Se lo decía con toda sinceridad. Sin rencor. Lo amaba tanto. Pero el rey lo negó: No hay ninguna verdad en esos rumores. Son solo cosas que se dicen", le contestó su marido, según recordó ella.
Aunque Noor no lo confiesa, es fácil deducir que la historia de la infidelidad del rey era cierta. Lo que nunca se sabrá es si fue el cáncer lo que le impidió seguir adelante con aquella relación sentimental. A lo peor, sí. ¿Hussein se hubiera divorciado de Noor para casarse por quinta vez? Nunca se sabrá. Para Noor fue mejor así. ¿El cáncer y la muerte le impidieron divorciarse? Esta pregunta sin respuesta siempre perseguirá a la bellísima y digna reina Noor, la luz de Hussein, que intentó por todos los medios seguir alumbrando su vida cuando la de él ya se estaba apagando. ¿También su amor por ella? Eso... nunca lo sabrá.
¡Mil gracias @Tanzanita por tu colaboración! Así podemos leer el artículo. Un abrazo.
 
Aunque puse no escribiria más lo haré pensando en @Mari Windsor .

Perdon Haakon si no me entendiste bien. Escribiendo con móvil es complicado.

Ayer Amman estaba lleno de policía y helicópteros. Internet fue cortado.
Los rumores son que ese acuerdo y reunión son mentira. Hamzah ha abandonado Jordania y no lo
dejarán volver.
Hamzah acabará como su abuelo Talal es lo que harán con el solo que lo callara para que no diga nada.

Hoy el rey Abdullah hablará para el país.

Saludos

La historia no deja de repetirse: Murad V, Talal I, Hamzah... 😣😣😣
 
jordania (2).jpg
Es el segundo por la izquierda.
Primero está Rashid (hijo de Hassan), Hamzah, Faisal (hermano de Abdullah), Talal (hijo de Mohammed), Hashem y Alí (hermanastros de Abdullah) y Ghazi (hijo de Mohammed). El principe Mohammed hermano de Hussein y Hassan no acude a estos actos porque está enfermo desde hace tiempo.
En su día Abdullah destituyó de sus puestos a su hermano Faisal, a su hermanastro alí y a su primo Talal en una situación que recuerda a la de Hamzah. Se supone entonces que en el foto hay cuatro personas de las que desconfia.
Me llama la atención que solo el principe heredero va vestido de uniforme.
 
Os lo traigo.


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Lucha por el trono

Los secretos que Noor contó de Rania antes del escándalo: "Presionó en la sucesión"​

La semana de la mayor crisis en la corte jordana, el columnista rememora la última semana de vida del rey Hussein, que él pasó en Amán a la espera de su muerte. Noor de Jordania le contó, años después, sus sospechas sobre Rania. ¿Está ella detrás de la detención de Hamza por conspirar contra la corona?
Rania y Noor en 1999

Rania y Noor en 1999GTRES

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Entre las fotografías dedicadas por personalidades que he conocido y entrevistado a lo largo de mi ya dilatada vida profesional, se encuentra en lugar destacado de mi despacho y de mi corazón una de la reina Noor de Jordania (69) con la siguiente dedicatoria: "A Jaime, con mis mejores deseos y sincero aprecio por su interés y afecto por mi amado esposo y por Jordania".
Con estas palabras, la reina Noor reconoce mi interés tanto por el fallecido rey jordano como por el país del que fue reina consorte desde el 15 de junio de 1978, día de su boda, hasta el 7 de febrero de 1999, cuando el corazón de Hussein se detuvo para siempre. Yo llevaba seis días en Amán esperando su muerte.
"En ese momento yo me hallaba junto a su lecho, con su mano entre las mías, rodeado por nuestros hijos Hamzah (41), Hashim (39), Faisal (57) y Ali (45) estos dos últimos, hijos de Muna y Alia respectivamente. Me volví hacia Abdalá y le dije: El rey ha muerto; larga vida al rey y lo abracé", me contaba la reina en nuestro reencuentro en la pequeña casa de dos plantas muy cerca de los almacenes Harrods, de Londres, que el rey Hussein compró en su día para las estancias en la capital británica.
Como resultado de aquella visita fue la entrevista que yo publicaba en las páginas de EL MUNDO, concretamente en Crónica, el domingo 24 de agosto de 2003, en la que recordaba la otra entrevista, en octubre de 1982, en Amán cuando demostró el afecto que me tenía comunicándome la noticia que todavía nadie conocía en el país: "Estoy embarazada de cuatro meses de mi tercer hijo". Sería una niña, Imán (37).
Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de Jordania

Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de JordaniaArchivo personal

También recordaba nuestro encuentro en marzo de 1985 en el que me confesó: "Ser reina no es ningún cuento de hadas porque la historia de las reinas no siempre tiene un final feliz".

¿RANIA CONTRA NOOR?​

Palabras desgraciadamente premonitorias. Sobre todo por lo que ha sucedido estos días durante los cuales su hijo y ex heredero Hamzah ha sido arrestado, acusado de conspirar contra su hermanastro, el actual rey Abdalá. Noor ha tachado de calumnia las acusaciones contra su hijo. ¿Está Rania detrás de esta intriga palaciega? Antecedentes hay.
Las dos reinas juntas en la boda de Hamza

Las dos reinas juntas en la boda de HamzaGTRES
A la muerte del rey Hussein se esperaba le sucediera el mayor de los hijos habidos en su matrimonio con Noor, el príncipe heredero Hamzah: "Pero mi marido designó a Abdalá, de 37 años, heredero. Apoyé la decisión contrariamente a lo que afirmaba Rania", desveló Noor. Una palestina convertida, desde que es reina, en la representación más frívola del reino hachemita por su pasión desbordada por el lujo y la alta costura de los grandes diseñadores europeos como Armani o Valentino. Incluso la llaman la carolina jordana. Noor siempre sostuvo que Rania afirmaba que ella "había estado presionando al rey para que nombrase sucesor a Hamzah, de 18 años".
Lo sucedido el día 25 de enero, cuando se dirigían en coche de Amán al aeropuerto para emprender vuelo a Rochester, en los Estados Unidos, en un desesperado intento de salvar la vida del rey, me lo contó también la reina. "Abdalá, ya heredero, iba en el asiento delantero junto a su padre, mientras que su esposa Rania y yo viajábamos atrás. Intenté calmar la angustia y los temores que le asaltaban ante la posibilidad de que en ausencia del rey se intentara interferir en la sucesión de su marido. La expresé mi convencimiento de que nadie contravendría los deseos del rey". Pero sobre todo los de Rania.
Cuando Hussein falleció, se produjo un hecho insólito en las monarquías. La que había sido reina a lo largo de 21 años y seguía siéndolo por real decreto del nuevo monarca, reina Noor, por deseo de Rania no es bien recibida en Amán. Nunca la quiso. Como tampoco soporta al príncipe Hamzah de 41 años,
"Rezo para que prevalezca la justicia para las víctimas inocentes de estas perversas calumnias", ha dicho estos días Noor en medio del escándalo de la detención de su hijo Hamza por, supuestamente, conspirar contra la corona, aunque el príncipe ya ha firmado una declaración de lealtad a su hermano. En lo que Noor denomina "perversas calumnias" se ve, se presiente, la mano de Rania, la esposa del rey Abdalá, quien desplazó al príncipe Hamzah, primogénito del fallecido rey Hussein y Noor, y a quien le hubiera correspondido, por expreso deseo de su padre, ser rey de Jordania. Rania maniobró en la sombra para que no lo fuera. "Por supuesto que ha habido personas que me han defraudado, pero no tengo ningún rencor ni odio en mi corazón", me dijo Noor cuando ya era viuda, en aquella entrevista en Londres.
En mi vida profesional no sólo he sido testigo de bodas reales. También de funerales de reyes, como Pablo de Grecia, Federico de Dinamarca o Balduino de los Belgas; de emperadores como el Sha de Persia y princesas consortes como Gracia de Mónaco. Incluso de princesas que mantuvieron su título tras el divorcio, como Diana.
Pero ningún funeral como el del rey Hussein, el soberano que me había honrado con su amistad y cuya muerte, el 7 de febrero de 1999 y a la que ya nos hemos referido, conmocionó al mundo entero.

ESCENAS DE UN FUNERAL​

Inolvidable para mi, por su fuerza dramática, la imagen de la viuda Noor, con sus hijas Raiyah e Iman; Haya, la hija de la difunta reina Alia, y Abir, la adoptada por ésta; y Alia, hija de Dina, junto a la princesa Basma, hermana de Hussein, que había donado su médula para el último trasplante realizado al Rey.
Todas de negro y las cabezas cubiertas con el pañuelo blanco, en señal de luto, dando su adiós desde la distancia, desde la puerta del palacio real en el que había velado el cadáver del soberano.
Rania y Noor en el funeral de Husein

Rania y Noor en el funeral de HuseinGTRES
Después del funeral, la reina Noor se dirigió al palacio Zahra, donde todas las mujeres de la familia real iban a recibir el pésame de otros muchas mujeres dolientes venidas de otros países árabes y del resto del mundo. Aunque el encuentro solo era para féminas, Noor me permitió que entrara en el palacio, donde tuve la oportunidad de conocer y saludar a Rania. Vestida de negro con su pañuelo blanco cubriendo la cabeza, no se distinguía ni diferenciaba, en absoluto, del resto de mujeres que Noor me fue presentando. Nada que ver con la Rania que conocemos vestida de Armani o de Valentino. Aquel día, que ya era esposa del nuevo rey Abdalá, me pareció lo que era: una palestina de origen plebeyo nacida al norte de Cisjordania en el seno de una humilde familia que emigró a Kuwait. Me pareció insignificante. Nada en ella llamaba la atención. Recordando aquel día, difícil imaginar que aquella mujer que se mezclaba con el resto de las dolientes mujeres de la corte iba a echar de Jordania a la glamurosa y bellísima reina Noor.

¿UNA QUINTA ESPOSA?​

Sucedió en 1992, seis años antes de la muerte del rey y cuando ya le habían detectado graves problemas de salud. En Amán corría el rumor de que Hussein se había enamorado de una joven jordana que trabajaba en una oficina de la corte.
"La distancia que venía percibiendo entre nosotros me daba qué pensar, no tenía forma de averiguar lo que realmente estaba pasando", reconoció Noor en sus memorias. Pero para no seguir torturándose, Noor decidió preguntar directamente a su marido "aunque se me hacía un nudo en el estómago": "No sé lo que estará pasando le comenté. Sólo tú puedes resolverlas antes de causarme más angustia. Si hay alguna verdad en lo que se cuenta y si tu felicidad dependiera de otra persona, por amor, dímelo, porque te amo lo bastante como para dejarte ir".
¡Qué demostración de amor! ¡Qué elegancia! ¡Qué generosidad la de Noor!
"Se lo decía con toda sinceridad. Sin rencor. Lo amaba tanto. Pero el rey lo negó: No hay ninguna verdad en esos rumores. Son solo cosas que se dicen", le contestó su marido, según recordó ella.
Aunque Noor no lo confiesa, es fácil deducir que la historia de la infidelidad del rey era cierta. Lo que nunca se sabrá es si fue el cáncer lo que le impidió seguir adelante con aquella relación sentimental. A lo peor, sí. ¿Hussein se hubiera divorciado de Noor para casarse por quinta vez? Nunca se sabrá. Para Noor fue mejor así. ¿El cáncer y la muerte le impidieron divorciarse? Esta pregunta sin respuesta siempre perseguirá a la bellísima y digna reina Noor, la luz de Hussein, que intentó por todos los medios seguir alumbrando su vida cuando la de él ya se estaba apagando. ¿También su amor por ella? Eso... nunca lo sabrá.

Lo que leo es al Peñafiel de siempre obsesionado con Noor. Que asco su clasismo al describir a Rania. Está claro que Noor es la princesa de cuentos de Disney y Rania la bruja! "Muy objetiva" su columna, como toda la mie... que escribe!
 
Os lo traigo.


PELEAS
Lucha por el trono

Los secretos que Noor contó de Rania antes del escándalo: "Presionó en la sucesión"​

La semana de la mayor crisis en la corte jordana, el columnista rememora la última semana de vida del rey Hussein, que él pasó en Amán a la espera de su muerte. Noor de Jordania le contó, años después, sus sospechas sobre Rania. ¿Está ella detrás de la detención de Hamza por conspirar contra la corona?
Rania y Noor en 1999

Rania y Noor en 1999GTRES

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  • JAIME PEÑAFIEL
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Entre las fotografías dedicadas por personalidades que he conocido y entrevistado a lo largo de mi ya dilatada vida profesional, se encuentra en lugar destacado de mi despacho y de mi corazón una de la reina Noor de Jordania (69) con la siguiente dedicatoria: "A Jaime, con mis mejores deseos y sincero aprecio por su interés y afecto por mi amado esposo y por Jordania".
Con estas palabras, la reina Noor reconoce mi interés tanto por el fallecido rey jordano como por el país del que fue reina consorte desde el 15 de junio de 1978, día de su boda, hasta el 7 de febrero de 1999, cuando el corazón de Hussein se detuvo para siempre. Yo llevaba seis días en Amán esperando su muerte.
"En ese momento yo me hallaba junto a su lecho, con su mano entre las mías, rodeado por nuestros hijos Hamzah (41), Hashim (39), Faisal (57) y Ali (45) estos dos últimos, hijos de Muna y Alia respectivamente. Me volví hacia Abdalá y le dije: El rey ha muerto; larga vida al rey y lo abracé", me contaba la reina en nuestro reencuentro en la pequeña casa de dos plantas muy cerca de los almacenes Harrods, de Londres, que el rey Hussein compró en su día para las estancias en la capital británica.
Como resultado de aquella visita fue la entrevista que yo publicaba en las páginas de EL MUNDO, concretamente en Crónica, el domingo 24 de agosto de 2003, en la que recordaba la otra entrevista, en octubre de 1982, en Amán cuando demostró el afecto que me tenía comunicándome la noticia que todavía nadie conocía en el país: "Estoy embarazada de cuatro meses de mi tercer hijo". Sería una niña, Imán (37).
Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de Jordania

Jaime Peñafiel junto a la reina Noor de JordaniaArchivo personal

También recordaba nuestro encuentro en marzo de 1985 en el que me confesó: "Ser reina no es ningún cuento de hadas porque la historia de las reinas no siempre tiene un final feliz".

¿RANIA CONTRA NOOR?​

Palabras desgraciadamente premonitorias. Sobre todo por lo que ha sucedido estos días durante los cuales su hijo y ex heredero Hamzah ha sido arrestado, acusado de conspirar contra su hermanastro, el actual rey Abdalá. Noor ha tachado de calumnia las acusaciones contra su hijo. ¿Está Rania detrás de esta intriga palaciega? Antecedentes hay.
Las dos reinas juntas en la boda de Hamza

Las dos reinas juntas en la boda de HamzaGTRES
A la muerte del rey Hussein se esperaba le sucediera el mayor de los hijos habidos en su matrimonio con Noor, el príncipe heredero Hamzah: "Pero mi marido designó a Abdalá, de 37 años, heredero. Apoyé la decisión contrariamente a lo que afirmaba Rania", desveló Noor. Una palestina convertida, desde que es reina, en la representación más frívola del reino hachemita por su pasión desbordada por el lujo y la alta costura de los grandes diseñadores europeos como Armani o Valentino. Incluso la llaman la carolina jordana. Noor siempre sostuvo que Rania afirmaba que ella "había estado presionando al rey para que nombrase sucesor a Hamzah, de 18 años".
Lo sucedido el día 25 de enero, cuando se dirigían en coche de Amán al aeropuerto para emprender vuelo a Rochester, en los Estados Unidos, en un desesperado intento de salvar la vida del rey, me lo contó también la reina. "Abdalá, ya heredero, iba en el asiento delantero junto a su padre, mientras que su esposa Rania y yo viajábamos atrás. Intenté calmar la angustia y los temores que le asaltaban ante la posibilidad de que en ausencia del rey se intentara interferir en la sucesión de su marido. La expresé mi convencimiento de que nadie contravendría los deseos del rey". Pero sobre todo los de Rania.
Cuando Hussein falleció, se produjo un hecho insólito en las monarquías. La que había sido reina a lo largo de 21 años y seguía siéndolo por real decreto del nuevo monarca, reina Noor, por deseo de Rania no es bien recibida en Amán. Nunca la quiso. Como tampoco soporta al príncipe Hamzah de 41 años,
"Rezo para que prevalezca la justicia para las víctimas inocentes de estas perversas calumnias", ha dicho estos días Noor en medio del escándalo de la detención de su hijo Hamza por, supuestamente, conspirar contra la corona, aunque el príncipe ya ha firmado una declaración de lealtad a su hermano. En lo que Noor denomina "perversas calumnias" se ve, se presiente, la mano de Rania, la esposa del rey Abdalá, quien desplazó al príncipe Hamzah, primogénito del fallecido rey Hussein y Noor, y a quien le hubiera correspondido, por expreso deseo de su padre, ser rey de Jordania. Rania maniobró en la sombra para que no lo fuera. "Por supuesto que ha habido personas que me han defraudado, pero no tengo ningún rencor ni odio en mi corazón", me dijo Noor cuando ya era viuda, en aquella entrevista en Londres.
En mi vida profesional no sólo he sido testigo de bodas reales. También de funerales de reyes, como Pablo de Grecia, Federico de Dinamarca o Balduino de los Belgas; de emperadores como el Sha de Persia y princesas consortes como Gracia de Mónaco. Incluso de princesas que mantuvieron su título tras el divorcio, como Diana.
Pero ningún funeral como el del rey Hussein, el soberano que me había honrado con su amistad y cuya muerte, el 7 de febrero de 1999 y a la que ya nos hemos referido, conmocionó al mundo entero.

ESCENAS DE UN FUNERAL​

Inolvidable para mi, por su fuerza dramática, la imagen de la viuda Noor, con sus hijas Raiyah e Iman; Haya, la hija de la difunta reina Alia, y Abir, la adoptada por ésta; y Alia, hija de Dina, junto a la princesa Basma, hermana de Hussein, que había donado su médula para el último trasplante realizado al Rey.
Todas de negro y las cabezas cubiertas con el pañuelo blanco, en señal de luto, dando su adiós desde la distancia, desde la puerta del palacio real en el que había velado el cadáver del soberano.
Rania y Noor en el funeral de Husein

Rania y Noor en el funeral de HuseinGTRES
Después del funeral, la reina Noor se dirigió al palacio Zahra, donde todas las mujeres de la familia real iban a recibir el pésame de otros muchas mujeres dolientes venidas de otros países árabes y del resto del mundo. Aunque el encuentro solo era para féminas, Noor me permitió que entrara en el palacio, donde tuve la oportunidad de conocer y saludar a Rania. Vestida de negro con su pañuelo blanco cubriendo la cabeza, no se distinguía ni diferenciaba, en absoluto, del resto de mujeres que Noor me fue presentando. Nada que ver con la Rania que conocemos vestida de Armani o de Valentino. Aquel día, que ya era esposa del nuevo rey Abdalá, me pareció lo que era: una palestina de origen plebeyo nacida al norte de Cisjordania en el seno de una humilde familia que emigró a Kuwait. Me pareció insignificante. Nada en ella llamaba la atención. Recordando aquel día, difícil imaginar que aquella mujer que se mezclaba con el resto de las dolientes mujeres de la corte iba a echar de Jordania a la glamurosa y bellísima reina Noor.

¿UNA QUINTA ESPOSA?​

Sucedió en 1992, seis años antes de la muerte del rey y cuando ya le habían detectado graves problemas de salud. En Amán corría el rumor de que Hussein se había enamorado de una joven jordana que trabajaba en una oficina de la corte.
"La distancia que venía percibiendo entre nosotros me daba qué pensar, no tenía forma de averiguar lo que realmente estaba pasando", reconoció Noor en sus memorias. Pero para no seguir torturándose, Noor decidió preguntar directamente a su marido "aunque se me hacía un nudo en el estómago": "No sé lo que estará pasando le comenté. Sólo tú puedes resolverlas antes de causarme más angustia. Si hay alguna verdad en lo que se cuenta y si tu felicidad dependiera de otra persona, por amor, dímelo, porque te amo lo bastante como para dejarte ir".
¡Qué demostración de amor! ¡Qué elegancia! ¡Qué generosidad la de Noor!
"Se lo decía con toda sinceridad. Sin rencor. Lo amaba tanto. Pero el rey lo negó: No hay ninguna verdad en esos rumores. Son solo cosas que se dicen", le contestó su marido, según recordó ella.
Aunque Noor no lo confiesa, es fácil deducir que la historia de la infidelidad del rey era cierta. Lo que nunca se sabrá es si fue el cáncer lo que le impidió seguir adelante con aquella relación sentimental. A lo peor, sí. ¿Hussein se hubiera divorciado de Noor para casarse por quinta vez? Nunca se sabrá. Para Noor fue mejor así. ¿El cáncer y la muerte le impidieron divorciarse? Esta pregunta sin respuesta siempre perseguirá a la bellísima y digna reina Noor, la luz de Hussein, que intentó por todos los medios seguir alumbrando su vida cuando la de él ya se estaba apagando. ¿También su amor por ella? Eso... nunca lo sabrá.
Un artículo muy novelesco. Para mi gusto demasiado empalagoso y la verdad no cuenta nada nuevo. Gracias x compartirlo.
 
Ver el archivo adjunto 1892321
Es el segundo por la izquierda.
Primero está Rashid (hijo de Hassan), Hamzah, Faisal (hermano de Abdullah), Talal (hijo de Mohammed), Hashem y Alí (hermanastros de Abdullah) y Ghazi (hijo de Mohammed). El principe Mohammed hermano de Hussein y Hassan no acude a estos actos porque está enfermo desde hace tiempo.
En su día Abdullah destituyó de sus puestos a su hermano Faisal, a su hermanastro alí y a su primo Talal en una situación que recuerda a la de Hamzah. Se supone entonces que en el foto hay cuatro personas de las que desconfia.
Me llama la atención que solo el principe heredero va vestido de uniforme.
Por lo que leo, el Rey Abdullah, hace limpieza de familia de vez en cuando.... es raro , todos estan contra el???O es para amenazar que nadie salga de su sitio???
 
Por lo que leo, el Rey Abdullah, hace limpieza de familia de vez en cuando.... es raro , todos estan contra el???O es para amenazar que nadie salga de su sitio???


Por lo que leo, el Rey Abdullah, hace limpieza de familia de vez en cuando.... es raro , todos estan contra el???O es para amenazar que nadie salga de su sitio???
No sabría decirte 🤷‍♀️
 
Esa costumbre de tener 10 esposas y 50 hijos no es gratuita, de ninguna manera. Demasiados egos, demasiadas ambiciones.
El rey actual por lo menos se mantiene (aunque sea para la foto) con Rania y, que yo sepa, no tiene hijos fuera del matrimonio que puedan crear estos líos el día de mañana. Algo aprendió... Prepara a su sucesor, pareciera, como corresponde. Si es o no competente, será otro tema.
Corrupción y enriquecimiento familiar son moneda común en todos los círculos de poder. Lo ideal sería que sean corruptos pero que, por lo menos, atiendan mínimamente las necesidades del pueblo que los mantiene. Pero ya sabemos que un pueblo ignorante y temeroso es más manejable, allí, aquí y en cualquier lugar del globo.
 
Lo que leo es al Peñafiel de siempre obsesionado con Noor. Que asco su clasismo al describir a Rania. Está claro que Noor es la princesa de cuentos de Disney y Rania la bruja! "Muy objetiva" su columna, como toda la mie... que escribe!
Es un misógino. Para él "la mujer", así en general es la culpable de todos los males del mundo desde que Eva mordió la manzana.
 
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